los vigilantes y la nenita

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Acostadoyflojo.
Mi nombre es Angel, soy oficial de seguridad (vigilante) 49 años de edad, soy de cuerpo normal, delgado pero si tengo algunos musculos que quedaron de mi juventud (jugaba beisbol), tengo buenas piernas, trasero, y mi orgullo, un pene de 20cm grueso, venoso, cabeza pequeña y se va anchando a medida que baja.

Trabajo en un area residencial bastante grande, de unas 145 casas de gente adinerada.
Bueno somos dos vigilantes uno en cada extremo pero yo quedo en la entrada principal y mi compañero en el final y al rondear nos encontramos en el medio.

Yo recibo en las tardes a algunos niños cuando vienen de la escuela y los llevo a sus casas o sus padres cuando llegan los pasan buscando por mi puesto de trabajo, siempre tengo entre 3 y 4 niños y niñas a diario alli de entre 6 y 9 años (de primaria)

Lo que sucedio fue hace ya mucho tiempo, con decir que la persona en cuestion tiene 13 y sucedio con sus 8 años (es algo de lo que es real en este relato)

Ella se llama Vanessa, cuando llegue a trabajar la conoci con 7 años y siempre muy coqueta agarramos confianza y sus padres igualmente, era una de las ultimas en irse por que asi lo pedia ella, le gustaba quedarse hasta tarde ya que sus papas llegaban muy tarde del trabajo y no le gustaba estar con el ama de llaves, tipica caprichosita
Una tarde despues que entregue a todos los niños estabamos los dos solos, el lugar era comodo pero pequeño, me dieron unas ganas de orinar y me daba pena hacerlo con ella alli, pero que va, tuve que disculparme y entrar al baño, para colmo la cerradura no servia y sin darme cuenta se abrio mucho la puerta (los hombres acostumbramos a cerrar los ojos al orinar)
Y de las ganas que tenia mi verga estaba medio morcillosa, al girarme casi terminando me di cuenta que ella estaba bien concentrada viendome las carnes y me dio pena pero tambien morbo.
Soy soltero y tenia algun tiempo sin tener sexo, eso me dio algo de calentura
Al salir "olvide" subirme el cierre y al sentarme frente a ella abri mis piernas y dejaba ver un poco mi interior y de reojo notaba como ella veia mi bulto a cada momento y eso me incomodaba un poco pero me gustaba y me exitaba muchisimo.

Mi pene estaba durisimo y disimuladamente yo lo iba poco a poco sacando para cuando me levantara se lograra ver mi pene aunq sea un poco, eso seria todo, pero un error de calculo hizo que mi pene saliera como resorte completamente de mi pantalon

– Guuuuuuuuaaaaaaoooooo, su pipi salio toditico.
Aaaaah mas grandotote
– Te gusta verdad!?
– jeje, no se, supongo.

– Disculpame, fue un accidente.
Oops.

Trataba de hacerlo en juego para que no se fuera alterar, pero mi verga estaba tan dura que empezaba a chorrear liquido

– Ah si, esta bien, no te preocupes.
Mi papi a veces se pone como tu cuando se despierta en las mañanas
– Ah si.
? Hmmmm okey.
Y te gusta.
!?
– El de mi papi es mas flaquito pero el suyo esta lindo
– Y te gustaria tocarlo y hacerle cariñitos.
!?
– Si, esta bien.

Yo estaba en las nubes, ella actuaba con mucha naturalidad como si fuera costumbre para ella ver penes.
Me acerque a ella, mi verga apuntaba a su carita infantil y tierna, sus labios de nena dulce rosaron mi punta y me recorrio un frio por el cuerpo que casi me hace eyacular, lo tomo entre sus manitas de la base y saco su lengua pasandola por la punta y saboreando mis jugos peneanos.

Yo la tome de su cabecita, haciendo que mi verga entrara dentro de su boca, su caliente, suave y an deliciosa boca alrededor de mi cabeza, fue lo maximo.
Y la fuerza con la que chupaba esa niña, era toda una experta en ese asunto.

Mi cadera iba y venia y mi pene entraba y salia una y otra vez mientras sus manitas acariciaban mi tronco y mis bolas, era casi magica la mamada que me estaba dando esa nenita.
Y cuando iba acabar con fuerza dicho sea de paso llenando su boquita de semen caliente y espeso abro mis ojos y mi sorpresa fue enorme al ver a mi compañero de pie en la puerta viendo la escena, su pene erecto y fuera de su pantalon

– Comes y no invitas eh.!!!.
Te gusta como la tengo entrenadita verdad.!?.

A que da la mejor mamada que te han dado
– Uff siii, fue demasiado rico
– Y eso no es nada, enseñemosle lo que sabemos hacer mi amor.
Dijo antonio a la niña acercandose y cerrando la puerta con seguro, se bajo los pantalones y se saco la camisa.

– Si .
Fue lo que ella respondio.

Mi compañero tenia tambien buen trozo, unos 18cm de verga algo gruesa como la mia, pero morena y con unas venas increibles que parecia que explotaria, ella abrio su boca aun con bastante rastro de mi semen y se engullo la verga de antonio, sus manos abarcaban su tronco y su cabeza se movia en un va y ven y su verga en un entra y sale.

La mano de el se diriguio hacia su entrepierna, ella abrio sus piernas y subio la faldita del uniforme y para mi deleite ya no traia braguitas, su vagina rosada, sin vellitos, con un clitoris rosado que brotaba de sus labios de donde se notaba un poco de brillo producto de liquido de exitacion, se llevo la mano a su boca, la lleno de saliva y volvio a ponerla entre su vagina

Toda aquella escena me volvio a poner duro como hierro, la exitacion y el morbo era demasiado enorme.

– Veo que ya estas listo para el 2do round
– Uff se ve demasiada rica ese chochito
– Ven, pruebala, no seas timido, veras que si esta bien sabrosa

Me arrodille sin que me lo pidieran dos veces, mis labios se acercaron a su vagina, mi nariz aspiro su aroma y su escencia a nena suave y tierna, mi lengua salio de mi boca y la pase por ese clitoris que lo unico que tenia de desagrado era la saliva que antes le habia puesto antonio, pero su sabor se dejo ver de a pronto, y abriendole sus piernitas mas mi boca y labios y sobretodo mi lengua se empezo a comer esa vagina suavecita y rica llenandola con mi saliva bebiendome sus juguitos.

Era lo maximo estar comiendome su vagina mientras que que mi compañero de trabajo un tipo de unos 35 años, de buen fisico incluso mas que yo moreno y de buena verga de cabeza gorda la ponia a mamar.

Mi tentación fue la mas grande de todas y tambien me desnude de la cintura para abajo, escupi la punta de mi verga varias veces hasta dejarla bien babosa y se la coloque en la entradita de ese chochito dulce, calientico y suavecito pero pense en desistir al ver que mi verga iba a ser muy dificil de meter en ese agujerito cuando mi compañero me dice

– Con confianza compadre que ya esa esta estrenada
– En serio.!?
– Si, andele que no se le ague el guarapo

Al escuchar esas palabras fueron como si me empujaran de mi cadera y mi cintura se dejo caer sobre ella y mi pene se dejo ir suavemente dentro de ella, no sin recibir algo de resistencia obviamente, se sentia demasiado apretado, caliente, suave, tierno.
Jugoso.

– Ah señor angel me duele, ud la tiene mas grande, hagamelo con cuidadito
– Si mi amor disculpame.

La tome de su cinturita e hice caso omiso a mis palabras, mi verga se hundio mas en ella sin escuchar sus quejidos, lo que deseaba era follarme una cuca y ella estaba disponible en ese momento, me la folle con media verga, apenas 10cm le metia y ella estaba gozando pero en medio de un dolor que le causaba mi grueso pene en su apretada vagina, mi compañero le daba a comer carne caliente y palpitante.

Mis embestidas iban aumentando de intensidad y rudeza pero sin poder meter mas que solo 10cm de mi pene mientras antonio la hacia callar con su verga en la boca.

15 minutos despues mi pene estaba soltando chorros de semen dentro de esa hermosa y tierna vagina mientras como si estuvieramos sincronizados antonio tambien empezo a darle de beber lechita tibia que yo veia como se rodaba por la comisura de su boquita que se abria a lo maximo para poder comercela como una experta.

– Buena eh.!? Te lo dije
– Si antonio, uff esto es demasiado bueno, te lo tenias bien callado
– Jajaja no pense que te fueras animar
– Desde ahora pues si.
Y yo con ella casi todo los dias aqui y ni sabia, como hacias
– En su casa, de noche, en mi puesto, bah uno se las ingenia.

– Ya veo.

A partir de ese dia mi compañero y yo nos reuniamos a la misma hora para darnos un banquete de nena tierna y sabrosa, y ella se iba a su casa bien llena y nutrida de leche