EL COMIENZO DE UNA RUTINA, Y SORPRESAS INESPERADAS, PERO MUY BUENAS
Me encantaba someter y dominar a otros con un buen lavado de cerebro, sin embargo pronto seria yo la dominada .
Hola a todos min nombre es Emma, soy natural de Republica Dominicana, en esta ocasión vengo a contarles una de mis mejores experiencias desde que llegue a Sudamérica y estoy aprovechando este blog para contarles mi cambio de rutina, pero antes les contare algo de mí, soy de tez blanca un tanto bronceada, mido alrededor de 185cm, lo cual es mayor al promedio y algo que me hizo destacar mucho, respecto a mis medidas afirmo que tengo muy buena genética, una cintura bien formada, unos pechos regulares, pero lo que resalta son mis anchas caderas y mi enorme y seductor culo, lo cual atrajo miradas desde que era muy niña
Yo vivía en Dominicana junto a mis abuelos, por exigencia de ellos termine la secundaria y de inmediato pase a ser universitaria, ya para mis 20 años termine la carrera de psicología y para cuando tuve 22 tenía un título y demás colegiaturas, mis abuelos eran expertos en masajes quiroprácticos, por lo que yo también aprendería mucho del negocio, cuando cumplí los 23 me conocí con un colega con el cual forme una familia, él era Santiago, y vivía entre 6 hermanos varones, con el cual tuve 2 hijas, Elizabeth y Carolina de un año de diferencia
Su familia pensó que me metí con él por mero interés, lo cual era falso, debido a mi carrera y negocio familiar tenia un muy buen sustento, pero aun así ninguno de ellos se fiaba de mí, cuando mi hijas tenían entre 4 y 5 años cuando mi esposo murió, quizá debido por mi culpa, ya que era muy fogosa, y mi deseo sexual era enorme, cuando mi esposo falleció sus bienes pasaron a mi nombre valorizadas en casi $3000000, debido a la molestia de su familia me fui a Colombia, pero debido a que algunos de sus hermanos también estaban ahí, me fui a Perú, a la parte norte donde estaba más tranquila, compre una propiedad de 4 pisos y lo equipe con un negocio quiropráctico, que a su vez funcionaria como consultorio psicológico
Al llegar nada más comenzaría la cuarentena por lo que permaneceríamos encerradas, debido a mi deseo sexual, y no tener a nadie al lado mío para satisfacerme utilice a mis propias hijas que con menos de 6 años me eran sencillas de manipular ya que era psicóloga, las persuadí y lave el cerebro de tal forma que debían de adorarme, les enseñe que debían de besarme los pies, debido a que sus cursos eran virtuales me era muy sencillo enseñarles antes de que se rodeen de personas
- Buenos días mami
- Hola hijas, como están
- Bien mami
Y de inmediato se arrodillaban para chuparme los pies usaría algunas fuentes como el anime o hentai, debido a que sus escenas me parecían más excitantes, las sesiones con mi hija solo eran cuando no tenia trabajo, debido a mi centro de masajes y terapia, tenia algunos clientes, pero para evitarme problemas solo atendía bajo cita, no hace falta decir que algunos hombres aparecían y buscaban algo mas que simples masajes, al principio no sabia que decidir, ya que me quería evitar problemas, sin embargo, debido a mi profesión me era sencillo manipular la mente de esos hombres que para mi eran patéticos, pero, que ofrecían un muy buen pago, solían pagarme $120 por sesión y mis sesiones no duraban mas de 1 hora y ni que decir del “extra del masaje” no duraban mas de 2 minutos
Esa era mi rutina, me la pasaba mejor con la adoración de mis hijas, las cuales poco a poco aprenderían a adorarme mejor, las veces que no tenía pacientes, me relajaba en mi sala, daba un chasquido y mis vendrían casi de inmediato, se postraban en el suelo y decían
- Mama aquí están tus mascotas
Y actos seguido me chupaban los pies yo me sentía en la gloria, debido a mi altura mis pies también eran grandes y veía como se esforzaban para chuparme con sus pequeñas boquitas, pasaban la mitad de su tiempo libre en ser mis mascotas y la otra mitad en lo que ellas quisieran, no podía tenerlas todo el tiempo y quitarles su infancia, sin embargo, que me chuparan los pies no era suficiente, por lo que opte por nuevas medidas total ya estaban en mi control.
Durante algunos fines de semana, fingía que tenía muchos pacientes, por lo que comería después de ellas, cocinaría sin problemas y todo lo demás, pero a la hora del almuerzo esperaría a que ellas estuvieran por terminar y ahí entraría a la cocina, me serviría y sentaría a la mesa justo el momento en que ellas terminarían
- No tienen labores que hacer
Solo bastaba esa pregunta para que ellas actuaran de inmediato, yo estaba feliz sentada comiendo mientras que mi hijas me adoraban y no se moverían hasta que yo me levantara de la mesa, sea o no que haya terminado de comer, esta rutina aumentaría de a pocos, hasta el punto de que durante ciertos horarios en los fines de semana ellas comerían a mis pies o mejor dicho de mis pies, dependiendo usaría mis pies para alimentarlas o solo pondría mi pies en sus platos y así me adoraban al mismo tiempo que comían, durante un inicio, pero después deje de reprimirme y lo hacía muy seguido.
Sin embargo, esa rutina por muy excitante que era, ya me resultaba monótona, por lo que empleé nuevos métodos, hasta que un día cuando me senté en el sofá a ver TV y ser complacida, le di una orden a mi hija menor Carolina
- Carolina levántate y acércate
- Si mama
- Apoya tus manos a mis muslos y acerca tu rostro
Al ver su pequeña cabeza estar cerca de mis enormes muslos, un impulso se apodero de mi e hizo que la tomara a la fuerza y incrustara su lindo rostro en mi coño el cual lo depilaba regularmente, al principio ella no sabía que hacer exactamente pero luego entendió que debía de usar su lengua y labios al igual que con mis pies, cuando junte mis muslo para presionar mas su cabeza vi que su cabeza no era ni la mitad de ancho que mis muslos, por lo que me estremecí y debido a mi excitación tuve un orgasmo en toda su boca, ella tomó algo del orgasmo en su boca y me lanzo una mirada inocente, yo por otro lado la miraba exhausta pero mi mirada cambio a espera, por lo que mi hija en su inocencia, trago mi corrida aun sin que yo se lo ordenara
De ahí que cambiamos la rutina de a pocos, me demoré un par de semanas para adiestrarlas en lamerme y chuparme el coño, pero poco después el cunnilingus ya no era suficiente para mí, si bien es cierto que llevaría el juego a otros niveles, me chupaban el coño mientras comía o me relajaba, hasta incluso me metía caramelos al coño y cuanto más lamian saldría el caramelo, pero aun así quería más, por lo que un día domingo les puse un desafío
Me eche en el sofá boca abajo mientras estaba con el celular por lo que llame a mis hijas
- Les toca chúpenme el coño las 2
- Si mamá
Ellas se acomodaron, pero, notaron que por mi posición era difícil que las 2 pudieran chuparme el coño, por lo que en su desesperación de no defraudarme Elizabeth se apresuró, pero carolina ya no tenía espacio, notaba su preocupación, por lo que le dije
- Carolina bésame las nalgas por todas partes
- Si mamá
Y acto seguido me empezó a besar las nalgas asegurándose de no dejar partes sin besar, tras algunos segundos pararía
- Dije por todas partes
- Pero mamá
- Ejem…
Abrí una de mis nalgas y entendió, ella misma abriría mis nalgas para besarme y de pronto cuando le tocaba mi roseta anal, sin preguntar planto su pequeña lengua ahí dentro, aunque me lamia toscamente y sin ritmo no era problema, aun así, me deleitaba sentir esa lengua en mi ano, pude ver por el reflejo de la TV que la cabeza de mi hija era pequeña en comparación a mis nalgas, por lo que ordene a Elizabeth que se detuviera de lamerme el coño
- Elizabeth ya deja de lamerme
- Si mamá
- ahora, te daré la orden para que presiones la cabeza de tu hermana aun más contra mi culo hasta que te diga basta
- si mamá
acto seguido, Elizabeth presionaba a su hermana de la nuca contra mi culo, a tal punto de que apenas si vi la parte posterior de su cabeza sobresalir de mi culo, por lo que le dije que pare, para después implementar un nuevo juego, tome un caramelo y se lo di a una de ellas
- chúpenlo un poco y después métanlo en mi hoyo
- si mami
Las 2 chuparían el caramelo para después insertarlo en mi culo
- si quieren el caramelo tendrán que aflojar mi culo con sus lamidas
- si mami
A lo que las 2 empezarían a trabajar lamiendo mi culo, yo por otro lado solo jugaría con ellas, aflojaba mi culo dejando a la vista parte del caramelo o lo chupaba para adentro para de esa forma me sigan chupando, estuvimos así casi 30 minutos hasta que le di el caramelo a Carolina, cabe aclarar que mantenía una muy buena higiene en ese lugar, pasado ese evento invente mas formas para complacerme como que me chuparan mientras hacia algunas cosas de pie, debido a mi altura no era problema, y al parecer ellas habían heredado la genética de su padre, algo que me disgustaba un poco pero me resultaba conveniente para este tipo de cosas, me lamian coño y culo mientras cocinaba o lavaba, admito que intente sentarme en una de sus caritas mientras comía, pero temía con asfixiarla o hacerle daño, quiera placer pero no acosta de lastimarlas
Esa era mi rutina hasta que cumplieron 6 y 7 años, incluso usaba los pasteles a mi antojo, me hacia untar las cremas y decorados en toda mis nalgas, pies y coño mientras las ordenaba que me lamieran, tomaba algún postre, cereza o chocolate, siendo este ultimo su favorito y me lo metía al culo y pues ya saben que seguía, mis hijas afanadas y preocupadas por no defraudarme me lamian de forma intensa, de esa forma seguía con mis ideas, las hacia comer a mis pies, les daba de comer directamente de mi culo, usaba sus cabezas como reposapiés, incluso a la hora de dormir las usaba para darme placer, ya sea me chupaban los pies o me lamian el culo o coño, pero algunos días las veía muy cerca de mi zona inferior, todos los días eran un gozo completo, pero cuando la pandemia se vio un poco controlada sucedería algo que ni yo me esperaba, pero eso ya será para otro relato
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