la noche mi complice
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por vichius.
Espere un poco mas, a las tres me baje y cruce la calle subí por un árbol hasta la ventana de tu habitación, mire y allí estabas tu, era verano, dormida sobre la cama sin tapar, una camiseta amarilla y unas braguitas blancas con dibujos azules, estabas boca abajo, tu culito precioso destacaba con la luz que entraba desde la calle, estabas…… preciosa, el pelo cayéndote por la cara tu brazo saliendo de la cama y tocando el suelo….
Dios que vista, te mire unos minutos y luego forcé la ventana, entre y te estuve observando, cogi un pañuelo de la mesita y con cuidado te vende los ojos, después tape tu boca con mi mano y te hable despacito al oído, nena, si gritas te mato, si te resistes te mato, si no haces lo que quiero te mato, te moviste asustada pero te sujete y te repetí “si no te estas quieta te mato” te quedaste quieta mientras yo te hablaba al oido “ esta noche vas a disfrutar y si no lo haces te aguantaras, si gritas o aces ruido te matare a ti y a quien venga a ayudarte, si haces todo lo que diga no pasara nada, cuando termine me ire y ya esta, me as entendido
Si
Haras lo que yo te diga
Si
Date la vuelta te dije y te tumbaste boca arriba, con mi navaja corte tu camiseta de arriba abajo como si pareciera un chaleco, empecé a tocar tus pechos preciosos mientras tu te mantenías rígida, pellizque tus pezones despacito primero uno y luego el otro notando como se ponían duros, subí mi mano derecha a tu cuello acariciándolo y la izquierda la baje por tu vientre, metí un dedo en tu boca y te dije “chupa” y empezaste a chupar, al principio despacio, mal, nerviosa pero poco a poco lo empezaste a hacer bien, mi mano izquierda se metió por debajo de tus bragas acariciando tus pelitos con suavidad, tocando en tu clítoris y tus labios vaginales por fuera, tu boca empezó a chupar de verdad, con gusto, metí otro dedo y lo cogiste con gusto, un pequeño suspiro salio de tus labios, mientas me agache y metí uno de tus pezones en mi boca, de momento tus piernas se abrieron dejando que mis dedos notasen la humedad que salía de ti, seguimos durante unos minutos donde los gemidos ya eran claros y que te estaba gustando también, entonces te dije, “siéntate en el borde de la cama” lo hiciste, yo puesto de pie delante de ti te dije, “usa tus manos, ya sabes lo que tienes que hacer” tocaste mis piernas y fuiste buscando mi polla, la cogiste y la meneaste, puse mi mano en tu cabeza indicando que te arrimaras y te metiste la polla en la boca, despacio, como saboreándola, pasando los labios, la lengua y luego abriendo la boca un poco
Fue entrando y empezaste a chupar, un momento después estabas pajeándome la tiempo k la mamabas bien rico, durante unos minutos aguante así, después te separe y te puse de pie, te lleve a tu escritorio donde te senté me arrodille entre tus piernas y empecé a chuparte el coñito tu te echaste para atrás y disfrutaste, con mi lengua y mis dedos te masturbe haciéndote llega casi al orgasmo, entonces me levante y metí la punta, estabas tan mojada que fue entrando sola asta el fondo, así al borde del escritorio follamos otro rato gimiendo y sudando, te la volví a sacar, te baje y te di la vuelta, apoyaste tu pecho en el escritorio y yo abrí tus carrillos del culo, apunte mi polla en el y empuje, te quejaste pidiendo que note la metería por atrás que te dolía pero yo seguí, entro hasta el fondo, tu querías huir hacia delante pero el escritorio te lo impedía, te quejabas y me pedías que la sacara y te la saque, te tumbe en la cama y me puse sobre ti, la metí de nuevo entrando suave de nuevo, mientras hacia esto besaba tus labios y chupaba tu lengua, poco a poco volviste a calentarte, volviste a gemir, sin sacarla te di la vuelta poniéndome yo debajo y desde ese momento tu llevaste el ritmo, te movías arriba y debajo de adelante atrás haciendo que mi polla corriera por tu coñito lubricado dándonos gusto a los dos, entre gemidos y un fuerte ritmo llegamos a un tremendo orgasmo que hizo que te echaras sobre mi pecho
Después de unos minutos te incorporaste y me dijiste “quiero verte” “no, hoy no me veras, si te a gustado volveré mañana, si veo ese pañuelo puesto en tu ventana volverá a subir, si no esta no me veras mas, ahora me voy, espera 5 minutos y luego te lo quitas y haces lo que desees, me denuncias o esperas mi visita mañana, como tu quieras” me vestí me despedí Salí por la ventana cruce la calle me monte al coche y me fui, ahora mi duda es si el pañuelo estará mañana en tu ventana, a eso respóndeme tu con el pañuelo
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!