Mi hijastra Violeta II
Después de ese breve encuentro con Violeta llegamos un poco más… ya nada volvería ser como antes.
Después de ese encuentro con Viole nada volvió a ser como antes, ella buscaba la forma de que yo tocara su cuerpo, dejaba su ropa interior usada en mi mochila de trabajo para que yo las huela, una vez estando en mi casa solo me fui a bañar, sabiendo que nadie vendría ya que mi esposa estaba en un cumpleaños con los chicos y no volverían hasta dentro de un par de horas, cuando estaba en el baño desnudo duchándome entra Viole al baño como sorprendiéndose que estaba ocupado, como teníamos cortina ella no me vio desnudo, ella me dice por favor necesito el baño porque me estoy haciéndome encima y estoy en los días que me viene me dijo, paso y se sentó en el inodoro, al estar sentada tiro de la cortina y me vio mi pene que apuntaba hacia arriba de lo parado que estaba, estiro su mano y lo agarro empezando a jugar con el mismo, yo cada vez más excitado y sabiendo que ya no había vuelta atrás le agarré la mano levantándola del inodoro y diciéndole que venga conmigo a la ducha, ella se resistió al principio porque me decía que no porque estabas en sus día de menstruación, yo le dije desvístete y ven, como estaba ella caliente también se saco su ropa y se vino conmigo a la ducha, era una belleza verla desnuda contemplar ese cuerpo joven, nos empezamos a besar como dos adolescentes con mucha pasión y empecé a tocarle todo su cuerpo, baje mi boca a saborear esos pezones hermosos que tiene, los chupe hasta estirarlo con mis labios, la di vuelta la puse de espalda a mi haciendo que se sostenga de la barra que tengo en la ducha abriéndole un poco las piernas, ella sabía lo que vendría, arqueo un poco el cuerpo y yo comencé a jugar con mi pene entre sus labios vaginales, subía y bajaba por ella hasta que en un momento la penetré con todo, ella pego un pequeño grito y gimió con todo al sentirse ensartada, se la deje bien puesta hasta el fondo comenzando a jugar con sus senos, esos pezones estaban a reventar, ella arqueaba el cuerpo y me decía ya por favor hazme como nunca el amor, empecé con el meta y saca de mi verga en su concha, en cada embestida ella hacía su cola para atrás para que mi pene entre en lo más profundo de ella, estuvimos así por varios minutos, yo jugaba con sus senos y con su clítoris logrando que Viole pegara un pequeño grito llegando a un gran orgasmo sentí que aflojaba sus piernas pero la seguí manteniendo en esa posición porque a mi no me faltaba mucho, seguí dándole con todo hasta que por fin acabé bien adentro de ella.
Cuando mi pene se puso flácido lo saque con restos de sangre y semen, ella se vio sus piernas y caían gotas de sangre de su regla junto al semen mío, nos terminamos de bañar mutuamente como dos parejas de enamorados, salimos del baño y acordamos guardar este secreto donde le dije que ella no se tenía que poner celosa con su madre porque se iba armar un gran lío.
Al regresar mi esposa yo estaba cocinando mientras Viole estaba tirada en el sillón mirando su celular, comimos y ella se fue para su casa y nos fuimos a dormir con mi esposa. La semana transcurría normal, cada vez que llegaba Viole tratábamos de no llamar la atención, ella se ponía ropa sugestiva para llamar la atención mía, seguía dejando su ropa interior en mi mochila no teníamos oportunidad para poder estar solo o yo poder visitarla en su casa porque al ser vacaciones estaban mis hijos y mi esposa todo el día en mi casa, así que solo teníamos unos pequeños toqueteo, no sabíamos que hacer para poder estar un tiempo solo los dos hasta que se dio un hecho no del todo agradable, ya que Viole debía ir a cuidar nuevamente a su abuela estuvo unos días en una ciudad cercana donde vivíamos con la particularidad que no había ningún ómnibus que conectara a las dos ciudades razón por la cual debíamos ir con mi esposa en el auto a buscarla, cuando Viole llama a su madre que la busque porque se quería venir ya ni esposa le responde que no puede ir aduciendo un gran malestar estomacal que en realidad era verdad ya que estaba con mucho vómito y diarrea haciendo que este recostada todo el día, me pide a mí que vaya a buscarla solo emprendí el viaje hacia la otra ciudad que estaba a casi una hora de viaje, cuando iba en el camino recibo el mensaje de Viole diciéndome que estaba esperándome en el hall de entrada del edificio donde residía su abuela, yo le dije que este preparada en cuanto a la vestimenta, que se ponga ropa ligera para poder hacer algo rápido cuando llegue hasta el lugar me estaba esperando con una minifalda de jean y un top sin corpiño, subió al auto rápido y nos dimos un beso como novios, emprendí el viaje de regreso rápido, cuando salimos de la ciudad estaba anocheciendo en ese momento le dije que se baje el top dejando salir sus tetas al aire y ella sola reacciono subiéndose la minifalda hasta casi el ombligo dejando al descubierto su vagina, yo me baje el pantalón dejando al descubierto mi pene ya erecto ella lo agarró con ambas manos empezando a jugar con el mismo, se arrodillo en el asiento delantero jugando con mi pene dejando expuesto todo su sexo a mi otra mano, le pedí que me lo chupara ella me dijo que era algo que no le gustaba hacer pero yo le dije que si quería seguir con esto debería empezar hacerlo, empezó de a poco a posar su boca en mi glande, a medida que avanzaba se iba introduciendo de a poco gran parte de mi pene, a medida que íbamos en el camino ella se devoraba mi pene con gran maestría mientras que con mi otra mano yo jugaba con su ano, estaba tan mojada su vagina que sacaba jugos de ella para introducir mi dedo en su cola cada mamada de ella era una embestida de mi dedo en su ano, cuando estaba ya a punto de acabar paro el auto y dejo que ella siga chupando descargándole toda mi leche en su garganta automáticamente retiro mi pene de su boca dejando caer gran parte de mi leche por todos lados, al tirarse para atrás no hizo más que ensartarse mi dedo en su culo razón por la cual lanzó un grito haciéndole llegar un gran orgasmo, nos quedamos quietos cada uno en la posición donde estábamos para recuperarnos, me miro en medio de la noche y me dijo es la segunda vez que tengo un orgasmo nunca antes había sentido esa sensación con ninguno de mis novios, de a poco fui sacando el dedo de su culito.
Nos acomodamos en el auto para proseguir el viaje a la cual nos faltaba muy poco kilómetros para llegar, la lleve a la casa le pedí un trapo húmedo para limpiar todo el auto y no dejar rastro alguno de mi leche por el auto. Cuando llegué a mi casa mi esposa estaba recostada esperándome, yo aproveche para darme una ducha y sacar todas las pruebas de mi acción con su hija.
Qué rico relato, es la primera vez que me masturbo con un relato!