María Paula y su primo II
Continuaremos esta serie conociendo los encuentros sexuales de estos nuevos amantes .
María Paula y su primo parte II
Ya habían pasado varios días desde aquella noche alocada de sexo y lujuria que María Paula y Ricardo habían tenido, Ricardo no veía la hora en que volviera a disfrutar del placer de cogerse a aquella chiquilla caliente, la que hasta hace poco para el era una niña más, ahora era su objeto sexual más deseado.
Por su parte María Paula estaba deseosa de volver a ser poseída por su primo, aquella experiencia había despertado ese deseo por ser cogida y disfrutar de los placeres del sexo sin control, pero como les había dicho en el anterior relato sus papás eran muy controladores y estrictos, no la dejaban ni respirar libre siempre la controlaban en todo momento y vivían en un edificio donde siempre vigilaban y les avisaban si alguien llegase a su casa así que no era opción escaparse con el, aunque su cuerpo estuviera loco de deseo y que en cada momento a solas su coño se le hiciera agua recordando la cogida que su primo le había dado.
Al llegar a su casa después del colegio, la chiquilla sólo pensaba en cómo desahogar su deseo, se quita la blusa y la falda a cuadros del colegio, dejando ver esos pechos nacientes aún pero firmes y con los peso pesones erectos y ese culo monumental que escasamente podía cubrir su panty y este terminaba cediendo y metiéndose entre esas dos nalgotas grandes y duras, la pequeña se tira en su cama con sus ojos cerrados mientras sus dedos van directamente a su vagina y su clítoris, ese coñito era un río de jugos que ella desprendía por lo caliente que estaba, metía sus dedos mientras recordaba como su primo la había cogido, las sensaciones eran de puro placer, recordaba como su primo la trataba de puta y aquello la encendía más aquel coñito pedía a gritos una buena verga, la chiquilla no pudo más y se corrió teniendo un profundo orgasmo y dejando un río al correrse.
Ricardo por su parte recordaba lo caliente que era aquella chiquilla como esa niñita podía ser tan puta y tan caliente, como le había gustado todo lo que el le hacía, como la follaba fuerte y ella le pedía más, como la trató como a una zorra y eso la excitaba más, no podía esperar al día de volver a poseerla y ahora también quería no solo probar su coño sino también aquel culo grande y ver hasta donde más podía llegar aquella chiquilla que poco a poco se hacia una adicta al sexo y a las vergas.
Los nuevos amantes eran un volcán a punto de estallar, con tantas ganas acumuladas y era hora de idear un plan para poder estar solos, a Ricardo la forma en que Maria Paula le hablaba y le decía que quería ser follada por el una vez más le llenaba la cabeza de lujuria y perversión.
La chiquilla en su colegio tenía una feria de ciencias y sus padres por el trabajo les quedaría difícil ayudarla así que la pequeña ideó que su primo le iba a ayudar así sus padres no verían lo extraño que su primo la visitará mientras estaba sola en casa. Así fue y al decirle a sus padres pensaron que para el sería una molestia y no aceptaría pero no habiendo más su padre llamo a Ricardo pidiéndole que ayudara a Maria Paula. Ricardo tratando de hacer bien su papel le dijo que tenia unas ocupaciones que hacer pero que si haría a ayudarla, pero por dentro no veía la hora de estar a solas con Maria Paula.
Pasaron dos días y era el día en que por fin se vería con su deseada María Paula, Ricardo hábilmente había mandado a hacer el proyecto con alguien más así lo llevaría ya realizado y no tendrían que perder el tiempo en eso.
La chiquilla no veía la hora en que las clases terminaran tan pronto sonó el timbre salió y ya el transporte la esperaba para llevarla a su casa , tan pronto como llegó empezó a prepararse solo pensar que su primo llegaría para cagersela le hacía aguas el coñito. Se coloco un hilo negro que entre ese par de nalgas desaparecía y un vestido negro corto que le quedaba de infarto la pequeña era la lujuria encarnada, desbordaba sensualidad con aquel vestido corto pegado a su cuerpo la hacia ver como una diosa, la diosa del placer y del sexo. Ricardo mientras tanto se dirigía a la casa, había comprado un lubricante para poder disfrutar de aquel culo que lo estaba volviendo loco.
Al llegar y ser anunciado Ricardo ingresa y al llegar a la puerta encuentra esta ligeramente abierta esperándolo, aquello despertó su verga y una erección se marcaba en su pantalón, al entrar allí estaba la chiquilla esperándolo, cual ninfa del placer al verla sus ojos se abrieron y la lujuria se apoderó de él, solo fue cerrar la puerta y sin dirigir ni una sola palabra ninguno de los dos simplemente se acercaron y ella corrió hacia el, el cargandola empezó a besarla mientras las piernas de ella rodeaban su cintura, los amantes se comían a besos como desesperados, tanto deseo acumulado, después de un momento de besos ella baja y abre su cremallera y sale aquella verga dura y brillante de tanto segregar líquido la chiquilla la lleva a su boca y empieza a mamarla de una forma única y magistral, Ricardo estaba nublado por el placer que le daba la boquita de su primita, era una experta mamadora de verga, le lamia la punta con su lengua y después bajaba por todo el tronco de la verga con su lengua, luego volvía a lamer desde abajo hasta la punta para meterse toda la verga en su boquita, succionaba la punta mientras sus manitos lo pajeaban Ricardo solo podía gemir mientras la pequeña escurría la baba por su boca y escupía a aquella verga.
Ricardo la toma y de una jalón le saca el vestido contemplando a la pequeña en aquel hilo solamente pues no se había puesto sostén, la tomo y la empotro contra una mesita que había en la sala, hizo a un lado el hilo y vio aquel coño lleno de jugos e introdujo su verga ya no podía aguantar más, se la metio hasta el fondo Maria Paula solo dio un ligero grito.
Ahí estaba la pequeña siendo bombeada por su primo este solo tenia su polla afuera pues nisiquiera la ropa se había quitado y la pequeña estaba solo en su hilo siendo follada salvajemente, el tapaba su boca para que los demás vecinos del edificio no fuesen a escuchar aquellos gritos de placer y lujuria, Ricardo no pudo más y empezó a llenarle el coño de leche en una corrida fenomenal , que si no era porque la pequeña toma anticonceptivos por sus problemas hormonales seguro hubiera quedado embarazada ahí mismo.
Pero esto solo fue el inicio, en cuanto ella fue y se limpio un poco el la esperaba ya sin ropa en la cama al verlo siguieron con sus besos intensos sus lenguas se entrelazaban, el la tomó y la tiro a la cama abrió sus piernas y empezó a beber del néctar de su vagina, la pequeña se retorcía del placer, la tenía en un trance decremento su espalda se arquea y tiene otro orgasmo. Pero el no le dio respiro porque inmediatamente la puso boca abajo y empezó a mamarle el culo lo que hizo que Maria Paula perdiera la noción de todo y quedar a merced por completo, el le abría ese par de nalgotas y metía su cara y su lengua masajeaba aquel ano tierno que estaba a punto de ser desflorado, el placer era inmenso toda la habitación olía a sexo, era tanto el deseo que la pequeña no pudo más y empezó a suplicarle ser penetrada una vez más, quería ese trozo de carne dentro de ella, lo que no sabía es que esta vez sería por su otro agujero.
Maria Paula: dame, cogeme como ahorita
Ricardo: quieres que te meta la verga otra vez?
María Paula: si por favor dame más. ¡Ah!
Ricardo: pideme verga como toda una puta
María Paula: quiero verga, dame verga
Muy complaciente el la toma por la cintura pero esta vez no iba por su coño iba por aquel culo delicioso, derrepente empuja con fuerza y la punta de su verga entra en ese culo, ella abrió sus ojos y grito
María Paula: me duele!
Ricardo: tienes que aguantar
María Paula pero duele! Ah!
Ricardo: a las zorra como tu hay que darles así
María Paula: despacito
Ricardo: te voy a partir todo ese culo para que veas como eres de puta y como lo vas a disfrutar.
Después de un rato así y untar un poco más de lubricante, ricardo metr toda su verga en aquel culo lagrimas salían de los ojos de ella mientras el le perforaba el culo completamente, ella solo mordió la sabana, mientras Ricardo sentía como aquel agujero apretaba su verga queriendola estrangular, y que poco a poco iba sediento ante las feroces embestidas de Ricardo, aquella muecas de dolor de Maria Paula se iban convirtiendo en gemidos de placer, es como si aquel culo hubiera sido hecho para eso para el placer de las vergas, tanto así que Ricardo se acuesta boca arriba y la pequeña se trepa sobre el ensartandose ella misma aquel pedazo de carne en su culo.
Ricardo: te la has metido toda entera
María Paula: ah! Ah! Así dame más
Ricardo: eres toda una zorra, sabía que partiendote el culo te ibas a enviciar más.
La pequeña cabalgo aquella polla orgasmo tras orgasmo, hasta que sintió como su culo se llenaba de aquel líquido viscoso y caliente, su primo le había llenado el culo de leche con la tremenda corrida que se había dado.
Así fue como nuestra niña se fue convirtiendo en una adicta a las pollas, pero aún esto era el comienzo de sus aventuras.
Espero les guste este relato, su apoyo es importante para seguir con esta serie
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