Mi hermana cuando se emborracha deja que yo me aproveche de ella.
Un joven encuentra que su hermana mayor llegó tan borracha, que decide aprovecharse de ella, pero luego se da cuenta que ella es la que lo deja aprovecharse de esa situación..
Yo estaba cansado de que a mi hermana mayor hiciera todo lo que le daba la gana y nunca nuestros padres le decían nada, ya que todos los fines de semana, llegaba a casa bien borracha, y la mayoría de las veces, alguno de sus novios se había acostado con ella.
Lo que, a mí, me molestaba aún más, ya que con el cuento de que es la mayor de nosotros dos, mis padres le permiten hacer lo que le da la gana, sin que le llamen la atención.
Aparte de que, desde siempre he tenido unas ganas tremendas de acostarme con ella, pero la única vez que se lo insinué, entre los muchos insultos que me dijo, me llamó pervertido, sucio, sádico, en fin, no hubo insulto que no me dijera.
Lo que me hizo sentir sumamente mal, ya que, con decirme que no, bastaba, ya que ella no tenía por qué insultarme de esa manera, además, le dije que ella actuaba como si yo fuera una santa, ya que en más de una ocasión yo la había visto como le mama la verga a uno de sus tantos novios, mientras que, a otro, también he visto, que ella se dejado dar por el culo.
No conforme con todo lo que le dije ese día, también le recordé que cuando ella sale con sus amigas, en más de una ocasión le ha tocado ser el jamón del sándwich, ya que en una ocasión porque escuché a una de sus amigas, preguntarle, si lo que me hicieron los dos turistas, le había gustado, a lo que mi hermana, le respondí, que sí.
Por eso cuando sus amigas la dejaron en casa, algo más temprano que de costumbre, completamente borracha, sentada en el pequeño sofá de la sala, al principio me lamenté que nuestros padres, no estuvieran en casa, para que vieran en qué estado en que ella había llegado.
Esa noche, por lo que supe después mi hermana había comenzado a beber, desde temprano, y al no llegar uno de sus novios, se emborrachó muy rápido, por lo que sus amigas la trajeron a casa, para no andar cargando con ella borracha.
Por lo que al ver el estado en que mi hermana se encontraba, me puse a pensar en todo lo que podía hacerle, y el gusto que me daría cogiéndomela, así que lo primero que hice para asegurarme que continuase así, fue ir al mueble donde el viejo guarda sus botellas, y sin pensarlo mucho, saqué una de vodka, luego regresé a la sala.
Al verla tirada sobre el sofá, con casi todas sus tetas por fuera, sus piernas bien abiertas, y que la pequeña minifalda que le quedaba además de bien corta, se le había subido, quedando con sus pequeña y transparente pantis ante mis ojos.
Si en algún momento, dudé en aprovecharme de ella, al verla así, bien borracha, no me quedó la menor duda de que se lo iba a meter, seguramente, ella no se iba a acordar, por lo que pensé que, de ser posible, hasta por el culo le iba a dar.
Pero antes de comenzar desvestirla, la llevé a su cuarto y me aseguré de que mi hermana siguiera bebiendo varios tragos de vodka, aunque por lo borracha que se encontraba, apenas y se daba cuenta de lo que pasaba a su alrededor.
Así que después de que le di de beber varios tragos del vodka, comencé a desvestirla, y al tiempo que lo iba haciendo, le pregunté varias veces si ella se había acostado con alguien, antes de que sus amigas la trajeran a casa.
A duras penas, me dijo que no, pero no conforme con eso, tras desnudarla abrí sus piernas y coño, luego de introducirle uno de mis dedos lo olí, al notar que todavía olía aun a limpio, lo que me provocó a mí fue ponerme a mamárselo.
Aunque no por mucho tiempo, ya que apenas me desnudé completamente, después de lavar mi verga con algo de vodka, la puse a que se la mamara, y a pesar de lo borracha que ella estaba, apenas tuvo mi verga dentro de su boca, comenzó a chupármela.
Mi hermana en esos momentos estaba tan ida, que a pesar de que me estaba viendo directamente a la cara, en un momento me llamó por el nombre de uno de sus novios, y en otro momento también me llamó por el nombre de otro de sus novios.
Así que mientras que la seguía penetrando de frente a mí, a pesar de lo bebida que mi hermana se encontraba, ella movía sus caderas, y no dejaba de pedirle, que le diera más duro.
De momento saqué mi verga de su coño, y se la enterré por el culo, y aunque chilló, y gritó, pero como continué enterrándole toda mi verga, metiéndosela y sacándosela toda, hasta que me vine, dentro de sus nalgas.
Al día siguiente, ella se levantó a eso de las dos o tres de la tarde, y tras ir al baño, y asearse sin tan siquiera ponerse nada encima, se dirigió a la cocina, justo cuando yo entraba, al verme se quedó como si nada.
Cuando algo asustado, le pregunté cómo se sentía, lo que me dijo fue. “Hay hermanito si te cuento lo que soñé, contigo anoche no me lo vas a creer”. Desde luego que no me dijo nada, pero cada vez que regresa a casa, borracha, y los viejos ya están durmiendo, mi hermana deja que me aproveche de ella.
Woooooooooooooow, delicioooooooso!