Las clases privadas se volvieron clases de sexo

Mi nuevo pequeño alumno vergon me da una de las mejores cogidas en la escuela.
Hola a todos, después de mucho tiempo contare otra de mis aventuras, espero les guste y lean hasta al final.

Esto paso tiempo después de mi ultimo relato, al inicio de un nuevo año escolar mis alumnos llegaban felices de ver a sus compañeros, antes de comenzar la clase veía como todos hablaban excepto uno que estaba al final del salón.

Cuando comencé la clase le pedía a todos que se presentaran, aunque a casi todos los conocía quería que ese chico se presentara y saber mas de el.

Todos se levantaban para presentarse, hasta que llego el turno de mi alumno, se levanto y dijo que su nombre era Santiago, era nuevo en la escuela y en el país ya que el era de Colombia, en ese momento me hizo recordar al amigo de Julián (Camilo), recordé todo lo que pasamos hace algún tiempo.

Por dentro esos recuerdos comenzaron a calentarme, todo continuo y los alumnos seguían presentándose, pero yo seguía sentada observando a Santiago, mi nuevo alumno era moreno y un poco mas alto que yo, las situaciones en las que podía estar con el pasaban por mi cabeza, aunque aun no sabia si el aceptaría.

Al final de la clase y todos estaban saliendo al descanso, el se quedo sentado solo, me acerque a el y me dijo que aun no conocía a nadie y era un poco tímido, empezamos a platicar y creo que se sintió cómodo conmigo, me contaba lo que le gustaba y como es que llego a vivir aquí.

No era muy extraño que me vieran sola con uno o varios alumnos durante el descanso, ya que soy de las maestras a las que mas le tienen confianza, entonces cuando estaba por terminar el descanso y veíamos como los alumnos estaban por volver a clase, el me dijo que era muy bonita.

Escuchar eso casi me hace mojar al pensar que tendría mi oportunidad con Santiago, solo di una risita y por «distraída» deje caer sobre el uno de mis cubiertos que cayo en su pantalón, nos reímos y cuando lo estaba por tomar pude sentir su verga que se estaba poniendo dura por la situación.

Tenia una cara de sorpresa y vergüenza, no sabia de que tamaño la tendría pero si era algo grande y apenas se estaba poniendo dura, el solo sonrió y nos separamos antes de que nos vieran, comencé de nuevo la clase, siempre que nos veíamos sonreíamos esperando que nadie lo notara.

Al final de la clase le dije a Santiago que si podría hablar con sus padres, como era su primer día ambos estaban afuera esperándolo, entonces fue por ellos para que hable con ellos.

Les comente que su hijo podría necesitar algunas clases para ayudarlo con algunos temas para ponerlo al corriente con los demás alumnos, eso no era del todo cierto ya que era un nuevo año y los temas eran nuevos, aunque ellos no lo sabían estaban de acuerdo y yo misma me ofrecía a darle esas clases.

Tenia que averiguar hasta donde podía llegar con mi nuevo alumno que me tenia tan caliente, aunque como sus padres aun no conocían la ciudad no podría darle las clases a Santiago en mi casa y tendría que hacerlo en la escuela.

Aunque no creo tener problema porque tenemos aulas para dar clases particulares, entonces pedí una de esas aulas al terminar mi clase normal y los padres de Santiago pasarían una hora mas tarde por el, pero seria suficiente para todo lo que tenia en mente.

Las clases eran de lo mas normal, sonriendo cuando cruzaba miradas con Santiago y pasando tiempo con el durante los descansos, hasta que terminaba la clase y nos íbamos a otra aula para nuestras clases privadas, la primera semana hacia movimientos sutiles, cruzarme de piernas ocasionalmente frente a el cuando usaba faldas cortas, mostrando mis muslos esperando que tuviera la curiosidad de ver mas.

Incluso usaba vestidos o blusas muy escotadas y me agachaba para que pudiera ver mejor mis tetas, así pasamos los primeros días en las clases privadas, con insinuaciones, comentarios provocativos además de la ropa reveladora que usaba.

La siguiente semana comencé a insinuarme mas y de formas mas obvias, tenia muchas ganas de poder coger con mi alumno así que los siguientes días solo hablábamos, diciéndole que entendía con facilidad los temas y podíamos tomar un descanso.

Hablamos de todo un poco, hasta que llegamos al tema y le pregunte sobre lo que tenia mas curiosidad

– Entonces Santiago… nunca has tenido sexo?

– No, apenas si he besado a una chica

Solo pensar que podría serla primera vez de mi alumno, me comencé a calentar y ponerme mas intensa con mis palabras, me acerque un poco mas, con voz mas lenta y sensual le pregunte

– Enserio? Y que piensas de las mujeres mas grandes que tu, tal vez de mi edad

El nada nervioso solo se acomodaba en el asiento y me decía

– La verdad es que me vuelven loco las mujeres mayores que yo, en especial usted es tan hermosa maestra – decía mientras me veía de arriba hacia abajo manteniendo su mirada en mi escote

– Mmm ya veo – dije mientras me acercaba mas para decirle algo al oído – Y si te diera la oportunidad de cogerme, lo harías?

Me aparte para ver su reacción, estaba incrédulo de lo que acababa de decirle, sorprendido solo movía su cabeza en señal de aprobación

– Pero esto tiene que ser un secreto, no le puedes decir a nadie

– Le prometo que no lo hare – me dijo rápidamente mientras yo notaba una clara erección entre sus piernas

Comencé por darle un besito, después le di mas hasta que mas que solo pequeños besitos le di uno tan profundo que casi dejaba de respirar.

Me calenté a tal manera mientras nos besábamos que tomaba sus manos y los llevaba a mis tetas para que las tocara y apretara como me gusta, yo tocaba su bulto por encima del pantalón y sentía su verga con ganas de salir, estaba a punto de desvestirme para que me hiciera suya hasta que sonó el teléfono de Santiago, era su padre que estaba afuera esperándolo.

Algo agitado le respondió que ya estaba por salir, ambos nos separamos rápidamente, nos acomodamos la ropa y antes de salir lo tome de la mano llevándolo hacia mi para darle otro beso mas intenso diciéndole que terminaremos con esto al siguiente día y salimos sin que alguien nos viera.

No podía creer que estuvimos tan cerca, me dejo tan caliente que me estaba tocando en mi auto camino a casa. Llegando a casa tuve que darme una buena metida de dedos imaginando lo que haría el día siguiente.

Al día siguiente no podía concentrarme en mi clase, estaba tan emocionada viendo a Santiago mientras me sonreía y yo le guiñaba, durante el descanso nos quedamos en el salón diciendo todo lo que haríamos cuando estuviéramos solos, el quería besarme, pero estaban los alumnos afuera y podrían vernos

Entonces solo deje que tocara un poco mis tetas, y fue cuando metió su mano debajo de mi falda entre mis piernas y toco mi tanga ya mojada, no podía creer lo húmeda que estaba con solo sus dedos tocando mi vagina.

Sonó el timbre del termino para el descanso, me asuste y lo aparte antes de que alguien nos viera, en cuanto termino la clase, salimos casi corriendo a la otra aula, no podía esperar mas para ver y probar por primera vez a mi alumno.

Tan solo llegar, lo lleve contra la puerta besándolo mientras cerraba la puerta para evitar que alguien nos sorprendiera, ya todo listo me aparte y pude notar la erección tan grande que tenia en sus pantalones, era el momento de ver lo que podía hacer con esa verga.

Lo lleve hasta el escritorio y lo senté sobre la silla, mientas me me arrodille frente a el para quitarle el pantalón, aun con el bóxer se podía notar que ya tenia su verga muy dura, no era la mas grande pero si demasiado gruesa, me tenia ansiosa de probarla, se la saque y me la lleve a la boca.

No pensé que la tuviera así de grande y gruesa, me encantaba tener ese gran manjar dentro de mi, apenas me cabía dentro de mi boca, lo recorría completamente con mi lengua, le escupí y lo volvía a meter a mi boca, lo metía y sacaba con tanta rapidez por lo caliente que estaba que termino en mi boca. La primera de muchas que le sacaría

El se disculpo, no quería que sucediera tan pronto, le dije que no había problema, apenas habían pasado 10 minutos y aun tendríamos tiempo para algo mas.

Deje que descansara un momento, mientras me comencé a desvestir sensualmente frente a el, uno por uno quitaba los botones de mi blusa, dejándole ver mis tetas aun con mi brasier el cual no tarde tanto en quitarme también, dándole la vista de mis tetas desnudas que tanto quería ver.

Aun con mis tacones y mi falda me volví a arrodillar para masturbarlo, aun con un poco de su lechita sobre su verga, deslizaba mis manos lentamente esperando ponerlo duro nuevamente, no paso mucho tiempo para que volviera su erección.

Estaba a punto de chupársela de nuevo hasta que el me comenzó a tocar las tetas con mucha intensidad, lo que hizo que me calentara aun mas, deje su verga y me pude de pie, solo recorrí mi falda dejándola sobre mi cintura, me senté sobre el sin meter aun su verga.

Recorría su verga con mis nalgas, me encantaba la forma en que me deslizaba hacia delante y atrás sintiendo cada centímetro esa sensación de sentirla entre mis nalgas solo me ponía mas caliente y no tarde en pedirle que me la metiera.

Mientras levantaba mi culo para que me la metiera le deje mis tetas justo en su coca y no tardo nada en chuparlas como un bebe, eso me hizo mojarme tanto que metí su verga de una sola vez, tan rápido y toda dentro que gemí tan fuerte sin importar que alguien me escuchara.

– Ahhh Santi me encanta tu verga – le dije mientras gemía y lo veía con mis tetas en su boca

– Mmm que tetas tan ricas tiene maestra – me decía sin separarse de mis tetas

Gemía como loca, la situación me tenia como toda una puta en celo, estaba en la escuela cogiendo con mi alumno, aunque nadie nos podía ver podrían escuchar los gemidos que daba cada que saltaba sobre la verga de Santi

– Sigue así, chúpame bien rico las tetas – lo acariciaba del cabello presionándolo mas con mis tetas

No podía hablar, pero recorrió con sus manos desde mi espalda hasta mi culo y lo acaricio para después darme unas nalgadas.

Con lo caliente que me pone que me den nalgadas, sentía que un orgasmo estaba por explotar dentro de mi, así que le dije

– Espera, quiero que me cojas en el escritorio – le dije mientras me separe y me recostaba en el escritorio

La sensación de que estuviera abriendo mis nalgas para metérmelo, mientras en sus intentos sentía como la punta de su verga abría lentamente mi vagina, me tenia gimiendo como loca.

– Ahh siiii, fuerte, mas fuerte – le decía mientras me tomaba de la cintura y me la metía con fuerza

Solo podía escuchar sus gemidos mezclados con el sonido de su verga entrando y saliendo de mi vagina completamente húmeda, con mi primer orgasmo a punto de salir

– Asiii Santi, me encanta tu verga, sigue, asiiii – hizo que me corriera tan fuerte

Se aparto un poco y me dio media vuelta, ahora estaba boca arriba recostada en el escritorio pero ahora con mi pernas sobre sus hombros

Me tenia a su disposición, abierta de piernas y no tardo en rozar su verga con mi vagina antes de metérmela de nuevo

– Hazlo mi amor, quiero seguir sintiendo tu verga dentro de mi

Me tomo de las tetas y las apretaba fuerte mientras me la metía, esta vez mas lento para sentir cada centímetro de su verga recorrer el interior de mi vagina.

– No sabia que era así de puta maestra

– Siii Santi, soy tu puta – me encanta que me hable así mientras me coge – sigue, sigue cogiendo a la puta de tu maestra

No podía creer lo aguantador que era Santi, pasamos tanto tiempo cogiendo que olvidamos que solo tendríamos una hora, la cual estaba a punto de terminar

– Sigue Santi, ya estoy por terminar de nuevo – seguía sacando y metiendo su verga como loco, me encantaba la forma en que me estaba cogiendo

Me corrí de nuevo, sentía como mis fluidos chorreaban por mi culo hasta terminar en el piso. Aunque Santi seguía cogiéndome sin parar

– Maestra no aguanto, estoy a punto de terminar también – sabia que no podía dejar que se corriera dentro esta vez

Le dije que se apartara y me arrodille rápido para chupársela y que se viniera en mi boca

– Hazlo amor, dame toda tu lechita que me la voy a tomar toda

Deseaba que terminara dentro de mi o sobre mis tetas, pero no estaba en casa y no podría darme un baño, tampoco podía salir si tenia el semen de mi alumno sobre mi

– Aggg siii – no podía creer cuanta lechita tenia guardada, casi me ahogaba, incluso tuve que escupir un poco al suelo, no podía con toda esa carga que me estaba dando

– Uffff – suspiro y cayo de nuevo a la silla del escritorio

Terminamos a tiempo, aun quedaban 5 minutos antes de terminar la hora de clase, nos dio tiempo a recuperar el aliento, nos paramos, nos vestimos y estuvimos limpiando el desastre que hicimos en el aula.

Antes de despedirnos me dio un beso profundo, no le importo que hace un momento tuviera su lechita en mi boca, eso me hizo confirmar que ahora Santi seria mi nuevo amante, dentro y fuera de la escuela

– Este será nuestro secreto, si no le cuantas a nadie lo repetiremos cada que podamos – le dije mientas abría la puerta y le daba otro beso de despedida

– Si maestra, lo entiendo, prometo que será nuestro secreto

El se fue con su padre que estaba esperándolo. Aun quedaban dos semanas de nuestras «clases privadas» entonces nos la pasamos cogiendo todos los días sin parar. Una de las ultimas veces que cogimos fue en mi casa, sin restricciones y sin prisas podríamos hacer de todo por el tiempo que quisiéramos. Pero eso lo dejare para otra ocasión, díganme si quieren que escriba sobre eso o de algunas otras experiencias.

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