Hondureñas Hermosas II
Continuación de mi aventura por Honduras.
Según comentaba en el primer capítulo como Damaris fue mía en nuestro primer encuentro y como con el tiempo a nuestro favor pudimos darnos el tiempo para coger de la mejor manera.
Como dije en ese mismo capítulo nuestra comida había sido interrumpida (por así decirlo), por una amiga de ella, ya que yo la invite a comer con nosotros, no está demás mencionar que en esa época la distinción de clases sociales era evidente en esa parte de Honduras, pues los restaurantes, según muchas personas, por lo que fue de mucho incómodo para los gerentes del lugar el que yo hubiera invitado a las niñas a comer y no porque pensaran en que si las cogería o les haría algo, era el simple hecho de que ambas lucían pobre y sucias y Karen (el nombre de quien recién había llegado) iba descalza. Yo vi de re ojo la reacción de molestia, así que me paré y fui a hablar con el gerente sobre su molestia, ya que yo regularmente llevaba clientes al restaurante a comer y yo también comía siempre ahí. Desde luego que él vio mi molestia ante esta situación y trato de excusarse por dicho comportamiento y me explico que la molestia era más por lo comensales que pudieran llegar, por lo que me pidió disculpas y que para evitar molestias para mí, para las niñas y para el restaurante que si no me molestaba moverme a un área en un segundo nivel, pues ahí no lo ocupaban a menos de que fuera extremadamente necesario, yo en el momento se me subió la sangre a la cabeza y le iba a discutir, pero me vino una luz a la cabeza junto a una voz que me decía: ESTARAN ALEJADOS DE LAS MIRADAS DE TODO MUNDO. Por lo que me calme y acepte las disculpas del gerente, al final me estaba sirviendo lo que yo quería, sin pedirlo. Por lo cual me dirigí a mi mesa le informé a las niñas que nos cambiaríamos de área, cabe mencionar que ellas ni siquiera supieron de dicha discusión entre el gerente y yo, por lo cual nos movimos a un área donde quedamos lejos de las miradas, pero yo incluso podía controlar bien si alguien subía las escaleras a donde nos encontrábamos en ese momento.
Este tipo de área es donde tienen un tipo de bancas en media luna con una mesa larga y redonda al centro, por lo que me daba chance a poder tener a cualquiera de las dos cerca de mí y poder tocarla sin problema alguno ya que incluso podían moverse antes de que alguien llegara al segundo nivel.
Uno de los meseros tomó lo que ya está servido y termino de servirle a la recién llegada, cuando habíamos pasado todo él muy amable trato de disculparse, pues al fin y al cabo era su misma gente la que estaba siendo marginada; yo por supuesto le dije que no había nada porque disculparse y le dí una propina anticipada, cuando ya se retiraba me dijo: “Voy a ponerle la cinta abajo para que nadie los moleste” (pensé a mis adentros si conocía mis intenciones).
Cuando nos habíamos quedado solos Damaris me dijo: “Le conté a Karen, de donde veníamos y todo lo que hicimos de rico”, me quede un poco perplejo y nervioso, pues me puse a pensar que Karen podría ir a comentar algo; sin duda que vieron mi cara de asombro, pues Damaris continuo diciendo: “No te preocupes, ella es mi mejor amiga y ella también quiere estar contigo”, así que Karen se acercó a mi lado y me dijo: “Es cierto”, sonreí nada más, poniéndome algo nervioso o excitado, busque mis cigarros y vi que se había acabado, a lo que Damaris se ofreció en ir a comprarme unos a la tienda, recuérdense que nuestros países los niños pueden ir a comprar cigarrillos o alcohol que nadie les pregunta nada.
Le di unos billetes y bajo corriendo y yo me quede en el segundo nivel con Karen, cuando Damaris no había empezado a bajar las gradas, me dijo: “Quiero verte tu verga, dice Damaris que la tienes grande y gorda”, por lo que por un lado me la saque y ella la tomo con su manita y la jugaba de arriba hacia abajo y la apretaba, pude sentir como su respiración se aceleraba y empezaba su excitación.
Yo por mi parte puse mi mano de manera de poder tocarla y sentí su conchita bien mojada, casi como que estuviera orinándose. En eso estábamos cuando vi a Damaris entrar por la puerta del restaurante y empezar a subir las gradas, por lo que le dije que se moviera para un ladito pues vi que el mesero venia unos pasos atrás, guarde mi miembro y ella cerro sus piernas y se movió a un lado. Llego el mesero a recoger nuestras cosas y a preguntar si queríamos postre (no sabía que yo ya había empezado a comérmelo). Pedimos cualquier chuchada para ellas y un café para mí, al rato regreso el mesero con todo y un cenicero. Al haberse retirado ella comenzaron a comentar qué onda, Karen le dijo a Damaris: “Tenias razón, la tiene bien grande y gruesa” y agrego en forma de pregunta: “Te entro toda?” y Damaris con cara de valiente y picarona dijo: “Si y hasta por el culo me la metió” y sin dar tiempo a más preguntas agrego: “Y se siente bien rico y caliente cuando echa su leche adentro”. Entonces Karen me dice: “Yo también la quiero adentro” para todo esto yo quería metérsela, pues seguía bien caliente al igual que ella. Antes de iniciar a comer el postre las niñas se dirigieron al baño y yo procedí a encender mi cigarro y a beber mi café.
Al rato venían las dos subiendo las gradas, con las carcajadas que caracterizan a los niños de esa edad, lo que yo no sabía era que la risa que traían era porque Karen venia sin calzón, pues en el baño decidieron que así fuera. Cabe mencionar que Karen era una nena de piel blanca (muy característica del área poniente de Honduras), ojos cafés avellanados, pelo entre rubio y obscuro y con pecas, con unas piernas bien torneadas y un par de hoyuelos en las nalgas (no se las conocía aun).
Cuando ellas llegaron a la mesa Damaris se sentó en su lado y Karen me dice que ella quería sentarse en mis piernas y jalado inmediato su pieza de pastel yo casi que me quede inmóvil hasta sentir que ella se sentó sobre mi verga. Mi primera reacción fue meter mi mano por la mini falda y sentir su conchita desnuda y me quede viendo y ella se río en confabulación con Damaris y me dijo: “Me lo quite para ti”, entonces sentí de nuevo los jugos de su hermosa vagina lampiña y sin mentirles, mis shorts estaban mojados, hice a un lado la maga de mi short y puse mi verga en manera vertical en dirección a su entrada vaginal, ella al sentirla se acomodó para que fuera fácil el ingreso de mi miembro grueso, y sin duda aún más en ese momento que estaba super excitado pues era más sangre la que circulaba en toda mi verga. La tome por la cintura y la penetre, por su propia lubricación no fue difícil y en esa posición en que estaba le metí hasta topar mis huevos en sus nalgas, solo sentí que ella puso sus dos manos en la mesa y sentí por dentro como apretaba mi miembro por dentro y comprendí que había llegado a un orgasmo en pleno restaurante. En ese momento me dio un poco de miedo que se hubiera escuchado algo en el primer nivel, por lo que disimuladamente hacia abajo y todo mundo se movía ignorante que frente a sus narices una niña de 10 años había sido penetrada y acababa de tener un hermoso orgasmo. Yo al ver que nadie estaba poniendo atención hacia arriba me dedique a meter y sacar mi miembro carnoso dentro de ella, devolviéndole a la vida y a esa excitación, llegando ambos a nuestro orgasmo y derramando dentro de ella toda mi leche, sentía que mi verga bombeaba y bombeaba sin terminar. Cuando todo había pasado, como perro que su nudo se ha deshecho la verga empezó a salir sola, mientras volvíamos a la realidad, vi la carita de Damaris que seguía poniendo atención a cada detalle de nuestra recién cogida, era una mezcla entre expresión de asombro y excitación. Metí mi verga en mi short y vi como ella bajaba su mini falda para sentarse sobre ella y sin duda que ahí se derramaría todo el semen que yo había vertido dentro de ella. Jalo su postre y aun sisando se lo empezó a comer, yo le pase la mano por la carita moviendo su pelo y preguntándole: “Estas bien?” a lo cual ella solo alcanzo a afirmando con la cabeza. Damaris le dijo en ese momento que se corriera para la orilla a donde estaba ella y ella se movió a la par mía. Viéndola a los ojos y preguntando y yo sin decir nada, ella me contesta: “Mira como estoy” jalando mi mano al medio de sus piernas para que yo disfrutara de su vagina y los jugos que emanaban de ella; algo que me encanta hacer (no se si es fetiche) es tocar su vagina y luego llevarme la mano a la nariz, me encanta el olor que emana de las vaginas de niñas, no importa que la niña tenga días sin bañarse, nunca deja de enloquecerme ese olor, mezcla de niña-mujer para las que ya tienen relaciones sexuales y olor a niña virgen para las que no han probado a tener una verga dentro de ellas (aunque no soy fanático de desvirgar, ni niñas, ni mayores). Después metí dos dedos dentro de ella y vi cómo me acomodaba sus piernas, dejando abierta la posibilidad de meterlos mejor, sin mayor reparo le baje su calzoncito y deje su vagina pelada viéndome, inmediatamente volvió a pararse mi miembro, pero yo sabía que no era el lugar ni el momento, por lo que le dije que mejor nos aguantáramos para después, pues yo estaría varios días en el lugar y podíamos tener tiempo.
Como por instinto vi cuando el mesero venia hacia arriba, las niñas se acomodaron bien y vi la cara del mesero como que hubiera olfateado el olor a coño de niñas que corría en el ambiente, sentí como se sonrió viéndolas a ellas y tuve la idea que a lo mejor era otro child lover; él pregunto si todo estaba bien a lo cual procedí a pedir la cuenta y ella bajaron al baño sin duda a ponerse agua en la cara.
Al salir fuimos a la plaza central la cual como indique estaba a unos pasos del restaurante. Nos sentamos a disfrutar de la tarde, y del pasar de un sinfín de niñas que transitaban, unas en mini faldas, otros en shorts super pequeños y otras muy recatadas en su vestir, les puedo jurar que parecía un niño suelto en una dulcería o una juguetería, aquello era un mundo de fantasía pues, puedo decir que en Honduras no hay niñas feas (y cuando digo feas es que todas están muy ricas).
Estando sentados en la plaza, pasaron varias amigas de ambas que las saludaba e incluso en algún momento se pusieron a jugar con otras niñas, como sabiendo que el que más disfrutaba de esos juegos era yo.
Al cabo de más o menos 20 minutos de estar por ahí, Damaris vino hacia mi corriendo y me dijo, espérame acá, allá vienen mis papás, sentí un frio correr por mi cuerpo (a pesar que es un área de mucho calor) y muchas cosas se vinieron a mi mente, pensando en que si ella me delataba diciendo algo de lo sucedido o si decía que andaba conmigo, que dirían los padres, entre toda esa turbulencia en mi cabeza, vi que paso ella con sus padres frente a mí y llevaban una niña como de 7 años de la mano de ellos (su hermanita pequeña), no volteo a verme e iban haciendo chistes sin duda porque se reían, al ratito regreso y me dijo que ya le había dado el dinero a su papá y que había quedado contento, además le había dicho que todavía iría a vender en la noche, por lo que teníamos tiempo para estar juntos.
Al rato vino Karen y me dijo que tenía que ir a su casa, yo sin preguntar mucho, saque de mi bolsillo un dinero y se lo di, no porque fuera una prostituta, sino porque sé que, aunque ellas tengan sexo, también tienen sus necesidades, justo cuando se estaba despidiendo Damaris le dijo que porque no pedía permiso en su casa para salir a vender con ella y que dijera que el dinero que llevaba lo habían ganado juntas, a lo que Karen contesto que iría a pedir permiso a ver si le dejaba regresar. Estuvimos esperando un rato y vimos que no regresaba y le dije a Damaris si quería ir a dar una vuelta, a lo que acepto. Justo estábamos partiendo cundo a lo lejos venia Karen corriendo y le dijo que si le habían dado permiso para estar hasta la media noche afuera.
Nos montamos a mi vehículo y como que no quería la cosa les pregunte a donde íbamos, me dice Damaris, demos una vuelta por donde yo vivo y me fue guiando para donde ir, por ser calles empedrada tenía que ir despacio. Mi carro es semi polarizado (vidrios claros adelante y obscuros atrás) Damaris iba sentada a la par mía en el lugar del copiloto y Karen iba atrás, la emoción de ir en carro hacía que Damaris fuera con el vidrio bajo viendo a todos y queriendo que todos vieran que ella andaba con su amante y amante con vehículo, a las cuadras me dice la que viene ahí es mi prima, déjame saludarla por favor, así que medio pare y Damaris la saludo, era una chica como de 13 o 14 años con uniforme escolar, iba saliendo de estudiar, pues estudiaba por las tarde la secundaria. Cuando ella se acercó muy sonriente y confianzuda me dijo un HOLA, casi de coqueta, la chiquilla estaba muy rica y nada mal, y Damaris le dijo: Él es Carlos, “hola” me dijo ella, me llamo Kimberly y luego agrego, “para donde van”, le conteste, dando una vuelta y conociendo un poco el pueblo le dije, a lo que ella me dijo: “Conozco un lugar que le llaman las aguas calientes” (a mis adentro pregunte, si estarían más calientes que yo) y me dice Damaris “Vamos ahí a bañarnos”, a lo que le dije que sí, Kimberly abrió la puerta del carro y se metió, diciéndole a Damaris: movéte para atrás y me dijo déjame a dos cuadras y voy a dejar mis cosas y aviso que regreso luego, me quede esperando en menos de 5 minutos ella venia de vuelta con un short que debe de haber sido como para el tamaño de Karen o Damaris, corto y rico, se subió al auto y partimos, el camino era de tierra y nos hicimos alrededor de 20 minutos en llegar, el lugar era un lugar público que por alguna razón cerraba tarde. El complejo es de los que tienen aguas termales naturales con piscinas públicas y privados con pequeñas piscinas y baños de vapor. Cuando llegue el que nos atendió trato de venderme los privados por lo que comprendí que él ganaba ese dinero extra para él y en los privados nadie podía ver si había clientes, no está de más que al mostrarles a ellas el privado les gusto mucho más que el área publica, pedimos unos refrescos y yo pedí una mi cerveza con un jugo de tomate para cargar energía, pues algo me decía que me tocaría comerme tres vaginas en ese momento. Antes de entrar nos llevaron las bebidas y me dijo el trabajador que adentro había baños para cambiarse, pensando que ellas llevaban traje de baño, en realidad ninguno llevábamos.
Nos metimos al privado y cerramos la puerta tras nosotros, al cerrar empezamos a hacer bromas y reírnos, pues ahí caímos en cuenta que no llevamos traje de baño, Karen sin ningún tipo de pena dijo, pues yo me quito todo y ahí delante de todos se desnudó, luego Damaris dijo e hizo lo mismo y se metieron, mientras Kimberly me dijo: “a mí me da pena desnudarme”. Entonces para darle confianza le dije: “Si tú quieres tranquilamente, quítate tu ropa y anda a gozar donde están las niñas, y yo me quedo acá en el baño de vapor”, así que me dirigí al privado y me quité la ropa, pensé en hacerme una paja para calmar la libido, y empecé a pensar en mis recientes aventuras, cuando sentí que Kimberly entro a la pequeña habitación, solo con calzón y sus pechos al aire, unas chiches ricas y deliciosas, pequeñas y con su pezón bien erecto. Yo estaba acostado en la pequeña cama de piedra que tenia el lugar, me le quede viendo y ella se sonrojo y me dijo: “perdón”, a lo cual no dije mas que: “ven aquí”, ella camino hacia mi y la tome y empecé a meter mi lengua en su boca y mi mano llevándola hasta su sexo, dentro del calzón, inmediatamente pude sentir como su vulva empezó a mojarse y a bajar un líquido viscoso, indicativo que su excitación había llegado. Sin soltarla empecé a bajar su calzón blanco tipo tanga que llevaba, terminándola de bajar con mi píe. La tome y la recosté contra la cama de piedra y continúe besando su cuello, mame sus chiches jugando sus pezones con mis dientes, mientras ella había empezado a gemir cada vez mas fuerte; yo mientras tanto seguí bajando con mi boca y lengua de sus pechos al estómago, pasando mi lengua en su ombligo y continúe hasta llegar a su vagina (que no se si rasurada o natural) estaba careciente de bello púbico; hundí mi cara en su vagina, teniendo como obsequio un clítoris que era enorme, muy grande y expuesto (como un pene pequeño), metía y sacaba mi lengua y ella para todo esto ya daba grandes voces de excitación en ese momento tome sus piernas y las subí a la altura de su estomago y las echa hacia atrás, dejando expuesta toda su vagina para mamarla mejor, entonces mamaba su clítoris y metía mis dedos; justo en ese momento solo vi una sombra pasar hacia arriba de la cama de piedra, fue cuando levante la mirada sin dejar de gozar de ese sabor a vagina que tenia en mi boca y pude observar a Damaris abriendo las piernas y sentándose en la cara de Kimberly y vi como Kimberly tomaba las nalgas de Damaris y empezaba a pasar su lengua entre la conchita y su ano, viendo al mismo tiempo como se arqueaba de excitación. La excitación se apodero más de mí y entonces empecé a meter un dedo mas en el culo de Kimberly y fue en ese momento que sentí como Kimberly literalmente EYACULO en mi boca y vi que mientras ella hacia esto metía los dedos dentro de Damaris, haciéndola venirse también, ahí la tomé y le di vuelta haciendo que quedara de espalda hacia mí, preparándola para penetrarla, cuando ella me dijo: “mira”, señalando a la puerta y vi que casi como un pedazo de madera se encontraba parada Karen jugando su vulva, a lo cual invitamos a que se uniera a nosotros, subiéndola a la mesa y dejando que ella y Damaris hicieran un 69 mientras a la par de ellas yo me cogía a Kimberly, inicie penetrando su chochita con embestidas fuertes y duras, levante una de sus piernas para dejar mas expuesta su vulva y sentí como en un segundo orgasmo ella volvía a eyacular, fue entonces que sin darle tiempo a recuperarse que saque mi verga y se la metí por el culo, en la primera estocada ella apenas pudo reaccionar, pero conforme fui metiéndola y sacándola que ella tomo el ritmo en el baile del sexo que teníamos, justo nos venimos juntos mientras las niñas también llegaban a un orgasmo juntas y vi como Karen eyaculo o se orino en la cara de Damaris que se bebía tan exquisitos líquidos emanados de su amiga. Los tres por un momento quedamos callados y quietos, hasta que Karen se baja de la mesa directo a chupar mi verga sin decir nada, el solo sentir su boca en mi escroto hizo que mi miembro reaccionara rápidamente, a ella no le di tiempo a mucho, la tome y la puse en el suelo y abrí sus piernas y empecé a penetrarla como loco y la niña empezó a sentir como mi verga llegaba hasta el fondo y mis huevos topaban con su ano, teniendo un orgasmo en el acto, yo aun con la calentura encima y viendo a mis tres niñas desnudas frente a mí me dirigía hacia Damaris, con mi verga erecta apuntando hacia ella, la cual entendí que era su turno y poniéndose en posición de perrito para ser ensartada por mi miembro, hambriento de su vagina, empecé a penetrarla abriendo sus nalgas para pudiera entrar un poco más adentro y tomando con mi mano su clítoris para motivarle un orgasmo, el cual no tardo nada en llegar y justo atrás de ella empecé a sentir las sensación de que mi corrida estaba cerca, con lo cual la puse hincada a la altura de mi miembro, las otras al ver esto se pusieron junto a ella para recibir las tres mis chorros de semen en sus caras.
Yo caí sentado del cansancio y ellas solo se veían una a otra como estaban llenas de semen, Kimberly empezó a poner el semen caído en su cara en sus dedos para luego llevarlos a su boca a la cual las otras replicaron lo visto. Después fuimos a nadar a la pequeña piscina privada. Al cabo de un rato salimos y nos dirigimos de vuelta al pueblo, nos quedaba un poco mas de 1 hora para que los padres de Damaris regresaran del bingo, fuimos a una venta de comida callejera a comer y tomarnos algo, a los 10 o 15 minutos de estar ahí llego una nena como de 10 u 11 años muy deliciosa y vi que saludo a las chiquillas mas atenta y familiar que otras chiquillas que habían llegado y que eran conocidas de las otras; me tope con la sorpresa de que era hermana mayor de Damaris, su nombre Leticia.
Por hoy dejare hasta acá la historia, para contarles luego un poco mas de esta aventura, la cual si la contara toda, sería de unos 40 capítulos pues involucra sexo con las dos hermanas de Damaris, otras primas, unas tías, un primito muy femenino y hasta la mamá.
Nos vemos luego
Me encanto la historia me ise una buena paja leyendote. Gracias
No lo dudo amigo, gracias por el apoyo.
Muchas ganas de seguir leyéndote,los dos capítulos han estado geniales
Gracias por tu apoyo. Pronto me sentare a escribir la tercera.