LILIANITA, HOCKEY Y SEXO segunda parte

Las dos estaban con sus manos apoyadas en el escritorio.
LILIANITA, HOCKEY Y SEXO

segunda parte

Salí de la escuela y en vez de irme a cambiar a mi casa, fui directamente al club (Había llevado mi uniforme de hockey en la mochila)

Llegue demasiado temprano, todavía era el turno de las sub 14, ya habían terminado de entrenar, unas chicas se estaban bañando, otras dos, estaban en la oficina del coach.

Fui a mirar por la ventana del pasillo, escuché la voz del entrenador que les decía enérgicamente, que debían poner mas ímpetu en las jugadas, que se debían esforzar más.

Las dos estaban con sus manos apoyadas en el escritorio, agachadas, con la cola parada y con la pollera del club, pero sin bombachas.

El coach tenia solamente la pija fuera del pantalón, se ponía detrás de una y le metía la verga en la concha, mientras seguía arengando sobre la falta de voluntad. Luego se la metía a la de al lado, se movía un poco y volvía a cambiar. Ellas respondían con “Si coach” cada frase que escuchaban, no podía ver sus caras, porque estaban de espaldas a mí, pero por el timbre de sus voces, podía adivinar que estaban gozando.

Volví al vestuario, me crucé con mi hermana, que ni me miró.

Empezaron a llegar mis compañeras, fuimos a la cancha, faltaba la otra colombiana que se llamaba Jazmín, llego diez minutos tarde.

El coach dejó a la colorada a cargo de la practica y llamo a Jazmín al despacho, mientras se alejaban escuchamos que le decía que incumplir los horarios era una falta muy grave.

Pasó alrededor de media hora, volvió la colombianita, con los ojos irritados, sin lugar a dudas habia llorado un montón.

No quiso hablar con nosotras, ni tampoco practicó, se quedó sentada en la banca hasta la hora de ir al vestuario, fue la ultima en meterse a las duchas…vi que tenia manchas de sangre en su ropa interior…

Cuando nos retirábamos el coach llamo a Jazmín, le acaricio la cabeza, le dio un beso en la mejilla y ella solo sonrió.

En casa mi hermana estaba con su noviecito, besándose en el sofá, me saludo y me preguntó-:

“Y Lili, como te fue hoy?” le dije que todo bien y me fui a cambiar.

Entre casa ando siempre con un short ajustado y un top…Me gusta ver al novio de mi hermana como me mira el culo…

Mi hermana también se da cuenta, y cuando lo hace, le da un chirlo en los huevos, causándole dolor.

 

Al día siguiente quice llegar tarde, pero no me animé, fue un día normal en el club, la única que se queda mas tiempo en el despacho es la colorada, que está siendo por ahora la capitana del equipo…
Nuestras remeras son blancas y ese día la negrita me señalo el hombro de la colo, tenia dos pelos enrulados…o sea dos pendejos.

El viernes, del colegio pasé por mi casa, no tenía que hacerlo, como siempre llevaba todo en mi mochila, pero quería llegar tarde, no por masoquista, si no por curiosa.

Llegue 15 minutos tarde, el coach interrumpió el juego y me llevó al despacho, cuando me llamó por mi nombre la colombianita me tomó de la mano y me miró con compasión.

Me hiso sentar frente a su escritorio, me preguntó el motivo de mi retardo, le mentí que me había olvidado el uniforme en mi casa, me dijo que eso no tenía perdon.

Despues suavizó su voz y me pregunto si yo era virgen, le dije que tenia tan solo 8 años, me dijo que eso no era lo que me había preguntado, entonces le dije “si soy virgen, señor”

“Te doy una oportunidad para evitar una sanción, tu elijes si la aceptas o no”

Mientras le preguntaba de que se trataba esa oportunidad, saco su verga de la bragueta y me la mostró, yo me hice la horrorizada, aunque se que mi cara de emoción me traicionó.

Se paró frente a mí, la pija estaba a medio metro y a la altura de mi cara…

“Dime que harías con esto?” mientras movía con una mano la verga de arriba hacia abajo.

“depende de lo que respondas será tu castigo o perdón”

Se me ocurrió decirle que le haría una paja, porque la verdad, pensar en chupársela me daba un poco de asco…Pero se me ocurrió una idea mejor, más arriesgada y le dije:

“Señor, me pondría de espaldas y pondría “eso” entre mis piernas, pero sin penetración, dejando que me utilice para eyacular de esa manera” como vi que la idea no le entusiasmaba agregué, “y masajeando su glande con mis dedos ensalivados” Al parecer eso le gustó.

Me hiso apoyar las manos sobre el escritorio, levanto mi pollera y puso su verga entre mis piernas, yo mojé las palmas de mis manos escupiendo en ellas y acariciaba la cabeza de su enorme pija.

Pude dar vuelta mi cabeza y vi la negrita mirando por la ventana…me causo gracia, porque desde donde ella nos veía, no debería tener dudas que yo la tenia adentro y que me estaba cogiendo, no se si fue eso o para comprar la voluntad del coach, que empecé a gemir y tirar la cabeza hacia atrás como gozando.

El coach estaba muy caliente por eso, me dijo al oído “unos años mas y te la voy a meter como se la meto a tu hermanita”

Solo confirmó lo que yo ya sabía, el hijo de puta, se culeaba a todas.

Me agarró la mano y la acomodó de tal manera que le agarraba toda la parte delantera y enseguida me llenó la mano de leche, me dejó ir… Tomé un pañuelo de papel del escritorio y me quite la lefa.

Camino de regreso a nuestras casas, tuvimos una conversación, la colombiana, la negra y yo.

Fue la negrita la primera que habló.

“¡Que cogida que te pegó el profesor!” yo solo lance una carcajada, luego le pregunto a la colombiana si a ella también la habia cogido el día que llegó tarde…

“No, la pija de ese tipo no me entra en mi argolla” dijo con ganas de llorar, despues agrego:

“Me hiso chuparle la chota” y ahí si se largó a llorar…” Me obligo a tragarme esa cosa asquerosa”

La compadecí, me imaginé lo feo que hubiera sido si me pasaba a mí.

La negra me dijo “estoy caliente, yo me tomaría lo de esa verga gustosa”

Le aconsejé que llegara tarde el lunes, pero me dijo “¡no, a ver si me quiere coger como a vos!”

Llegué a mi casa y no podía dejar de oler mi mano, antes de meterla debajo de la canilla no pude resistir la tentación y le pasé varias veces la lengua…no me pareció tan feo el sabor, claro que no quedaba casi nada.

En la parte delantera de mi bombacha habia quedado un manchón de semen, me calentó tanto ver eso que me tuve que tocar, nunca me había hecho una paja, solo me fregaba mi clítoris con el calzón…no se si acabé o no, pero me encantó la sensación.

Mis padres permitían al noviecito de mi hermana que se quedara a dormir los fines de semana, claro que, en la pieza de huéspedes, pero yo ya había visto que a media noche el chico se cruzaba a su habitación y para ello tenía que pasar por mi puerta, así que esa noche lo esperé y cuando estaba cruzando me le puse en el camino, le agarré la verga (que ya la traía parada) y le dije, o me dejas chuparla un poquito o grito.

Se quedo como una estatua, yo le bajé el calzoncillo, me arrodillé y me la puse en la boca.

¡Estaba tan salada y tenia un sabor a queso de rallar que casi vomito”

Me paré y mientras escupía en el suelo, le hice señas que siguiera su camino.

A los dos minutos, entró enfurecida mi hermana a recriminarme lo que había hecho, incluso trató de pegarme, yo no hice ni dije nada, solo me tapé con las frazadas para defenderme.

“¡Hija de puta, calentona de mierda, putita barata, chupa pijas!” y no paraba de insultarme.

Hasta que se cansó y se fue.

A mí, el sabor horrible de esa pija, me había quitado la calentura por esa noche.

Al día siguiente, busque la forma de hablar con mi hermana, la idea era pedirle perdon, utilice la escusa del club de hockey.

Le dije que el profe me había mostrado su poronga y que yo jamás había visto una, que esa noche no podía dormir recordando y que me encontré con su novio en calzoncillos y pudo más mi calentura…

Quiso saber que mas había hecho el profe, le dije que nada más, solo me había mostrado su pija dura…
No le pareció extraño, cuando ella tenia mi edad, habia pasado por lo mismo

Me dijo que no vuelva a provocar a su novio y que, si alguna vez el profe me quería coger, que lo dejara únicamente por el agujero de atrás.

Se terminó la conversación.

 

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Alfredo Chapelco.