Cuidado con lo que deseas

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
No se muy bien como calificar esto que me pasó, todavía no puedo entenderlo y su recuerdo me persigue, pero mejor os lo cuento.

Mi nombre no importa mucho, soy una chica normal con un físico normal, y esto ocurrió en la fiesta de mi 18 cumpleaños, el fin de semana anterior ya lo había celebrado con mis amigos, y esta era la celebración más oficial, estabamos en un restaurante con mis padres, mi hermana con su marido y su hija, algunos tios y primos y uno de esos parientes que siempre ha sido viejo y que no terminas nunca de ubicar. Total para alguien de mi edad y que no tiene un gran sentimiento familiar era lo que se dice un autentico tostón, un compromiso, en el que se supone que era el centro de atención, y que iba cumpliendo ayudada del vino, cava y licores habituales en este tipo de cenas/celebraciones.

Y llegamos a la hora del pastel y las velitas, bueno, pensé, ya queda poco. Mi madre, como casi todas las madres, dijo eso tan típico de: "piensa un deseo" y yo que llevaba una buena temporada sin tener sexo pense "que se cumplan todas mis fantasias sexuales", soplé con todas mis fuerzas y las 18 velas se apagarón casi a la vez. Mientras todos aplaudian note a alguien detrás de mi, sobre mi hombro derecho, giré un poco mi cabeza y me encontré con un camarero de entre 30 y 40 años, con una barba corta y bien cuidada, mientras sonreia ligeramente me dijo con un acento indefinido: "ten cuidado con lo que deseas por que a veces se cumple", sin dejar de sonreir note un brillo en sus ojos, en ese momento uno de mis tios reclamo mi atención y cuando volví a girarme ya no lo volví a ver.

Ya en casa, le di las buenas noches a mis padres y me fui a mi habitación a dormir, estaba algo mareada por el alcohol, sensación que aumentó mientras me adormecia. No se cuanto tiempo pasó cuando note unos dedos acariciando la piel de mis brazos y piernas, era una sensación agradable, muy agradable, durante unos segundos me dejé llevar sientiendo las caricias hasta que empezé a tener consciencia de lo que estaba pasando y abrí los ojos. Estaba en una cama, pero no era la mia, ni tampoco era mi habitación, una luz bañaba la cama y sus alrededores pero daba la sensación de que la habitación era muy grande y parecía no tener fin, a mi alrededor había cuatro mujeres preciosas, que eran las que acariciaban mi piel con sus dedos, eran realmente espectaculares, largas y torneadas piernas, un vientre liso, pechos perfectos, y los rostros más bonitos que habia visto nunca, sus sensuales bocas sonreian y sus preciosos ojos me miraban, una era rubia, otra morena, la tercera castaña y la última pelirroja, todas con el pelo largo excepto la morena que lo llevaba muy corto, tambien me di cuenta que ninguna tenía vello en la entrepriena.

Me incorporé un poco y les dije: "¿que hago aquí? ¿quienes sois?, la rubia se acerco a mi casi rozando mi oreja con sus labios y dijo con una voz dulce, casi con un susurro: "no tengas miedo, somos tu deseo de cumpleaños".

Me quede con la boca abierta, la morena me cogio de la mano y me hizo levantarme: "ven" dijo con una voz tan dulce como la de su compañera, cuando estuve de pie me dió un suave beso en los labios. Entre las 4 me quitaron mi basto pijama de invierno, estando de pie entre ellas me di cuenta de lo altas que eran y cuando me quede en bragas senti una sensación de ridiculo rodeada de tanta belleza, con mi barriguita, mis muslos gorditos, mis pechos algo caidos hacia abajo, la pelirroja se agachó, cogió mis bragas, una bragas grandes de las de no pasar frio, y tiró para abajo dejando al descubierto la importante mata de vello de mi entrepierna, mientras le dejaba completamente desnuda las demás seguian acariciando mi cuerpo, mi cuello, mi espalda, mis nalgas, mi vientre.

Me volvieron a tumbar en la cama y me hicieron flexionar y abrir mis piernas, yo me dejaba hacer completamente excitada, la chica morena paso la mano con sus dedos bien abiertos por mi entrepierna rozando toda mi vagina, que yo ya notaba humeda, haciendome estremecer, despues con una maquinilla electrica empezó a rasurar el vello de mi pubis, mientras lo hacía dos de las chicas se pusieron a cada lado de la cama y posaron sus labios sobre mis pechos besándolos, la otra se dedico a besar mi boca, era increible un mar de sensaciones, con mis manos intente tocar aquellos cuerpos perfectos que me daban tanto placer, pero no me dejaban me las apartaban, las chicas empezaron a cambiar sus labios por sus lengas, en mis pechos, pezones y entrando en mi boca, mientras el sonido de la maquinilla se apagó y en su lugar note algo húmedo que llenaba todo mi pubis supuse que era crema de afeitar, tambien lo puso por los alrededores de mi ano, aunque no pude verlo. Suavemente agarraron mis muñecas las llevaron sobre mi cabeza y las atarón eso todavía me excito más, las lenguas aumentaron su intensidad, notaba mis pezones duros y sensibles. noté como las cuchillas se deslizaban sobre mi pubis y ano dejandolo libre de vello, y como una 4 lengua empezaba a trabajar mi vagina y clítoris, mi cuerpo se estremecia, la muchacha morena metio dos dedos en mi coñito mientras con su increible lengua lamia mi clitoris, no tarde mucho en llegar a un gran orgasmo que no pude gritar por la lengua que tenia metida en mi boca.

Las 4 se apartaron riendo, mientras yo seguia tumbada con los ojos cerrados y con el pecho desbocado debido a mi respiración agitada, volví a abrir los ojos al notar como levantaban mis piernas y me ponian en el borde de la cama, levantaron todavía mas mis piernas y las pusieron sobre uno de esos aparatos como los de los ginecólogos, pero este tenia unas correas con las que sujetarón mis tobillos piernas y muslos y me parecio que estaba más levantado de lo que debería ser "normal". Me asusté un poco "¿que haceis?" la pelirroja me contesto: "no te preocupes cielo, es tu deseo, tu solo disfruta". Me quede completamente inmovilizada y abierta, mi coño y culo estaban expuestos y las cuatro estaban frente a el sonriendo la morena se acercó y con la mano abierta me dio un azote en el coño que me hizo dar un pequeño grito, se giró a hacia las otras y les dijo en un tono autoritario "empezad" por primera vez pase miedo, pero no me atreví a decir nada, la rubia se acerco a mí y me pellizco un pezón con fuerza, haciendome gritar "ahhhhh que haceis, basta esto no me gusta". La morena me agarro del pelo con fuerza y me dijo "Este es tu deseo puta, no nos culpes a nosotras de ser tan zorra" a continuación abrio mi boca y escupió dentro, la rubia seguía pellizcando y retorciendo mis pezones ya con las dos manos, el dolor y la humillación del escupitajo hicieron que mis lagrimas brotaran de mis ojos entonces note como introducian algo en mi culo, me incorpore un poco y vi como estaban metiendo un tubo de goma que estaba conectado a un recipiente, casi inmediatamente note como un liquido tibio inundaba mis entrañas poco a poco, notando como se hinchaba mi barriga, la chica morena me dijo: "ahora cierra el culo y que no se te escape ni una gota", asi me dejaron durante unos eternos minutos en los que tuve que esforzarme por aguantar las ganas de evacuar que me invadian, la morena volvio a ordenarme "vaciate", a pesar de las ganas que tenia me resistia a hacerlo era algo humillante, la morena me dio un bofetón "que cages puta" entre lágrimas y sollozos empecé a soltar chorros de agua por mi culo y lo que no era agua, debajo de mi culo debía haber algún tipo de recipiente por que oia como chapoteaban el agua y mis heces, una de las chicas dijo en voz alta "cuanta mierda esta echando esta puta" yo me moría de verguenza y mas por los sonidos que salían con los esferzos que hacía por vaciarme, cuando hube terminado me limpiaron con una toalla y repitieron la operación, y hasta lo hicieron una tercera vez en la que me pusieron tanta agua que la barriga se me hincho hasta que parecía una embarazada y tarde una eternidad en sacar toda el agua de mi culo que parecía una fuente.

Todavía me sentia aturdida por la terrible humillación sufrida cuando note como algo frio entraba en mi coño, era como un gel y tambien en mi culo y vi por entre mis piernas abiertas como las otras dos llevaban un guante de latex puesto en la mano y estaban echandose una especie de gel, al instante note como unos dedos entraban en mi coño, no puedo saber cuantos y también lo hacian en mi culo, mi vagina los acepto bien, mientras que en el culo sentí una molestia que se podía aguantar, hasta ese momento en mi culo lo máximo que habia entrado eran un par de dedos, me atrevi a decir: "por el culito no por favor…" la morena no me dejo terminar una bofetada me hizo callar de golpe "cuando vas a aprender a callar puta, ya que te gusta mover la lengua te voy a dar trabajo" se puso a horcajadas sobre mi y separo las nalgas "comeme el culo puta" saque la lengua y empecé a lamer aquel rosado agujerito, mientras la rubia habia dejado por fin de pellizcarme los pezones, las otras dos en cambio parecían empeñadas en ensanchar mis agujeros y solo paraban para echar mas lubricante, ya notaba la entrada de la vagina llena aún así seguian apretando para forzar la resistencia, lo mismo notaba en mi culo sobre el que además de la presión notaba como los dedos se movían en círculos para ensanchar todavía mas el agujero, por momentos el dolor era muy fuerte aunque también el placer era muy fuerte. Oi a la morena decir "dale" y senti un gran dolor en mis pechos, como un latigazo, "mete la lengua dentro puta" sentí otro golpe igual en el otro pecho, y me esforcé por hundir mi lengua en el culo de la morena lo máximo que pude "mucho mejor zorra" dijo la morena, aún así otro golpe me dió de lleno en un pezón haciendo que mis ojos se inundarán de lágrimas, de golpe sentí como algo cedia en mi coño y un gruñido se escapó de mi garganta, una de las chicas grito "ya le he metido la mano en el coño" sentí un gran dolor y como la mano se movia en mi interior, la mano que intentaba meterse en mi culo hizo más presión, tenía la sensación de que me iba a desgarrar, me dolía muchísimo. La morena se bajo de mi cara y aproveche para suplicar "por favor me duele mucho" un latigazo cruzo mi vientre, entonces vi que era la rubia con una fusta la que me castigaba y parecía disfrutar mucho, volví a insistir "por favor…" esta vez el latigazo fue a mis muslos, pero no fue uno fuerón varios seguidos en muslos, vientre y pechos, sólo grité pero no volví a suplicar… la morena volvió y esta vez me puso su coño en la boca, no tuvo que decirme nada empece a lamerlo, la sensación de dolor en mi coño habia desaparecido bastante, ahora notaba como se cerraba el puño, era doloroso, pero soportable, lo que me dolía más era el culo, parecía apunto de romperse, note como hacían fuerza de manera constante, aguante la respiración y volví a sentir esa sensación de que algo cedía pero esta vez en mi culo y con un dolor insoportable y un grito ahogado por el coño que tenía en mi boca, "mano en el culo chicas" pero aquellas dos manos no parecían conformarse con haber entrado en mis agujeros, seguían empujando para entrar más a fondo, la rubia seguía azotandome de vez en cuando si previo aviso y mas o menos fuerte, solo dejo de hacerlo para entretenerse mordisqueando mis pezones y estirandolos con sus dientes.

"Ya toco la matriz" dijo una de las chicas, la que tenía la mano en mi coño y se quedo quieta con la mano dentro en esa posición, la que tenía la mano en mi culo seguía moviendola y empujando como disgustada por haber perdido una carrera, me estaba haciendo un daño atroz en el culo, la rubia pareció cansarse de jugar con mis pezones y les puso unas pinzas, con lo sensibles y doloridos que los tenia fue muy doloroso, aunque me fui acostumbrando.

Oi como la chica que estaba en mi culo decia "yo creo que ya está" y por fin dejo de empujar ahora tenia las dos manos profundamente metidas dentro de mi, o al menos esa era mi sensación) pero ya no empujaban más, sólo se movían de derecha a izquierda y viceversa, era un alivio, ahora el dolor remitia y el placer acupaba su lugar, la morena volvio a bajarse y desapareció con la rubia dejando a las otras dos con sus manos dentro de mi, no se cuanto rato estuvieron así, me quede medio desvanecida y perdí la noción del tiempo, notaba oleadas de placer y algo de dolor, pero creo haber tenido mas de un orgasmo.

Volvi a la realidad con una bofetada de la chica morena "espabila puta" se puso a horcajadas sobre mi una vez mas y abri la boca obediente para volver a lamer su coño, pero lo que hizo fue mearse en mi boca gire la cabeza para apartarme pero la rubia me sujetó con fuerza, la morena descargo entre risas su tibio líquido sobre mi boca y cara y cuando termino me hizo lamerle el coño. Depues se fueron con las otras dos y la morena les dijo "Ya está bien" empezaron a sacar sus manos, primero la del coño, note como salía y me sorprendio sentir hasta donde había llegado, fue otra sensación de placer doloroso, y me parecía que mi vagina había quedado monstruosamente abierta, despues salió la de mi culo, esta fue peor el lubricante parecía haberse secado y era mucho más doloroso, aunque la sensación de alivio fue mucho mayor, la morena hizo una revisión, abrió mi coño con sus manos y lo miró unos instantes despues sin ningún esfuerzo metión una de sus manos hasta el fondo, cerro el puño dio una vuelta y salio, las chicas separaron mis nalgas, la morena metió algunos dedos (no se cuantos) y los movio sin esfuerzo, después me pareció que metía todos los dedos de las dos manos y separaba mi culo para abrirlo, estuvo unos segundos y dijo "perfecto", me quedé asombrada y asustada de la capacidad de mis agujeros.

Por fin me desataron, me hicieron poner de pie, me dolia todo el cuerpo, vi mis pezones estirados y pellizcados y las tremendas marcas que me habían dejado en los pechos, muslos y vientre con la fusta, eso hizo que me cayeran lágrimas, la morena se dio cuenta, cogio la fusta y me azotó las nalgas varias veces mientras me mordía los labios "¿algo que decir puta?", solo baje la cabeza.

La morena y la rubia me llevaron a otra habitación o a otra parte de la habitación no lo tengo claro, yo pensaba que ya habíamos terminado, pero tenia miedo de preguntar, nos acercamos a una nueva cama donde había varias personas, al estar allí lo vi claro eran dos hombres, enormes, casi gigantes, además eran muy parecidos y no sabría decir de que raza eran, eso si altos, fuertes, sin un solo pelo en la cabeza y unos miembros increibles, tenian unas pollas como brazos de largas y gordas, y estaban tremendamente duras y levantadas, y los testiculos eran igualmente enormes, era casi grotesco, la chica castaña y la pelirroja estaban lubricando con gel aquellas monstrusosas pollas y utilizaban las dos manos para hacerlo, me gire hacía la morena le suplique "no por favor, me van a reventar" sonrió "te hemos preparado para esto, ademas este es tu deseo, puta".

Uno de los hombre se tumbo sobre la cama, la morena y la rubia me levantaron sin esfuerzo, apoye mis brazo en sus hombros y me sujetaban por los muslos abriendo mis piernas, mis lagrimas me cegaban, me levantaron todavía mas hasta que note la enorme cabeza de aquella monstruosidad en la entrada de mi coño, "por favor" suplique una vez mas, empezaron a bajarme, el capullo se quedo encajado en mi coño estaba como sujeta por aquella mole, casi ni respiraba, las chicas hicieron fuerza y me empujaron para abajo y con un grito aquella enorme polla empezo a abrirse camino, poco a poco iba bajando más notaba como cada cm de aquella polla entraba en mi, notaba como mi cuerpo temblaba y sudaba, aquello duro una eternidad hasta que note los tremendos huevos tocar mis nalgas, me parecía que aquella polla había llegado hasta mi estomago, las chicas me hicieron recliname sobre el pecho del hombre al que no me atrevía a mirar, noté que algo entraba en mi culo, era pequeño y de gope senti como un liquido frio que me llenaba por dentro, me estaban inundando el culo de lubricante, empecé a llorar y temblar por lo que me esperaba, una polla de ese calibre en mi culo no podría aguantarla, note como una mano entraba en mi culo con bastante facilidad y removia el gel y ensanchaba mi agujero a la vez.

senti que unas manos separaban mis nalgas y note como la cabeza de la segunda polla se ponía sobre mi agujero trasero, estuvo unos segundos así, de golpe un tremendo empujon hizo que la cabeza traspasará la entrada de mi culo, casi me devanecí del dolor y quizas fue mejor así ya que muy lentamente pero sin parar aquella tremenda polla ocupo todos los rincones de mi culo, el dolor y la sensación de que iba a reventar eran terribles, sentia los dos miembros tocandose entre la delgada pared que separa mi culo de mi coño y temiendo que esa separación se rompiese.

Los dos hombres se quedaron inmobiles dentro de mi, una de las chicas (no recuerdo quien) me agarro del pelo y levanto mi cabeza, abrí los ojos asustada y vi ante mi una polla normal, "chupa" me dijo, abri la boca mecánicamente y empecé a chupar, al cabo de poco rato descargo su semen en mi boca, intente apartarme pero las chicas me sujetaron la cabeza "traga puta" y así lo hice, de inmediato apareción otra polla, distinta, que se metio directamente en mi boca, y como la anterior se corrio al poco rato en mi boca, y apareció una tercera… solo puedo suponer que había una cola de hombres con la polla dura y apunto de correrse, pollas distintas de tamaño, grosor, color, olor y sabor, que apenas tardaban unos segundos o un minuto en descargar en mi boca.

Mientras satisfacia con mi boca a aquella multitud de desconocidos, los dos hombres que ocupaban mi coño y culo empezaron a moverse primero lentamente, aumentando el ritmo, pero sin prisas, coordinando sus movimientos a la perfección, aquello era increible, pasado aquel terrible dolor inicial el placer que me proporcionaban aquellas dos monstruosidades era indescriptible, mi cuerpo era una mar de sensaciones sintiendo aquellas pollas entrar y salir de mis agujeros, con un recorrido infinito, rozando mis zonas mas sensibles, hasta mi clítoris era rozado por aquellas enormidades cuando entraban y salian de mi cuerpo, no se las veces que me corrí o si fue un orgasmo continuo, no se cuanto tiempo estuve consciente, ni cuanto duro aquella follada perfecta, supongo que a veces perdía la consciencia porque mi cara estaba pegajosa de semen y en los momento en que volvia en mi las chicas me tenían la cabeza sujeta y con la boca abierta para que siguieran echando su semen en mi boca, cuando volvia a estar en mi, seguía chupando pollas con avidez, completamente invadida por la lujuria, hasta agradecí los azotes que de vez en cuando recibía en mi espalda, estaba completamente fuera de mi. Solo deje de chupar pollas cuando aquellos gigantes empezarón a follarme con toda su fuerza buscando su orgasmo, me levantaban como una muñeca y sus pollas, sus enormes pollas, entraban y salían de mi cuerpo con una velocidad y violencia increible, apenas duraron un minuto de esta manera, pero soy incapaz de describir las sensaciones que senti en ese minuto irrepetible, finalmente sus miembros se encajaron hasta el fondo de mis agujeros y note como se hinchaban y empezaban a descargar su semen dentro de mi, se quedaron inmoviles mientras un autentico torrente se desbordaba en mi coño y en mi culo, aquella corrida hacia justicia a aquellos impresionantes testiculos, aquellas pollas al menos estuvieron un minuto palpitando e inundando mi interior, haciendome gritar de placer.

Me quede casi desmayada, las chicas volvieron a sujetar mi cabeza y a abrirme la boca, abrí los ojos, y esta vez eran varios los hombres que se masturbaban ante mi apuntando con sus pollas a mi boca, descargaban y dejaban su lugar a otros, que intentaban acertar en mi boca con desigual fortuna, esto duro unos minutos que se hicieron interminables, ya que tenía la boca dolorida de tanto abrirla y mi estomago estaba saturado de tanto semen. A todo esto seguia empalada por aquellas pollas que poco a poco iban perdiendo su dureza, una de las chicas vino con un gran vaso lleno de lo que supuse que era semen, no se si era de lo que había caido o de los que no habían podido descargar sobre mi, me lo dio y ni siquiera proteste, me lo lleve a los labios y me bebí aquella mezcla de leches a grandes tragos.

El hombre que estaba a mi espalda, salio de mi culo con un sonido enorme como un tapon, dos de las chicas me ayudaron a descabalgar de la segunda polla que habia ocupado mi coño, no me tenía en pie, me sujetaban para que no me cayese, me notaba la cara pegajosa, restos de semen me resbalaban por la barbilla, la chica morena se acercó a mi, me quito, por fin, las pinzas de los pezones de las que ya ni me acordaba y me dijo "Deseo cumplido" abrio mi boca y escupio dentro.

Me desperté sobresaltada, me incorporé de golpe quedandome sentada, que sueño, que locura, todavía estaba mareada, supuse que por el alcohol de la noche anterior, y con el estomago un poco revuelto, pense que no debía haber mezclado bebidas, siempre me pasa lo mismo, noté que me venia una arcada, me levante del todo y fui corriendo al baño, cerre la puerta y llegue justo para arrodillarme ante la taza y empezar a vomitar, vomité varias veces hasta que desaparecieron las arcadas, lo curioso era que todo era líquido un liquido viscoso y blancuzco que colgaba de mis labios y ese regusto dulzón… mi cabeza estaba confusa y mientras intentaba centrarme me di cuenta por primera vez de mi desnudez, estaba desnuda cuando yo siempre duermo con pijama, quizas el sueño… no puede ser, escupi un par de veces lo que parecía… semen, no puede ser, me levante y me vi ante el espejo… increible, fui corriendo a la puerta del baño y cerre el pestillo, volvi frente al espejo despacio temiendo ver mi reflejo, me acerque, mi cara, mi pelo, estaba sucia parecia manchada de semen, mis pezones estaban hinchados, enormes, roce uno con la yema de mis dedos, me dolía.. o me gustaba, mis pechos estaban marcados como por látigazos, y no solo mis pechos, mi vientre, mis muslos, mi… mi pubis estaba rasurado sin un solo pelo, me estaba volviendo loca, todavía estaba soñando, me gire y vi como mis nalgas y espalda también estaban marcadas, me quedé de pie sin saber que hacer estaba completamente confundida, volvi a la realidad, si es que se le podía llamar realidad, cuando noté como por mis muslos empezaba a resbalar el semen que salía de mi coño, me metí en la bañera observando como bajaba por mis piernas llegando hasta los tobillos, y no solo salia por mi coño, también de mi culo manaba un torrente de esperma, estaba perpleja, abrí mis piernas y puse mi mano sobre mi ahora decubierto coño, sin esfuerzo y completamente asombrada metí toda mi mano dentro de mi coño y con la mano hueca saque una gran cantidad de semen, casi de manera mecánica metí cuatro dedos en mi culo que los acepto con facilidad, lo notaba tremendamente sensible, me ardia, lo retire también lleno de una mezcla de semen y lubricante con un tono rosado que supuse sería de sangre, todavía estaba mirando aquella mezcla que había salido de mi dilatado culo cuando llamaron a la puerta, era mi madre, que quería saber que me pasaba, le dije que algo me había sentado mal en la cena, que ya estaba bien que me iba a duchar. Y asi lo hice me duche por fuera y por dentro apunte el telefono a mi coño para limpiarlo de aquella increible cantidad de semen que habia dentro, al acercarlo vi con sorpresa como desaparecia dentro de lo que se había convertido en un coño monstruoso, con el telefono de la ducha dentro del coño me limpie bien, y lo mismo hice con mi culo, sin mucho espuerzo también lo introduje y me llene las tripas de agua, que vacie acuclillada en la bañera. Al salir de la ducha me puse de espaldas al espejo, me incorpore hacia adelante abriendo bien las piernas y girando la cabeza para poder ver mi reflejo, con mis dedos abri mi vagina estaba muy abierta, hice fuerza con mi culo como si fuera a cagar y mi ojete se abrió como una boca, estaba muy asustada, me puse crema hidratante por todo mi castigado cuerpo incluyendo mis partes más intimas y me volvi a la cama.

Me desperté, por unos segundos creí que todo había sido un gran sueño, pero no, seguia desnuda, y acariciar con mi mano mi pubis rasurado me confirmo que no había sido un sueño. Me vestí de manera que mis marcas quedaran ocultas y volví al restaurante de la noche anterior, tarde unos minutos en entrar, hasta que al final me atreví a cruzar la puerta y preguntar por el camarero que me había advertido, pero resultó que en ese restaurante no trabaja ningún camarero con barba.

Ha pasado casi un año de eso, y mis agujeros han vuelto a tener su tamaño normal, aunque se dilatan con una facilidad pasmosa, las relaciones que he tenido desde entonces me han dejado insatisfecha cuando no indiferente, y cada noche me voy a dormir con la esperanza de que la chica morena aparezca de nuevo para preparame otra sesión de sexo, pero no ha vuelto a pasar, pero dentro de dos semanas vuelve a ser mi cumpleaños y ya le he pedido a mis padres que repitamos la cena en el mismo restaurante, yo ya tengo mi deseo preparado.

Sonia

sonienkayy@hotmail.com