INTERMEDIO – Relatos Ramdon – Algo para comer? Parte 2

El regreso de la nena de que un día antes pidio comida y ahora regresa acompañada de una sorpresa.

PREVIO: Al día siguiente me levanté con mi papá y me dijo: y ese milagro, le dije que tenía que hacer unos negocios a las 9 de la mañana, él como siempre salió a las 8 de la mañana. Como a las 8:30 tocaron a la puerta, fui a ver y era ella, pero no venía sola….

Al abrir venía con otra niña de unos 9 años, mi ninfa sonrió al verme, me abrazo y me planto un beso en la boca, delante de la otra niña, Sonia vio que me quede impresionado y me dijo: ella es mi prima, la que te había contado.

Al entrar les pregunte si ya habían comido y me dijeron que no, porque la mamá de Sonia había tenido que ir a trabajar y le había dado el permiso de ir, si se llevaba a su prima. Escuche muy atento la historia mientras les servía cereales a ambas.

Le pregunte a la otra nena, como se llamaba y me contesto: Elizabeth, le pregunte cuantos años tenía y me contesto que hacia una semana había cumplido los 9 años. Así que le dije que yo le tenía que dar su regalo (ella no sabía que yo lo tenía al medio de mis piernas).

Examine a Liz (forma cariñosa de llamar a las Elizabeth), ella llevaba un short color rosa, no apretado, aunque se veía que tenía un SEÑOR culo. Tenía un tono de piel morena clara, su pelo algo medio crespo debajo de los hombros, ya sus tetitas empezaban a despuntar, ella llevaba una blusa blanca que mostraba bien lo que había debajo de ella.

Llevaba unos zapatos tenis blancos con unas calcetas rosas; Sonia por su parte llevaba el mismo vestido del día anterior.

Terminamos de comer y Sonia dijo que ella lavaría los platos y Liz me pidió usar el baño, yo me fui a mi habitación y sin decir nada, me quite el bóxer y me acosté. La que llego primero fue Liz y se me quedo viendo, pero no se inmuto, sino al contrario, empezó a bajarse su short y a desnudarse totalmente, ella se subió sobre mi plantándome un beso con lengua y dejando mi verga al medio de sus piernas, mientras nos besábamos ella subía y bajaba sus caderas, sintiendo mi verga jugar en su entrada, la puerta de mi habitación estaba abierta, así que cuando Sonia llego, nos vio ya enredados en toqueteos, besos y erotismo. Vi que ella levanto su vestido, dejando ver que venía sin calzón, lista para entrar en la sesión de sexo que teníamos programada para hoy, que sería de todo el día.

Sabiendo que sería un día largo me tome una mitad de la pastilla azul para resistir al máximo, no podía, ni debía de dejar burladas a las dos niñas.

Me recosté sobre la cama, boca arriba dejando que Sonia gozara de mi verga con su boca y a Liz la puse en mi boca, ya Sonia le había dicho que no se bañara, que a mí me encantaba el olor fuerte de la cuca, ella se montó en mi cara, con las piernas bien abiertas, dándome un panorama completo de toda su raya, la de la vagina y la del culo. Mientras yo iniciaba mi trabajo oral, ya Sonia estaba al frente de mi tronco pasando su lengua desde el glande hasta mis huevos, ella lo hacía cada vez con más ganas, podía escuchar su respiración agitada.

Igualmente, Sonia bailaba cada vez más en mi boca, llegando a un orgasmo rico soltando muchos fluidos en mi boca, cosa que me sorprendió, pero no deje de beberme lo que salía de ella, cambie de lugar a las niñas y empecé a mamar el coño de Sonia la cual ya estaba muy mojada de escuchar a su primar gemir como loca.

A Sonia la puse de frente a mí, y la agarre las nalgas buscando empecé a chupar su clítoris y a meter los dedos dentro de su vagina, sacando mucho más fluidos de ella, la levante un poco y procedí a pasar mi lengua por su culo, me volvía loco el olor que tenía, pues sumados a los del día anterior, ahora tenía el olor a mi semen, eso me enloquecía grandemente, empecé a meter mis dedos en su culo y ella solo dio un gran gemido, sintiendo como en ese momento llego a su orgasmo junto conmigo, soltando yo chorros de semen en la boca de Liz, tirando su cara Sonia para pedir un poco de los mismos.

Quedando un tiempo tendidos en la cama, Sonia se bajó de la cama y fue a traer coca cola para que bebiéramos los tres.

Ellas estaban dándome un espectáculo con su cuerpo frente a mí, mientras yo seguía acostado, bebiendo mi coca mientras mi verga seguía medio parada. Sin decir nada, Liz se sube sobre mis piernas y se ensarta en mi miembro, subiendo y bajando, dejándome sentir el calor inmenso que manaba desde su pequeño coño, haciendo que mi miembro retornara a su erección, ella levantaba todo su cuerpo haciendo que mi verga entrara desde principio a fin, sintiendo todo el líquido que salía de adentro de ella, el cual facilitaba su penetración hasta el fondo, ella aceleraba más su ritmo en cada entrada y salida, yo sentía llegar al fondo de su útero, en un momento ella se da un sentón y se queda ahí en un orgasmo grande, quedándose quieta y teniendo pequeñas convulsiones, la levante de su lugar y la pase a mi boca para limpiar su pequeño chochito e indicándole a Sonia que se sentara en mi verga, ella estaba ansiosa y ya bien mojada y yo con ganas de depositar mi semen dentro de ella.

Empezó a sentarse igual de duro en que lo había hecho Liz, ella empezó el sube y baja y yo a como pude la tome de la cintura y empecé a meterla duro dentro de ella, haciendo que ella acabara dos veces antes de vaciarme dentro de ella. Fueron varios chorros los que salieron que ella llego a otro orgasmo, dejando la cama, mis huevos y parte de mis piernas mojadas.

Justo en ese momento, Liz se contorsiono en mi boca con otro orgasmo, junto a un poco de orín el cual me bebí todo, pues cayo directo en mi boca.

Me pare y fui al baño a mear, cuando escuche que abrían la puerta del garaje y vi por el inter que era mi hijo mayor, que en ese entonces tenía como 25.

Este muchacho había heredado mi (maldito gusto o perversión) pasión por las niñas y ya nos habíamos comido algunas juntos o por separado, aunque siempre tuvo la suerte de buscarse madres solteras con una o más niñas. Definitivamente éramos padre e hijos pedófilos.

Al entrar a la casa me vio desnudo y me dice: ¿Qué onda? Yo solo llamé a mis dos nenas del cuarto y ellas llegaron desnudas como estaban, les dije saluden a mi hijo Alex, las dos se acercaron a él y Sonia le dio un beso en la boca con todo y lengua, Liz replico lo hecho por Sonia.

Mi hijo se sonrío y me dijo: ¿estoy invitado? Y le dije: cuando no te he invitado, conteste con una cara de perversidad, pues sabía que la fiesta había empezado.

Mi hijo se empezó a sacar la ropa, él es blanco, algo rubio y con ojos claros, mide aproximadamente 1.70 mts. de alto y no es feo.

Sonia al ver a mi hijo desnudo y que heredo un poco más del tamaño de mi verga a parte del gusto por las niñas, se abalanzo hacia él, marcando donde y como quería empezar.

Mi hijo la acostó en el sillón de la sala y abrió sus piernas para empezar a chupar su pequeño coño, mientras ella empezaba a retorcerse, yo puse a Liz a la par en 4 mientras llevaba mi verga a la salida anal, mi hijo vio cómo se empezaba a tragarse la verga y me dijo: ¿a esta también le entra? Si fue la respuesta que le di y él inmediatamente se sentó en el sillón se puso saliva en la verga y la sentó sobre ella, dando un grito, una mezcla de dolor y de placer juntos, pero ya mi hijo no le hizo caso mientras la cogía por el culo, ella empezó a enredarse en el placer y a gozar junto a él, rodeándole con sus brazos para darle un beso apasionado, continuamos dándoles de esa manera, hasta que ambos acabamos, nos vimos e así escurriendo semen ambas, hicimos cambio y cada uno uso el semen del otro como lubricante para dejarla ir en amabas niñas, ellas a todo esto ya habían tenido un par de orgasmos, pusimos su caras frente a frente para que se besarán mientras las cogíamos, ellas solo alcanzaban a gemir, sin decir nada, por excitación, el trance en el que estaban y porque ya no tenían dominio de sí mismas. Sin acabar aun ninguno de los dos le dije; ¿Sonia o Liz para trio? Señalo a Liz, sacando mi verga de Sonia, le dije: descansa un poco, que luego te toca a ti.

Yo me senté en el sillón y Liz sin saber que pasaría, solo sintió cuando mi hijo, la sentó sobre mi verga y ella puso sus ojos en blanco y yo la jale hacia adelante, dejando su culito parado, momento en que mi hijo aprovecho para ensartarla, ella al sentir las dos vergas dentro de ella, empezó a decir que así le dolía, que se la sacaran, mi hijo no hizo caso y solo dejamos que se acostumbrara a las dos vergas y vimos como ella empezó a volverse loca diciendo: que rico, que rico, hay que delicioso no paren.

Sonia solo observaba atenta, pues sabía que la próxima iba a ser ella, yo le dije a mi hijo, no acabemos todavía, vamos con Sonia.

Mi hijo saco la verga del culo de Liz, y en ese momento se corrió meandome todo el frente de ser, lo cual a mí no me importo, yo le saque la verga también y cargue a Sonia de frente a mi hijo, el cual le ensarto la verga en su vagina y yo me dirigí a su orificio anal prepare mi verga y se la metí sin parar, esta nena solo hizo cara de molestia, pero no grito sino más bien fue un pequeño gemido el que dio.

Así de pie empezamos a hacer el mete saca, y ella casi de inmediato empezó a convulsionar con pequeños orgasmos, pues no dábamos tiempo a que lo desarrollara por completo, hasta que sentimos que nos veníamos le dije pongámoslas juntas y lo hacemos en la cara, así que la bajamos y pusimos una al lado de la otra y derramamos nuestro semen en la cara, boca, pelo y ojos de las dos. Ellas sacaban su lengua para recibir lo más que pudieran, hasta que la metimos en la boca de cada una de ellas, limpiándolas y luego se dedicaron a pasarse la lengua en la cara de cada una de ellas.

Nos sentamos en el sillón y reímos un poco, y ellas estaban felices, le dije a mi hijo que fuera a comprar comida para todos y que se llevará a Sonia con él (como iban en carro, sabía que no había problema).

Le di a la nena una camisa mía, la cual sabía que le quedaría larga y que se fuera desnuda por debajo, tenemos una SUV con vidrios obscuros, así que no había problema.

A los 5 minutos que salieron ellos, llegaron a tocar, por lo que le dije a Liz que se subiera al segundo nivel, por cualquier cosa.

Cuando abrí era la amiga que había cogido un día antes, llego a preguntar si podría dejar a sus hijas (una nena de 6 y otra de 9) y a un sobrino de ella (el cual había yo enseñado a coger a sus primas y también le gustaba sentir mi verga entre sus nalgas) por la noche, porque la habían invitado a una fiesta y no llegaría a dormir.

Al entrar a la sala se dio cuenta del olor a sexo que había y vio los pequeños charcos a la par del sillón.

Se me quedo viendo bien y vio mi torso desnudo y vio que lo tenía mojado y me dijo, ¿estas con alguien verdad?

Si, le dije y vio para mi cuarto y vio los dos calzones ahí tirados y me dijo, solo porque mis hijas están en la casa, sé que no son ellas las que están acá. En cuanto lo dijo, le metí la mano en el sapo introduciendo mis dedos en ella, sentí como se mojó y la voltee y saque mi verga y se la deje ir y mientras se la metía le dije: ¿hay algún problema en que me esté cogiendo a tus hijas? Mientras no dejaba de meterle la verga, y ella me dijo, mientras ellas estén contentas a mí no me importa.

Me dice: ¿puedo conocer a quien tienes acá? La llame y dije: Liz amor, ven. Ella bajo las escaleras, desnuda, yo a todo esto sin sacar mi verga de ella, se le quedo viendo, y le dije: acércate a Carolina y salúdala como saludaste a Alex. Se acercó a su cara y la beso apasionadamente en la boca, se le quedo viendo y me dice mi amiga: ¿pero no se la metes verdad? Le dije, ven amor y en cuanto se acerca a mí, la pongo en 4 en el sillón y se la dejo ir violentamente y rápido, lo cual hizo que Liz empezara a gemir. Me dice mi amiga: WOW, estas niñas empiezan cada vez más pequeñas. Se acomodó y me dijo, te las mando como a las 5 de la tarde, con mi sobrino.

Ella salió mientras yo no dejaba de coger a Liz, saque mi verga y me senté y solo me dedique a besarla, dejándola con las ganas. Al rato vuelven a tocar y me dice mi amiga, dicen las nenas que, si se pueden venir ya, pero me dice: me da pena con el sobrino que pueda decir algo, le dije que no te preocupes que me encargo de él (sin saber que él también se cogía en especial a la más pequeña), el chico tenía 11 años casi los doce, pero no manejaba mal aparato. Le dije a mi amiga que mandara a las niñas livianas porque no las quería súper vestidas, que les mandara ropa, pero casi desnudas. Ella como siempre me pidió dinero que necesitaba, con ella las niñas me salían baratas, pues no me cobraba, yo le daba lo que yo quería, pero se fue contenta. Antes de irse se metió por atrás de la puerta y me hizo un oral, con sabor de la vagina de Liz.

Así que llame a mi hijo y le dije que trajera más comida, me dijo que estaba bien, que él estaba en el estacionamiento metiéndole la verga a Sonia.

Al ratito vinieron las niñas, ellas viven a la vecindad de mi casa, así que no era tardado.

Al llegar yo le había puesto a Liz una camiseta larga mía, no teniendo nada abajo, entraron a quienes llamare: Masha (9). Tuti (6) y Robert (11).

Cuando llegan, algo celosa Masha me da un beso con lengua, sigue la Tuti y Robert se le van los ojos al ver a mi pequeña Liz.

Cuando llegaron les ofrecimos coca cola, nos sentamos de modo que Liz quedará cerca de Robert, ella coqueta que también gusto el niño, se sentó de manera que viera que andaba desnuda. Yo vi que había química, le dije a Robert: ¿quieres coger? Él dijo que si, y le dije, desnúdate, y empezas, vi que él se intimido un poco, talvez por estar todos ahí, así que le dije a ella, que iniciará y ella se quitó la camiseta y sin decir mucho le bajo el short y dejo a la vista su hermosa verguita ya erecta, ya mi nena estaba de nuevo receptiva y con ganas de una verga, sin importar de quien fuera.

Ella metió ese pito de tamaño mediano, el cual me podía sentirme orgulloso, ya que yo lo había entrenado mucho para que le creciera y sabía que un día podría ser mucho más grande.

Ella empezó metiéndose la cabeza en su boca y bajando hasta los huevos del nene, mientras que las otras dos chiquitas estaban de espectadoras en primer plano.

Masha veía muy atenta como Liz gozaba de la verga de su primo, ellas venían en minifalda, así que vi, como ella empezó a mover sus piernas, la pequeña Tuti se bajó de la silla y se fue a donde estaban los niños y tomos la mano de su primo para que empezara a hurgar en su cuevita.

Masha se me quedo viendo y la pare en la silla y la empecé a besar y metí dos dedos dentro de ella, yo empecé a desnudarla, cuando me llega un mensaje de la mamá, que quiere le haga una video llamada por Skype para ver a su hija gozar, así que le digo a ella que se vaya para mi cuarto que iré al baño, le hice la llamada y cuando contesta me dice que esta lista y veo que esta acostada en la cama desnuda con un dildo que le regale yo, lista para masturbarse mientras yo me coja a la hija, puse el teléfono para que ella viera, y la puse en 4  y me tire a chuparle el coño y culito ella tiene los labios exteriores bien grandes, así que me daba una gozada, y la niña siempre me ha dicho OSO y decía, así mi oso, dame más, hasta que me pidió, métela ya por favor, así que tome el teléfono y lo puse de manera en que ella viera como ingresaría la verga dentro del coño de su hija, viendo como salía y entraba, mientras yo veía como la mamá metía su dildo dentro de ella, puedo decir que casi en sincronía los tres acabamos casi al mismo tiempo, la mamá suele siempre soltar un rio de agua que sale de ella y Masha heredo eso mismo de la mamá.

Yo escuchaba en la sala, como Liz y Robert cogían sin prestarle mucha atención a la pequeña Tuti, la cual al escuchar que habíamos acabado acá, vino corriendo y se acostó en la cama con las piernas abiertas y yo solo saqué mi verga de Masha y se la metí a Tuti, la mamá presto atención al ver como a su pequeña de 6 también se la cogían y gozaba tanto o más que ellas. Cabe mencionar que esta niña, siempre quiere tener los dedos o una verga dentro de ella, gime de una manera muy excitante, poder escuchar su vocecita pidiendo siempre más.

Vi como la mamá metía más u más su dildo, no solo con ms fuerza y velocidad. Sin duda se acordaba que cuando niña a ella también le gustaba la verga, pues como una anécdota de muchas que ella tiene: le encantaba bañarse desnuda (sus papás salían a trabajar todo el día), y le avisaba a todos los chicos de la cuadra para que la llegaran a ver y luego entraran a cogerla. Entre ella y yo hay una diferencia de años, yo la conocí a ella siendo niña y yo ya era adolecente y un día la mamá de ella la dejo a cargo de mi mamá, la cual tuvo que salir, dejándonos solos. Justo cuando me iba meter a bañar, ella se quitó la ropa frente a mí, diciéndome que quería bañarse conmigo, tenía unas nalgas hermosas. Le pregunté a ella si ya la habían cogido y me dijo que si, así que, aunque le metí la verga estaba apretada, ella ya se mojaba como lo hace actualmente. Esa fue la primera de muchas cogidas, y estoy seguro que a ella venían a su mente todos esos recuerdos y sensaciones dentro de su vagina.

Tuti se retorcía de placer bajo mi pene, hasta que exploté dentro de ella, mostrándole con la cámara todo el semen que salía de ella y solo pude ver como ella también estaba en un Squirt en su propia cama.

Creo que tendré que hacer una tercera parte de este relato ya que se me alargo, por los detalles que quise incluir para que todos entendieran…una disculpa a todo aquel que lo lea.