Cayo la hija, cayó la madre y detrás todas las demás 9
La relación entre el Amo y sus cachorras aunque un intento de chantaje por un testigo accidental termina de forma inesperada .
No bien hubieron salido las dos hembras de la casa aproveche para terminarme la copa y el habano, que a estas alturas estaba a medio consumir, lo que me dio un respiro para replantearme la vorágine de acontecimientos que se habían desatado en apenas tres días y lo que podría venir de aquí en adelante.
El panorama que se abría a mi alrededor no podía ser más esperanzador, pero como humano que soy no dejaba de darme cuenta de que como siguiera ampliando mi circulo de mascotas al final del verano tendría que darme una cura de reposo y que manejar los problemas de relación entre tal grupo de calientes hembras me podrían ocasionar muchos dolores de cabeza si no iba con cuidado.
No obstante, fiel a mi idea de que, si los problemas no tienen solución para que preocuparse y si los tienen pues igual, me dispuse con mejor animo a disfrutar del momento, por lo que abandonando la casa que había adoptado como mía, no sin antes recoger la generosa cantidad que la cincuentona había dejado a la entrada, me dirigí a la playa dispuesto a pasar un rato de relax y para comprobar cómo se desarrollaban los acontecimientos.
Nada más acceder a la cala pude contemplar como la cosa no podía desarrollarse con más naturalidad. Mi chaval con su grupo de amigos, aunque su atención se desviaba continuamente hacia la mama zorrita que le premiaba con las mejores vistas de su anatomía. Mi gatita compartiendo toalla y dándole palique a la joven Clara mientras su caliente tía no perdía detalle tratando de aparentar que leía al borde del mar y bueno, la rubita, en su plan habitual, haciendo cabriolas, jugando entre la arena y el mar con su habitual grupo de amigas.
No dejo de hacerme gracia como al notar mi presencia toda mi camada fijo su atención en mí, lo que pareció suspender el tiempo durante un segundo, retomando su curso habitual cuando con un leve gesto les di a entender mi satisfacción. Y no dejo de satisfacerme el que la única extraña al grupo que pareció darse cuenta de tal circunstancia fuera la joven Clara que, si inicialmente fijo su atención en Sarita, extrañada de la pausa que había impuesto a su parloteo y la gran sonrisa que iluminaba la cara de mi gatita, paso de inmediato a fijarse en mi al darse cuenta que mi aparición era el motivo para tal reacción en su nueva amiga.
Dispuesto a continuar captando su atención me plante en todo su campo visual y despojándome de la camiseta me extendí a todo lo largo en mi hamaca entreabriendo ligeramente mis piernas para que toda mi anatomía quedara a la vista de la jovencita y a fe mía que lo conseguí porque la chica no dejaba de darme continuos repasos visuales y mi gatita enseguida me informo por wasap que su nueva amiga le estaba preguntando insistentemente por mí.
Satisfecho por el efecto conseguido me puse en pie y pasando al lado de las chicas saludé exclusivamente a la chinita, que de un brinco se puso en pie y me dio brevemente palique, con lo que la reacción de mi putita y mi indiferencia no consiguieron sino aumentar el interés de la nueva chica por mí.
Dispuesto a que la cosa no decayera, sino que se acrecentara por todos lados me dirigí hacia donde se encontraba Rosa, que al verme aproximar se levantó presurosa de la silla
“Hola Amo, he hecho lo que me habías mandado y parece que las chicas congenian” comenzó a decir la atribulada cincuentona mientras de reojo observaba como su sobrina volvía de continuo la cabeza hacia nosotros, sin duda extrañada de la relación que pudiera unir a su severa tía con alguien que hasta hace un momento le era un completo extraño.
“Eso parece, si tu sobrina es tan zorra como tú, no hay nadie mejor que mi gatita para mostrarle su verdadera naturaleza, y por lo que veo la cosa va bien.
¿Estás leyendo? Supongo que no te importara seguir sobre la arena” le respondí mientras sin preámbulo me sentaba en su silla, gesto que hizo que la sobrinita, no acostumbrada a tales deferencias en su tía, abriera su boca de asombro y pusiera sus ojos como platos, mientras contemplaba como su tía aceptaba la situación sentándose a mi vera sobre la húmeda arena de la orilla.
“Parece que he sabido llamar la atención de tu sobrina, seguro que te pregunta sobre mí. Pícale su curiosidad, deja que como una polilla sea ella la que se queme al aproximarse a la llama. Seguro que sabrás hacerlo, la recompensa lo merece ¿verdad golfa?”
“Si Amo, descuida hare lo que me deseas, no te defraudare”
“Seguro…y ahora vamos a disfrutar del sol antes de que se oculte, anda enséñame tus tetas, las tienes de muy buen ver pero muy blancas. Vamos a empezar a corregir eso” le indique a la atribulada madura que, sin embargo, procedió de inmediato a quedarse en top less ante los ojos de sobrinita que no daba crédito a como se estaban desarrollando los acontecimientos y los nuevos descubrimientos en la conducta de su hasta ese momento severa tía.
En tales cosas trascurrió la tarde y al ir ocultándose el sol decidí dar por terminada la jornada
“Bueno zorra, me retiro, para cuando os subáis asegúrate de que las chicas me suban las cosas a casa. Ah y mañana te quiero a las ocho en mi casa, pídele una copia de mi llave a Sarita y no hagas ruido no vayas a despertar a mi chaval” le solté al levantarme
“Si Amo, allí estaré”
Y sin más preámbulo me despedí del grupo subiendo a casa donde me relajé dándome una prolongada ducha. No acababa de terminar de salir de la ducha cuando sonó el timbre de la puerta y sin prisa, con una escueta tolla a mi cintura, me dirigí a ver de quien se trataba.
Al abrir la puerta me encontré plantadas ante mí a gatita y su nueva amiga, que ante la visión de mi cuerpo semidesnudo reaccionaron de muy diversa forma, sonriendo y divertida mi joven putita y con los ojos como platos de asombro la joven Clarita.
Rápida como era mi chinita enseguida rompió el hielo “Don Marcos, veníamos a traerle sus cosas” comenzó mientras miraba divertida a su amiga que aún no había recuperado el habla.
“Gracias guapas. Anda pasar. Tu…” dije dirigiéndome a Clara “lleva la hamaca a la terraza” a lo que la jovencita sin salir de su estupor se dirigió a donde le indicaba
“Parece que a tu amiguita le ha comido la lengua el gato “me dirigí con sorna a mi chinita e intencionadamente alto para que nos oyera la joven Clarita lo que le provoco que se pusiera roja como un tomate
“Uy, pues que va. Pues bien que se la da la lengua” contesto con toda la intención mi putita mientras con su mano se hacía dueña de mi dura polla a través de la ceñida toalla “bueno ya nos vamos” continuo Sarita mientras observando que regresaba su amiga retiraba la mano de mi miembro
“Pues gracias guapa, nos vemos mañana en la playa” le conteste a mi chinita, acariciándole la mejilla e ignorando deliberadamente a la otra jovencita.
Ya en el rellano y aun ruborizada como un tomate, la joven Clara volviéndose hacia su nueva amiga le soltó “Tía, ni se ha fijado en mí, era como si no existiera, solo ha tenido ojos para ti. Joer tía y está buenísimo”
“ja jajá, a lo mejor tiene algo que ver el bañador tan soso que llevas hoy” le replico mi putita mientras llevaba sus manos a las copas de su bikini, apretando y realzando sus pechos a la vista de su amiga lo que provoco en esta otra subida de colores y que volviendo su vista a su traje de baño bajara la vista avergonzada, respondiendo “Jo tía, es que mi tía Rosa es una anticuada y me dice que no tengo edad para bikinis y vamos, ni hablar de un tanga como el tuyo”
“Bueno, bueno igual mi madre puede hablar con tu tía”
“¿Si? ¿harías eso por mí? Oh Dios eres la mejor”
“No prometo nada, pero…no te saldrá gratis…ja jajá” concluyo enigmática la chinita.
Como en un suspiro y casi sin darme cuenta, entre terminar de arreglarme, disfrutar de la cena y conversar con mi chaval, al que encontré muy animado y que como todas las noches salió con sus amigos, me habían dado las once de la noche y ahora disfrutaba de esa paz que da cuando disfrutas en soledad de tu espacio cuando recibí una llamada de mi gatita
“¿Si putita?” respondí un poco intrigado
“Amo, amo, lo siento. Lo siento…hip…hip…” oí al otro lado de la línea como mi gatita entrecortadamente y entre lágrimas intentaba decirme algo
“Vamos, vamos gatita…relájate. Para y cuenta de cinco para atrás…cálmate y cuéntame que te pasa” respondí preocupado, pero intentando que recobrara la cordura
“Estoy perdida Amooo, estoy perdida…hip…hip” continuaba sin consuelo
“Vamos, vamos…deja de llorar y dime donde estas “insistí
“Abajo, en el cuarto de la basura…hip…hip” respondió entre sollozos
“Bueno pues no te muevas de allí que ahora mismo voy” a lo que raudo y cogiendo la bolsa de los plásticos me dirigí a donde me indicaba y donde me encontré a mi tierna chinita acurrucada entre los contenedores en un mar de lagrimas
Agachándome frente a ella la recogí entre mis brazos mientras acariciando su cabecita trataba de calmarla “Ya está, ya está, ya estoy contigo gatita…vamos tranquila, nada malo te puede pasar conmigo” le decía mientras lograba levantarla y poco a poco la sacaba del pestilente habitáculo en dirección a los ascensores, mientras con la mirada a un lado y a otro del garaje buscaba cual o quien podía ser el motivo de la congoja de mi gatita.
Franqueada la puerta de mi piso llevé a la chinita al sofá mas cercano y dejándola cómodamente recostada en el mismo me hice con un vaso, una botella de brandy, una manta y un paquete de toallitas.
Ya a su lado conseguí con dificultad y muchos mimos que se incorporara y que empezara a tomar sorbitos del fuerte licor que tuvieron el efecto de devolverle el color a sus mejillas y que cesara de llorar, ante lo que aproveché a taparla por los hombros y empezar a limpiar su carita surcada por las lágrimas.
“Venga y ahora gatita me vas a contar que te ha pasado. Y no te preocupes tenemos todo el tiempo del mundo, ya he avisado a tu madre de que estás conmigo. ¿has cenado? ¿te apetece algo?” Pregunte cada vez más intrigado, pero intentando aparentar calma
Como respuesta la jovencita se abrazó a mí, y más calmada comenzó a relatarme lo acontecido
“Amo, al irte de la playa el resto no nos quedamos mucho más porque ya empezaba a hacer fresco.
Mama zorra recogió a Perrita y juntos nos despedimos del grupo, subimos y después de la ducha, donde cumplimos con la limpieza de nuestros culitos como nos tienes mandado, preparamos la cena.
Acabada la cena, y cuando iba camino del cuarto de la basura de repente y sin saber de dónde había salido, me abordo Borja, el presidente de la urba, el padre de los mellizos y de Caridad y de Gadea…” momento del relato en que la jovencita pareció empezar a dudar y le volvieron los temblores
“Si mujer, ya sé quién es nuestro engreído e insoportable presidente…sigue” le anime a continuar mientras estrechaba mi abrazo y besaba dulcemente la frente de mi gatita.
“Bueno, pues…me cogió del brazo…retorciéndomelo…me hacía mucho daño…y me puso contra la pared. Hablabas entrecortado, el aliento le olía mal…y me dijo que me había visto la otra noche mientras un niñato me echaba un polvo en la terraza…me dijo que era una golfa…que si no quería que se enteraran mis padres y me devolvieran de vuelta a China que me iba a follar todos mis agujeros y que así probaría lo que es la polla de un macho de verdad…” relataba, volviendo a interrumpirse mientras algunas lágrimas volvían a recorrer su asustada carita.
“Sigue cariño, venga ¿Qué paso más? “la anime a seguir
“Me intentaba besar…yo apartaba la boca y me resistía…decía que tenía que ser suya, que sería su puta…que me iba a follar allí mismo y que desde hoy todos los días tendría que bajar a la hora de la siesta a su trastero para que recibiera mi ración de polla…era asqueroso…” se volvió a interrumpir
“¿Ha abusado de ti ese mal nacido? Juro que ese hipócrita cabrón lo pagara gatita” respondí indignado
“No, no…menos mal apareció un vecino y se recompuso como pudo…pero antes de despedirse me dijo que recordara su recado, a las cuatro de la tarde de mañana…Amo ¡tengo miedo! ¿Qué vamos a hacer?” termino entre sollozos.
“Vamos, vamos, pequeña ¿me ves preocupado? No te preocupes ese cabrón se va a encontrar con la horma de su zapato, no lo dudes. Y ahora ¿estas segura que esas fueron sus palabras? ¿se refirió a un niñato, no a mí, y que te había visto, no que tuviera fotos o videos? ¿eh preciosa?” insistí
“Si, si seguro. No, no te nombro en ningún momento y no, tampoco dijo nada de fotografías o videos…estoy segura” respondió mientras recuperaba la calma y se la veía más animada.
“Bueno pues tranquilízate, deja todo en mis manos y ahora lo que se trata es de descansar así que vamos a la cama” Y cogiéndola entre mis brazos como una novia en su noche de bodas la conduje a mi dormitorio “Esta noche te quedas conmigo preciosa” le decía mientras la depositaba en mi cama. Despojándome de mi ropa me metí bajo las sabanas con mi dulce putita a la que encontré igualmente desnuda, y que en cuanto me tuvo a su lado se pegó a mi como una lapa dejando caer su cabecita sobre mi pecho “Amo, ¡pasé tanto miedo! Era tan desagradable, olía a sudor…pero…si tú me lo ordenas me entregare a él para evitar que pueda perjudicarte…” comenzó a decir la todavía agitada gatita como un suspiro
“Shiiiii” comencé poniéndole mi dedo sobre sus labios “…no está hecha la miel para la boca del burro mi niña…No, ese cabrón va a tener su merecido y nosotros vamos a pasar un buen rato…” continúe mientras posaba mis labios sobre los suyos, encontrándolos carnosos, cálidos, húmedos y ansiosos de mí. Sus manos recorrieron mi pecho bajando a mi entrepierna donde ansiosa tomo posesión de mi miembro, que completamente erecto y duro como una piedra, sintió como su cálida manita iniciaba una suave masturbación
“Ohhh mi Amo, antes me has llamado cariño…entonces… ¿me quieres? ¿No dejaras que me toque ese baboso?” murmuro como temiendo molestarme, pero con un brillo de esperanza en sus ojos
“Claro que te quiero mi gatita ¿lo has dudado alguna vez? Y no, ningún sucio baboso te pondrá la mano encima sin mi consentimiento” respondí mientras tiernamente deposité un beso en sus labios
La reacción de la entregada jovencita no pudo ser más fulminante. De repente pareciera que la vida había vuelto a su cuerpo y situándose sobre mí, empalo su cálido sexo con mi polla “Ohhhh Amo, soy tuya, te amo…haz conmigo lo que quieras mi cuerpo, mi vida es tuya y para ti…” repetía mientras me cabalgaba con desespero, llevando en cada acometida mi polla hasta el fondo de su vagina mientras se sostenía con sus manos sobre mi pecho.
Para no acabar con mis huevos machacados por el frenético ritmo que mi joven putita imponía a su cabalgada, con mis manos en su cintura acompasé su ritmo al mío y, entregada, dejo caer su pecho contra mi pecho haciéndome sentir la dureza y turgencia de sus pezones
“Aaahhh, Aaaagg, ooohhh siiii, tuya…soy tuya, todo tuyaaa…” gemía a la vez que frotaba su pubis contra mi
Decidido a hacerla desfallecer la giré por completo, y poniéndome encima de ella, puse sus piernas sobre mis hombros y a la vez que metía dos de mis dedos en su prieto culito inicié un constante martilleo que llevaba repetidamente mi glande a chocar con su útero
“Uuuuuffff, Siiiiiiiiiiiiiii…si…siiiiiiii… mi macho…mi vidaaa, me corro me corroooooo…” gemía
“Si córrete putita, córrete en la polla de tu macho…de tu Amo…eres mía…golfa, puta, zorra…” le repetía mientras la chinita encadenaba un orgasmo con otro y yo seguía intensificando el ritmo de mi follada.
“Siiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiii…tuya…tuya…tu puta…” Concluyo en un suspiro y desvaneciéndose mientras regaba sus entrañas con una prolongada y cálida lechada.
Lentamente, dejando que mi polla dejara de emanar mi corrida dentro de su joven coño termine por salirme del mismo y recostarme al lado de mi chinita, quien aún aturdida parecía haber caído en trance.
Poco a poco percibí como su respiración se acompasaba y girando su cuerpo sobre el mío me abrazo con su mano y pierna derecha, cayendo de seguida en un profundo sueño al que de inmediato me uní.
Las primeras luces de la mañana entraban por la ventana de mi dormitorio cuando la percepción de una presencia extraña me hizo abrir ligeramente los ojos.
Cuando pude fijar mi vista vi, a los pies de mi cama, a mi vecina Rosa mirando con indisimulada envidia el joven cuerpo de mi acompañante
“Bueno, espero que no vayas a quedarte mirando como una boba ¿vamos no sabes cuál es tu primer deber por la mañana?” le dije divertido, descubriendo mi morcillona polla de entre las sabanas, a lo que, repuesta de su inicial estupor, la madurita respondió poniéndose de rodillas junto a la cama e, abarcando con su boca mi miembro, iniciando una dulce mamada “¿Ves? No es tan difícil, en mis gustos no soy nada complicado.
Y en otro orden de cosas ¿Cómo te va con tu sobrinita?” le pregunte mientras con m imano sobre su nuca imprimía un ritmo más rápido a la mamada “Ja jajá, perdona que tienes la boca ocupada Ja jajá” termine por reírme de lo imposible de mi petición “vamos, sigue…termina lo que has empezado y luego me cuentas” a lo que la complaciente vecina respondió intensificando las penetraciones de mi polla hasta su garganta mientras con sus suaves manos estimulaba mis duros huevos.
Tantas y habilidosas caricias consiguieron pronto su efecto y, notando que me venía una abundante corrida, apretando hasta el fondo su cabeza de modo que con su nariz llego a mi pelvis, que le obligue a tragar toda, cosa que para mi satisfacción hizo como una verdadera profesional.
Completamente descargado y quitando mi mano de su cabeza por fin la madura pudo sacar mi miembro de su boca, tras lo que sonriendo de satisfacción pregunto “¿Está contento mi Amo?”
“Más que contento, estas resultando una adquisición muy provechosa, lástima que hayamos perdido tanto tiempo, no podía sospechar el potencial que escondías so guarra” respondí divertido
“Solo hacía falta una buena polla para despertarme, y desde ayer mi Amo me enseño que era la suya la que tanto andaba esperando”
En eso estábamos cuando a mi lado sentí como mi joven chinita comenzaba a desperezarse “Mira gatita quien ha venido a despertarnos, vamos ¿no le vas a dar un besito de buenos días?”
A lo que ni corta ni perezosa la chinita, pasando su cuerpo sobre el mío tomo posesión de la madura boca, que en cuanto noto el sabor de mi semen en ella, se lanzó con su lengua a explorar todos sus recovecos
Ansiosa por aprovechar la ocasión que se le brindaba, la madura cogiendo entre sus manos la cabeza de mi putita profundizo y prolongo cuanto pudo el intenso morreo, y notando que no necesitaba retener el objeto de su deseo comenzó con su mano a explorar los firmes pechos de mi gatita
“Quieta zorra” la paró de un manotazo mi gatita “aun no te lo has ganado. El Amo te puso un precio y aún lo has pagado ¿verdad Amo?” me pregunto mi joven putita
“Tienes toda la razón” conteste divertido viendo la cara de estupor y decepción de la madura” y no me gustaría que perdiera la motivación Ja jajá”
“Sabes que no Amo, desde ayer estoy entregada a ti y tus deseos son míos” respondió compungida la vecinita
“Lo se guapa, pero un trato es un trato” le conteste mientras la besaba tiernamente y con mi mano me hacía dueño de su pezón retorciéndolo insistentemente “buena zorra…buena zorra” le repetía mientras empezaba a notar sus lágrimas en mis labios que seguían gozosos disfrutando de los suyos mientras mi mano, abandonando su tormento se apodero de su vagina comenzando una dura penetración con tres de mis dedos que en poco la llevaron a retorcerse de gozo.
“¿Ves gatita? Nuestra amiga Rosa desde ayer se está preguntando porque durante tantos años se ha negado gozar, vivir plenamente, sintiéndose poseída. Eso gracias a mí no te ocurrirá a ti que has encontrado en tu entrega la razón de tu existir” comente mientras me volvía hacia mi joven gatita
“Gracias Amo. Gracias a ti esta semana he empezado a vivir” respondió mimosa posando sus húmedos labios sobre mi pecho.
“Bueno, pero ahora es momento de desayunar y ponernos en marcha que tenemos muchas cosas de las que ocuparnos, así que componeros, mover el culo y cada uno a su casita que yo me voy a dar un baño en el mar y luego iré a desayunar a tu casa gatita.
Tú,” dije dirigiéndome a Rosa “no tardes en arreglarte, que te quiero a las once y media en la playa. Ah y a tu sobrinita le buscas un bikini, no esos horrorosos trajes de baño que le pones, que, si no tienes, que gatita le preste alguno.
Y ahora fuera las dos, bueno antes ventilar y hacerme la cama.
Adiós zorras” concluí poniéndome un bañador y dirigiéndome a la salida camino del mar.
Reconfortado por el baño tempranero volví a mi piso donde me encontré con el piso perfectamente recogido. Satisfecho me apreste a tomar un fuerte desayuno pues preveía que el día daría para mucho. Huevos, beicon, zumo y un café bien cargado me renovaron las energías y empecé a planear como resolvería el fastidioso tema del abusador de mi chinita.
Recapacitando todo lo acontecido y conociendo someramente al personaje, miembro numerario de la Obra, Director General de los centros de enseñanza en Castilla y un ser insoportable pagado de sí mismo, que tras su beaterio escondía un abusador de la peor calaña, pergeñe un plan, del que tras darle un par de vueltas quede satisfecho.
Aún no se había levantado mi chaval cuando ya había ido al coche, al trastero y había reunido los elementos necesarios para cumplir el delicado asunto.
Aburrido, procedí a levantar a mi chaval, que en verano duerme como una marmota, le preparé el desayuno, e informándole de que a las doce bajaríamos a la playa me preparé para ello.
Listos y después de recoger la cocina y obligar a mi vástago a hacerse la cama y recoger su habitación cogimos camino a la playa.
No habíamos puesto un pie en la arena cuando mi revoltosa Perrita salió a nuestro encuentro y cogiéndome de la mano nos llevó a donde se había asentado el grupo. A nuestra llegada nos saludaron alegres Mamen, la mama zorra que aprovecho para echar una mirada más que insinuante a mi chaval mientras sin disimulo se atusaba sus pechos; Sara y Clara que como el día anterior compartían toalla y confidencias y algo más apartada su siempre vigilante su tía Rosa que busco con su mirada mi aprobación al nuevo bikini que lucía su sobrina.
Si por algún momento pensé que mi mañana iba a ser tranquila, rápidamente la pequeña Perrita se encargó de desengañarme, pues desde el primer momento insistió en que nos bañáramos juntos y la lanzara por los aires.
Si bien su mamaíta insistió en que no me molestara, yo accedí a sus requerimientos y me metí en el agua con la mocosa. No me había cubierto aun el agua la cintura cuando la preadolescente dejo clara sus intenciones llevando su manita a mi paquete que sobo a placer
“Que duro y grande Amo ¿es por mí?” pregunto coqueta
“¿Por quién va a ser sino preciosa?” respondí zalamero, a lo que la niña insistió en su tocamiento llevando y llevando su mano por dentro del bañador inicio una suave masturbación.
“¿Jugamos?” pregunto
“Claro Perrita, aunque creo que tú tienes tu juguete en tu mano” replique guasón mientras la acercaba contra mi
“Vamos a jugar a las ahogadillas, veras como aguanto bajo el agua” prosiguió divertida la chiquilla a la vez que sin dejar responderle se sumergió bajo el agua, y sacando mi erecto miembro del bañador se lo metió en su boca iniciando una suave mamada.
Sorprendido y encantado por la actitud de la más joven de mis putitas me deje hacer disfrutando de su placentera caricia y apreciando como pese a las evidentes dificultades de la situación la niña estaba aprendiendo rápido, tanto que instintivamente lleve mi mano a su cabecita e imprimí presión contra mi polla.
Así hubiera seguido hasta descargarme en su sabrosa boquita de no avisarme sus agitadas manitas que estaba a punto de quedarse sin aire, con lo que liberándola emergió sofocada pero sonriente y tras recuperar el resuello pregunto divertida “¿Le ha gustado al Amo mi jueguecito?”
“Mucho guarrilla, pero la próxima vez asegúrate de poder terminar lo que empiezas, que no me gusta quedarme a medias” respondí tratando de aparentar cierto enfado si bien el brillo burlón de mis ojos me desmentía
“Perdón Amo, seguro que la próxima vez aguanto hasta el final” respondo confundida al no apreciar la sorna en mi respuesta
“No te entristezcas Perrita, el Amo está contento, pero debes practicar y ahora ¿Por qué no terminas con tus manitas lo que tan bien has empezado?” requerimiento que no se hizo repetir y que con mucha zalamería llevo a cabo sin que nadie desde la orilla pareciera darse cuenta del morboso lance que ocurría ante sus ojos
Descargados mis huevos la chiquita no dejo de observar “Que pena, tanta lechecita rica desperdiciada” a lo que respondí elevándola por el aire y, divertida por el giro de los acontecimientos, tirándola lejos lo que provocó una fuerte zambullida de la que salió riendo y pidiendo más.
Vuelto para la orilla me percaté de que algo alejado acababa de llegar a la playa la familia del presidente de la urbanización y no queriendo desaprovechar la ocasión de tantear al abusador de mi putita, salí del agua dirigiéndome a donde se encontraba.
“Hola Cari ¿no ha bajado Borja?” pregunte inocente a su esposa mientras esta terminaba de colocar todos los bártulos de su progenie bajo la sombrilla
“Ah, hola Marcos, si, si, iba bajando, pero ya sabes una llamada del administrador, y se ha quedado un poco atrás. Pero mira, por ahí baja” respondió solicita señalando la escalera que daba acceso a la playa
“dispuesto a que no se me escapara, y tras disculparme, avance hacia el personaje que hablando muy alto a través del móvil intentaba que todo el entorno supiera de su presencia y de la naturaleza de sus gestiones, que el vendería posteriormente como desvelos por una comunidad que no le reconocía lo suficiente su esfuerzo.
“Oye, perdona que te dejo, pero me aborda un vecino y tengo que atenderlo” habló pomposo a su interlocutor cortando la comunicación “Hombre Marcos ¿en qué puedo atenderte hombre?”
“Perdona Borja, eh mira es que tengo un problemilla de filtraciones sobre mi plaza de garaje y estaba pensando si a la hora de la siesta podríamos bajar a echarle un vistazo, si no es mucha molestia” lo aborde sin más preámbulos
“Uy, lo siento tío. No sabes cómo lo siento, pero esta tarde tengo un asuntillo de la comunidad, tú ya sabes, y me es imposible ¿Por qué no se lo dices a Paco al portero y él le echara un vistazo? Dile que vas de mi parte” respondió
“Pues vale gracias, eso hare, hasta luego Borja” me despedí observando como sobre mi hombro buscaba con su mirada la que creía sería su próxima pieza
Vuelto a donde estaba mi camada me dedique a darme repetidos baños, tomar el sol y disfrutar de una distendida charla. En uno de los momentos de relax aproveche para por wasap indicarle a mama Zorra que este mediodía almorzaría en la playa junto a Perrita y que hiciera lo imposible para retener con ella a mi chaval mientras yo subiría con Sarita a la urbanización.
Levantando mi vista por encima de las gafas de sol pude observar el feliz efecto que tuvo mi mensaje en su destinataria, que de inmediato se puso a ello con el morboso propósito de disfrutar del cuerpo joven de mi chaval y tal vez suponiendo que su Amo quería disfrutar de una calurosa siesta junto a mi gatita.
Llegada las dos y media observe como la familia del presidente, fiel a sus rígidas costumbres, iniciaba su camino de vuelta a la urbanización, aunque eso supusiera perderse el momento más animado de la playa, mientras volvía a fijarme como el abusador trataba de captar la atención de mi gatita haciéndole gestos que para otro observador carecerían de significado y sin embargo para la aludida y para mi estaban cargados de intención.
A las tres y justificándose en que tenía una clase online de idiomas Sarita se despidió de su nueva amiga iniciando su camino a su casa, que yo seguí sin despedirme de nadie y tratando de llamar lo menos la atención.
A las tres y media cite a mi gatita en el garaje y le di las últimas instrucciones a la vez que procuraba que recuperara la tranquilidad que parecía haberla abandonado según se iba acercando la hora de la cita.
Llegada la hora mi gatita inicio dubitativa el camino al trastero donde la habían citado, volviendo de continuo la vista, buscando con sus ojos los míos para recuperar las fuerzas que parecían faltarles.
Llegada a la puerta, con sus nudillos llamo tímidamente, abriéndose de inmediato la estancia que aparecía profusamente iluminada
“Hola golfa. Así me gusta, puntual, pasa rápido idiota” escupió, más que dijo, ansioso el abusador. La visión de una apetecible y asustada joven fue lo último que vio antes de recibir un seco, contundente, directo en su rostro que lo sumió en la más absoluta oscuridad.
“Gatita, cierra rápido” le decía a mi putita mientras arrastraba el cuerpo de Borja para adentro del trastero mientras la chica se aprestaba a cumplir mis órdenes no sin antes comprobar si alguien había observado la confusa escena y entraba en la estancia el macuto que había traído conmigo.
Ataviado con un mono de mecánico, pasamontañas y fuertes guantes me aprestaba mientras tanto a inmovilizar el cuerpo inerme de Borja que sangraba abundantemente por la nariz y tapar su boca con una brida que mantenía en su boca una bola perforada que solo le permitía respirar y babear. Seguro de que no me generaría problemas pude pararme un momento a examinar la estancia y no pude dejar de apreciar la previsión de quien se había llegado a creer rapaz para pasar en un instante a convertirse en presa.
La estancia estaba profusamente iluminada por lámparas portátiles mientras dos trípodes sostenían sendas cámaras de video cuyos objetivos se dirigían a un extraño potro metálico en el que de seguro se proponía inmovilizar a mi gatita para someterla a toda clase de abusos.
“Vamos, ayúdame antes de que espabilé” le dije a mi putita que tras el inicial shock parecía recobrar su energía “la previsión de este cabrón nos va a aligerar los tramites” continúe mientras comenzaba a desnudar a Borja y poniéndolo boca abajo ataba sus muñecas al potro para luego pasar a hacer lo mismo con sus tobillos con lo que el todavía inconsciente quedo a cuatro patas sobre el suelo.
“Bien, ahora me voy, Sigue tal como te he dicho y nada saldrá mal. Yo estaré vigilando y contigo a través del móvil para lo que necesites. Hasta pronto guapa, confió en ti” le dije mientras la besaba suavemente, me desacia del pasamontaña, el mono de mecánico, los guantes y el puño americano que escondían.
Recogidas esas y otras cosas en mi mochila, abandoné el trastero cerrando a mi espalda y, comprobando que nadie me veía, me dirigí a mi vehículo desde donde seguiría los acontecimientos.
Conectado a través del móvil con mi sumisa comencé a darle las instrucciones “Hola gatita ¿todo bien? ¿Sí?, bien pues comprueba que enciendes las cámaras de video y que funcionan los móviles.
Bien ahora todo depende de ti, respira hondo, tienes el control absoluto y yo estoy a tu lado para lo que necesites.
Aplica el amoniaco para despertar a la bella durmiente” Comprobando por la cámara del móvil que hacia cuanto le iba indicando.
Viendo que Borja recuperaba el sentido, su ansiedad aumento exponencialmente girando su cabeza a un lado y otro en búsqueda de quien lo había sometido a su actual situación. Su turbación aumento aún más al, no teniendo a nadie a la vista, pues la chinita se mantenía alejada de su campo visual, empezar a oír a través de unos auriculares una fuerte y distorsionada voz metálica para no ser reconocida “Hola mamón ¿de verdad creíste en algún momento que ibas a follarte a mi chica? No eres más que un mierda cobarde y como tal vas a ser tratado a partir de ahora”. Palabras que aumentaron su angustia, hicieron que sus ojos se le salieran de las orbitas y comenzara a sudar abundantemente.
“¿Tienes miedo sanguijuela?, vas a recibir tu justo castigo y te prometo que no lo olvidaras en tu miserable vida ¿Y sabes lo más divertido de todo? Pues que tu correctivo te lo va a aplicar la misma que pensaste era una indefensa chiquilla y que está a punto de demostrarte que es una verdadera mujer capaz de someter a un mierda como tú” Momento en que la chinita se situó enfrente de sus ojos, mostrándola vestida con corpiño, botas al muslo de cuero negro, portando un enorme strapon del mismo color entre sus piernas y cubriendo su rostro con un antifaz, visión que logró arrancar de Borja gemidos de desesperación.
“Procede, es todo tuyo princesa” Ante lo que la aludida desapareció de su campo visual situándose detrás mientras su víctima hacia desesperados esfuerzos para girar su cuello y poder tener una idea de lo que le esperaba.
Asiendo una próxima pala de padel, la joven sopeso su peso, la agarro con fuerza y comenzó a golpear alternativamente los cachetes del culo de su víctima. Primero tímidamente para, tal como la iba dominando la furia, la ira por la humillación recibida, ir acrecentando la violencia y número de sus golpes al compás de su cada vez más agitada respiración y abundante transpiración que la dominaba.
Esa manta de golpes consiguieron que el hasta hace un momento atildado madurito fuera ahora un despojo humano, con su cara arrasada por las lágrimas, desfallecido por el dolor y del que poco más que salían de su boca gemidos lastimeros.
Aplacada poco a poco la furia de la chiquilla, de igual modo paro la secuencia de golpes.
“Ya no te ríes tanto ¿verdad Borjita? No es esta la agradable tarde que te prometías disfrutar ¿verdad rata sarnosa?” Le dije por el intercomunicador “Pues esto no ha hecho más que empezar” Aviso que hizo que el aludido recuperara el ánimo, aunque solo fuera para gimotear suplicando.
Sin darle tiempo a más la chinita enfilo el culo y de tras duros golpes consiguió penetrar hasta al fondo el recto del humillado mequetrefe, que de no habérselo impedido la mordaza hubiera proferido un grito que se hubiera escuchado en toda la urbanización. Presa de un dolor que debiera ser inenarrable Borja perdió el conocimiento.
“Reanímalo con el amoniaco, este mierda va a sentir en sus carnes el tratamiento completo” le ordene a mi sumisa que de inmediato aplico el producto bajo la nariz del aludido, que recupero el sentido
“Vamos Borjita, te estas comportando como una nenita ¿no eras tú el machote que le ibas a hacer probar a mi chica una polla de verdad?” Le decía mientras la jovencita, firmemente agarrada a las caderas del aludido, iniciaba un frenético mete-saca que arrancaba a este continuos gemidos de dolor y un rio de lágrimas que regaban el frio suelo.
La chinita, cada vez más fuera de sí, acompañando la brutal enculada con continuos golpes en los ya magullados cachetes del presidente, comportamiento que tuvo el, tal vez no tan extraño, efecto de provocar una erección en su víctima y que este, en el climax de la follada se corriera como un cerdo.
“Vamos, vamos Borjita ¿pues no va a ser que te está gustando? Jajajaja, quien prometía ser un Amo dominante ha quedado reducido a un miserable masoquista, Jajajaja, ¿no te da vergüenza? Y a manos de una niñita, Jajajaja.
Patético tío”
Sea por mis palabras o porque mi sumisa había llegado al extremo de sus fuerzas la chinita concluyo su enculada sacando el strapon del culo de su víctima, lo que provoco que algunas gotas de sangre y heces cayeran al piso.
Recuperado el ritmo normal de su respiración, la chica, retirando el móvil del presidente del cable USB que lo conectaba a mi portátil, lo puso delante de los ojos de su propietario.
“Bueno Borja, esto está siendo muy divertido, pero vamos a tener que despedirnos. No obstante, no creerás que esto te va a salir gratis ¿verdad? De alguna manera tendrás que reparar el daño y el tiempo que nos has hecho perder con un mierdecilla como tú.
Mira, esto es lo que vamos a hacer. Ahora mi chica va a retirar las tarjetas de memoria de las cámaras de video que han recogido esta bonita sesión de amor, unas escenas que nos encargaremos que lleguen a manos del Presidente nacional de la Obra, el circunspecto don Francisco Javier Azirmendi, de todo tu círculo de amigos y porque no, del ciberespacio en general, de seguro que en poco serás trending topic Jajajaja.
Salvo…que en menos de quince minutos que empiezan a contar desde YA, adquieras 2 bitcoin con la cuenta del colegio y los transfieras a una cuenta encriptada, no te preocupes ya tienes todos los enlaces en tu móvil y solo deberás poner tus claves personales.
Sara, corta la brida de la mano derecha de este mamarracho” lo que la aludida se apresto a hacer de inmediato con un pequeño alicate.
Como quiera que el aludido parecía dudar, insistí “Él envió del video está programado si a los quince minutos no has terminado la transferencia y, si por un casual se te ha pasado alegar que ha sido una violación, el pequeño detalle de la erección de esa pichita de mierda y tu corrida de cerdo creo que planearan más de una duda razonable a tus excusas de llorona ¿no te parece? argumento ante el que el termino de convencerse y comenzó a teclear frenéticamente.
“Bien, me gusta que al final hayas entrado en razón. A lo mejor en tu retorcida mente habías llegado a concluir que era un estúpido al exigirte tan exigua cantidad, pero por si no lo sabes la cotización actual del bitcoin está en 30.000€ y es justo el límite de libre disposición por tu cargo de Director General y en límite en que a la Agencia Tributaria se le empiezan a encender las alarmas, con lo que creo que el próximo año estarás más que entretenido en intentar ocultar dicho movimiento a los ojos de la auditoria interna y Hacienda de modo que no te quede tiempo para seguir acosando chicas indefensas.
Bien veo que ya hemos acabado, justo a treinta segundos del punto de no retorno. Felicidades”
Enhorabuena que pareció sacar algo parecido a una sonrisa al extorsionado, que pronto mudo en una mirada llena de odio.
“Borjita, guárdate tu mala leche para aquellos que se dejan pisotear, esta niña y yo ya te hemos enseñado que somos demasiado enemigo para ti. Y ahora abur colega.
Sara saca las tarjetas de memoria de las cámaras de video, recoge los móviles y déjale cerca las tenazas, pero no tan cerca como para que las coja a la primera” Tras lo que cumplir lo ordenado la chica salió del trastero cerrando la puerta tras de sí, encontrándome esperándola me apreste a cubrirla con una amplia camisa de playa y una pamela que ocultara su vestimenta e identidad.
“Lo has hecho estupendamente cariño, este cerdo se pensará mil veces volver a molestarte y si lo intentara lo tenemos cogido por los huevos” palabras que remate con un tórrido beso correspondido por un prieto abrazo a través del que sentí como mi putita se deshacía de la ansiedad que hasta entonces la dominaba “Vamos cariño, debemos volver, este cerdo no tardara en desatarse y aunque tendrá que eliminar mucho de su rastro para evitar preguntas incomodas no debemos darle oportunidad alguna para desbaratar nuestro plan” y cogiéndola de la mano nos dirigimos hacia su casa.
A amparo de las cuatro paredes de su apartamento recogimos la mayor parte de las evidencias que pudieran relacionarnos con los recientes hechos “echa en esta bolsa todo lo que haya tenido contacto con esa mierda, no merece la pena guardar nada, incluso esa bonita vestimenta que tanto me pone” le decía mientras tirando de ella hacia mí, sentándola en mis rodillas, iniciaba una profunda comida de boca y a penetrar con mis dedos su húmedo sexo.
“Ohhhh Amo, siiiii…” gemía mientras mi boca se hacía dueña de sus lindos pezones “tenía tanto miedo…te debo mi vida…uffffff siiii…empálame…Diosss…..sigueee” continuo a la vez que, girándose frente a mí, cogiendo mi dura polla, llevo mi glande a la entrada de su cálida cueva y dejándose caer lentamente la llevo hasta el fondo, iniciando un suave balanceo
“Mi Dios, mi Amo, mi vida entera…soy tuya…que gusto…” gemía mientras ayudada de sus brazos tras mi cuello, sus caderas, imprimía a su cálido sexo un cadencioso bombeo, apretando sus músculos vaginales entorno a mi cada vez más caliente polla, que se abría paso hacia su útero como si penetrara mantequilla “Si, si, si…te necesito como el respirar…me arde el coño…contigo me siento viva…hembra…que gustazoooo…me corroooo…”
“Venga gatita, descárgate, suéltate, córrete como la guarra que eres… ¿quieres polla? pues toma polla puta zorra…” le decía mientras aumentaba el ritmo de mi martilleo empujando su culo contra mi “Puta ¿Quién es tu dueño? ¿eh? …”
“Tú, tú, tú solo tu…me vuelves loca…dame tu leche, la necesito…báñame en ella…fóllame…córrete…mi Diosss…mi Amooo…mi Vidaaa…” gritó al fin, para sacando mi polla de su coño, ponerse de rodillas ante mi e, iniciando una frenética masturbación a dos manos de mi miembro, conseguir una inagotable corrida que le lleno cabello, cara, pechos y que rápidamente extendió por todo su cuerpo, rechupeteando golosa los restos que aun quedaron en sus dedos “Ummmmm, que rica…necesito comértela todos los días de tu vida…saciarme con ella…es mi droga…te deseo…cuando no estoy contigo siento un vacío en mi coño imposible de colmar si no eres tu quien me penetra…ni mis manos, ni las bocas de Perrita o mama me llenan como tú, mi Amo, mi Señor, mi Dueño…te entrego mi vida entera…haz conmigo lo que quieras…mi culo, boca, mi existencia entera es tuya…”
“Ni dudes que eres mía y que hare contigo lo que me plazca gatita, esa es la razón de tu vida y a ello te aplicaras hasta cuando y como yo diga putita” le decía mientras aproximando su boca a la mía penetre con mi lengua hasta su campanilla
“Uffff, aggg, uummm, sí, sí, quiero ser digna de ti…ser la mayor de las putas, la más sucia golfa y lo sere para ti mi Amo, la más y grandísima guarra que hayas ensartado jamás con tu grandísima y riquísima polla” gemía mientras frotaba su sexo con mi empeine llenándomelo con sus cálidos flujos para a continuación limpiármelos sumisa con su lengua “soy tu perra y estoy a lo que ordenes mi Amo, tus deseos son órdenes y tus palabras la ley para mi” insistía mientras con sus manos cogía al peso mis huevos y su boca limpiaba ansiosa el tronco de mi polla “Ardeee, Dios que rica…no puedo pensar en otra cosa…no vivo para otra cosa que me estés partiendo el culo, el coño a todas horas…tragarme tu semen, hacerte feliz mi Amo…me has convertido en una viciosa…”
“Ja jajá. Ya lo eras golfa, solo que necesitabas un macho como yo que aflorara tu verdadera naturaleza de puta, de hembra.
Bueno, pero ahora ya es tiempo de que volvamos a nuestros quehaceres, tu a rematar lo que has empezado y conseguir una nueva adquisición para mi camada y yo a deshacerme de esto y ver que esconde el móvil de la sanguijuela esa…Ja jaja a ver cómo se las arregla ese mal nacido para explicar su nariz rota”
” Como ordene mi Amo, demostrare ser digna de ti. De esta noche no pasara de tenerla entre mis piernas rogándome que le deje comer mi coño y dispuesta a abrir todos sus agujeros para mi Amo” replico irguiéndose, hinchando su pecho y con la mirada llena de orgullo.
“Lo se gatita, lo se…y ahora al lio” conteste posando mis labios en los suyos, compartiendo el gusto a su sexo y el mío mientras observaba como ante esa caricia cerraba tiernamente sus ojos, su nariz se dilataba para recoger mi aroma y su rostro reflejaba el embeleso que le producía saberse mía.
Continuara…
Ya paso un tiempo habra continuacion?
Excelentes relatos muy excitantes con morbo lujuria y pasión, espero la continuación ya ha pasado mucho tiempo.