La nueva vida de Carol, Cap I
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Volvamos a la continuación de “Carol, la negrita III”:
Luego de que Jose pudo comprobar que la negrita que tenia de rodillas besándoles los pies, era capaz de obedecer cualquier mandato suyo, se decidió a hacer lo imposible para poder tener para sí a aquella obra de arte negra… Pensó varias formas en como poder tenerla en su casa, pero no concebía la idea de cómo hacer que su madre, doña Martha, una mujer de 45 años, viuda y con 2 hijos, uno de 19 (Jose) y otra de 15 (Ileana), pudiera aceptar como buena y valida la presencia de perra domesticada como Carol en su casa. Carol, frente a Martha, según lo pensaba Jose, seria de desagrado y bajo ninguna circunstancia iba a poder tolerar a una niña, sin papeles (Ciudadanía o algo del Estado que la reconociera), sin educación escolar, sin ser hija de nadie, y sobre todo: Negra, bajo su tutela.
No obstante, Jose fue a su vehículo, abrió el baúl (cajuela para algunos) y le dijo a Carol; “Negrita, entra ahí” mientras señalaba el baúl de su carro… Carol, no tuvo reparos en entrar, acción que afirmaba mas el poder de Jose para con Carol, una vez Carol entro, Jose acomodo con sus manos la cabeza de Carol y le hiso señas con su mano, refiriéndose a que se esté tranquila, luego cerro el baúl y se propuso a marcharse.
Predio su vehículo, y mientras conducía trataba de idear un plan para introducir en su casa a Carol, pensó en mantenerla escondida, pero luego recordó que su hermana podría darse cuenta, así como también su madre, pensó en llevarla a la casa de un amigo, donde sabría que podría quedarse y trabajar para la familia de aquel amigo, pero luego sentía que esa persona podría adueñarse de su presea, así que decidió mantenerla oculta en la en el patio de su casa, específicamente en el casita del perro, donde no habitaba ningún perro desde hacía años, lo pensó detenidamente y resoluto para sí, que así seria hasta que pudiera idear como hacer que Carol pudiera estar en su casa.
Jose, al llegar a su casa, una casa de dos niveles, con un garaje de aquellos que tienen portón eléctrico, con un gran patio… procedió a darle al botón del portón, una vez abierto, entro y de inmediato observo si su madre estaba o no en la casa, a lo cual pudo constatar que ella no estaba y que podía llevar a cabo su plan… abrió el carro, le dio la mano a Carol, y una vez la ayudo a salir del baúl, la llevo al patio de su casa, sin entrar a su casa, es decir, por la entrada lateral… Se dirigió con Carol hacia la habitación del patio, en donde guardaban todo lo que no servía, o lo que no querían adentro de la casa, entro y haciéndole señas con su dedo índice, indico a Carol que podía hacer ruido, le señalo una cama, un baño y la dejo un momento allí… fue a su cocina, busco en el horno el almuerzo que le habían dejado a él, y se lo llevo a Carol… Se trataba de arroz blanco, con gandules, ensalada verde y bollos de berenjena con queso… Cuando Jose extendió el plato de comida a Carol, a pesar de que Carol ya había comido pizza, no dudo en tomar el plato y comer de él, comió como nunca antes lo había hecho, cada vez que probaba algo, era como si una fiesta de sabores estallara en el paladar de Carol, ella, no podía creer lo bueno y suculento de aquella comida, y en ese momento, a pesar de ser una niña, se sintió agradecida de aquel joven hombre, del cual incluso desconocía el nombre, a pesar de que conocía bien el sabor de su semen… Jose, al verla comer dijo “no quieres algo de tomar” a lo que Carol contesto moviendo su cabeza de arriba abajo… Jose, volviendo a salir del cuarto fue a la cocina, busco un vaso, lo lleno de hielo, saco un refresco sabor uva y lo hecho en el vaso… Llevo el vaso hacia donde Carol, y esta, con mucho gusto tomo de él… Mientras Carol tomaba refresco, Jose sintió que alguien caminaba en la sala de su casa, y mirando a Carol de manera fija, le indico que no podía hacer ruido, le señalo el sub-suelo de la cama, e indico a Carol, entrar allí.
Cuando Jose, dejando a Carol en el cuarto de los regueros (como popularmente se les dice a esos cuartos en RD), lo cerró con seguro y saco del llavero la llave de aquella habitación… La guardo en su cartera, entro a la cocina, dejo la lleve donde usualmente va, y fue a la sala a recibir a quien estaba en la sala… A entrar en la sala, pudo observa a su Madre acompañada de 4 señoras de iglesia y un señor de la misma…
-“Hola mama”, dijo Jose.
-“Mi niño, hola, ven a saludar a Doña Lourdes, Doña Margot, Doña Estela, Eduarda y a Don Ernesto”, dijo Martha.
Acción que obedeció al pie de la letra Jose (algo que generalmente no hacia). Luego de saludar a todas las personas, y disponiéndose a retirarse, la señora Estela dijo:
-Corazón, por que no te quedas con nosotros, (y mirando a Martha) quédate, vamos a hablar de la palabra de Dios.
Usualmente Jose a este tipo de invitaciones hubiera dicho que no, pero esta vez tuvo una corazonada y decido quedarse, pensando para sí que sería una buena oportunidad de ver cómo podría introducir a Carol en la casa.
Luego de la larga y aburrida conversación sobre la biblia y todo lo demás, paso algo muy interesante, y era que todos, se abrían propuesto a hacer un sacrificio, una obra de caridad para poder agradar al señor… Esto puso a Jose pensativo, y aunque en el momento no sabía cómo, si sabía que esa proposición de grupo podría ser de gran ayuda para él.
-“Cuando nos volvemos a encontrar”, dijo Doña Lourdes.
-“Podemos hacerlo el miércoles, día que estoy de cumpleaños” dijo Martha.
“Oh muy bien, excelente” repitieron todos…
-“Bueno, ya saben, el miércoles aquí” dijo Martha “Espero me traigan me regalo”
A lo que Don Ernesto, contesto:
-No te preocupes Martica, tu sorpresa va.
A lo que Jose acentuó diciendo:
-Si mami, tu sorpresa va!
Martha nunca imagino el tipo de sorpresa que le tenía Jose, así que alegremente dijo “bueno, entonces nos vemos, chao” y procedió a despedirse de todos.
Luego de que todos se fueron, Martha, como de costumbre, se retiro a su habitación en el segundo nivel. Acción que Jose aprovecho para ver como se encontraba su nueva mascota, fue a la habitación, abrió la puerta de madera (pero no la hierro) y miro adentro, al no ver a nadie, dijo “Psss!! Hey, soy yo negra, tu señor”, a lo que Martha, quien se encontraba muy bien escondida debajo de la cama, asomo su cabeza…. Jose, señalo el plato y el vaso, y le hiso señas para que se lo pasase, luego de que Carol busco lo que el ordeno, se lo dio a Jose, este, puso el plato y el vaso en suelo del lado de afuera de la habitación, y mirando a Carol con algo de perversión, saco su pene de su cremallera, y lo entro entre las rejas de la puerta de hierro de la habitación, Carol miro el pene flácido, pero no hiso mucho caso del mismo, Jose al ver la actitud de la negrita, introdujo su mano por los hierros, y tomando a Carol por el cuello dijo: “Que esperas!!, arrodíllate y haz lo que tienes que hacer, coño”, y soltándola, ella se arrodillo de inmediato, mientras con prisa, y con ánimos de emendar su error, coloco el pene de su Amo adentro, muy adentro, de su boca..
Estando así, Jose aprovecho para colocar sus dos manos en la nuca de la negra, y aprisionarla contra los hierros de la puerta… Esta acción hizo que Carol, por instinto, pusiera sus dos manos en los hierros, de forma que podía hacer algo de fuerza hacia atrás (de manera que podía alejar su cabeza del pene de Jose), acción que Jose, al sentir la fuerza contraria de la negrita, se excito, e hizo más presión, su pene empezó a incorporarse de manera rápida, mientras Carol tocia, y trataba de sacar el pene de su boca, con algo de ánimos de vomitar
Jose cada vez hacia más fuerza, y la vez su pene se llenaba de mayor y mayor energía… Y ya estando en su máxima expresión, vio que la negrita desesperadamente trataba de sacar el pene de su boca, en ese momento, Jose comenzó a mover la cabeza de Carol de adelante hacia atrás, y mientras le hacia FaceFuck (le cogía la cara) se regocijaba de emoción y morbo… No duro más de 7 u 8 minutos en descargar todo su semen en lo más profundo de la garganta de Carol, y cuando la soltó, esta cayo buscando aire, con la respiración muy agitada, y toda bañada en sudor.
Jose, luego de aquel acto, introdujo se pene en el pantalón, fue a la cocina a beber agua, y tomando un galón de agua que se encontraba en la cocina, se lo llevo a Carol, se lo entrego, y dijo: “Bien hecho negra, coge esa agua, quédate en la habitación, si vez que alguien trata de entrar no haga ruido ni te preocupes, no lo podrán hacer porque yo tengo las llaves de esta habitación, ¿entendiste?”
-“Si”, dijo Carol.
Jose, mirando a Carol con una mirada dominante, dijo:
-Si QUE??!!
-“Si señor” dijo Carol.
Luego de escuchar esto, Jose confiado, cerró la puerta con llaves y se retiro a su habitación…
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