Cuentos de Daniela, Capitulo 2:

Para llegar a ser sexopata en extrema tuve que pasar por un inicio, inicio extremadamente dificil dado que fue brutalmente dificil para mi edad y a pesar de eso, me gustó mucho..
Asi como en las peliculas, para llegar a donde se llega tiene que haber un comienzo, un inicio, un bautismo en el mundo de a donde se haya llegado. Y tal es ese mi caso, un caso particular entre tanta gente que hay en el mundo en general. Un caso en el que hay pocos reales… mayormente todo es fantasia y deseo impuro que jamas llega a cumplirse, son deseos que nacen y mueren en la masturbacion e imaginacion… Pero lo mio, sucedió.
Hablo puntualmente del incesto, el ser sexopata y ser mujer al mismo tiempo, porque mayormente es algo que a menudo suele exitir en el publico masculino en mayoria.

Pasemos a contar esta historia, dividida en muchos capitulos en mi vida algo apasionantes.

El Inicio

Mi inicio real en el incesto fue a los 10 años. En mi casa de Santa Rosa de Calamuchita, Cordoba, Republica Argentina. En el seno de una familia numerosa de multiples nacionalidades. Una madre de origen Brasileña, Un padre de origen Belga-Neerlandesa, muy aventurero y viajero con descendencia sudamericana Argentina-Uruguaya, 4 hijos, todos nacidos en Brasil pero criados en algunos casos en Estados Unidos y otros en Argentina. Tal es ese mi caso y el de mi hermana gemela Cinthia.
A la edad de 10 años ambas eramos fanaticas de las novelas amorosas y suspenso Argentinas y Mexicanas. No nos perdiamos ningun capitulo de nada, haciamos nuestras tareas a tiempo para despues encerrarnos en nuestra habitacion y mirar juntas cada episodio…
El punto de quiebre empezo una noche, mirando un capitulo de la serie «Mujeres Asesinas», edicion Mexicana, cuyo capitulo se llama «Eliana, Cuñada»… un capitulo en el que narra la obsesion de una mujer hacia la pareja de su hermano, o sea su cuñada… hay una escena que me abre la mente y me genera a partir de ese momento mucha curiosidad, mi hermana y yo sentadas a los pies de la cama observamos como una de las mujeres acorrala a su cuñada contra la pared y empieza a acosarla y a besarla desesperadamente, mientras la otra mujer hace mil intentos por salir de ahi y no puede lograrlo. A esa edad, era la primera vez q veiamos con mi hermana 2 mujeres besandose. No teniamos conocimientos de que se podia dar algo asi, 2 personas del mismo sexo besandose.
Ante la sorpresa de ambas, lo primero que dijimos fue «que asco». Pero con mi hermana a esa edad eramos muy aventureras en cuando a juegos y entretenimiento… nosotras en el dia jugabamos copiando y representando todo lo que veiamos en casa y en la tele, ya saben.. para no aburrirnos… cosas de niñas.
Esa escena vista fue el puntapie para mirarnos ambas un instante antes de dormir y sonreirnos… ambas recordabamos mucho lo recientemente visto y no dudamos ni por un momento en acercar nuestras bocas y darnos nuestro primer beso, un simple piquito, para probar que se sentia… a lo cual nos miramos luego y todo fue risas nerviosas.
Pero eso no iba a terminar ahi, ambas recordabamos todo lo que habia pasado en ese capitulo desde principio a fin. Y tomamos una decisión, irnos a bañar juntas, como haciamos cada noche antes de acostarnos.
Cada habitacion de la casa tenia su llave, el baño en particular tenia llave tambien. Entramos y cerramos con llave, pusimos musica en nuestra radio que siempre la llevabamos, amabamos escuchar musica en el baño, llenamos la bañera con agua (lo haciamos siempre para jugar y estar largo rato ahi). Pero esa ducha juntas fue distinto, algo cambio entre nosotras ese dia… el haber visto ese capitulo nos desbloqueo algo en la cabeza que no existia hasta ese entonces: el deseo.
Aunque nosotras no teniamos conocimiento acerca de lo que se podia hacer y no en la vida con respecto a algunas cosas… algo que justamente no sabiamos era lo del incesto… popularmente prohibido en el mundo. ¿Temas religiosos? ¿Temas politicos y legales? ¿Tradicion? Quien sabe… en el momento nosotras nos olvidamos… esa hora siguiente nosotras no paramos de mirarlos nuestras bocas… nuestros labios carnosos grandes, tentadores y besables… en el momento que nos empezamos a duchar  y empezamos a enjabonarnos  los cuerpos… cuando toco enjabonar nuestros «pechos» aun no crecidos, nuestros ojos se miraron fijamente, manteniendo una seriedad que hasta ese entonces jamas existió. Mis ojos descendieron hasta los labios de mi hermana y mi deseo desesperado se hizo presente… el control por sobre mi, desaparecio por completo.
Acorrale a Cinthia contra la pared y no pude evitar ni por un momento comerle la boca. Si, nuestros labios empezaron a besarse con una intensidad que desconocia totalmente. Con una desesperacion que nunca imagine tener. Mientras el agua de la ducha tocaba nuestros cuerpos y la musica del radio sonaba arduamente. Nuestros labios eran una sinfonia musical, una lucha dominante en ver cual boca dominaba a la otra… nuestras lenguas se asomaban entre si y socializaban entre ellas, se abrazaban en un sin fin de pasiones.
Ambas perdimos completamente la memoria y nos besamos incontroladamente contra la pared durante 30 minutos, que era lo que duraba el cd musical que poniamos. En esos 30 minutos, nuestras manos tocaron el cuerpo de la otra, mis manos no evitaron desear tocar la cola de mi hermana, tambien con desesperación… a esa edad nosotras haciamos mucha gimnasia y artes  marciales. Nuestros cuerpos se estaban empezando a desarrollar con rapidez, muchos nos decian que pareciamos mas grandes y nuestros pechos creciendo ya se hacian ver. Por lo que el intenso manoseo supero los limites de la cordura, mis manos llegaron a la frontera entre mis dedos y su vagina… perdia lentamente la cabeza por completo , ese episodio me habia enloquecido y mi hermana, siendo mi hermana, tambien se habia convertido en mi blanco principal para experimentar mi primera experiencia en el lesbianismo.
Yo ya habia visto por accidente a mi papa haciendole un oral a mi mama en su vagina. Una de tantas veces que por accidente veia jugando a las escondidas con Cinthia, pero para mi eso era algo que no me interesaba, cosas de adultos q yo no entendia…
Pero las cosas cambiaron esa noche en la ducha… ese recuerdo volvio de otra manera… ambas sabiamos que la vagina de la otra no tenia pelos crecidos, que estaban suaves… siempre hablabamos de eso como nenas.. pero en el instante que mis dedos tocaron su vagina, mi deseo incontrolable fusionado a los recuerdos de los orales de mi papa a mi mama hicieron que yo empiece a descender al punto en el que mis labios quedasen a la par de la vagina de mi gemela, que ante su atonita mirada algo enamorada y sorprendida me dijese «¿Qué estas haciendo dani?». Mi respuesta fue un silencio atroz, no pude controlar mi impulso e inicie el primer oral de mi vida… un sabor amargo pero riquisimo recorrio toda mi boca… su vagina suave sin pelos fueron abusadas brutalmente por mis labios, mi lengua curiosa lamio y se introdujo una y otra vez durante largo rato en la parte intima de mi hermana, que sin poder hacer nada contra esa pared cerraba los ojos y mezclaba risas con algo de un placer que recien descubria por primera vez. 2 nenas de 10 años, hermanas, perdian sus mentes en un juego que dejaba de ser juego… haber chupado su vagina cambio mi mente para siempre… esa vagina hasta el dia de hoy, fue la mas suave y rica que jamas chupe en mi vida… y que hasta el dia de hoy sigo chupando…
El vinculo de esa noche con mi hermana cambio para siempre. Cada una seguia con su vida, jugabamos juntas… puertas para afuera no demostramos jamas nada sexual que haga sospechar a otros. Nos portabamos como 2 mujeres normales. Pero una vez cerrabamos las puertas de nuestra habitacion, el sexo lesbico incestuoso placentero mutuo que nos dabamos hacia que una se enamorara de la otra, al menos por ese rato.
20 años despues hasta el dia de hoy, cada tiempo sigue sucediendo… cada una teniendo su vida, ella con su pareja, yo con mi hija y siendo separada… nos permitimos disfrutarnos en privacidad como 2 hermanas amantes conjuradas en un amor mutuamente declarado hacia la otra que durara de por vida.

Y asi termina el segundo capitulo de «Cuentos de Daniela», un inicio en mi vida… mi primera experiencia, la lesbica con tintes de incesto que generaria que desde ese instante me gustasen las mujeres, gracias a «dulce maria» siendo acosada por su cuñada en ese episodio mi cabeza cambiaria desde ese instante en adelante, dando pie a infinidad de deseos incontrolables que recien volverian a ser reales a la edad de 13 años, cuando mi propio padre marcó un antes y un despues en mi cuerpo […]