PERDIDOS II (CAP 32) EL CHANTAJE A LA EMPRESARIA (Primer parte):

La inescrupulosa amiga de Judith, se “divierte” chantajeándola, y cobrándole muy caro la no publicación del libro que revela su vida secreta,.
CAPITULO 32:

                                   EL CHANTAJE A LA EMPRESARIA (Primer parte):

La inescrupulosa amiga de Judith, se “divierte” chantajeándola, y cobrándole muy caro la no publicación del libro que revela su vida secreta,

Las amigas llegan a la empresa, y Judith la hace pasar a su oficina, para darle el dinero del chantaje a solas y sin que nadie las vea, para evitar tener que dar explicaciones, sobre todo a su hijo mayor, Jonás.

Antes de irse Jaky le vuelve a recordar que se estuviera pendiente al teléfono.

Cuando Judith queda sola en su oficina, se sienta en su sillón de jefa, e inmediatamente siente un revoltijo de estómago y una fuerte angustia y nervios la invaden en ese momento.

No podía creer en que manos había caído, no podía creer lo resentida e hija de re mil putas que había resultado ser su amiga Jakeline. Y menos podía creer o llegar a imaginarse hasta qué punto la Colo sería capaz de llegar con todo esto.

Pero a mal tiempo buena cara dice el viejo y conocido refrán, y Judith tuvo que fingir que nada pasaba, que estaba todo bien y poner buena cara para que nadie se diera cuenta de lo hecha mierda que estaba por dentro.

El tiempo fue pasando (los días y semanas) y las amigas no volvieron a hablarse durante ese buen periodo.

Judith siempre seguía durmiendo con alguno de ellos en cada noche, y al principio le costó muchísimo fingir bien estar y buen humor con cada uno de ellos, en especial con Jonathan por su entrevero amoroso con su amiga y todo lo que ello aportó a esta situación de hoy. Pero mami todo lo perdona, todo lo entiende y todo lo supera.

Entonces, durante todo aquel tiempo, y desde que desde su casa llevó a su amiga al trabajo, Jakeline sintiéndose triunfal y victoriosa por todo lo “logrado” con su amiga, y sabiéndola a Judith arrodillada e implorante (por su silencio) a sus pies, ese mismo día y con la plata que le dio su amiga (cómo parte del chantaje) fue a un finísimo restaurante a festejar con una buena cena de finos platos y caras bebidas.

Ella sentía que su vida había cambiado para siempre, y que su amiga de ahora en más le pagaría todos los caprichitos de mujer rica, además de acompañarla a las fiestitas “XXX” de la gente más selecta y acomodada de la ciudad, eso sin contar de que a partir de ahora su amiga también sería su “cachorra” sexual y personal.

Al día siguiente Jakeline fue al canal de TV donde trabajaba, y se presentó en la oficina de Don Tiburcio a charlar un rato con su amigo, y mostrarle un libro muy especial de su autoría, que revelaba una perturbadora vida secreta de la famosa empresaria Herzoch, una conocida por él desde hacía ya varios años, y de quien obtuvo solo rechazos a todos los halagos y regalos.

Ellos charlaron largo y tendido obre el libro “LA VIDA SECRETA DE LOS HERZOCH EN LA ISLA”, Ella le comentó cómo había obtenido toda la información, y le dijo que mucho (por no decir casi todo) se lo contó su propia amiga.

Le contó además que su amiga le confesó la apertura que había tenido en su vida sexual después de semejante experiencia de vida, y que cuando ella (Jakeline) le contó de la existencia del grupo de solas y solos (del cual Jaky y Tiburcio) eran miembros, la amiga le manifestó su voluntad de entrar en él.

Y que ella (la Colo) había pensado en arreglarle una cita con su amiga, cómo para empezar a incorporarla a la empresaria en el selecto ambiente.

Don Tiburcio que en ese momento tenía en sus manos y lo ojeaba mientras la escuchaba muy atentamente a su “amiga con derecho” y empleada Jakeline Bauer, no podía creerlo. Al parecer y según el libro de Bauer y lo que ella le contaba, lo que había vivido la empresaria y su familia, no era lo que parecía o se había disco hasta este momento, sobre que los Herzoch habían vivido una tragedia con suerte.

Según lo que arrojó la “investigación periodística” de Jaky Bauer, la empresaria más conocida de Crisao, había ido a pasar unas “vacaciones xxx” con sus hijos, y allí fue donde aparentemente algo salió mal y terminaron perdiendo el yate de lujo propiedad familiar.

Y no terminaba de salir del asombro por este giro inédito de la historia de la odisea de los Herzoch, cuando Don Tiburcio escucha de boca de la periodista, que la recatada empresaria de bajo perfil era una depravada sexual reprimida, que se había alegrado de escuchar sobre la existencia de un grupo de fiestitas XXX de la alta sociedad crisaoense, y que le encantaría participar del mismo. Y obviamente el gran remate de la perversa Jaky Bauer fue decirle a su jefecito que su amiga no tendría inconvenientes en debutar con él cómo una nueva integrante del selecto y secreto grupo de” gente de bien”.

• ¡Y bueno, habrá que ir preparándole la bienvenida a la nueva amiguita del grupito, jejejeje! Dice el viejo sobándose las manos con una expresión perversa en su mirada.
• ¡Viste viejito, te la conseguí a la Judith, tu amorcito imposible! ¡Te estoy entregando a mi amiguita! ….. ¿Que me vas a dar a cambio de una noche con ella? Le dice Jakeline, ya queriendo sacar ganancia del asunto.
• ¡La verdad flaquita hermosa, esta vez te pasaste, esto te lo tengo que recompensar muy bien recompensado, así que déjamelo pensar! ……. ¡Pero, podríamos hacer lo siguiente, una parte te lo puedo pagar ahora, y la otra parte te la doy ni bien me la coja a la Herzoch! ¿Te parece mi amor? Le responde el viejo.
• ¡Jajajaja, perfecto mi viejito hermoso!, pero ¡Seré curiosa! ¿de cuánto estaríamos hablando en principio? Le insiste ella.
• ¡Jajajaja, mierda flaca, no cambiás más! ¿Eh? ¡La avaricia y el oportunismo que te corroe, son tu Némesis! ……. Bueno que se Yo ¿Que querés? Un viaje de vacaciones con todo pago, algo de plata, que te asigne algún puestito más elevado, ¡No sé, decime, ponele un precio Vos a este “notición” que me trajiste nena! Le responde el viejo.
• ¡Jajajajaja, bueno viejito, no sé, déjamelo que lo piense, pero en principio un chequecito me vendría bárbaro! Le responde ella.
• ¡Jajajajajaja, que hija de puta que Sos! “¡Un chequecito me vendría bárbaro”, me dice la muy hija de puta! …… ¡A tu culo nunca jamás me lo dejaste gratis, y ahora tengo que pagarte por el de tu amiga! …….. ¡Me vas a dejar en la ruina nena, me vas a dejar en la ruina, jajajaja!, pero por cogerte te pagaría siempre bebota hermosa, y encima ahora me la voy a clavar a la Herzoch, no sé cuántos años me quedarán en este mundo, pero me voy a ir al puto infierno habiéndome cogido a las dos hembras más hermosas de este planeta, la Bauer y la Herzoch, ¡Que hijo de puta! Comenta congratulándose victorioso el viejo.
• ¡Jajajajaja! Bueno viejito divino, me voy a trabajar, ahí te dejo el libro para que lo leas tranquilo, y te deleites con las aventuras de tu amorcito imposible con sus 4 cachorritos. Le dice ella, se levanta de la silla, se besan en los labios y se va de la oficina de su jefe.
• ¡Andá, andá y ponete a trabajar que en la vida no todo se gana abriéndose de patas, lo que pasa es que Yo te mal acostumbré muy mal cuando eras una nenita todavía jajajaja!. Le grita Don Tiburcio, cuando ella ya había salido de su oficina.
• ¡Jijijijijiji! Se va riendo Jaky por el pacillo mientras escuchaba las palabras y carcajadas del viejo Tiburcio.

Jakeline estaba eufórica, todo le salía tal cómo ella lo había planeado, tal vez en un par de días la tendría a su amiguita puritana arrodillada chupándole la verga al viejo que rechazó tantas veces, y ella no solo tendría la satisfacción de verla a su amiga cómo puta, sino que a Jaky el viejo le pagaría por su bella amiga, y así por fin empezaban a concretarse los tan ansiados planes de Jaky con su amiga.

Al día siguiente Jakeline Fue a ver a Oscar, otro miembro del “selecto grupo de solos y solas”, para hacerle una propuesta.

Oscar era el padre de Ramirito el admiradorcito de Jaky) que pronto cumpliría sus tiernos 18 años, y papi quería regalarle su debut sexual para el cumpleaños.

Oscar, quien se la había cogido varias veces a la Colo, y que varias veces le pidió hacerlo debutar a su Ramirito, pero ella siempre se lo rechazó muy elegantemente.

Ramiro sabía de la amistad entre la periodista “amiga” de en su calidad de empresaria, y la empresaria Herzoch, y en varias oportunidades Ramirito le manifestó su tierno enamoramiento o atracción por su amiga, a quien solía ver en las entrevistas que le hacían en la TV ya sea en su calidad de la más importante empresaria de Crisao, o en su calidad de miembro del club de beneficencia en el que participaba.

De ahí la idea fija de Jaky, que la primera vez del chico, se la de su propia amiga y objeto de las juveniles pajas del chico.

Entonces ella ella fue primero con su amigo Oscar, a él le contó más o menos lo que a su jefe, y su amigo tampoco podía creer lo que escuchaba de la apuesta, acomodada y famosa empresaria.

Entonces también a él le regaló una copia del libro “LA VIDA SECRETA DE LOS HERZOCH EN LA ISLA”. Y al igual que Tiburcio, óscar la escuchaba a Jakeline totalmente incrédulo y fascinado, y muy contento del “regalito” que Jaky le tenía a Rami para su cumpleaños. Y no pudo evitarse la tentación de pedirle a Jaky que le reserve una noche con su hermosa amiga.

Ahora sí: Sólo restaba comunicarle a Judith las 3 citas que tenía Jaky arregladas para ella en los próximos días venideros, y poco le preocupaba ya la reacción de su amiga, quien desde un principio seguro que se negaría rotundamente, pero entonces entraba en escena el arma del chantaje y la siempre latente amenaza de publicarle el libro” LA VIDA SECRETA DE LOS HERZOCH EN LA ISLA”, para que toda la ciudad, el país y por qué no el mundo, se entere de la escandalosa historia.

Seguro que cuando Judith se entere de en el sub mundo que la había acabado de meter su “amiguita”, la putearía de arriba abajo, le rechazaría todas y cada una de las citas XXX que tenía por delante, lloraría un poco y finalmente terminaría cediendo ante el temor de que aquel puto libro de su amiga saliera a la venta y saliera a la luz todo lo que pasó en la isla.

Jaky se excitaba de solo imaginarla a Judith, arrodillada frente a ella implorándole que le cancele la cita con el viejo Tiburcio.

Dos días después, era un sábado y Jakeline fue a visitar a su amiga a la finca, para charlar con ella y comunicarle todas las noticias que le tenía para darle.

Esperó entonces hasta la noche, para estar las dos solitas en el cuarto de su amiga.

Eran más de la 5 de la mañana cuando luego de un largo trasnoche entre charlas amenas y juego de cartas entre las amigas y los hijos de Judith, los chicos se fueron a dormir y las amigas fueron al cuarto de Judith a conversar un rato antes de dormir.

• Amiga, ¿Te acordás que la última vez que nos vimos te dije que estuvieras atenta a mi llamada para recibir las novedades de lo que quería que hagas por mí? Le pregunta la Colo a su amiga, mientras se sienta en el sillón frente a la cama, y Judith se sienta en la cama frente a ella.
• ¡Sí, claro, me acuerdo perfectamente y me acuerdo lo nerviosa que estuve en los siguientes días!…… pero ¿por qué?, al final ¡no me llamaste más! Le responde Judith intrigada y nerviosa, por con lo que le podría llegar a salir su últimamente impredecible amiga.
• ¡Jijijijijiji, no, no te llamé más porque lo que tengo para contarte es demasiado bueno cómo para hablarlo por teléfono! Le responde la Colo.
• ¿Ah sí? …… ¿Y qué es? Le responde Judith, viéndole una mirada perversa y lujuriosa a su amiga.
• ¿Te acordás de Tiburcio Álvarez, mi jefe en el canal de TV? Le pregunta la Colo.
• ¡Si, el viejo baboso ese, un asco el viejo verde, me lo tuve que sacar de encima un montón de veces, re pesado! Le responde ella.
• ¡Jajaja, si ese mismo! ……. ¡No sabés lo enamoradísimo que está de Vos mi viejito! . Le responde la Colo.
• ¡Guacala, te lo dejo para Vos, es un asco! Le responde Judith, perfectamente consciente de que su amiga no le hace cara de asco a nada.
• ¡Jajajaja, ¡Yo ya me lo vengo comiendo desde hace muchos años, no sabés de los apuritos económicos que me ha sacado, los regalos que me ha hecho, y lo bien que se porta con la billetera! Le dice la Colo, viendo en su amiga la tradicional carita de asco y repulsión que le ponía cuando ambas eran más jóvenes y intentaba jactarse de sus “conquistas” frente a la fina dama recatada y puritana de Judith Herzoch.
• ¡Ay si me lo imagino, nunca te habrá hecho faltar nada! Le responde Judith.
• ¡Bueno amiga, no te lo imagines más, ……! porque te lo conseguí! ……… ¡Jajajaja, mi viejito está fascinado con la idea de acostarse con Vos! ¡No me lo vayas a matar de un infarto en la cama! ¿Eh? Le dispara su amiga.
• ¿Que? ……. ¿Vos te volviste loca? Le pregunta Judith, muy nerviosa, caminando por todo el cuarto.
• ¡Ay amiga! ………. ¡Además el viejito es re regalón andá a saber con cuanto se pone por cada noche, lo que le pidas te lo da, te lo compra, te lo regala! ……… ¿Nunca hiciste un buen negocio con esta? (le pregunta la Colo agarrándose la concha) … ¡es hora de que te relajes y empieces a disfrutar de la vida! Le dice Jaky.
• ¡Mirá Jaky, a progresar en la vida con la concha es a lo que estás acostumbrada Vos nena! …… ¡Pero Yo estudié, me esforcé y hasta el día de hoy trabajo, y tan mal no me va tal cómo verás! Le responde muy indignada su amiga, sin dejar de agarrarse la cabeza y caminar por la habitación.
• ¡Bueno, bueno Judith! ¿Me vas a dejar que te termine de contar? Le dijo Jaky ya un poco molesta con su amiga.
• ¡Con lo que acabo de escuchar, creo que ya me contaste más que suficiente…! o ¿Hay más? Le dijo Judith ya espantada con los planes de su amiga.
• ¡Jajajajaja, hay mucho más……! Le respondió la Colo con una mirada en sus ojos ciertamente siniestra y lujuriosa.
• ¡Ay Jaky! Exclamó en voz baja Judith sentándose en la cama frente a su amiga, y tomándose la cabeza con ambas manos.
• Bueno, mirá, cómo sabrás Yo ando mucho en el ambiente de “Solas y solos”, y armamos fiestitas XXX y encuentros entre los distintos miembros del grupo, pues ahí te conocí varios admiradores y admiradorcitos. Le empieza a contar su amiga.
• ¿Admiradorcitos? …… ¿De qué hablas nena? ¿En qué mierda andarás metida Colorada hija de puta? Le responde en tono altanero Judith.
• Te hablo de que tengo un amigo que tiene un hijo que está a punto de cumplir sus tiernos 18 y es admirador tuyo, y con el papá queremos que seas su “regalito de cumpleaños”. ¡Amiga, a tus casi 50, una criatura de 18 se muere por Vos! ¿No dejarás pasar esta oportunidad, o sí? Le remata la Colo.
• ¿Vos me estás pidiendo que me acueste con un viejo verde cómo de 70 u 80 y con un pendejito de 18? Le pregunta espantada su amiga.
• ¡Jajajajajaja, que poder de deducción! …. A ver Judith, ya te revolcaste con tus propios hijos, que algunos de ellos por ese entonces tenían la edad de Ramirito, y ¿Ahora me venís con tanto espanto y remilgo? …….. además, en la lista de espera por una noche con Vos, ¡también se anotó el padre! …….. ¡Ay amiga, Sos de campeonato, no hay quien se te resista! Le remata la Colo.

Pero Judith, ya no le contesta más nada a su perversa amiga Colo. Se pone las dos manos en la cara y queda pensativa por un largo momento.

Momento en el que empieza a darse cuenta de que no había opciones a la perversidad de Jaky, porque negarse a cumplirle sus demandas, era la segura publicación del puto libro que la arruinaría social y tal vez económicamente para toda la vida.

Entonces totalmente abatida y derrotada se echa a llorar desconsoladamente frente a su amiga, quien la miraba muy complacida, totalmente deshecha, derrotada y humillada, por ser tan puta o más que ella, por haberse comido a sus propios hijos, y querer ocultarlo contra viento y marea.

Instintivamente al oírla llorando con tantas ganas y sin consuelo alguno, la perversa mente de Jakeline Bauer, la imaginaba a solas con el viejo verde de su jefe, Don Tiburcio (cómo se lo conocía en el ambiente empresarial de la prensa allá en Crisao).

• ¡A ver nena, vení un poquito, acércate, ……! Que buena estás hija de puta, ¡cómo te pienso coger y disfrutar perra de mierda! Le dice Don Tiburcio, mientras Judith, tímida y con cara de repulsión le desfila.
• ¡A ver mamita déjame tocarte un poquito! Le pide el viejo sentado en una silla.

Entonces ella visiblemente contra su real voluntad, se acerca al viejo, y el viejo empieza a manosearle las tetas.

• ¡Uy a ver nena, sacate todo, sacate todo que no doy más! Le dice el viejo, apurándola a que se desvista.
• ¡Ay mamacita, pero que buena que estás hija de tu re puta madre, déjame tocarte un poquito esa conchita hermosa! ……A ver? …… uh, mamacita, cómo te pienso coger. Le dice el viejo, admirándose de la belleza de Judith Herzoch completamente desnuda frente a él.

Entonces, al imaginársela tan humillada, derrotada y doblegada ante el viejo, la calentura de Jaky se disparó por las nubes y no pudiendo consigo misma, quiso desahogarse con su amiga, que lloraba impotente y en silencio frente a ella, sin poder creer, ni mucho menos aceptar a todo lo que su amiga la estaba exponiendo.

Al verla a Judith, tan deshecha, tan abatida y desconsolada. A su amiga le entraron unas incontenibles ganas de “consolarla”.

Entonces Jaky se paró y comenzó a desvestirse, sacándose primero las hermosas botas de cuero negro, luego se sacó su vaquero gris y una vez que quedó solo con un conjunto de corpiño y tanga rojo, se acercó a su amiga Judith, quien seguía llorando en silencio cubriéndose la cara con sus dos manos, y sumida en su llanto incontrolable siendo indiferente totalmente a lo que pasaba a su alrededor.

• ¡Amiga, amiga, no te pongas así de mal por algo por lo que puede arreglarse! Le dice Jaky con Voz dulce sensual y serena, mientras la acaricia tiernamente en la cabeza y su largo pelo castaño claro.
• ¿Y cómo? … ¿Publicándome ese libro de mierda que escribiste de mí y mis hijos? Le respondió ella sin siquiera mirarla y con ganas hasta de abofetearla o algo peor aún.
• Hagamos un trato …… ¿Te parece linda? Le propone la Colo cada vez más excitada.
• ¿Que trato? …… ¿Cuánto vas a querer ahora? Le pregunta Judith sin dejar de llorar y resignada a tener que darle más dinero.
• ¡Jejejejeje, amiguita, en la vida no todo es dinero linda, pero ya que ofrecés, mmmmmmmhh, digamos unos 189 mil esta vez. Le responde la Colo, cómo para no desaprovechar la oferta de dinero, que su amiga desesperada le hacía por motus propio.
• ¿Tanto? … ¿Y por esta vez? Protesta llorando Judith, por la abultada suma, sabiendo que le volvería a pedir más en otro momento.
• ¿Un consejo de buena amiga? ….. no le regatees el precio a tu honor social linda. ¡Te podrías arrepentir toda la vida! Le dice casi en tono altanero Jaky, recordándole que la tiene en sus manos.
• ¡Está bien te los doy ahora! Le dice Judith, levantándose y caminando hasta la caja fuerte que tenía ella en la habitación.

Cuando Judith se los da en la mano, Jaky los guarda en su cartera, y acto seguido, la abraza a Judith y le empieza a besar en la boca, ya muy excitada con la sumisión que había logrado en su amiga.

• Pero la plata, solo es una parte del trato. Le dice Jaky entre beso y beso.
• ¿Cuál es la otra parte? ….. ¿Qué vas a querer ahora? Le responde su chantajeada y sumisa amiga.
• Que hagamos el amor cómo dos buenas amigas que se quieren mucho. Le murmura Jaky al oído, y al término de la frase la besa tiernamente en la mejilla y le sonríe.
• Está bien, y con todo esto ¿Que obtengo Yo? Le pregunta Judith, desesperada ya en su urgente necesidad de recibir algún alivio de todo lo que le esperaba, por evitar la publicación del puto libro de su traicionera amiga.
• ¡Ay bueno Judith, que sé Yo! ……. Bueno mira, déjame bien conforme en la cama, y Yo veo que cita te suspendo, ¿Cuál es la que más quisieras suspender? Le dice Jakeline.
• ¡La del viejo asqueroso ese, por favor Jaky, te lo suplico! Le pide Judith.
• ¡Jijijiji, pobre mi viejito, no sabés las ganas que te tiene! …bueno está bien, Vos cumplime en la camita y Yo veo que hago. Le “promete” la Colo.

Entonces ellas se abrazan nuevamente, y Judith al verse esperanzada y con posibilidades de zafar del viejo, por lo que su amiga le prometió, empezó a besarla apasionada y desaforadamente en la boca metiéndole la lengua en ella, hasta ahogarla por momentos, mientras su amiga le manoseaba las tetas, y de vez en cuando le manoseaba la concha por encima del pantalón.

En ese momento, y aún que Judith no podía excitarse todavía, abrió sus piernas solo para contentar a su amiga.

Entonces y luego de manosearle bien la concha por encima del pantalón, Jaky le desajusta el cinto a su amiga, le desabotona el pantalón y le baja el cierre de la bragueta, metiéndole la mano por dentro de la bombacha blanca que su amiga tenía puesta en ese momento.

Acto seguido Judith hace unos movimientos de piernas y sus pantalones caen al piso, y en ese preciso momento la mano de su amiga que ya se había colado por dentro de la bombacha, llega al abundante y espeso monte de venus de Judith, quien al sentir la mano de su amiga llegar a esa zona de su cuerpo, sin dejar de besarla en la boca, cierra sus ojos y se prepara mentalmente para ser masturbada por su chantajista amiga.

Y si bien Judith, tenía razón al presentir de que la intención de la Colo era hacerle una buena paja para empezar, ella (La Colo) se entretuvo un rato jugando con el abundante y espeso monte de venus de su amiga.

“ ¡ Mmmmmmhhhh, amiga me parece que vamos a tener que hacer algo con estos pelitos tan largos! ¿Eh? ….. ¿Porque esta desprolijidad a mi viejito asquerosito no le va a gustar!”. Pensaba Jaky jugando con los pelos de la concha de su amiga, con la que al mismo tiempo no dejaban de comerse la boca mutuamente.

Entonces Jaky metió u dedo índice entre los labios vaginales de Judith, y al notarla aún algo seca a su amiga, comenzó a acariciarle el clítoris con el dedo. Haciendo que Judith abra sus ojos repentinamente y separe aún más sus piernas.

• ¿Me saco la bombacha para que estés más cómoda para pajearme? Le preguntó Judith a su amiga, murmurándole entre besos en la boca.
• No linda, no es necesario mi amor. Le respondió su amiga Colo con un tono de voz suave símil al de su amiga, y acto seguido, la penetró con el dedo.
• ¡Aj! Se quejó casi con un murmullo Judith, cuando el dedo de su amiga que acariciaba suavemente el Clítoris entró en su vagina.
• ¿Te gusta linda? Le preguntó la Colo ya entrando y saliendo de la concha de la chantajeada mamá.
• ¡Aaaaaayyyyy, me encanta amiga, me encanta, mmmmmmmmhhhhhhh, aaaaaaaaaaaahhhhh! Gemía entre besos y palabras Judith, todavía fingiendo tanto placer, pero ya cada vez más excitada.
• ¡Eso, eso, eeeeeso, así perra, así mi cachorrita, mojate bien esa concha peluda que tenés! Le decía Jaky muy excitada notando cómo su amiga se mojaba cada vez más.
• ¡Aaaaaaaaaammmmm, aaaaaaaaaa, ahahahahahahaha, aaaaaaaaay ay Jaky, ay amiga, aaaaaaaaaahhhh, ay mi amor, aaaaaaahhh! Gemía, jadeaba y decía Judith, mientras su amiga ya la pajeaba deliberada y rápidamente, logrando que esa peluda concha se mojara más y más.
• ¡Eso mi cachorrita divina, así mi amor, abrí más las piernitas así te llego más adentro preciosa, abrí la boquita mi amor, abra bien la boquita para su amiga! Le decía la Colo mientras la pajea sin parar, y cuando Judith abre bien su boca, La Colo le mete sus dedos adentro iniciando un jugueteo con la lengua de su amiga y sus dedos que por momentos llegan hasta la garganta de Judith interrumpiéndole sus gemidos y jadeos para hacerla toser y tener alguna que otra arcada.

Entonces Jaky la masturba durante 4 minutos más, en los que combina la paja y el juego de dedos en la boca de su amiga, hasta que Judith, entre fuertes jadeos, y espasmos, tiene finalmente su orgasmo sobre la mano se la Colo, mojándosela cómo con un pequeño escape de meo.

• ¡Ahahahahahahahahahahahahahaha! Jadeaba Judith empapándole la mano a su amiga con su orgasmo.

Entonces Jaki retira la mano del interior de la bombacha blanca de su amiga Judith, y parada al lado de ella cómo estaba y bajo la atenta mirada de una sonriente y complacida Judith, comienza a chuparse los dedos limpiándose los restos de la acabada de su amiga y disfrutando del sabor de su concha.

Habiendo saboreado los jugos emanados de la concha peluda de su amiga y esclava, Jakeline la besa apasionadamente y con esa misma pasión, desenfreno y entrega, es correspondida por Judith, quien al ver las energías de su amiga chantajista, tiene en claro en su mente, que esto aún no ha terminado, que aún sigue a prueba y que deberá poner su mejor esfuerzo en dejar bien complacida a la inescrupulosa de su amiga, para que esta considere la posibilidad de que Judith no tenga que acostarse con el viejo verde y asqueroso de Don Tiburcio.

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