Las amiguitas de mi hija IV
Natu me calentaba a mil.
Las amiguitas de mi hija IV
Natu se trago todo mi semen, al terminar de limpiar su boca escuchamos el timbre, salgo a atender y eran los papas de ella que venían a buscarla, charlamos de lo que había hecho que notaba cierta dificultad en entender los problemas le dije pero que unas clases más ella estaría ya bien.
La semana recién comenzaba y ya habíamos tenido una buena relación con la niña, yo sabía que esto no iba a durar mucho así que tenía que sacar el máximo provecho de ello. Llego el miércoles y sabía que volvería la nena para que yo le enseñe, llego como siempre a horario, salude a su papá y le indique donde tenía que ir, ella ya sabía el lugar donde estudiaba, le dije a mi hija que no nos molestara y le di mi celular para que se entretenga en esa hora que pasaría con Natu yo quería realizar algo distinto con ella, quería poseerla por su culito que cada día estaba más grande.
Comenzamos la clase como la primera vez explicándole los ejercicios a realizar y ella lo hacía muy bien, estuvimos como media hora con eso cuando se para y avanza hacia mi, me separa un poco de la mesa para sentarse ella mirándome, ella acerca su boca a la mía dándome un pico, yo la agarre y empecé a buscar su lengua para jugar con ella, lo entendió rápido y sola comenzó a jugar con mi lengua estuvimos un buen rato así notando que ella estaba muy excitada me dio al oído hoy no hacemos nada puede ser por favor porque me quedó doliendo mucho el otro día bueno le conteste pero tenemos otros lugares donde vos podés hacerme disfrutar también, ella con cara de ingenua me dice donde así como la tenía empece a meter mano en su colita jugaba con sus nalgas y con un dedo le empezaba a pasar por su culito, ella daba saltos de lo excitada que estaba y yo super cargado de leche, comencé a meter de a poco el dedo en su culito notando en ella cierta molestias pero se la aguantaba seguí y seguí hasta que pude meter casi todo el dedo notando en ella mucha excitación seguí con el meta y saca en su culito cuando veo que es la hora que la vienen a buscar, saqué el dedo de su cola, la baje de mí y le acomodé toda la ropa, cuando estábamos terminando de arreglar las cosas suena el timbre, sale mi hija a abrir y entra su mamá a buscarla donde yo le indico las tareas realizadas y lo bueno que se porta.
Así siguieron las semanas venideras había días que teníamos relaciones y otras donde yo preparaba ese culito para poseerlo, cuando yo notaba que ya no daba para más las clases les dije a los papá de Natu que el viernes era la última clase ya que la nena había aprendido bien las cosas. Llego el viernes y como siempre Natu llegó vestida con una pollera hasta las rodillas y una remera ajustada, apenas entro me saludo mientras me despedía de su mamá, al entrar a la habitación donde le daba clase no la encontré, salí a buscarla y estaba saliendo del baño, pasó por la habitación de mi hija a saludarla y no dirigimos a la habitación de la clase. Empezamos la clase como siempre y no había pasado diez minutos que ya la tenía a Natu en mis faldas notando que no traía bombachita se las había quitado en el baño, yo tenía puesto un pantalón corto sin ropa interior y una remera amplia, cuando ella se acomodo bien sobre mi falda me baje el pantalón dejando afuera mi pene, ella al sentir mi pene ya erecto se acomodo para dejarlo entre sus labios vaginales, cuando se termino de sentar entro hasta casi la mitad de mi pene en su vagina, ella estaba totalmente lubricada, empezó con un mete y saca como loca, mientras yo jugaba con los dedos en su colita, cuando noté que estaba dilatada su cola, le saqué el pene de su vagina y lo coloqué en la entrada de su ano, como estaba ya lubricado empujé un poco y sentí como le hizo presión ella se hizo el intento de levantarse pero yo la sostuve de sus caderas y empujé un poco para abajo logrando entrar la cabeza de mi pene en su ano, emitió un pequeño grito y le saltaron lágrimas de sus ojitos, me miro pidiéndome que le saqué el pene, yo le dije que espere un segundo que su ano se amoldara a mi pene, estuvimos unos minutos sin movernos cuando yo la agarré fuerte de su cintura y la empujé para abajo otro poco logrando entrar hasta la mitad del pene, Natu trato de zafarse logrando que mi pene entrara casi en su totalidad, ella me pedía entres sollozo que la deje que por favor se la saque porque le dolía mucho, la besé y le tocaba su clítoris para que se relaje, note en ella que empezaba a gozar, cada vez que le tocaba su vagina comenzó a gemir despacio, cuando asimilo mi pene en su cola empecé a moverla, ella sola se levantaba y sentaba con todo logrando que mis bolas peguen en su vagina, estuvimos así como diez minutos hasta que descargue toda mi leche en sus entrañas, fue sensacional, extraordinario sentir como ese ano me apretaba mi pene. Estuvimos pegados hasta que se puso flácido mi pene saliendo de su interior dejando escapar mi leche que comenzó a correr por sus piernas. Como pudo se repuso se bajo de mi falda y se fue al baño a lavarse, cuando caminaba al baño note cierta dificultad al caminar, pensé la cague porque se darán cuentas sus padres, me repuse y fui a buscar una crema que siempre usábamos con mi esposa cada vez que teníamos relaciones anales, cuando volvió del baño le bajé la bombachita y le unté la crema por su anito, logrando que relajar su colita y dejándola sin dolor.
Ella quedo feliz porque yo le había enseñado de todo, y me dijo al oído, quiero ser tu novia entregarme las veces que vos quieras me dijo, aproveche a acomodar su ropas y sus cosas cuando suena el timbre, salgo atender y eran sus padres que ya venían a buscarla, me pagaron por los días que le enseñe y se fueron.
Transcurrió un tiempo prolongado y no había tenido sexo ni contacto con las amiguitas de mi hija, se terminaba el período escolar y yo sabía que no tendría ninguna otra oportunidad de que pase algo, pero el destino tenía preparada una jugada magistral. Unos día antes de la velada de fín de año que hace la escuela todos los años, Natu tuvo un serio esguince de tobillo por lo cual no podía concurrir a los ensayos de la velada, ella estaba enyesada y con muletas por lo cual le dificultaba todo para hacer, la mamá de Natu y mi esposa decidieron que yo la pase a buscar por su casa y la llevara a la mía para luego trasladarla hasta la escuela junto a mi hija para los ensayos, así que yo almorzaba junto a mi esposa y luego la llevaba a la escuela y pasaba a retirar a Natu a su casa. El primer día transcurrió normal, pero el segundo día tuve una grata sorpresa ya que al pasar a retirar a Natu a su casa ella llevaba puesto una falda hasta las rodillas tipo acampanada, como yo había ido sin mi hijos porque se habían quedado en casa junto a la persona que nos hace la limpieza una vez a la semana, Natu me dice te gusta mi falda levantando dejando ver que no tenía bombachita, eso me puso a mil, me dijo vamos a un lugar apartado y me enseñas a manejar yo sabía cual era su intención pero le dije estás con un yeso y eso dificulta todo. Nos fuimos a las afueras del pueblo y tire para atrás el asiento logrando que ella se sentara en mi falda, cuando ella estaba pasándose a mi lugar me bajo el pantalón dejando al descubierto mi pene haciendo que apenas Natu se sento en mi falda mi pene quedo entre sus labios vaginales, se movió un poco jugando con mi pene entre sus labios cuando se levantó y se sentó sobre el, entro todo de un solo golpe logrando sacarle un suspiro enorme a la niña, ella se quedo quieta porque le dolía el pie así que yo comencé a moverme logrando que ella golpeara su cabeza contra el techo del auto, cuando estábamos en lo mejor de todo, suena mi celular era mi esposa para preguntarme donde había ido porque ya se iba la señora de la limpieza y no había llegado, le dije que se había pinchado una rueda y estaba cambiándola en el auxilio, ella quedo convencida de la mentira que le di, logrando seguir metiéndole el pene a mi nena hasta acabar en ella, ella había quedado exhausta y yo también, la saqué de arriba mío y la pase al otro asiento, le pedí que no se limpiara que se quedara así le dije que quería ver como le salía mi leche de su conchita, busque un trapo que siempre llevo en el auto y se lo puse bajo ella para que ensuciara el auto, nos fuimos rumbo a mi casa cuando estábamos por llegar le digo que usara el trapo como tapón pero que no se limpiara, ella me dijo que si, se bajo y me pidió permiso para ir al baño, cuando salió del mismo se metió en la habitación de mi hija para jugar hasta tanto yo las llevara a la escuela a ensayar, cuando nos íbamos a la escuela en el auto ella iba adelante por el tema del yeso, subiendo su falda mostrándome los restos de leche que le había quedado pegado en su vagina pasando su dedo chupándoselo después saboreando todo sin que mi hija se percatara de algo.
Pasada la velada no quedaba ninguna otra oportunidad de hacer algo, así que me había resignado a no tener nada….
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