Mi pequeño Amante (Parte 1) By: Sandra12Amores
Sandra necesita buscar unos regalos de Navidad en una tienda, pero lo que no sabía es que un niño de calle sería su regalo.
Mi pequeño Amante (Parte 1) By: Sandra12Amores
Hola otra vez, de antemano les quiero pedir una disculpa por mi ausencia este último mes, es que he estado ocupada en mi vida personal y me ha quedado poco tiempo para escribir de la manera que me gusta, ya que lo que menos quiero es relatar de manera floja y apagada, así la verdad no me gusta hacerlo, pero ya los dejo de aburrir con mis locuras jeje, sin más los dejo con otra historia que estoy segura les gustara muchísimo, Saluditos
Mi nombre como muchos lo recordaran es Sandra, ha pasado mucho desde la última vez que les escribí, si han seguido mis historias entonces deben saber que yo fui la primera de mi hermanito y mi primito Carlitos, Pero lo que me paso en la noche del 24 fue… especial, al menos para Pablito, todo comenzó cuando la mañana del 24 de diciembre estábamos mi madre, mi hermanito y yo desayunando en la sala, como era de costumbre, mi hermanito le gusta sentarse a mi lado para tocarme mis piernas y mi Conchita algo peludita sobre mis pantalones, pero mientras lo hacía mi madre me platicaba sobre si podía hacerle el favor de ir a comprar los regalos de Navidad para llevarlos en la noche con mi tía
Yo me mostraba dispuesta a hacerlo, por lo que después de un rico desayuno y unas cuantas manoseadas de mi hermanito, me dirigí a mi cuarto para alistarme, «Que me pondré?», me dije susurrando mirando mi closet y cajones mientras el sonido de la ducha caía en mi baño privado, Mis ojos se mostraban entre un suave sujetador negro con bordes florales rojos semitransparente junto con una tanga roja fuerte con un listón pequeño en medio o un sujetador de línea media con bordes rosados y cubierto por morado junto con una tanga simple, pero bastante caliente morada, después de unos segundos de pensarlo e imaginarme en él, me decidí por la segunda opción y junto con mi ropa de calle me la lleva hacia el baño cerrando la puerta detrás de mí
Alrededor de 20 minutos salí con mi ropa interior elegí puesta sobre mi hermoso cuerpo y cuando me vi en el espejo simplemente me sentía celosa de mí misma, «Dios, Ahora entiendo por qué esos niños me ven con tanto descaro» Lo dije mientras posaba seductoramente en el espejo, pero de repente apareció Andrés «Boo» grito Andrés para asustarme, inmediatamente me cubrí con mis manos «Dios!, Andrés ya habíamos quedado en que no entraras a mi cuarto así cuando mama está en casa, Dije con autoridad, pero con un leve tono juguetón con una sonrisa en mi cara, «Ya sé hermanita! Pero es que me gusta verte todos los días así, además quería saber si me regalaras algo?», me dijo mientras se acostaba en mi cama juguetonamente
Yo cubriéndome lo mejor que podía, pero dejando ver un poco fui al marco de la puerta de mi cuarto y la cerré para después voltear a ver a mi hermanito ya sin miedo a que me viera, «Pues… que te parece si te regalo un videojuego?», pregunte con mis manos sobre cintura, Mi hermanito se acomodó en mi cama y se sentó en ella y sin perder detalle a mi cuerpo, me respondió, «SÍ! Me gustaría el GTA 6, Porfis, porfis», repetía varias veces dando pequeños saltitos en su misma posición alegre, «Hagamos esto» dije acercándome y acariciando su cabecita, «Si me dejas jugar con tu primito Carlitos cuando vengan a la fiesta de año nuevo, Yo te compro el juego. ¿Trato?», le guiño el ojo para darle un toque más coqueto a la situación
Andrés dudó un poco, pero al notar eso tome su manita y la acerque a uno de mis pechos cubiertos por la sexy lencería y él por instinto lo apretó bastante fuerte, «¿Qué me dices Hermanito?, te prometo que siempre te daré lo mejor para ti» Una sonrisa empezó a crecer y con mucha alegría me respondió «Bueno está bien hermanita, pero prométeme que me seguirás dando cosquillas aquí» su mano izquierda agarro suavemente su bulto el cual ya estaba erecto, mi mano derecha se fue a su bulto y lo acaricie con pequeñas vueltas y movimientos suaves. «¿Has hecho lo que te dije verdad?» Pregunte con una sonrisa pícara en mis labios y ojos lujuriosos
«Sí, me he tomado ese jugo verde que me preparas para mi lunch, me he comido la fruta en la cena…» Yo lo interrumpí y mientras él seguía apretando con su manita mi enorme pecho y yo manoseando su pene sobre la ropa, «Y… ¿Qué más?» Andrés seguía pensando en mis demás cuidados y al fin lo dijimos al mismo tiempo, «No jugar con mi manguerita toda la semana» Ambos nos reímos y no despegábamos nuestros toques, «Exacto, pero ya me tengo que apurar cariño, mama se va a enojar si no traigo los regalos antes de las 7» Dije alejándome de Andrés y quitando su manita de mi pecho, «Awwww» Andrés se miraba decepcionado y no quería dejarlo así, «¿Qué pasa cariño?» Andrés bajo su cabecita algo triste y me dijo «Es que quería jugar ahorita»
Yo me sentía apenada por dejarlo así, de todas formas yo tengo culpa por dejarlo tocar, así que lo justo era al menos darle un pequeño adelanto de su regalo, «Está bien, Pero solo un ratito, ¿ok?», le dije arrodillándome y desabrochando mi brasier mientras Andrés se arrodilló en la cama y se apoyó en mis hombros para no caerse, «Quieres que lama suave o rápido cariño?», le pregunte mientras Andrés se baja los pantalones y yo le ayudaba con sus calzoncillos de Batman, «Quiero suave, me da cosquillas así» Andrés dio pequeñas risitas juguetonas y su penecito estaba tambaleándose suavemente frente a mí, Mis manos se posaron sobre las pequeñas y suaves nalguitas de mi hermanito y lamí mis suaves labios para llenar su puntita de saliva caliente, Mis ojos nunca dejaron de ver su penecito tan pequeño y con su prepucio tan suave y blanquito
Abrí mi suave boca y pase mi lengua alrededor de mis labios para lubricar mis labios con mi saliva para segundos después introducir su pequeño pene de 9 centímetros en mi boca, al momento que metí todo su eje mis ojos no perdían de vista los de mi hermanito, ver como se contorsionaba de placer tan solo de sentir mi lengua caliente dando vueltas sobre su puntita, la cual jugueteaba con su puntita para que sintiera cosquillas era mi mayor gozo y cuando empecé a dar mis primeras succiones ese rostro tan inocente y angelical se volvió a una llena de lujuria y placer que nadie podía quitarle, Mi cabeza daba movimientos de adelante hacia atrás mientras mis manos se posaban sobre las suaves nalguitas de Andrés, Andrés ya estaba adiestrado para mantener el equilibrio y que aguantara mucho más
«¿Hermanita… puedes hacer eso otra vez?» Dijo antes con gemidos y resoplidos que daban un toque de ternura y lujuria a la situación, Yo ya sabia a que se refería Andrés y cerré mis ojos para intensificar mis chupadas más rápido y dentro de mi boca hacía que mi lengua tocara la puntita de Andrés para intentar meterla dentro del pequeño prepucio, ya que la última vez que lo hicimos él me dijo que se sentía rico como jugaba con su puntita y como no podría negarme a mi hermanito el cual ya hace tiempo deje de verlo como mi hermanito, lo empecé a ver como mi novio o mi pequeño amante para algunos, Alrededor de 1 minuto más de jugar con su puntita y sentir como Andrés estaba casi al borde del clímax, saqué su pene completamente e inmediatamente le escupí en su pene para masturbarlo con mi mano derecha
Intente agarrar su penecito con mi mano completa y mientras lo observaba no paraba de provocarlo con palabras, «Te gusto mucho como te la mame hermanito?!», dije con mucha excitación y descaro, Andrés se contorsionaba de placer e intentando no soltar su néctar antes de tiempo, «S…s…si….se siente…ric….co» dijo Andrés con mucho esfuerzo en sus palabras mientras que para mí era el incentivo perfecto para seguir, «Y te quieres correr? ¿Quieres ver a la puta de tu hermanita manchada con tu leche? Eh?» Le preguntaba con mucha insistencia y resoplidos para hacerlo explotar más rápido, «Ahhhhh!» Andrés dio un gemido medio fuerte y 8 hilos de semen semitransparente salieron disparados de su punta, los cuales aterrizaron la mayoría en mi cara y unos 3 hilos en mis enormes pechos sobre el sujetador
«WOW! Andrés… muy bien, veo que esa dieta y cuidados míos te ayudaron mucho jeje» dije con mucha confianza y orgullo por ver que gracias a mí, mi hermanito logro expulsar bastante leche que sin duda no desperdicie, ya que con la ayuda de mis manos me encargue de recoger todo su semen de mi cara y lo arrastre hacia mi boca para saborearla a mi gusto, «A que te sabe hermanita?», pregunto Andrés con mucha curiosidad y alegría en sus ojos, «Sabe bastante dulce cariñito, es como comer azúcar, pero en agua» le respondí con mucho amor mientras saboreaba con mi lengua su esencia y recogía con ambas manos el semen restante de mis pechos, Andrés algo juguetón se burló de que mancho mi brasier, «Lo siento hermanita, no quería ensuciarte, me perdonas?», pregunto Andrés algo apenado y nervioso
Solté una pequeña carcajada, «Esto!? No te preocupes hermanito, al menos ya tengo mi perfume ideal para salir hoy jeje, ven aquí» le indique a mi hermanito a que se acercara desnudo hacia mí para que yo le diera un tierno, pero apasionado beso de lengua, Andrés me hizo caso y se acercó a mí y acerque mis labios a los suyos para conectarlos en un beso húmedo donde nuestras lenguas jugaban entre sí y que gracias a mí, pues ya tenía experiencia en como moverla y como juguetear entre ambos él puso sus manos sobre mis hombros mientras que yo lo abrazaba y acariciaba su cabecita mientas nos besábamos como si fuéramos una pareja, después de un pequeño beso de 10 segundos, yo me aleje y me gustaba ver la carita de satisfacción de Andrés, «Bueno ya Andrés! Me tengo que ir o mama me regañara» dije apresurada en vestirme
Andrés se volvió a vestir nuevamente y se bajó de mi cama mientras que yo me terminaba de vestir y justo cuando estaba mirándome en el espejo ajustándome mi blusa morada de botones Andrés se acercó y con todo descaro me dio una fuerte nalgada en mi pompi derecha, «No olvides mi juego hermanita» Dijo con una sonrisa bien picará dirigiéndose hacia la salida de mi cuarto, Yo ni siquiera pude responder, pero aun así me dibujo una sonrisa ante la acción tan pervertida de mi hermanito
Alrededor de unos 10 minutos más, salí de mi cuarto ahora con unos pantalones Jeans negros bastante ajustados que hacían resaltar mis enormes glúteos que no le hacían competencia a las modelos playboy jeje, pero aparte de eso vestía unos tenis blancos con bordes azul claro que normalmente uso para distancias largas y por último vestía una bella blusa de un color morado fuerte que tenía 6 botones, pero como me gusta sentir la brisa del aire en mi pecho, me desprendí 2 botones superiores para que mi escote se vea más resaltante y el aire pase mejor, además para que no se apeste mi brasier por el aroma del néctar de mi hermano el cual mancho hace unos minutos, pero antes de salir agarre mi bolsa y me dirigí a la cocina y me despedí de mi madre, y Andrés estaba en la cocina ayudándola, pero de manera sugerente le guiñé el ojo a mi hermanito sin que nuestra madre se percatara de nada
Ya eran como las 1 de la tarde y estaba en mi automóvil yendo de tienda en tienda buscando donde esté mejor comprar, ya que era mejor comprar en ofertas y había una tienda en particular que me llamo la atención donde había un descuento en general del 50%, pero algo me que dio lástima fue ver a un pequeñín que parecía tener como 8 o 10 años parado al lado de a entrada con un pequeño bote de plástico pidiendo limosna a la gente que pasaba a su lado, Yo agarre mi bolsa y salí del auto y tenía planeado darle un poco de dinero, así que cuando cierro la puerta del auto y me dirigí hacia el pequeñín saque un billete de $100 y me acerque a él y se lo entregue al niño, «Ten pequeñín» puse el billete en su bote y el niño me volteo a ver con un brillo en sus ojos al ver que alguien le haya dado tanto dinero
El niño se sorprendió tanto que salto de alegría, «Muchísimas gracias, señora!», yo me alegre por él y lo corregí de manera juguetona, «Jeje, no hay de que cariño y no me digas señora, es señorita» el niño se disculpó y me pregunto como me llamaba, «Me llamo Sandra, como te llamas nene?», entrelacé mis manos y las pase sobre mi estómago, El niño sosteniendo su bote me respondió muy alegre de hablar conmigo, «Pablo, me llamo pablo, pero mi mamá me dice Pablito», Este niño realmente se sentía a gusto hablando conmigo y yo le seguí con la plática, «Awww, que lindo nombre Pablito, vienes con tu mami?» Pregunto mirando alrededor por si aparecía, pero no parecía haber señales de que pablo estuviera acompañado, «La verdad no, mi mami se fue con un señor al baño, pero ya hace ratito, me dijo que la esperara aquí», respondió pablo de manera tranquila
Esto me extraño, pero algo me dice que no es la primera vez que Pablito se queda solo en la calle, «Pablito? Por qué estás solito pidiendo dinero?», le pregunte de manera tranquila, pero con un poco de preocupación, «Pues dice mi mami que debo pedirle dinero a la gente para que podamos comer, pero casi nadie me da» respondió de manera triste, esto para mí conmovió y a la vez preocupó más, por lo que saque de mi bolsa otro billete, pero de $500, «Ten Pablito, eres un niño y debes comer bien y vestir bien, tienes la ropa malgastada y sucia, corazón» Respondí con tristeza al ver un niño en pésimas condiciones, Pablito agarro el billete que le di y me pregunto si con ese dinero podrá tener ropa tan bonita como la suya, Esto me alegro, «Claro! Te verás guapísimo corazón, ¿qué tal me veo?», le pregunto posando de forma amigable mi ropa
Pablito vio con detalle mi ropa ajustada y a la vez muy femenina que hacía honor a mi figura «Se le ve muy bien señorita Sandra, y más sus pantalones negros» esto me llamo la atención, ya que sabía que mis jeans eran bastante apretados y no era fácil quitarles el ojo a mis glúteos, «Qué zona? ¿Esta?», me volteo dándole la espalda y mirando sobre el hombro preguntándole, «Esta parte te gusta, crees que me veo bonita?», Pablito parecía bastante maravillado al ver mi cuerpo y se notaba en sus pantalones rotos y sucios, «Se ve muy bonita señorita, se ve todo bonita jeje», Yo me volví a voltear y me agache para estar a su altura y en voz baja le pregunte si quería ver con más detalle, «Oye Pablito, Quieres ver un poquito más?», pregunte con un tono juguetón y con picardía, Pablito tuvo curiosidad y me asintió con la cabeza
Me volví a parar y tome a Pablito de la mano y me lo lleve a un pequeño callejón que parecía abandona y con muchos contenedores de basura donde nadie podría molestar, ya que mi idea era no solo mostrar un poco de mí, sino que también hacer «Cositas»
CONTINUARÁ…
Fin de la primera parte mis amores, espero les haya gustado muchísimo y los haya excitado aún que sea un poquito, la 2 parte será más picante y erótica, téngalo por seguro y a continuación les dejo mi LINK de TELEGRAM para estar más en contacto para ideas o sugerencias, los quiero Bye
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