Jefa de grupo domada, parte 5

continuando con el trayecto de regreso a la ciudad.
Continuando con mi historia, les contaba que el camino continuo varias horas más, iba yo desnuda, recién cogida, con el sabor de su semen en mi boca, pensando en lo que acababa de suceder, en lo que le había dicho a este hombre, y debo reconocer que me sentía muy extraña, por un lado, me sentía mal, culpable de ser infiel, pero por otro lado me sentía mujer, en 3 días había experimentado cosas que nunca había experimentado.

Entre tanto pensar, y sumándole lo cansada que estaba, me quede dormida, no se cuanto tiempo paso, siento que no fue mucho, entre sueños comencé a sentir que me sobaban las tetas, que me las apretaban y estiraban desde mis pezones, comienzo a abrir mis ojos, y si, era el jugando con mis tetas, me tenia los pezones muy parados.

De pronto lleva su boca a mis tetas y me las empieza a chupar y a morder y llevo su mano a mi vulva, estaba con una mano masajeando y estrujando una de mis tetas, con su boca chupando y mordiendo la otra y con la otra mano masajeando y abriendo mi vulva.

Oleadas de placer recorrían todo mi cuerpo, no me di cuenta cuando tenia su pene en mi mano, jugaba con el lo jalaba, lo tenia durísimo, cuando de pronto me aprieta una de mis tetas y me dice “dime otra vez, ¿que eres?” yo le respondí “mmhh por Dios, soy tu puta, hazme lo que quieras” y me mete sus dedos en mi vagina y me dice “y dime puta, ¿para que eres?” y le respondo “para satisfacerte, para que me cojas” y me dice “chúpamela puta” y se levanta y se pone en el pasillo del autobús recargado en el asiento continuo (cabe aclarar que estábamos en la parte trasera del autobús).

Yo me quede pasmada, si alguno de los chicos o de las chicas se levantaba o con tan solo se asomará vería a la jefa de grupo chupándole el pene a uno de los jefes de sección, incluidas mis hijas, él se acerca a mi y me toma del cabello y me jala hacia atrás un poco y me dice:

El: ¿Qué eres?

     Yo: tu puta

     El: ¡dilo!

     Yo: soy tu puta

     El: ¿y si te digo que hagas algo que haces?

     Yo: obedezco

     El: ¿qué vas a hacer?

     Yo:  chuparte el pene

     El: vas a comerte mi verga, ¿Qué vas a hacer? Pídelo

     Yo: me voy a comer tu verga, déjame comerme tu verga

El se acomoda nuevamente y yo me acerco nerviosa a su pene y lo tomo con mi mano y acerco mi cara y se lo beso primero, y comienzo a chupárselo suave, poco a poco comencé a metérmelo más y más, pero no me cabía todo, luego me sienta en el asiento en que estaba yo, y pone su pene entre mis tetas y me toma mis manos y me las pone para que las mantenga juntas, y me comienza a coger por las tetas, luego me toma por la parte de atrás de mi cuello y me lleva y me cogía por las tetas y se lo chupaba al mismo tiempo.

Después de un rato, me pone de pie en el pasillo, viendo hacia al frente del autobús, y me mete su pene entre las piernas, sin penetrarme, y hace movimientos, su pene rozaba mi vulva y sentía una descarga eléctrica cada vez, y me toma del pelo y me dice:

El: ¿qué quieres?

Yo: cógeme, por favor cógeme, méteme tu verga

El me tomo de mis caderas, me jalo un poco para hacer que levantara mis nalgas, acomodo su pene en mi vagina y me lo metió a fondo.

El: estas muy buena puta

Yo: ahhmm uhmm

El: ¿tu marido casi no te usa verdad?

Yo: uhmm no, uaamm, muy poco

Si alguno de los chicos o de las chicas, se hubiera asomado, lo que hubiera visto seria: a la jefa desnuda, de pie, con una cara de puta, sus tetas rebotando y al jefe de sección atrás de la jefa bombeándola duro.

De pronto me saca un orgasmo, por lo que por los mismos movimientos su pene se me sale y voy a dar al piso del autobús, temblando y gimiendo, fue un orgasmo muy intenso, sentía como mi vagina se abría y cerraba.

El me toma de mi cadera y me levanta y me avienta en el asiento donde originalmente veníamos, y él se avienta encima mío y me mete su pene otra vez de golpe, y comienza a bombearme duro y me da una nalgada y me dice:

El: ¿que eres?

Yo: soy tu puta ahh

El: ¿y yo que soy?

Yo: uhhmm eres mi amo, mi dueño, mi amor

El: ¿te gusta mi verga?

Yo: ahh me gusta mucho, amo tu verga

El: ¿quién te coge mejor, tu marido o yo?

Yo: tú, tu me coges mejor, ahh

De pronto me agarra fuerte de mi cadera y me jala hacia el y al mismo tiempo empuja su pene y me saca otro orgasmo y siento que me llena de su semen.

Nos acomodamos en los asientos, y me recargue en el y me quede dormida, hasta que me despierta y me dice “ya vamos a llegar”, y yo ¡desnuda!, ¿y mi ropa?, pues la había puesto en un asiento más atrás, para recuperarla tuve que ir hacia el asiento de atrás a cambiarme, y una vez más se quedó mi panty.

Llegamos a nuestro local, despertamos a los chicos y chicas, descargamos el autobús, y cada quien se retiró a su casa.

En la siguiente parte les contare un poco más, me disculpo una vez más por el bajo nivel de redacción, pero igual espero les haya gustado.