Mi viaje a Mexico
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Les cuento algo que ha marcado mi vida. Para que puedan comprender bien les hare un recuento de los sucesos que forjaron el antecedente de este relato. Para ponerles al tanto de las fechas, el suceso central del relato me ocurrió hace uno 6 meses cuando visite por motivo de trabajo la ciudad de México. En esa fecha estaba asistiendo a un seminario de mi profesión de maestra por una semana. Aprovechando el viaje planifique quedarme otra semana más para conocer la ciudad. Contaba con la ventaja de que tengo un gran amigo, llamado Luis. Él vive allá junto a su esposa trabajando para un organismo internacional. Así que planifique todo y me prepare para el viaje.
Hace más de un año y medio, en diciembre del año 2011, Luis estuvo en mi país de visita y se quedo en mi casa, donde vivo con mi esposo. Una noche salimos de fiesta los 3 y llegamos tarde de la noche con una muy buena borrachera. Luis es un tipo fuerte, muy amigo de mi esposo, y unos 6 años menor. Es un tipo alto, muy agradable y el tipo de hombre que no pierde oportunidades. Esa noche mi esposo se fue a acostar por el exceso de alcohol que tenia y Luis y yo quedamos hablando boberías en la sala.
Yo vivo en un apartamento de 3 habitaciones, uno para cada hijo. Ellos estaban de vacaciones donde sus abuelos por fin de año. De la sala donde estábamos hay un pasillo que termina en tres puertas cada una para una habitación. Yo estaba, como decimos nosotros los dominicanos, contentona, es momento que los tragos te dan soltura que liberas un poco tus inhibiciones.
Bueno volviendo a la idea, de la sala decidimos irnos cada uno a sus respectivas habitaciones. Luis en un gesto amigable me tomo de la mano y me dijo vamos. Yo me quite los tacones y camine descalza por el pasillo. Al final del pasillo me detuve para despedirme y nos quedamos como atolondrados entre darnos la mano, un abrazo o un beso en la mejilla. Luis no dudo y me abrazo besándome los labios sin dejarme retirar. Estaba en medio del pasillo besando a otro hombre, no lo podía creer, pero cedí a ese beso. Pensé dentro de mí: que mas da es solo un beso. Y el beso se convirtió en un apasionado momento que ninguno quería terminar. Luego de prolongados minutos nos separamos y yo intente irme a mi habitación, pero Luis me agarro con sus manos sin dejarme reaccionar y me metió en su habitación o mejor dicho la habitación que él ocupaba en mi casa.
Arrempujada como si quisiera ir más veloz que mis pensamientos o huyéndole a mi arrepentimiento me tiro a la cama. En la cama comenzó a desnudarme y le dije: Luis por favor no. Pero para el todo lo que decía significaba mas deseo de continuar. Con una negación en mi boca ahogada por los tragos e invadida por el deseo y el deslumbramiento de un momento así; con un hombre diferente, con alguien que me deseaba y que veía como sus ojos iban quemando cada parte de mi piel que iba desnudando, quede entregada a aquella pasión que fue uno de los mejores orgasmos que me han hecho vivir. Me hizo de todo y me entregue a plenitud. Pero esto es solo parte de lo que quiero relatarles.
Salí de Dominicana vía Miami para llegar a ciudad México. Llegue día domingo para iniciar el seminario que sería de lunes a viernes. Luego me mudaría a casa de Luis y su esposa por la segunda semana. Esa noche Luis y su esposa me visitaron y cenamos juntos. Los días pasaron agotadores hasta que al fin llego el viernes y realice el Check Out del hotel para irme a casa de Luis. Llegamos a su apartamento y subimos mis maletas. El lugar estaba vacío, y le pregunte a Luis: ¿donde esta Isabel?. Luis me respondió: Ella salió del país por 2 semanas a USA para trabajos en la sede de PNUD.
Quede inquieta por que lo que había pasado entre nosotros no era mi intensión que volviera a suceder. Luis noto mi preocupación y me dijo: no te preocupes que aquí no hay lobos, nadie va a comerte. Me llevo a la habitación que ocuparía y me dejo sola. Antes de irse y con su picara sonrisa me dijo: prepárate que esta noche vamos a un sitio muy bueno aquí, así que vístete para fiestear. Y añadió: y mientras menos ropa mejor. Y salió riéndose. Mas tranquila acomode la maleta, descansé un poco hasta que llego la hora de salir. Yo soy una mujer alta de 5’ 11” delgada, de piernas muy bien formada, buenos pechos no tan grandes pero si bien posicionados lo que me permite muchas veces andar sin sostenes. Me puse minifalda, una blusa corta, tacones y solo ropa interior en la parte de abajo.
Salí de la habitación y ya Luis me esperaba. Como buen dominicano me dijo: coño la verdad que estas buenísima. Hoy la pasaremos muy bien. Fuimos a un bar, entramos y fuimos a una mesa donde había 3 tipos más. Pensé que solo era para saludarlos pero no ellos estaban esperándonos. La mesa era tipo U con un sillón enterizo alrededor de la mesa. Ellos estaba sentado en el lado derecho por lo que Luis indico que me entrara por el lado izquierdo y me corriera hacia el que estaba mas adentro de la mesa. En ese momento Luis para ayudarme me empujo un poco por las nalgas, sabiendo yo que era para aprovecharse o para marcar territorio con sus amigos.
Nos presento de la siguiente manera: Esta es la amiga que les conté, quede perpleja preguntándome a que se refería con eso de contar, y continúo diciendo: Teresa y él es William. Estábamos lado a lado y el acerco su cara a mi mejilla y medio un beso, diciendo en un español mal hablado: hola ¿como estas? Respondí: muy bien gracias. William que también trabajaba para el organismo internacional era afroamericano, más pequeño que Luis pero muy fuerte. Pareciera que solo viviera para hacer pesas.
Luis me señalo al segundo diciéndome: Teresa este es Rubén. Rubén era de pelo rubio, con pequeñas entradas en su cabeza, con un candado en su boca y arete en sus orejas. Tenía un tatuaje en el brazo de un alambre de púas a todo el rededor. Luego me señalo al último que se llamaba Fernando quien me indico que era mexicano.
Estábamos los 4 sentados en aquella mesa y Luis me pide una margarita, para enseñarme a tomar tequila. Llego el trago y bebí, y continuaron llegando más y ya era shot de tequilas y entre risas y cuentos sentí como Luis comenzaba a manosearme las piernas. Intente detenerlo disimuladamente para que los demás no se dieran cuenta pero fue imposible. El continuo llevando sus manos por mi entre pierna. De la manera que menos se notara le dije al oído: Luis no jodas que estamos en público. El me respondió al oído sin sacar sus manos: hoy voy a cogerte como nunca te lo han hecho. Yo no le respondí solo atine a emitir una sonrisa.
Luis continúo su manoseo hasta que logro llegar a mis pantys. Por encima de ellos quería masajear mi clítoris y lo hizo. Luego con una gran habilidad metió sus dedos por debajo de mis pantys y comenzó a masturbarme. Entre los tragos y su fricción no sabia como ponerme para disimular. Era difícil pues del otro lado tenia a William que podía darse cuenta. Decía dentro de mí: la verdad que las cosas de este loco no tienen comparación con nada.
La verdad que ya sabía que terminaría haciéndolo con Luis y le dije: Luis cuando nos vayamos debemos pararnos en una farmacia para que compres preservativos por que creo que estoy en plena ovulación. El respondió: ya veo por eso estas tan lubricada. Yo solo volví a manifestarle una sonrisa. A partir de aquí Luis tenía una sonrisa malévola algo que no podía comprender y no era por el uso del condón.
Estaba luchando por que mi cuerpo no respondiera a la masturbación pero la situación tan publica me hacia responder ante tan buen manejo de esos dedos. Me hizo abrir un poco más las piernas e introdujo su dedo dentro de mí. Sus movimientos se convirtieron en introducciones y masajeo de mi clítoris. De repente siento otra mano en mi pierna izquierda. El susto me corto la inspiración que llevaba. De inmediato reaccione a quitar esa mano, pero entre Luis y William me agarraron las manos y continuaron manoseándome. No lo podía creer. Me dijo Luis: te soltamos si te bebes esta ronda de tequila que esta en la mesa. Eran los cuatros shot que recién nos habían traído. Yo para salir de la situación accedí. Los resultados fueron una buena borrachera.
Nos fuimos al apartamento de Luis y creo que hasta me dormí en el camino. Cuando nos paramos en la entrada del edificio, veo a los 3 amigos de Luis que vienen hacia nosotros. Le dije: ¿Luis que esta pasando? Él me dijo: Nada que ellos vienen a terminar de bebernos un trago y luego se van. Yo le respondí: bien yo me voy a dormir que quede bien claro.
Subimos los 5 por el ascensor y veía como esos tipos me miraban. Sospechaba que había algún plan conmigo. Llegamos y entramos al departamento, de inmediato todo cambio. Luis y William me agarraron por los brazos. Yo le dije a Luis: Luis por favor soy tu amiga y el me respondió: y la esposa de mi amigo y te acostaste conmigo y no solo disfrutaste sino que me rogaste que te tratara como una puta. No lo recuerdas, que me decías soy tu puta. Que cuando te lo hacia como perrito me rogabas que te pegara en las nalgas y tu marido una habitación mas allá. Ese sexo contigo aquella noche que marco el placer por el sado. Y ya vez lo que es la vida, te trajo a nosotros para que podamos disfrutarte durante esta semana. Pero oigan lo mejor, continuaba diciendo, la putica esta mientras le daba dedo en su coño en el restaurant me dijo al oído que comprara preservativos por que ella estaba ovulando. Esto es lo mejor pues jugaremos a la ruleta con ella durante la semana, no la dejaremos que tome nada y cada uno tendrá un día entero para preñarla. Para que de esta semana le quede un recuerdo que llevara por 9 meses en sus entrañas y que vivirá para siempre junto a ella.
Todos rieron y el añadió: que te gustaría que saliera un dominicanito, un inglesito, un mexicanito o un negrito. Se rio a carcajadas y añadió a ver como le explicas a tu marido de donde salió en negrito. Llore, roge, suplique y les implore que no lo hicieran. Pero estaba decidido. Me desnudaron en la sala, todos me manoseaban, me agarraban las nalgas, las piernas, las tetas, todo. Me llevaron a la habitación y me atravesaron en la cama. Me pusieron boca arriba mis senos quedaban al aire para ser observados, manoseados, apretados. Mis hombros lo pusieron al borde de la cama quedando en el aire mi cabeza. Ataron mis manos a las patas de la cama con sogas y tipe rap. Tenía a William sosteniéndome por las piernas y a Luis parado frente a mi cara. Volví a rogar y solo conseguí una bofetada.
Luis me hizo inclinar la cabeza hacia abajo, saco su pene y lo introdujo en mi boca. Me dijo: puta cuernera mámamelo. La posición en que estaba con la cabeza inclinada le permitía a Luis una entrada total de su miembro. Comenzó penetrarme balanceándose con mucha velocidad. Me ahogaba en cada embestida, tenia miedo de ahogarme si vomitaba pero el seguía sin compasión. Sentí como William se posicionaba encima de mí. Mis piernas la pusieron en sus hombros para que le permitiera una entrada total de su aparato. Sentí la primera estocada, él lo tomo con su mano y lo frotaba sobre mi clítoris. Me moví para no dejarlo entrar pero era imposible como estaba. Luego sentí como se abrió paso dentro de mí. Aun con las secreciones naturales de la ovulación sentí como se abría mi túnel por tamaño tan grande del semejante pedazo. Luis seguían metiéndolo en mi boca y se agarraba de mis senos para penetrarme mas hondo cada vez. Luis fue el primero en venirse, derramando en mi boca toda su leche obligándome a tragarla toda.
Terminado Luis siguió dirigiendo, permitiendo que Fernando me la metiera también en la boca. William seguía dándome como loco, algo tenían que haber tomado estos tipos. Luego dándome unos enviones brutales como si quisiera romperme por dentro eyaculo dentro de mí. Luego que le volvió el aliento le dijo a Luis: ya esta hecho el daño, me le vine en el cuello uterino, lo más profundo que pude, con las piernas para arriba. Así que vamos a sostenérselas en alto por lo menos media hora mas para que los espermatozoides míos lleguen al ovulo de esta puta y quede totalmente preñada. En 9 meses sabremos de quien nosotros es. Y soltó una carcajada que fue secundada por Luis.
Fernando seguía metiéndome su parte en mi boca. William me sostenía las piernas hacia arriba para que no se saliera su semen. En eso Rubén dice: señores yo no lo he metido aun. Luis le dice: deja que acabe Fernando que esta puta tiene boca para tragarse 20 guebos. Rubén insistió y dijo: no por la boca no. Y tanto William como Luis le dijeron por el coño no, pues debe quedar bien definido la preñes de uno de nosotros. Ok respondió Rubén, mi idea es por el culito. Yo oí eso y empecé a llorar aun teniendo el pedazo de Fernando en la boca. Ellos dijeron que estaban de acuerdo.
Rubén se metió por debajo de William que estaba parado agarrándome las piernas hacia arriba, y se fue colocando de lado y perpendicular a mis nalgas. Sentí la fuerza de ese miembro bien erecto presionando hacia dentro como si tratara de hacerme una perforación y era que no tenia nada de lubricación, pero el siguió insistiendo hasta que mi esfínter cedió a tanta presión. Su cabeza me cortaba pero era para dentro que iba. Me rompió el culo literalmente, fue muy doloroso. Pero siguió dándome cada vez mas duro. Yo lloraba del dolor pero con el pene de Fernando en mi boca no podía sollozar. Al ver mi desesperación Fernando de tanta excitación se vino en mi boca, agarrándome de la mandíbula y la cabeza para penetrar lo mas profundo derramando su leche en mi garganta. Me ahogue, tosí, trague, seguía tosiendo a tal nivel que se asustaron y me soltaron una mano para que me pusiera de lado. Solo puede torcer mi torso pues estaba agarrada de los pies con las piernas hacia arriba y clavada por el culo. Volvieron a atarme y seguí siendo violada por mi culito sin que me dieran tregua. Finalmente Rubén se agarró a mí y comenzó a bramar hasta que lleno mi culito de su leche.
Debieron haber pasado más de 1 hora desde que llegamos a la casa. Había sido violada por un amigo y 3 desconocidos. William pregunto: ya debe haber pasado tiempo suficiente para que mis espermatozoides hayan llegado a su trompa. Es que quiero preñarla así va a pagar los cuernos que pego contigo. Todos rieron. William soltó mis piernas. De inmediato las ataron a las patas de la cama dejándome desnuda y adolorida.
Luis se acercó y me dijo: Teresa serás nuestra esclava durante esto 5 días. Cada uno de notros hará lo que le plazca contigo así que prepárate a ser obediente. Llore, el procedió a besarme y al final me mordió el labio inferior de la boca produciéndome una cortada que sangraba. Me dijo: Esa boca tuya me encanta.
No sabia que hacer, bueno nada podía hacer realmente. Entonces Fernando dijo: señores esta puta no ha sufrido, solo le hemos roto el culito pero después todo ha sido placentero. Propongo jugar con nuestra esclava. Rubén pregunto: ¿Qué propones? Y este respondió tatuémosla con nuestras iniciales asi a demás de un mocoso para recordarle esta semana también tendrá una marca en su piel para que todo el mundo le pregunte.
Bien ¿pero como? No sabemos tatuar dice William. Rubén responde: hagámosle como las vacas. ¿Como así? pregunto Luis. Ya verán. Luis búscate perchas de ropa de alambre y un alicate. Luis responde ok y trae varias perchas. Rubén agarra una y con el alicate dobla la punta en forma de una R. pregunta: cual es esta letra y los demás responden una erre. Si así es. Volteemos esta puta boca abajo y amárrenla bien por que va a gritar más que un chivo. Ahora pónganle los pantys en la boca y séllensela. Rubén y William salieron del cuarto con la letra y volvieron unos 10 minutos después con algo agarrado por el alicate. Casi no podía ver. Luis me agarro por los brazos y hombros y Rubén procedió a realizar lo que tenia planeado. De repente, sentí una quemadura en mi nalga derecha, insoportable, un dolor que arrasaba las terminaciones nerviosas de mi columna, me retorcí, grite con todas mis fuerzas llegaba a lo maximo soportable y me desmaye.
No sé que tiempo pasó pero me despertaron echándome agua. Mi primera reacción fue sentir el ardor de mi nalga. De inmediato me dijeron ¿ya estas despierta puta?, que ahora viene la efe, y de inmediato entro de nuevo poniéndome el tizón del metal ardiendo sobre mi nalga izquierda. De nuevo me estremecí, es que es inexplicable el dolor que eso produce, tenias ganas de vomitar del ir al baño, hasta me hice pipi en la cama. Luis dijo: puta de mierda te measte en la cama. No te preocupes que hay mismo vas a dormir. Tenia en sangre viva las marcas que me acababan de hacer, con el método mas doloroso y con una marca permanente en mi piel.
Seguía boca abajo, y William grito volteen boca abajo la puta de mierda esa. No pueden imaginarse el dolor que me produjo apoyar mis nalgas en la sabana. Vi como manchaba de sangre la sabana. Amarrada totalmente boca arriba Fernando voceo: vengan que ya la puta esta en posición. Esta ves vería lo que me hacían. Estaba desesperada cuando vi entrar a Rubén con un hierro al rojo vivo en forma de ele. Debe medir una pulgada de altura. Luis le dijo: colócala que la curva de la L envuelva el pezón de manera que todo el que la toque sepa que lleva mi inicial y que ella fue mi puta. El corazón se me salía, sudaba, temblaba, casi convulsionaba al ver como bajaban este hierro hasta colocarlo alrededor de mi pezón derecho. La quemadura fuera tan fuerte que me desmaye de inmediato. Volvieron a echarme agua y desperté. Ya tenían preparada la letra W. y William pónganla en otro pezón que el mismo quede entre las 2 ve. Y solo recuerdo el dolor posterior luego que volvieron a despertarme de mi inconciencia.
Así pase cada día de esa semana sufriendo de nuevas torturas y recibiendo de 3 a 4 venidas por cada uno de ellos en cada día diferente, de manera de lograr preñarme uno solo ese día que le tocaba. En la parte trasera de mi cuello una letra P de mas de 2 pulgadas para indicar que soy una puta.
Marcada para el resto de mis días por esa semana, ahora 6 meses después sentada frente a este computador me veo la panza gigante de un hijo que no se cual de ellos es el padre. De mi esposo estoy separada pues el no pudo aguantar verme marcada como una res y saber que había sido una mujer de otros hombres.
Marinerosado
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