Astrid Mi primera modelo, una chica de casa que descubre el sexo con un fotógrafo maduro
Hace 5 años por azares del destino me inicie como fotógrafo, mi primera modelo me permitió comenzar en este camino que tantas satisfacciones profesionales y sexuales me ha traído. Así comenzó mi historia con Astrid..
Para fines prácticos se me conoce como Luis, aunque no es mi nombre real, más bien es como mi nombre artístico por decirlo de alguna manera. Estudie Informática y siempre he sido aficionado a la tecnología, motivo por el cuál siempre tengo un iPhone de modelo reciente por su cámara, así como alguna cámara fotográfica semi-profesional reflex de buena calidad. Es un vicio algo caro, ya que el celular normalmente me sale en unos 30 mil, lo mismo que la cámara y los cambio más o menos cada dos años.
Me gusta entrar a los chats para conocer gente y platicar, siempre sobre fantasías que uno tiene y como podrían llevarse a cabo, deseos ocultos y todo eso. Un día platicando con una chica la llamaremos Astrid me comentó que deseaba ser modelo, obviamente teníamos mucho en común, En mi caso había hecho mis prácticas profesionales en una conocida marca de lencería, donde comencé apoyando en el mantenimiento de los equipos de cómputo, pero eran pocos y en un par de días quedé libre, al verme desocupado, me pidieron ayuda editando algunas fotos, luego eventualmente tuve la oportunidad de apoyar con la iluminación e incluso por la amistad que hice con un par de fotógrafos pude tomar fotos a hermosas modelos de catalogo, lo que fue todo un sueño. Le compartí está experiencia, ella me dijo que le encantaría vivir algo así y para no hacer la historia larga, un día quedamos de vernos para hacer una sesión. Habíamos platicado de todo lo que podía pasar, qué hacer si se me paraba, si se mojaba, en fin, platicamos de todas las posibilidades y habíamos logrado llegar a acuerdos para todo.
Quería algo con luz natural y donde se pudiera apreciar su hermoso cuerpo. Ella me había mandado un par de fotos, se las pedí porqué haciendo cuentas aunque no le iba a pagar, entre la renta del lugar, invitarle algo de comer y beber, pues sí iba a gastar unos 2 o 3 mil pesos, por lo que quería estar seguro de no perder el tiempo. Así que renté un AirBnb en Teotihuacán, ya había ido alguna vez con una novia, lo renté del sábado para el domingo, me quedé de ver con Astrid a las 6am, yo llegué desde el día anterior, por si acaso reservé dos noches. Me llamó al llegar a Teotihuacán, venía en camión, fui por ella en carro y entramos al AirBnb que ocupaba el tercer piso y la azotea del mismo. Debía ser domingo porqué a esa hora desde la parte de arriba se veían los globos que subían con personas para apreciar las pirámides desde arriba y también las luces del amanecer.
Ella estaba muy nerviosa, habría comprado una lencería negra como acordamos, con encaje y tela traslúcida, subimos, al ver los globos aerostáticos y el amanecer entendió porqué quería hacerlo en ese lugar, toda la azotea tiene un barandal de cristal con una baranda de aluminio, además de un piso de azulejo gris y un par como de palmeras que están en unas macetas que hacen que todo se vea genial, muy coqueto, muy estilizado, además de todo eso hay un jacuzzi grande como para 3 o 4 personas, sillas y mesa de jardín, un asador y un par de camastros para tomar el sol, por lo que las posibilidades eran muchas para fotografiar un cuerpo hermoso en diversas situaciones.
La apresuré, ella temblaba un poco, siempre había querido algo así, pero obviamente estaba nerviosa, se quito su playera y debajo pude ver su preciosa piel blanca, ella era delgada y alta, 1.70, 59 kilos, con senos de tamaño medianos, 34B. También pude apreciar ese hermoso sostén, negro, de forma triangular, el contorno era con encaje, el centro era de una tela transparente se podía ver sin problemas sus hermosos pezones parados rosados, era una delicia sin duda, venía maquillada con un tono rosado en sus labios que se veía muy natural, sus ojos delineados levemente, el cabello se lo degrafilo y se puso algunas luces. era un espectáculo realmente. Luego se quito el pantalón de mezclilla, era una delicia, unas nalgas redondas, firmes, blancas, su abdomen se veía exquisito, tenía un piercing como de flecha en el ombligo. La parte de abajo era igual que la de arriba, el borde de encaje, pero el centro era de una tela traslúcida y se veían sin problema sus labios, que ganas daban de besarlos, ella estaba roja de pena, pero se aguantó.
Me vio y me dijo, oye se te paró, le dije obvio, con semejante mujer hasta a un gay se le para, ella se rió, ahí se fue toda la presión. Nos concentramos, le dije como posar y salieron unas hermosas fotos de ella mirando al horizonte hacia los globos, con las luces del amanecer sobre su cuerpo, lo que hacía que se viera increíblemente hermosa. Disparé en ráfagas, en 10 minutos ya tenía más de 200 fotos desde varios ángulos, con varias poses, de frente, de perfil, de lado, sentada en el piso con las piernas abiertas, empinada sobre el barandal. Le pregunté si se animaría a dar el siguiente paso que habíamos hablado, lo dudo un momento volteo a ver alrededor, sabía que decir que sí implicaba quedar desnuda en un lugar donde la podían ver desde algunas partes de la calle, las azoteas vecinas o de los mismos globos, pero le gustaron mucho las fotos que le mostré así que se animó. así que primero se quitó el sostén y le tomé varias fotos así de diversos ángulos. Sus pezones rosados se veían deliciosos. Luego de varias fotos por fin se quitó la pantaleta y pude verla completamente desnuda sin nada que limitará mi vista, la puse en todas las posiciones que me imaginé, en cuatro, sentada con las piernas abiertas, en cuclillas, de rodillas, la recosté en los camastros, la metí al jacuzzi a que jugara con el agua,
Pude notar como ella se calentaba cada vez más, al inicio se veía tiesa, forzada, pero conforme paso el tiempo, ella comenzó a sentirse cómoda, comenzó a tocarse en las fotos, se pellizcaba los pezones, jugaba con su clítoris abría sus labios con sus manos, se abría las nalgas, estaba a mil, cuando decidí preguntarle si quería hacer la última parte, lo pensó, agachó la mirada, se veía apenada y entonces me dijo que sí. Me desnudé y le dije que se arrodillara junto al barandal, me acerque a ella y comencé a fotografiar el momento, aunque también capturé varios vídeos cortos, comenzó con unos tímidos besos en mis testiculos, le dije que me viera mientras lo hacía, las fotos se veían súper cachondas, luego me comenzó a lamer, era delicioso y luego a darme mordidas, después lamió el tronco, le dió de mordidas, hasta llegar a la cabeza, le pasaba la lengua por la punta, la besaba, succionaba, hasta que comenzó a metérselo cada vez más profundo, ahí decidí decirle que se levantará, la llevé a la mesa de jardín, la hice recostarse boca arriba, se veía deliciosa, abrí sus piernas, le dije que abriera sus labios con sus manos, la hice masturbarse mientras fotografiaba cada instante, luego llegó el momento, comencé a frotar mi pene en su vagina, era delicioso, ademas del tremendo morbo, yo tenía poco más de 40 años y ella tan solo tenía 18, según lo que me dijo su papá tenía 39, así que era un par de años mayor, eso me ponía más cachondo aún.
Al metérsela, no mentiré, apenas y pude hacerlo un par de veces cuando por la excitación me vacié por completo, eso sí, me asegure de fotografiarme dentro de ella y de vaciarme hasta el fondo, salí, era increíble ver mi semen escurrir de esa diosa, las fotografías las atesoro hasta el momento, la bajé, la hice arrodillarse y limpiarme el semen, así arrodillada le tomé fotos a mi semen escurriendo de su cuerpo, estuvimos unos minutos así y ante las caricias mi pene se recupero, por lo que estaba listo para una segunda ronda. Decidí volver a ponerla boca arriba sobre la mesa, ella ya estaba ida, jadeando, totalmente sonrojada, se dejaba hacer a mi antojo, esa cachondearía se veía en las fotos increíble. La acomode de manera que su cabeza quedó colgando, la hice abrir la boca y pude fotografiar y grabar vídeo de como se hacía grande su garganta al entrar en ella y capture esos momento bombeando su garganta, le pasé la cama a ella y le pedí que fotografiara y grabará lo mejor posible como pegaban mis testículos en la cara y como entraba y salía de su garganta. Dure más tiempo, fueron unos 10 minutos de un placer indescriptible, mientras le empujaba mi pene a su interior manoseaba sus senos, pellizcaba sus pezones, era un placer indescriptible. Cuando estaba por vaciarme le dije que lo haría en su boca y que no tragará, que al vaciarme debía guardarlo en su boca y mostrármelo, cuando estaba por venirme me salí casi por completo, solo dejé la punta dentro y me vacíe nuevamente, me alejé y capture ese momento, luego le dije que dejará escurrir el semen por su cara, verla embarrada me pareció algo muy erótico, le pase mi pene por la cara para terminar de esparcirlo y le di de golpes con él.
Le dije que necesitaba hidratarme y le pregunté si quería comer algo, me dijo que sí, vi que iba a ir por su ropa y le dije que no, que mejor se quedara así, se sonrojo y al ver eso le dije, hay confianza, total ya te vi todo y tu a mí, te conozco mejor que tu papás ¿o no?, agacho la cabeza y me dijo que sí. Le dije que nos bañaramos rápido antes de comer, bajamos y entramos al baño, ella estaba un poco incomoda, se notaba que no lo había hecho antes, igual que otras de las cosas que hicimos, abrí la llave, le comienzó a caer el aguar y ya que se había mojado el cabello, tome el shampoo y se lo comencé a aplicar yo, ella parecía disfrutar el gesto, cerré el agua, le enjabone el cuerpo y le pedí que esperará, fui por la cámara y le tomé fotos así toda enjabonada en diferentes poses, abrí la llave y la fotografíe mientras se enjuagaba, se veía increíble, dejé la cámara de lado, me metí y le dije que ahora ella me debía bañar a mí, cuando terminó, le dije que nos enjuagaramos juntos, para ese momento ya se me había parado nuevamente y la pusé contra el muro, coloqué mi pene en la entrada de su ano, ella me dijo que aún era virgen por ahí y le dije que no más, se intentó zafar, pero la sujeté fuerte, apliqué fuerza y solo escuche como dijo aaaaaayyyyyyyy noooooo meeeee dueeeeleeee aaaayyyyyyyyyy, pero no me detuve, eso solo me prendió y comencé a bombearla hasta que un par de minutos después por la excitación que tenía de estar en un culo tan tremendo me vacié, cerré la llave de agua, tomé la cámara de nuevo, la hice empinarse y abrirse las nalgas para fotografiar mi semen saliendo de su ano, quedaron increíbles, su espalda aún tenía agua que escurría y completaba una hermosa escena.
No la deje limpiarse, le dije que se quedara así, de nuevo se sonrojo, fuimos al refrigerador, tenía un six de cervezas, medio kilo de cecina y medio kilo de enchilada, además de tortillas, platos desechables, guacamole, un par de salsas, cebolla, cilantro picado, carbón, etc., cosas que había comprado el día anterior. Subimos nuevamente prendí el carbón y la puse a cocinar así desnuda, cuando comenzó a cocinar noté que aún se podía ver mi semen en su trasero, no resistí la tentación y le dí un par de nalgadas bien puestas, una en cada nalga, le pegué como si mi vida dependiera de ello, ella solo se mordió el labio, gimiendo levemente, mmmmmhhhhh, pero se vio que le gustó, de esa manera quedo marcada mi mano en su blanca piel, me aseguré que ese culo rojo y mi semen se vieran en las fotos, fui por un par de pinzas que había traído para la ocasión y pusé una en cada pezón, también le pusé un plug anal de una colita de zorra. Sentí como su ano oponía resistencia al colocar el plug, aún estaba apretado, le tomé la primera foto y ella quisó verla, se la mostré y me dijo que le gustaba como se veía. Me senté y comencé a tomarle fotos cocinando, sirviendo mi comida, trayendola, sirviendo mi cerveza, comiendo, llevandose los trastes, lavandolos, por puro morbo también la puse a barrer y recoger el poco polvo que había. Esa colita se veía fantástica, así que le tomé más fotos viendo hacia las pirámides, en cuatro, en cunclillas y finalmente la puse a mamar de nuevo, me encantaba ponerla a mamar, solo que ahora decidí venirme en sus pechos, las fotos de mi semen en sus senos con las pinzas en sus pezones se ven realmente formidables.
Nos relajamos un rato en el jacuzzi, la hice masturbarse sentada en la orilla, se veía deliciosa, me tomé un par de viagras, sabía o al menos creía que jamás en mi vida tendría otra oportunidad así y esperé que hicieran efecto. Ya estaba cansado, ya eran como las 2 de la tarde, tenía un par de cientos de fotos que sin duda serían excelente material. Fue entonces que pensé que yo debía perder también la pena, bajamos a la habitación, tomé un consolador con chupete de la maleta, de 40 centimetros, sabía o creía que no le cabría completo, lo lamí y pegué en el piso cerca de la cama, saqué el tripie y aprovechando que se pueden tomar fotos con un control remoto, voltee la pantalla, hice que se sentará sobre el consolador, viendo a la cámara y masturbandose, le tomé fotos de como le entraba poco a poco, esos gestos que hacía al devorarlo eran súper cachondos, yo me veía detrás de ella mirando con morbo el espéctaculo, esas pinzas en los pezones hacían que se viera aún más cachondo, su joven e inocente cara contrastaba con el monstruo que se estaba comiendo lentamente y esas pinzas que torturaban sus pezones. Se comío como 30 centimetros quedando de rodillas, la hice voltear hacia mi dando la espalda a la cámara, lo cual hizo lentamente, me imagino lo curioso que debió sentir el girar así montaada en tremendo consolador y la puse a mamar mientras tomaba fotos donde nos veíamos los dos de cuerpo entero, ella con su cola de zorra, su piel blanca, con ese cuerpo joven y perfecto, la hice subir y bajar sobre el consolador, moverse en círculos también, que lo gozará, tuvo un par de orgasmos mientras lo hacía, en el segundo se orino, no lo pudo contener, yo con mi mano forzaba su cabeza contra mi cadera para que le entrara tanto de mi pene como pudiera, cuando tuvo el primer orgasmo quiso sacarlo de su boca, pero al contrario la apreté hasta el fondo, y sentí retumbar en mis testículos un gutural aaaaammmmmmm….. ahogado por mi pene en su boca. Cuando tuvo el segundo orgasmo yo también estaba llegando, sentí como todo el cuerpo le temblaba y luchaba por aire, pero todo lo que recibió fue mi semen en su garganta, ahora sí, no le deje nada en la boca, todo se fue hasta el fondo. Una vez que se despegó estaba toda ida y sabía que no se negaría a nada, la deje hincada sobre el consolador, fui por una botella de agua que tenía a mano y me tomé dos litros tan rápido como pude, no demoré más que un par de minutos en hacerlo.
Ella continuaba con la mirada perdida, como en un estado zombie se notaba que no tenía experiencia y esto la había sobrepasado, pero no creí que fuera a quejarse, lo había disfrutado, se notaba, estaba extasiada, me voltee, me empine sobre la cama, la tomé del cabello, y puse su cara entre mis nalgas, le dije que lamiera y ella comenzó a hacerlo sin oponer más resistencia, le dije que me acariciara los testiculos mientras lo hacía, era delicioso sentir su lengua buscando llegar tan adentro como fuera posible, mientras me sobaba el miembro, era delicioso, estuvimos así unos 5 minutos hasta que sentí que se me paró de nuevo, y la hicé masturbarme ordeñandome mientras me lamía el culo, tuve un orgasmo brutal, aunque ya casi no saqué semen, también sentí que ya no podía aguantar las ganas de orinar, así que me preparé para el acto final.
Aprovechando que seguía en ese estado le dije que se masturbara, comenzó a gemir suavemente, luego le dije que comenzará a moverse hacia arriba y hacia abajo sobre el consolador, el movimiento era muy leve, así que le dije que más alto hasta que se veía entrar y salir unos 15 o 20 centimetros, mientras ella se masturbaba, luego le dije que abriera la boca, y que tragara tanto como pudiera, hizo un gesto como de no haber entendido, luego abrió los ojos al entender que iba a suceder, pero no dejo de hacer lo que le había dicho, abrió la boca y comencé a orinarle encima de la cara, de sus pechos, ella intentaba tragar lo que podía y gemía aahhh, ahhhh, sí, dámelo, síiiii, fue la primera vez que ella dijo que lo quería, por fin lo aceptaba, una vez que terminamos la vista era increíble, ahí estaba esa joven y delgada mujer, que parecía ser tan frágil, la típica niña de casa, montada en ese consolador enorme, pinzas en sus pezones, una cola de zorra en el ano, llena de semen, llena de orines, con el sabor de mi culo y mi semen en su boca, completamente despeinada, con el culo rojo de las nalgadas que le dí. Sabía que jamás volvería a ser la misma y todo, absolutamente todo, había quedado grabado en más de mil fotografías y cerca de veinte videos que sumaban más de dos horas en total.
No quería ensuciar la cama, así que tomé la colcha, la doble y la puse en el piso junto a ella, no lo dudo y se dejo caer encima sin pensarlo, estaba totalmente exhausta, eran ya las seis de la tarde, hacía 12 horas que estabamos juntos. Le pregunté hasta cuándo había pedido permiso, se rió, me dijo que aviso que saldría un par de horas nada más, fui a su bolsa y tomé su celular, tenía Face ID, se lo acerqué a la cara, al revisar, tenía un montón de llamadas pérdidas y de mensajes, de sus padres y de su novio por lo que pude leer. Ella estaba cansada pero despierta y platicamos un poco más de cosas que antes no habíamos abordado. Le pregunté con cuántos hombres había estado, me dijo que solo con uno, con su novio, luego cuantas veces lo habían hecho, me dijo que solamente un par, qué había hecho con él, me dijo que vaginal con las luces apagadas, que solo le había manoseado los senos, le había alzado la falda y hecho a un lado el calzón, que duró un par de minutos y se vino pero no sintió porqué tenía condón, que ella pensaba que así era el sexo, nunca había visto una porno. Le dije que porqué aceptó todo esto y me dijo que ella sabía que en el modelaje se daba mucho el sexo y que era como obligatorio hacerlo y hacía mucho se había resignado por eso se había dejado hacer sin oponer resistencia. Iba al gimnasio diario y cuidaba mucho su alimentación y esperaba que todo saliera bien. Nada de eso me sorprendió, me topé con la clásica niña de casa sin experiencia, de buen promedio, que nunca se había portado mal y la había tratado como una auténtica puta, pufff, que increíble experiencia había vivido con ella.
Le pregunté si se quería ir a casa o si se quería quedar, lo pensó un momento y dijo, al carajo, me quedo y se durmió. Lo que hicimos al despertar lo contaré en un próximo relato, siempre y cuando este relato tenga al menos un comentario positivo. Me pueden encontrar como @luishernandezmx en Telegram si quieren platicar al respecto. Cabe hacer mención que las mujeres que he fotografiado y video grabado, todas tienen 18 años, lo hicieron porqué fue su voluntad, dieron su consentimiento y no se usaron drogas ni sustancias ilegales, aunque sí consumimos alcohol, pero todo eso era algo previamente platicado y acordado.
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