Mi primer bully y mi madre
Historia acerca de mi primer bully y mi madre. Inspirada en hechos reales. .
Los acontecimientos que desencadenaron el fetiche por mi madre comenzaron antes pero Daniel fue probablemente mi primer bully. Yo tenia aproximadamente 12 años y eramos compañeros de primaria. Ya se imaginaran lo que pasaba por la mente de los mocosos a esa edad y una de esas cosas era opinar de las madres de los demas. Principalmente para molestar claramente.
Yo era timido en aquel entonces y Daniel tenia una personalidad dominante. Tambien era mas fuerte porque hacia deporte y tenia una contextura mas grande. Le gustaba molestar a los demas y yo era una de sus victimas preferidas.
Era mas avispado tambien en cosas del sexo. Tanto el como otros compañeros hablaban sobre la paja y yo no sabia que era ni como se hacia. Finalmente un dia logre descubrir eso y las revistas porno de mi hermano, los dvds y las fotos escolares de mis compañeras de curso pero esa es otra historia.
La protagonista de esta historia es mi madre. Una mujer de unos 40 años, estatura baja, melena castaña,delgada, pechos chicos/medianos y caderas anchas (ya se imaginaran como era su cola).
Se ve que ella no habia pasado desapercibida para Daniel, porque en un momento (aun lo recuerdo) dijo algo muy ofensivo sobre ella.
» A tu mama se la cogieron en las vias del tren. ¿No ves el culo que tiene?»
Debi haber hecho algo, como un estupido no reaccioné. Esa y otras veces que años posteriores otros compañeros dijeron algo sobre mi señora madre.
Yo intentaba ocultar lo que pasaba, no queria que mi madre se enterase de que me molestaba y menos que decia esas cosas de ella. Pero las madres se dan cuenta de todo y claro que se enteró, mas aun por los chismes de las otras madres.
Mi madre estaba molesta, en ese tiempo trabajaba como empleada domestica en la casa de un matrimonio de dinero y no estaba mucho en casa, entonces lo que menos queria era enterarse de esas cosas. Apenas volvió del trabajo fue a la casa de Daniel para hablar con sus padres.
«¿Ninguno de los dos esta?!» Exclamo mi mama.
«No, se fueron a visitar a unos familiares» Contestó Daniel un poco intimidado por la mujer madura. No esperaba que fuese a confrontarlo asi.
«Bueno, los espero». Dijo mama decidida. Pasó a la casa de Daniel y se sentó en la sala. El mocoso no perdió detalle de sus nalgas.
Lejos de calmarse mi madre lo increpó.
«¿Por que molestas a mi hijo? ¿Y que son esas cosas que andas diciendo de mi?»
Daniel intentó negarlo pero no pudo. El mocoso era atrevido asi que intentó suavizar la situacion.
«No, no es cierto Doris» Dijo llamandola por su nombre.
«Con Dieguito solo jugamos, nada mas. Somos amigos». Continuó tratando de convencerla.
«¿Ah si? ¿A eso le llamas jugar? Espero que no vuelvan a pasar estas cosas entendiste?»
Daniel asintió con la cabeza intentando hacer el papel de niño bueno.
«Y me enteré de otras cosas que dijiste de mi».
«Son solo bromas que hacemos. Ademas Diego debería haberme puesto un freno, es culpa de él tambien. Si alguien me dijera algo de mi mama la defenderia a los golpes».
Mama pensó que tenia razon de algun manera.
«Igualmente tenes que respetar a las mujeres mayores. Esas cosas no se dicen».
Daniel se sintió confiado, era atrevido y decidió arriesgarse. ¿Que era lo peor que podia pasar?
«Perdon Doris, dijo nuevamente llamandola por su nombre, a ella le sorprendia que el mocoso la llame asi. Pero no puedo evitarlo, yo te respeto pero a veces hablo de mas.
Mama lo observaba.
«Es que, con todo respecto, estas muy buena Doris».
«¿QUE??»
«Si Doris, estas buenisima. Todos los chicos hablamos de vos».
«¿De que?» Preguntó ella ingenuamente.
«¿Y de que va a ser? de tus tetas, de tu culo. Nos matamos a pajas con vos.»
«PENDEJO ATREVIDO!». Dijo dandole una bofetada.
A Daniel le dolió pero se dio cuenta de que ahora tenia las de ganar.
«Cometiste un error Doris. No debiste haber hecho eso».
Tenia razon, no solo por pegarle a un chico, sino por estar sola con el en su casa. Era su palabra contra la de ella.
«Ademas seria una lastima que siga molestando a Dieguito, tal vez ahora haga cosas peores…»
«Por favor no». Dijo la mujer que habia pasado de estar enfadada a preocupada. Estaba visiblemente alterada.
«Tranquila Doris». Le dijo Daniel dandole un vaso con agua para que se calme.
«Ya vamos a llegar a un arreglo».
Mientras tanto yo estaba en mi habitación jugando a un videojuego en la computadora, me parecia raro que mi madre tardase tanto pero no podía hacer otra cosa que esperarla.
Entretanto Daniel habia invitado a mi madre a su habitación para hablar mas tranquilos. Mi madre tampoco queria que la mama de Daniel la vea alterada si justo llegaba en ese momento.
«¿Que arreglo Daniel? Decime por favor asi terminamos con esto y me voy a mi casa».
Bueno, tengo curiosidad de saber si son como me las imagino.
«¿Que cosa?»
«Si que sos ingenua Doris ajaj».
Mama estaba resignada.
«Si lo hago nos dejas en paz?»
«Sisi» Dijo entusiasmado. Mama se estaba desabrochando la blusa. Daniel no lo podía creer.
«Segui». Dijo mientras mama se desabrochaba el corpiño quedando en tetas.
«Uhh que tetas tenes Doris». Exclamo el mocoso, eran las primeras tetas que veia en la vida real.
Mama estaba avergonada, eso era un martirio pero su verguenza mutó a asombro.
«¿Que estas haciendo?!» Dijo al ver que daniel se sacaba los pantalones.
«No lo puedo evitar, no lo puedo evitar». Dijo mientras se masajeaba el pene.
Mama miraba para otro lado deseando que termine todo pronto pero no podia evitar mirar de a ratos la pija que tenia el pendejo. Estaba sorprendida del tamaño.
Daniel se pajeaba freneticamente queriendo aprovechar al maximo el momento.
Mama no reaccionaba y el se aprovechó de eso. Puso su verga en la mano de mi madre para que lo pajee. Ella lo hacía con asco pero tal vez asi todo iba a terminar mas rapido.
Daniel se estremeció al sentir la suave mano de mi madre en su verga.
Hacia ya un tiempo que mi madre no veia una pija, ya que no estaba teniendo sexo con mi padre y aquel miembro le parecía agradable a la vista.
«¿Te gusta mi pija?»
«Es bastante grande para tu edad». Le contestó sinceramente ella.
Eso pude notar al comparar en el vestuario de natacion. Tu hijo siempre se esconde y trata de que no lo vean. Debe tener un pitito.
«Pobre mi hijo. No seas malo con él si?»
» Jaj, bueno bueno». Decia Daniel de forma jocosa.
Mi madre acelero la velocidad y el mocoso estaba por acabar.
«Ahhh ahhh siii». Jadeaba.
Mama agarró una prenda de Daniel y la puso sobre su pene para que no salpique para todos lados. Varios chorros de leche salieron de su verga y fueron a para alli. Daniel estaba extasiado. Sentia que estaba en el cielo.
Mama dejó la prenda, se limpió con un papel la mano y se pusó el corpiño.
«Bueno, ya esta. Tenemos un trato Daniel»
» Sisi» Respondió el mocoso mientras seguia en otra galaxia totalmente satisfecho.
Escucharon la puerta de la calle.
«Son mis padres. Ya llegaron»
Mama se pusó la blusa rapido y agarró un cuaderno que estaba en la habitacion. Fueron al encuentro de los padres.
«Doris, que sorpresa. ¿Que haces aca?» Consultó la madre de Daniel mientras el padre no perdía detalle de mi mama.
«Ah nada, Vine a buscar la tarea para mi hijo que hoy no pudo ir a clases» Dijo señalando el cuaderno que tenia en la mano.
Saludó amablemente sin decir nada acerca del motivo que hizó que fuera alla en primer lugar.
Al rato llegó a casa y no dijo nada. Preparó la comida y no pasó nada relevante. Por su parte Daniel se hizo otra paja con las imagenes frescas en su cabeza de las tetas de mi madre y sus manos subiendo y bajando en su verga.
FIN
Espero que les haya gustado, comenten si fue asi. Tambien si quieren una segunda parte.
Hasta la proxima!
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