De profesora a puta de mi alumnito
Angelito es mi pequeño alumno que hará que termine siendo su puta..
De profesora a puta de mi alumnito.
Angelito es mi pequeño alumno que hará que termine siendo su puta.
Yo soy una profesora que enseña el nivel primario. Tengo un cuerpo muy bien formado, con un trasero muy redondo y blando, un par de tetas ni tan grandes pero tampoco tan pequeñas.
En esta ocasión les contaré sobre una relación que tuve con un alumnito de mi clase, él se llama Ángel, pero yo, de cariño le decía Angelito. Cuando nos conocimos fue como cualquier otra relación entre alumno y maestra, pero conforme pasaba el tiempo, él me fue mostrando un gran cariño por mi, como escribiéndome cartitas, dándome flores y hasta me compartía du comida. Y bueno siguieron pasando los días y ahora era yo la que le daba algún regalo, éramos inseparables, nos quedábamos todo el recreo hablando del colegio y sus tareas.
Un día, todo iba como siempre yo dando mis clases y mis alumnos trabajando en sus tareas, hasta que llegó el recreo y Angelito se me acerca y me pregunta directamente:
_ Profesora, usted sabe como hacer el amor?
Yo me quedé en chock, y lo único que hice fue decirle que tenía que ir al baño. No recibí su respuesta y sali con dirección al baño, mis piernas temblaban de la exitación que me había provocado ese niñito, con su voz tan dulce y tierna. Tuve que salir a confirmar si solo habia sido una imaginación mia y que Angelito me quizo decir otra cosa.
Pues no fue así. Angelito estaba ahí sentado en mi escritorio con su vergita afuera, toda gruesa y muy larguita para su edad. Se estaba masturbando y cuando me vió s entrar se puso a llorar. Lo intente consolar pero su vergita aún estaba afuera y seguía erecta, así que le dije:
_Angelito, quieres saber si sé hacer el amor?
_Si profesora- me respondió.
Así me lo llevé al baño de mujeres, cerré la puerta y le tomé su vergita con mi mano izquierda y la comenzé a mover lentamente, de arriba hacia abajo. Él jadeaba de placer mientras yo me comenzaba a mojar.
_Profesora se siente muy ricooo.
_Verdad que si?
_Si profesora, usted es maravillosaaa.
En eso sonó el timbre que indicaba que el recreo había terminado, pero yo no le hice caso, simplemente seguí masturbandolo hasta que se vino en mi blusa.
_Ahhhhh profesora me corro, me corrooooo.
_Vente mi amor, correte para tu profesora, sí? Vente rico y mucho quiero sentir tu lechita.
_Me corroooooo.
Se corrio y me manchó mi blusa, así que recogí su leche con mis dedos y me los chupé, le dije que se fuera al salón no sin antes darle un besito en su boquita y le dije:
_Si te sigues portando bien todos los días, te seguiré dando mucho pero mucho amor.
_Esta bien profesora la amo es la mejor.
_Gracias mi vida, pero ya ve al salón, esto será nuestro secreto vale?
_Si, está bien profesora.
Cuando salio, me tuve que limpiar aún mas mi blusa y luego me alisté para salir.
A la salida le dije a Angelito que me esperara un momento que le iba a dar un regalito. Él me espero y cuando solo estabamos nosotros dos, me saqué mi pantalón y luego mis bragas, todas mojaditas por mi lechita, y se las entregué para que cuando se masturbase, pensara siempre en mi.
Esta es una de mis aventuras con Angelito, si quieren saber que pasa los siguientes días, esperen que los subire en otro relato. Byes
Buen relato, hazlo un poco más amplio, por cierto me gustaría decirte algo con sinceridad.
Wooooooooooooooooooowwwwwww! ya quisiera unas bragas de alguien jejejejejejeje!
¿Dónde estaban esas profesoras cuándo yo era niño? Me hubiera encantado haber estado con cualquiera