Juana y su niño favorito Parte 2 Final By: Sandra «Besitos»
Mi vecino Carlitos Experimenta lo que es complacer a una dama.
Juana y su niño favorito Parte 2 Final By: Sandra «Besitos»
Carlitos y yo volvimos a la sala y la televisión ahora estaba mostrando la serie de Bluey, sin duda eso me hizo sentir más emocionada por la idea de enseñarle a este pequeño cómo complacer a una dama a tan temprana edad.
Carlitos se volvió a sentar en el piso y siguió jugando como si nada con sus juguetes, pero mi mente ya estaba planeando formas de jugar más… interactivas
–YO (Alegre y juguetona)
¿Carlitos? ¿Se te antoja una limonada o jugo?
Carlitos me miro con mucha ánimo y mientras jugaba me contestó
–Carlitos (Alegre)
¡Me gustaría un jugo de limón!
Él me lo dijo con mucho entusiasmo y bastante prendido, aunque los niños normalmente son muy activos, pero en su caso se podría decir que yo lo activé muchísimo más jeje
Yo me dirigí a la cocina y fácilmente podía ver a Carlitos debido a que la cocina no tenía puerta, sino que era un marco de tamaño de 2 puertas que daba una vista amplia a toda la sala de estar, agarre 3 limones del refrigerador y saque la tabla de cortar y el exprimidor de limón, todo esto lo estuve haciendo mientras Carlitos se paseaba gateando por toda la casa arrastrando un carrito por toda la sala como si estuviera conduciendo, esto para mí era muy lindo de ver por qué me traían recuerdos sobre cómo eran mis hijos cuando tenían la edad de Carlitos
Mientras me encontraba exprimiendo los limones que había cortado, Carlitos se acercó gateando y mientras que conducía su coche de juguete poco a poco se fue acercando a mis piernas y en su imaginación el coche se empezó a subir a mi cuerpo y sin pena y algo de cosquillas sentía como su coche se subía poco a poco a mis piernas hasta llegar a mis glúteos como si fuera una colina super contorneada
–YO (juguetona y cortando exprimiendo limones)
¡Carlitos jeje! ¡Ese cochecito se va a caer!
Solté una pequeña carcajeada, pero Carlitos simplemente me abrazó y, como estaba a la altura de mi cintura y de espaldas, pues me abrazó restregando toda su cara sobre mis pompis como si tratara de meterse entre ellas, lo que me ocasionó soltar una pequeña risa ante la situación tan inocente
–Carlitos (Abrasándome)
¡La quiero mucho vecina!
Su abrazo me dio muchísima ternura y yo le respondí
–YO (Amorosa)
AWWW… yo también te quiero, Carlitos, eres un niño muy especial y lindo
Carlitos me soltó y yo había terminado de hacerle su agua de limón, pero sobró un poco, así que me serví un poco en un vaso de vidrio, mientras que a Carlitos se lo serví en un vaso de plástico de color naranja. Le añadí un poco de azúcar al de Carlitos y lo llamé para que tomara su vaso
Carlitos agarró con su mano derecha el vaso, mientras que en la izquierda seguía agarrando su carrito, mientras yo agarraba mi vaso y lo acompañaba a la sala.
Yo me senté en el sillón de 3 plazas, mientras que Carlitos se sentó en el piso con sus piernas cruzadas mirando la tele. Yo quería jugar con este pequeño y para eso necesitaba marchar mi plan a la perfección, por lo que hice como si tomara un poco de agua y dejé caer a propósito un poco de líquido sobre mi pecho y escote, haciendo que se mojara mi camisa.
–YO (fingiendo molestia)
Augh! Se me cayó el agua
Carlitos volteó a verme y con unas risas vio cómo mi camisa se manchó
–YO (agitándome la camisa)
¿Carlitos? Puedes ayudarme a quitarme la camisa, no quiero que mi piel se ponga pegajosa
Carlitos se miraba algo confundido, pero dejó su vaso en el piso y se me acercó mientras yo me agachaba y me ayudó a quitarme la camisa semi mojada, dejándome toda la parte de mi bello torso en sujetador, el cual era uno de color café claro con un estilo floral muy bonito
Carlitos se había quedado algo intrigado y bastante perplejo al ver mis pechos cubiertos con ese sujetador tan atrayente y sugestivo
Sonreí ligeramente por su reacción tan inocente ante mis enormes pechos y le pregunté
–YO (juguetona)
¿Qué pasa, Carlitos? ¿Tengo algo en la cara?
Carlitos se quedó mirando unos 5 segundos más y de repente volvió de su estado hipnótico y su mirada intentó centrarse en mis ojos, pero era algo que para el era difícil por 2 GRANDES razones
–Carlitos (Nervioso)
emm, ¿qué son esas cosas?
Carlitos señaló con su dedo índice a mis pechos con una expresión de curiosísimo.
–YO (amorosa y tocando ligeramente mis pechos)
Ahhh, mis pechos, pues estas cosas se llaman Pechos o tetas, cariño, solamente las mujeres como yo o tu mami las tenemos
–Carlitos (mirando mis tetas)
y ¿para qué sirven esas cosas?
–YO (juguetona)
ah, bueno, pues sirven más que nada para que las mujeres se vean muchísimo más bonitas y… también para dar lechita dulce, *pequeñas risas leves*
La palabra «Lechita dulce» hizo que la cara de Carlitos se iluminara y sacara una bella sonrisa y se acercara más a mí
–Carlitos (juguetón y alegre)
Lechita? ¿A poco sacan leche de ahí?
Mis manos se ponían más juguetonas y ahora estaba apretando un poco más fuerte mis pechos sobre el sujetador
–YO (juguetona y algo coqueta)
¡Sí! ¡Como si fuera una vaca jeje
Carlitos sin duda me estaba calentando con sus preguntas tan inocentes, pero que para mí eran algo personal y hasta personales, pero no me importaba y quería seguir el juego y ahora quería darle un motivo razonable para sentir su lenguita sobre todo mi cuerpo, por lo que le dije que si podía ayudarme a limpiar mi cuerpo mojado porque el limón puede sentirse pegosteoso cuando caen en la piel y que con su saliva puede ayudarme a que no me sienta rara, Carlitos me dijo que estaba bien y le dije que se acercara lo más posible a mí para que con su lenguita diera lamidas sobre mi pecho y cuello como si fuera un helado de chocolate
Carlitos ahora estaba con su rostro en mi cuello dando lamidas con su saliva lentamente mientras yo cerraba mis ojos ante sus toques tan ricos que me estaba dando, juro que sentir su lenguita recorriendo mi cuello de arriba hacia abajo y viceversa era una sensación que mi esposo nunca había hecho y sin duda sentirlo de parte de un niño me estaba dando ganas de gritar de placer
Alrededor de 8 largos minutos, Carlitos estuvo dando su saliva por todo mi cuello. Podía sentir cómo mi vagina estaba empezando a sentirse húmeda por sus toques tan placenteros
–YO (Animada y acariciando la cabeza de Carlitos)
¡Muy BIEN, cariño! ¿Pero ¿crees que puedas hacer lo mismo ahora en… mis pechos?
Mientras lo dije, puse mi mano izquierda sobre mi pecho izquierdo para incitarlo más
Carlitos no dijo una palabra y ahora empezó su labor de hombre de la casa dándole lamidas sobre toda la zona superior de mi pecho y poco a poco empezó a dar lamidas sobre mi pecho izquierdo, pero como tenía el sujetador, pues no podía hacer mucho, pero yo quería esperar un poco más, su lengua se pasó a la de la derecha y yo encamine su cabecita hacia el centro de mis pechos y sentir su lengua recorriéndome como si este nene me estuviera violando en mi casa era muy excitante
Ligeros gemidos placenteros salían de mi boca y ahora puse mis manos sobre mi espalda y me desabroché el sujetador, ahora que mi brasier estaba tentadoramente suelto sobre mi cuerpo entre placer y tentación puse mis manos sobre mis pechos mientras Carlitos lamia mi pecho, pero como el sujetador estaba sin abrochar, pues poco a poco se empezó a ver mis pezones cafés obscuros y ahora Carlitos podía saborearse a su vecina a su gusto
Carlitos se había concentrado ahora en mis duros y erectos pezones con una sonrisa y alegría tan inocente que yo sin duda estaba volviéndolo morboso y excitante. Carlitos metió su boquita sobre mi pezón izquierdo, mientras que con su mano derecha apretaba mi otro pecho como si fuera una plastilina
Podía sentir la lengua de Carlitos recorrer todo mi pecho y, tan solo, de sentir su lenguita sobre mi pezón, hacía dejar salir breves gemidos de placer que a Carlos parecían gustarle, ya que cuando hacía un ruido en él mientras hacía lo suyo, él me miraba con mucha alegría
Mi excitación era tanta que mi mano izquierda se escabulló hasta mi vagina y me metí sobre mi pantalón y ropa interior para tocar mi clítoris, el cual ya estaba algo mojado, dando pequeños y lentos círculos mientras Carlitos seguía con su boca dando círculos sobre mi pezón
Mi mano derecha se había posado en la cabecita de Carlitos y lo acariciaba suavemente sobre su cabello como si fuera mi bebe dándole teta
–YO (excitada y acariciando la cabecita de Carlitos)
¿Te gusta mucho corazón?
–Carlitos (entre chupadas)
S… sí… está rica
Pequeñas risas de satisfacción salieron de mí y me acerqué para darle pequeños besitos en su mejilla y frente, pero ya estaba muy caliente y ahora quería darle a Carlitos un premio por ser tan amable conmigo, jeje
Separe a Carlitos y rastros e hilos de saliva suya se habían quedado en mi teta, pero eso solo era el principio de la diversión, Carlitos y yo nos levantamos de ahora yo me quite los pantalones para Mostar mi húmeda prenda interior, cosa que a Carlitos le hizo gracia, pero algo que sin duda no me había dado cuenta hasta ese momento fue que cuando Carlitos se levantó un pequeño bulto se había levantado de su pantaloncito
Me mordí el labio tentativamente y sin decir ni una palabra más me quite mi tanga mojada de una manera seductora levantando mi pierna derecha y dejando caer la prenda hasta mi pie izquierdo, por fin había quedado desnuda al natural frente a este pequeño que sin duda iba a ser mío, aún no olvido cuando Carlitos se me quedo viendo con una mirada de deseo y de admiración, literalmente Carlitos estaba viendo el juguete que quería para Navidad en la plaza y yo sin duda me iba a entregar a él… GRATIS
Me acerqué a Carlitos con unos pasos de gata, donde mis caderas se movían de un lado hacia otro mientras entrelazaba mis piernas una delante de la otra para darle un toque más seductor y erótico a la escena que estaba desarrollando, Carlitos no perdía detalle en mis movimientos, más que nada en mis enormes pechos y en mis labios vaginales que para el era una cosa muy nueva que no sabía para que servía
Ahora que estaba muy cerca de Carlos, yo me agaché para estar a su altura y él me dijo
–Carlitos (Feliz)
Qué bonita eres, vecina, esas… tetas están bonitas, jeje
–YO (Amorosa)
Awww muchas gracias bebe, y esto que haremos te va a encantar. ¿Sabes lo que es el… sexo?
Carlitos se miraba algo confundido, pero sin perder detalle me dijo una respuesta que sin duda me dijo anonadada y bastante caliente
–Carlitos
Pues… hace mucho vi a mi mami con un hombre algo alto en su cuarto, pero estaban sin ropa como usted
Yo me sonrojé un poco al saber que Carlitos vio cómo su madre Sofía estaba teniendo sexo con un hombre que no era ni su novio, ya que ella desde que nació, Carlitos ha sido madre soltera, pero en mente no la culpaba, obviamente de seguro se sentía sola
y quería desquitarse un poco
Yo había regresado de mi pensamiento y le contesté
–YO
Bueno, Carlitos… pues el sexo es algo así como dar besitos como los que te da tu mami o yo, pero de una forma más… especial
Carlitos se mostraba intrigado y me preguntó mucho más sobre el tema
–Carlitos(Curioso)
¿Cómo especial? Solo vi a mi mami acostada y ese señor estaba encima de ella, pero como que le metía algo que tenía en sus piernas, se parecía a lo que tengo para hacer pipi
–YO
Bueno, Carlitos, eso que tú me dices se llama pene, los hombres tienen pene y las mujeres tienen algo que se llama vagina, y en cuanto a lo de especial es cuando un hombre penetra amorosamente en un lugar especial a su chica, es algo único y rico que se siente
–Carlitos (Alegre y Emocionado)
¡ME PUEDES ENSEÑAR! ¡PORFIS!
Carlitos estaba superemocionado y yo, siendo una vecina y mujer muy generosa, no se lo iba a negar, por lo que le indiqué que se quitara su camisa con cuidado
Carlitos se quitó sin problemas su camisa y le dije que le quitaría su pantalón con cuidado, mientras se lo quitaba, Carlitos se apoyó en mis hombros y deje caer sus pantaloncitos y los aventé cerca del sillón, dejando a Carlitos en calzones los cuales eran de Batman y sin duda su «Batarang» estaba bien parada jeje
Yo agarré confianza y sin miedo acaricié por debajo de su calzón sus pequeños testículos y los masajeaba ligeramente mientras Carlitos decía que le hacía cosquillas. Yo no quería esperar otro segundo más y quería volver a tocar y ver este pedacito de carne nuevamente.
Le bajé sus calzoncillos hasta abajo y como si su pene intentara sorprenderme, este saltó de golpe y sin duda mi exquisito y cuerpo de estrella porno lo había hecho ponerse duro a tan temprana edad
–YO (asombrada y juguetona)
¡Oh! Veo que te emocionaste de más eh jeje
–Carlitos (juguetón)
es que tus tetas son muy ricas, vecina
Yo solo reí y 3 segundos después me volví a meter su pene a mi boca y empecé a hacer movimientos de felación mientras mi lengua hacía círculos alrededor de su prepucio
Mis ojos se cerraron mientras disfrutaba cada pequeño centímetro de este pequeño. Mientras Carlitos reía de felicidad, puso sus manos sobre mi cabeza para acariciarme. Mis manos encontraron un buen agarre en sus pompis suavecitas y blanquitas que sin duda eran muy suaves para mis manos
La habitación era más que excitante, la televisión prendida transmitiendo Bluey y a mí y Carlitos desnudos mientras le hacía una rica mamada a su penecito con el sonido de succión y saliva recorriendo cada parte de su pene para mí solita
Estuvimos alrededor de 4 minutos más y Carlitos estaba más que listo para escupir su lechita nuevamente sobre mí, pero ahora quería sentir su corrida calentita sobre mi cuerpo
Carlitos empezó a gemir levemente y su respiración empezó a acelerarse más y más, por lo que escupí su pene de mi boca y lo masturbé con mi mano lo más rápido posible mientras acercaba mis pechos hacia su pene para recibir su rica carga de semen
–Carlitos (excitado)
Ugh! ¡Señora JUANA!…me voy… a… pipi…!
Carlitos no pudo completar su frase porque soltó de golpe otros 9 hilos de semen transparente sobre mis enormes tetas y cara de puta
Carlitos estaba en la gloria pura, ya que al ser su segunda vez corriéndose, pues esa sensación tan rica y placentera era demasiada para su pequeño cuerpo, pero en ese momento yo solo tenía pensado en coger con este pequeño bastardo en mi casa
Miré a Carlos y él observaba cómo restregaba su caliente néctar sobre mis grandes pechos y los restos que cayeron en mi cara. Me las llevé a la boca y la saboreé como si fuera miel
–YO (excitada y coqueta)
¡Ven!
Agarré la manita de Carlitos y me lo lleve al sillón de 3 plazas para después subirlo al sillón conmigo, mientras él se ponía de rodillas en el sillón yo me puse en 4 patas de forma inclinada mirando a la televisión apoyando mis manos y rodillas en el sillón cómodamente y más porque me apoyaba de reposabrazos para tener un mejor agarre
Mientras que Carlos se posicionó detrás de mí, este pequeño ya sentía mucha confianza conmigo y por eso me agarraba el trasero como si nada
–YO (Amorosa y Emocionada)
¿Te gustan mis pompis? *Meneando mis glúteos para Carlitos*
–Carlitos (juguetón)
¡Sí! Son muy suavecitas como tus tetas jeje
Acto seguido, Carlitos inconscientemente me dio pequeñas nalgadas a modo de juego porque eran muy suaves para él y eran como tocar un tambor para él. Yo simplemente le dije que podía darme nalgaditas así cuando yo le diga.
Esto a carlitos lo entusiasmó y me respondió que está bien
–YO (Amorosa)
¿Ves este hoyo cariño?
Le señalé mi entrada vaginal a Carlitos, la cual él me respondió afirmativamente y después me lo tocó suavemente
–YO
aquí quiero que metas tu penecito, ¿crees que puedas?
–Carlitos (Dudoso)
mmmm, ¿creo que sí?
Carlitos acercó su penecito erecto hacia mi entrada, pero cuando intentó meterlo, me dijo que era bastante cerrado para que entrara, por lo que pasé mi brazo hacia atrás y agarré su penecito y lo acerqué a mi entrada para ayudarlo
–YO (Amorosa)
es normal, cariño, tal vez esto te duela un poquito, pero se te pasará rápido. Hagámoslo lento, ¿ok?
–Carlitos (Tranquilo)
ok
Mientras yo dirigía el pene de Carlitos, él poco a poco se acercaba más a mí y mire sobre mi hombro y podía ver como su cara estaba algo adolorida y con los ojos cerrados por el dolor de que su prepucio esté haciéndose para atrás por la presión que daba mi vagina, pero yo intente introducirlo lentamente hasta que todo su pene había entrado hasta donde podía
Carlitos apoyó sus manos sobre mis glúteos grandes y suaves y yo le di la instrucción de que ahora moviera un poco sus caderas hacia atrás, pero sin sacar su penecito, solamente que se moviera hacia atrás y adelante muchas veces, Carlitos increíblemente entendió y empezó a mover sus caderas hacia atrás y pequeños gemidos míos empezaron a salir por la enorme excitación que me estaba dando un pene tan pequeño
Gracias a que la televisión estaba enfrente de mí, podía ver por el reflejo a Carlitos moverse de una forma tan rica y morbosa, penetrando a su mujer
Mientras miraba por el reflejo a Carlitos, él proseguía con su penetración tan linda, sus caderas se movían hacia adelante y atrás, como me hubiera gustado ver sus testículos moverse, pero me gustaba sentirlos chocando conmigo, los gemidos de Carlitos eran lo que más me estaba prendiendo, sus pequeñas respiraciones combinadas con su placentero ruido era algo que sin duda era mejor que hacerlo con mi esposo, estuvimos así alrededor de 8 minutos porque Carlitos ya se había corrido mucho 2 veces y creo que fue una buena decisión drenarlo hace rato, ya que así era seguro que tardaría más en correrse y así lo tendría más tiempo dentro de mí
Mi excitación era tanta que empecé a gemir más fuerte y a cerrar mis ojos haciendo mi imaginación mientras Carlitos no paraba de acelerar sus caderas para penetrar mi vagina y los sonidos de mis nalgas chocando eran lo único que se oía en toda la casa
«Creo que me voy a hacer pipi!», dijo Carlitos con cansancio y excitado mientras me aceleraba sus movimientos
Yo abrí mis ojos y miré sobre mi hombro derecho para verlo e incitarlo a que fuera más rápido
«¡Tú dale amor! ¡No te pares, hazlo dentro!», le grité de manera excitada mientras empecé a mover mis caderas igualmente para que se corriera Carlitos en mi vagina
Carlitos se me pegó más a la espalda y me abrazó la cintura sin parar de mover sus pequeñas caderas, dando pequeños gemidos de placer que combinaban con los míos
De repente Carlitos soltó un leve grito de agitación y freno en sexo sus movimientos dejando salir todo su semen dentro de mí, haciendo que su cuerpo sudoroso se pegara más a mi espalda y yo con mucha satisfacción simplemente mire sobre mi hombre su carita de cansancio y sudoroso y con una sonrisa le pregunte si le gusto mucho
«¿lo disfrutaste cariño?», dije con un toque amoroso, pero lujurioso hacia Carlitos, él se despegó un poco de mi espalda, pero levemente recostado me respondió, «S… si… se siente muy calentito aquí dentro vecina» Carlitos se mostraba algo cansado, ya que esta vez él fue quien hizo el mayor trabajo pero yo aún quería verlo de frente
Yo con delicadeza me separé de él y le dije que se separara lentamente para no lastimarlo, justo al momento que su pene salió pude sentir como su semen brotaba sobre mi vagina y Carlitos mirando su pene brotando hilo de semen me dijo, «Por qué se ve como rojita la puntita?», yo con tranquilidad y afecto le respondí, «Eso pasa por qué la vagina de una mujer es algo apretada y pues tú al principio dijiste que te dolió un poco ¿no? Pues es que fue la presión para meterlo lo que provocó eso, pero tú no te asustes, se te pasará rápido. Lo calmé dándole un pequeño beso en la frente y eso hizo que Carlitos recobrara su sonrisa
«¿Qué hacemos ahora?», preguntó Carlitos con algo de agotamiento
Mi rostro se miraba coqueto y lujurioso
–YO
¿Quieres ver mi cuarto?
Carlitos solo me sonrió y con su cabecita moviéndose lateralmente, diciéndome No
–YO (coqueta)
¡Pues ven corazón!
Agarré cariñosamente de la mano a Carlitos y caminamos juntos a las escaleras, y con mis tetas rebotando y su penecito tambaleándose, nos fuimos a encerrar en nuestro cuarto para finalizar la «sesión de juegos»… por hoy
Dentro de mi cuarto, se encontraba una cama matrimonial de sabanas blancas con bordes rojo que era más que perfecta para la comodidad de mi pequeño amante
–Carlitos ( entusiasmado)
Es muy bonita vecina, mi camita es muy chiquita a la suya jeje
–YO (emocionada)
jeje es muy suave también, Carlitos, ven súbete
Me subí a la cama y Carlitos me siguió inmediatamente agarrando mis largas piernas con sus manitas que no abarcaban ni la mitad
–YO
Ven, Carlitos…
Mi arranque de amor pudo conmigo y le di un rico beso de lengua a Carlitos, levante mi mano rozando la mejilla de Carlitos como si quisiera memorizar cada parte de su inocente carita antes de entregarme puramente a él, sus labios tan suavecitos y vírgenes me incitaban a algo tan depravado y prohibido que solo me hacía seguir
Carlitos mientras tanto había encontrado excitación en el beso y más cuando sus manos se extendieron sobre mis pechos y cintura, sus manitas estaba recorriendo mi bella y contorneada cintura mientras su lengua daba lenguas sobre la mía, el sonido que ahora llenaba la habitación no era de un amor real, simplemente era morbo y pasión, Mis ojos no paraban de ver a Carlitos y a la vez una bella foto de mi familia e hijos, pero sus miradas no me transmitían nada, en ese momento yo era una vil zorra caliente que necesitaba una rica verga que solo mi vecinito podía darme ahora
Mi mano se dirigió a su pene, el cual ya está duro por 3 vez, y lo empecé a acariciar suavemente. Mientras que rompimos el beso, un pequeño hilo de saliva aún nos mantenía juntos, pero se rompió cuando Carlitos me preguntó si íbamos a jugar otra vez
–YO (juguetona con un toque seductor y erótico)
MM, claro que sí, pero esta vez, tú estarás acostado aquí, Carlitos
Le indico a Carlitos que se acueste boca arriba en el centro de la cama mientras que yo me posicione enfrente de él, con un toque de audacia me Regí sobre él posicionando mis rodillas en cada lado de su cintura, puse brevemente y con cuidado mis manos sobre su pechito y pude sentir como su corazoncito iba aumentando, me eleve levemente para ajustar mi posición a una cómoda para ambos, sus ojos y expresión lo decían todo, su vecina le estaba dando el espectáculo visual de su vida, una mujer adulta que podría ser su madre, totalmente desnuda y con atributos perfectos que solo muy pocos han disfrutado
«Ahora es hora de la acción», dije con un tono coqueto y excitada, el penecito de Carlitos ya estaba duro nuevamente y listo para mi vagina, la cual ya estaba empapada y lubricada para Carlitos, el cual solo se mostraba feliz y con placer ante su puta privada que antes veía como la dulce vecina de al lado
Mi mano se acercó al pequeño miembro de Carlitos y lo dirigí hacia mi entrada para darle sentones encima de él. Justo en el momento en que su puntita rozó mis labios húmedos, yo le pregunté.
–YO (Amorosa)
sientes eso…?
–Carlitos (Calmado y emocionado)
S… sí… da cosquillas, jeje
Mi cuerpo se dejó caer un poco más y al fin todo su pene estaba dentro de mí, apretado y caliente.
Ligeros gemidos salieron de mi boca, Carlitos con un aire de placer y cosquillas manoseaba mis piernas y poco a poco inicié a dar pequeños brincos sobre él, mis pechos grandes empezaron a saltar igualmente con mis movimientos y Carlitos sonreía de manera depravada mirándome los pechos como si fueran pelotas para él
Como me hubiera gustado ver su penecito entrar y salir de mi vagina, pero ver su carita angelical llena de morbo era más que suficiente
Yo estaba más caliente y excitada por la escena tan morbosa que teníamos, los movimientos eran más bruscos conforme seguía sobre él, pero yo me acerqué a él y, sin sacar su penecito de mí, le acerqué mis pechos en su cara para que los lamiera y chupara a su gusto
–YO
¿Te gustan, Carlitos? Restregándoselos en la cara*
Carlitos apenas tuvo mis tetas sobre su carita, no dudo en jugar con ellos con sus manos y lengua
Mientras Carlitos gozaba de mis tetas de vaca, yo seguía con mis movimientos de cadera de arriba y abajo, donde mis jugos empezaron a dejarse caer sobre el pene de Carlitos
La cama empezó a rechinar y Carlitos estaban en el cielo absoluto, que a muchos nenes de su edad les gustaría vivir
Por 6 largos minutos estuvimos en esa posición y Carlitos logro apretar tan fuerte mis tetas que logro sacar leche materna que hace años pensé que ya no tenía, pero Carlitos no desperdicio ninguna gota y yo estaba cerca del clímax, a lo cual me aleje de Carlitos y me apresure mucho más golpeando la pelvis de Carlitos con mi cuerpo, pero eso solo provoco que Carlitos empezara a hacer caras extrañas y de no soportar
–YO
Ahhhh….. Car…litos! Mmmmmm
—Carlitos (Gritando de placer)
¡Creo que me voy a hacer pipi, vecina!
Di un último golpe a su pelvis y pude sentir que ambos nos corrimos al mismo tiempo, ya que su pene empezó a palpitar dentro de mí, Carlitos no paraba de retorcerse en la cama apretando las sabanas de la cama con furia mientras sus ojitos estaban cerrados, mientras que yo miraba hacia el techo con éxtasis y apretujándome las tetas ante la hermosa escena de amor puro con mi pequeño amante
Saqué el pene flácido de Carlitos y me tumbé al lado de él en la cama, y él me abrazó jugando con mis tetas pero ya exhausto
–Carlitos (Cansado)
…me gustó mucho su juego vecina
–YO
Me..alegro que te haya gustado, pero mañana volveremos a hacerlo, solo que no le digas a tu mami que hicimos esto, solo dile que jugamos en la sala con… tus juguetes.
Solté una risita leve y juguetona, pero Carlitos entendió a lo que me refería
–Carlitos (Alegre)
¡Sí! ¡Sí! Será nuestro juego especial
–YO
¡SÍ! Ándale, nuestro juego especial
Después de recobrar nuestras fuerzas, ambos nos levantamos de la cama y rápidamente nos bañamos juntos para no levantar sospechas con Sofía
Carlitos y yo recogimos sus cosas de la sala y simplemente nos sentamos viendo la tele esperando la llegada de su madre, la cual no tardó mucho, por lo que antes de abrir la puerta me arrodillé a Carlitos y le di un pequeño beso y le dije
–YO (susurrando)
ya sabes, secreto.
Abrí la puerta y Sofía nos saludó y Carlitos la abrazó con mucho amor
–Sofía
¡Hola, Juana! ¿Cómo les fue?
–Carlitos (Feliz)
¡Muy bien, mami! Me diverti mucho, ¿puedo venir mañana? ¡Ándale!
Carlitos puso carita de gatito triste y Sofía no podía desilusionarlo, por lo que acepto que Carlitos viniera mañana, esto para mí era un golpe de suerte, pero por hoy ese día había acabado, Sofía agarro a Carlitos de la mano y se despidió de mí, al momento que ambos se retiraban, Carlitos me volteo a ver y yo estaba en el marco de la puerta y rápidamente y para gozo de él, me descubrí levemente la blusa que traía y le enseñe parte de mi pecho y pezón izquierdo, el cual solo sonrió de manera juguetona
El día siguiente, pues. Que les digo, fue una locura total de sexo prohibido, gemidos y gritos en la cocina, revolcón en la sala y el piso, las sabanas de mi cuarto, manchadas de semen de niño y jugos de su servidora. Puro sexo todo el día, para mi mala suerte, mis hijos y marido volvieron y todo se podría decir que volvió a la normalidad, obviamente nadie supo que me metí con un pequeño como Carlitos, pero cada que podía hacíamos de las nuestras, pero sin duda el sexo con mi marido ya no era tan satisfactorio, prefería pensar que era un niño el que me cogía, pero ya habrá tiempo para eso.
Aca unas buenas fotos de mi sexy cuerpo que sin duda fueron tocadas por mas de 1 nene
FIN.
Ojalá les haya gustado este relato mis pequeños amores, espero puedan calificarlo con 5 estrellas y dejar sus lindos comentarios, que sin duda les respondo con mucho gusto y con todo el amor de mi corazón, recuerden chicos, sean amables y respetuosos, porque ya paso la situación de que por culpa de 1 personita ya no veo mi correo y tuve que cerrar mi grupo de Telegram porque hubo una situación que me incomodo bastante y no quiero volver a pasar lo mismo, así que ya no habrá nada relacionado con nada de eso
Y Chicos bonitos, les gustaría que a partir del 15 haya un maratón de relatos cortos con el tema de Navidad, si es así, déjenlo en los comentarios y díganme que temas quieren que relate, desde fantasías que les gustaría vivir o donde me pongan en una situación bastante «Divertida», este maratón sería desde el 15 hasta el 12 de enero, será 1 relato cada 2 o 3 días, así que estén atentos a mi perfil y pues nada, nos estaremos leyendo
BESITOS DE SU BELLA AMIGA SANDRA
Me encantan tus relatos me parecen geniales, me parece una gran idea lo de los relatos navideños.
Muy lindo relato, pero realmente me habría gustado que los hijos de Juana regresaran de su viaje y tuvieran acción con Sofía. ¿En el maratón podrías poner un par de relatos de intercambio madre-hijo por favor?
Particularmente, estos relatos podrían ser ambientado en un contexto de »ceremonias de mayoría de edad» en un pueblito donde los jovencitos por tradición se estrenan con mujeres maduras. En un relato con una premisa así, las madres del pueblo podrían estrenar a los hijos de las otras.