Lupe 48

Pajeado por su hija..
Lupe 48
Sugiero leer los anteriores relatos.

Al llegar a la habitación vi que la nena estaba medio triste. Le sonsaque un poco, finalmente, llorando dijo que nadie la quiere.  Su papá hace tiempo se habia desentendido de ella, ahora su mamá la dejaba para estar con su novio.

Ya la console diciendole que no era así, que seguro su papá la queria mucho. Que si ella me dejaba, iva a lograr que su papi le demuestre todo su cariño y tambien su abuela. Se le iluminaron los ojos, me dijo que le encantaria.

Por esa noche teníamos que bañarnos y descansar. Me dijo que su Mamá siempre se bañaba con ella, así que entramos juntas a la ducha. Estar desnuda delante de la nena me resultó raro, pero ella lo hacia muy natural.

Me dijo que ella sabía enjabonarse sola, así que me dedique a lavarme yo. Estaba lavando me con champú el cabello con los ojos cerrados,  cuando sentí su manita acariciandome la concha.

No pude contener un gemido de placer, cuando pude abrir los ojos la mire inquisitivamente. Me dijo que a su Mamá le gustaba que le de cariñito ahí abajo. Le dije que me gustaba que podia seguir haciendolo.

Le pregunte si queria que yo le de carñitos a ella, me contesto que antes de dormir su Mamá le daba besitos ahí abajo, que eso le gustaba más. Su manito me estaba calentando mucho, más la idea de chupar su conchita me tuve que contener para no correrme.

Salimos de la ducha y cada una se seco el cuerpo, me sorprendió que se acosto en la  cama totalmente desnuda, con sus piernas abiertas esperando sus besos. Sentí que estaba necesitando sentir afecto, así que me acosté a su lado desnuda.

Acaricie su cabellera, bese suavemente su carita. Cuando pose mis labios en los suyos,  ella abrió un poquito la boca. Se veía que no era la primera vez que recibia un beso de lengua.

Segui acariciando su cuerpito, pase mi lengua por sus tetitas . Segui bajando por su pancita,  llegando a su rosadita conchita. Se la estuve besando, pasando mi lengua desde su conchita hasta su culito igual de rosadito. En eso estaba cuando le escuche decir, «gracias mami».

Entendí que era suficiente, así que la deje. Me dijo que habia sentido muy lindo, que sentia que yo la quería. La abraze, diciendole que mejor descansemos. Nos dormimos abrazados, desnudas, era muy tierno.

Al despertar al día siguiente, después de lavarnos. Le di que se ponga una bombachita con dibujitos y una remerita. Yo también me me puse una tanga y una remera, le expliqué lo que tenia que hacer.

Fuimos juntas a desayunar, su papá estaba desayunando viendo el noticiero.  Como le indique,  ella se le colgó del cuello dándole un abrazo fuerte sin soltarlo. Yo le hice seña para que le siga la corriente.

El le la abrazo también, dándole besos en su carita, algunos sobre sus labios. Entre los abrazos aprovechaba para tocarle su colita, llego a meter la mano por debajo de la bombachita.

En eso llegó la abuela trayendo cafe y leche.  También la abrazo fuerte y le dio muchos besos. Finalmente desayunamos todos juntos, yo sugerí que vayamos a pasear al parque zoológico ya que ella nunca habia ido.

Cuando pude le conté al señor todo lo que habíamos hecho con la nena la noche anterior. Le dije que le demuestre mucho amor, todo el amor que el quiera darle. La vesti con una corta pollera y una remera.

Fuimos los cuatro, como quería que padre e hija compartan el día. Nosotras nos mantuvimos alejadas. A la nena le llamaban  la atención todos los animales del zoo. Jugaban con su papá,  riéndose mucho, abrazandola, besandola.

Cuando la nena se canso de caminar el papá la llevaba en andas, con su mano metida debajo de la pollera. En un momento se sento con la nena en sus rodillas, le hacia caballito. Seguramente rosaba la pija con su culito. Finalmente volvimos a la casa, le pregunto si queria que su papi la bañe.
Acepto pero queria que yo esté con ellos.

Fumios a la ducha, la nena no se queria desnudar si nosotros no lo haciamos. Entre risas nos desnudamos, todos. Agarrando el duchador los empape a ellos dos, ella trataba de esconderse detras de papi.

Despues se desquito mojandome a mi, ella miraba detenidamente la pija ya morsillona de su papá.  El morbo de estar todos desnudos habia superado toda barrera. Ella empezo a acariciarme «ahí abajo», como ella decia.

Su vista seguia en la pija de papá, le pregunté si queria darle cariñitos tambien a su papi.  Movio su cabecita afirmativamente, tome su manito que estaba en mi concha y se la puse sobre la pija.

Ella la palpaba como con miedo, yo le tome la otra mano para que también lo acaricie. Luego le enseñe como juntar sus manitas y moverlas suavemente de arriba abajo.

El señor disfrutaba de lo lindo, estaba con los ojos cerrados jadeando.

Ella me preguntó si a a su papi le dolia algo,  le expliqué que por el contrario. Estaba disfrutando del amor que ella le estaba dando, que en un ratito más el iva a darle su lechita de amor.

Así fue, despues de unos minutos el se corrio mojando las manitas de su hijita con su caliente corrida.

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