Abusada por un adolescente de 16 años.
Me llamo Laura, tengo 36 años y hoy voy a contar como un pendejo de 15-16 años me trató de prostituta y me hizo lo que quiso, y no hice nada para evitarlo..
Esto fue hace un año, en vacaciones de verano, estaba con mi familia en una playa a las afueras de la ciudad, era un dia caluroso y la estabamos pasando muy bien. Fui con mis 2 hijas y mi esposo, la verdad es que no habia tanta gente pero tampoco estaba vacia la playa, normal.
Estabamos situados en una zona de la playa algo aislada, no habia gente a nuestros lados y podiamos disfrutar un poco más de nuestra privacidad. Eso fue durante unas 2 horas, porque luego, a nuestro lado derecho se situó una familia a disfrutar de la playa, esta estaba conformada por lo que parecia ser un padre, una madre, el hijo de ellos que era un chico de unos 15 o 16 años, y 2 hombres más que podrian ser amigos del padre, hermanos de la madre o algo asi, obviamente no lo sabia. No me gusta juzgar y no me considero clasista, pero esta familia parecia un poco rara, tenian pinta de ser los tipicos problematicos y barullentos, gente de clase baja que lo unico que hacia era molestar, todo lo contrario a mi familia que economicamente estamos muy bien y tratamos de cuidar nuestra imagen.
Bueno en fin, tratamos de ignorarlos lo más posible, ellos pusieron musica bastante alta y eso me molestaba, pero bueno, la playa no era nuestra. Mientras mi esposo y una de mis hijas estaban en el agua, yo me recoste en la arena sobre una toalla a tomar sol, mi otra hija que era la más pequeña, de 9 años, estaba a mi lado jugando con la arena, normal. No deberia haberlo hecho pero me dormí, no me percaté de que era peligroso por el tipo de gente que habia a mi lado, pero bueno lo hice. Me desperté a los minutos, mi esposo y mi hija estaban en el agua aún, cuando gire mi cabeza para ver a mi otra hija… no estaba. Rapidamente me senté en la toalla y miré a los lados, ella estaba con la familia de al lado, estaba sentada en las piernas del chico de 15-16 años que ya nombré, él metió las manos debajo de su bikini y estaba manoseandole las tetas apenas en formación, ella claramente no queria estar ahi pero no gritaba, los demas hombres de la familia lo miraban y reian abalando lo que hacia y alentandolo a que siga.
Me puse de pie lo más rapido que pude y fui ahi, se la arrebaté a los gritos y volví a mi lugar, llamé a mi esposo rapidamente porque tenia miedo, mucho miedo. Él vino y le dije lo que estaba pasando, los de al lado se me quedaron mirando muy feo, pero más que nada el chico, estaba furioso por lo que habia hecho como si estuviese mal, eso me estaba asustando. Le dije a mi esposo para irnos, no estaba comoda, pero él me dijo que no pasaba nada e intentó tranquilizarme, bastante ingenuo de su parte, pero bueno no podia hacer nada más que sentarme en mi reposera vigilando que no vuelvan a tocar a ninguna de mis hijas, mientras tanto el chico me seguia mirando serio. Pasó como una hora y ya estaba un poquito más tranquila, deje a mi esposo a cargo de mis hijas ya que tenia ganas de ir al baño, asi que empezé a caminar hasta el baño de la playa.
Caminé bastante, con la guardia baja ya que no pensé que iba a pasar nada malo, estaba distraida. Llegué al baño y entré al de mujeres, entré a un cubiculo e hice lo que tenia que hacer ahi dentro. Es verdad que cuando estaba haciendolo escuche pasos dentro del baño, pensé que era otra mujer que habia entrado, no le presté atención. Esta «mujer» entro a un cubiculo del baño. Cuando salí, fui al lavamanos a lavarme las manos, mientras lo hacia la puerta donde habia entrado la mujer se abrio y escuche pasos que se acercaban a mi, levante la mirada para ver quien era por el espejo, me llevé una grata sorpresa. Era el chico que estaba manoseando a mi hija, se acerco por detras y me tapo la boca con su mano, sabia literalmente a mierda, era un asco. Acerco su cara a la mia y me empezó a susurrar al oido, lo que dijo no me lo olvido más: «Si no pude con tu hija, voy a hacerlo con vos entonces»
Yo creo que si forcejeaba podria habermelo sacado de encima, pero no pude, mi cuerpo no reaccionaba y me temblaban las piernas, tenia mucho miedo. El con su mano libre empezo a manosearme el culo, la hacia con tal desesperacion como si nunca hubiese tocado uno, movio mi bikini a un lado y sentí su verga parada llena de liquido preseminal intentando entrar en mi vagina. Era bastante torpe y le costó, se notaba la inexperiencia, pero despues de unos 4 intentos logro insertarla, la metió hasta la mitad y empezó a cogerme contra el lavamanos. Cuando empezo a hacerlo soltó mi boca y uso sus dos manos para sostenerme de la cintura, me movia freneticamente hacia adeltante y atras acompañando el movimiento de su pelvis, cada vez la metía más. «Uhh estas re calentita puta, toda mojadita por dentro, sos una puta de mierda». Lo unico que podia hacer era rogar que pare, pero ignoraba mis ruegos, es más, mientras más le pedia que pare más rapido lo hacia.
Llegó a un punto de velocidad que su pelvis y mis nalgas al chocar sonaban como aplausos. Sus manos subieron y manosearon mis tetas sin bajar el ritmo de las embestidas. Finalmente dio unas estocadas finales, la metio lo más profundo que pudo y eyaculo dentro. Tenia los huevos bien llenos de semen y los vacio dentro mio, quedé rebalsando en ese espeso y apestoso semen adolescente. Sacó su pene y se subio los pantalones entre risas. «Que rico putita, preparate porque no es la ultima vez que hacemos esto, es solo el principio, me hiciste enojar y vas a pagar las consecuencias». Despues de decir esto se fue lo más tranquilo que podia y yo me quedé ahi, con las manos apoyadas en el lavamanos pensando en lo que habia pasado, no podia creerlo, mientras una gruesa gota de semen se deslizada por mi pierna…
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