Convierto a mi mejor amiga en mi puta personal
Descubriendo los limites de la amistad.
Hace varios años que conozco a Jenifer, aunque yo le digo jane, la conoci trabajando en una tienda departamental y de inmediato nos hicimos buenos amigos, ella tiene un muy buen cuerpo, no tiene demasiados pechos, pero tiene un culo y caderas de muerte, ademas de un abdomen plano, y tiene una carita muy linda, ella es de piel blanca y aunque ella no lo admita cualquier hombre desearia poder tenerla en la cama, aunque para desgracia de ellos y mia tiene novio, aunque no lo ve muy seguido por el trabajo, y como es una chica bastante timida no tiene muchos amigos, de echo al parecer soy yo el unico que tiene.
Este relato inicia un dia en el trabajo, yo tenia casi una semana sin follar con nadie, y tenia los huevos bastante cargados, lo que me tenia bastante caliente, por lo general intentaba no mirar de forma tan directa a jane, pero ahorita mismo me era imposible, ademas a ella le gusta usar pantalones pegados o mallas, y ese dia tenia puestas unas negras que le levantaban el culo de una manera increible, ademas solia recargarse sobre el mostrador, lo que le levantaba mas las nalgas, no podia dejar de verlo, en un par de ocaciones ella me atrapo viendolo, pero solo bromeabamos con eso, pero como nunca se molestaba ni me decia nada yo volvia a verlo despues de un rato. Como no podia mas con mi calentura y aprovechando que practicamente no habia gente me puse detras de Jane y le di una leve nalgada juguetona, dios que rico sono su culo se movio como si fuera gelatina, inmediatamente despues de eso ella me volteo a ver con la cara completamente roja, no sabia si era de enojo o verguenza, yo no sabia que hacer, me quede quieto esperando su reaccion, sin embargo no me dijo nada, solo se volteo como si no pasara nada, mi corazon latia a mil, tras varios años al fin pude tocar su culo, y no solo eso, lo azote, sin pensarlo mucho le di otra nalgada, esta vez algo mas fuerte, no podia verlo pero estoy seguro que mi mano se marco en su blanca piel, ella gimio un poco esta vez, pero a diferecnia de la vez pasada no me volteo a ver, solo se levanto del mostrador y se sento en unas sillas cercas de ahi, para no tener su culo tan a mi dispocision, yo tenia la verga completamente dura en mis pantalones, necesitaba ir al baño a masturbarme pero queria seguir intentando mas cosas con ella, queria ver hasta donde mas podia llegar, sin embargo para mi mala suerte en ese momento llegaron clientes, asi que no pude hacer mas.
Al dia siguiente ella actuaba como si nada, platicabamos como si no le hubiese echo nada, me aproveche de esto y mientras hablabamos la tome por los hombres y la recargue sobre el mostrador, ella me veia extrañada, yo sin dejar de platicar con ella como si nada de esto fuera raro le di un par de nalgadas algo fuertes, ella cerraba los ojos mientras azotaba su culo, intenaba no gemir, mientras yo seguia actuando como si nada, ella se intento mover, pero esta vez no la deje, y le di otra nalgada, esta vez una bastante mas fuerte, ella no pudo contenerse mas y solto un gemido, me volteo a ver como si me pidiera piedad, yo sonreia con una sonrisa burlona, y en vez de darle una nalgada solo tocaba su culo lentamente, undiendo mis dedos en su gordo culo, a pesar de eso ella aun no me decia nada, mi pene estaba a punto de estallar, tomaba su mano y la colocaba en mi pene para que la acaricie, ella intentaba quitarla, pero yo no la dejaba, tras unos segundos le di otra fuerte nalgada,ella entendio y dejo su mano sobre mi paquete, por un momento dude si seguir, pero la calentura era demasiada, y ella no oponia resistencia alguna, la tenia a mi merced por completo, una vez mas llegaron clientes, esta vez la solte pero me puse detras de ella, le restregaba mi pene en su enorme culo mientras ella los atencia, la abrazaba como si fueramos novios asi que no decian nada, aunque ella ya tuviera novio, asi estuvimos un buen rato, hasta que no pude aguatnar mas y fui al baño a masturbamre, pero no queria desperdiciar mi leche, asi que tome su bote donde tomaba agua y me corri bastante ahi, cuando regrese le dije que se bebiera todo, ella obedientemente lo hizo aunque claramente no le gustaba el sabor, pero a mi me encanto saber que Jane estaba bebiendo mi leche como toda una pituta en celo, tras esto el dia paso normal, ella seguia muy tensa, aunque intentando que el dia no fuera raro, casi al cerrar la tienda le dije que fuera al baño y dejara sus bragas en la tasa, que yo pasaria por ellas y sin dejarle decir ni una sola palabra le di una fuerte nalgada, ella sin decir mas se fue al baño y tras unos minutos regreso, inmediatamente entre yo y vi que la perrita me obedecio, mi pene se puso muy duro rapidamente y comenze a masturbarme con sus bragas alrededor de mi pene, no dure mucho y me corri en ellas, las deje nuevamente en la tasa y fui con jane, le dije que se las volviera a poner y esta vez no fue necesario ninguna nalgada, rapidamente fue al baño y esta vez duro un poco mas, pero cuando regreso tenia cara de asco y caminaba raro, pero aun asi tenia que verificar que en verdad se las hubiese puesto, la volvi a poner sobre el mostrador y bajo un poco sus mallas, solo para observar sus bragas salir un poco, las tome y jale de ellas fuertemente para que se metieran bien en su coñito, embarrando bien mi semen, ella levantaba la cadera para intentar aminorar el dolor, podia ver en su cara la desesperacion que tenia, y a pesar de todo no me decia nada, no era capaz de hacer nada, ella sabia que si se resistia perderia a su unico amigo, tras un buen rato asi, la solte, ella se recargo sobre el mostrador con las piernas temblandole, por el dolor, me acerque a su oido y le dije, que mañana no usara nada de ropa interior y que se pusiera una falda, para despues darle una nalgada.
Hasta aqui esta parte del relato, si les gusta voten y pronto relato como hice que me la chupara y tome su coñtito.
Continua
Amo!