PRIMERA VEZ, QUE SOMETI A MI ESPOSA

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Esa noche, a pesar de disimularlo, por primera vez, y a esta edad, tuve un enorme ataque tanto de celos, como de pensar que ella podría haber estado con otro, por supuesto me controlé, y volvimos a casa, sobre las dos de la mañana algo bebidos, y nuestra hija estaba en casa de la abuela teníamos la casa para nosotros, me duche pensando, tanto en esos ataques de celos, como pensar que hubiera estado con otro, y deseando echarle un buen polvo, tras mas de dos semanas sin hacerlo, Maria mi esposa, ya se había duchado, y estaba, picando algo en la cocina, tapada con una enorme toalla, también algo bebida, pero no estaba por la labor, del sexo.

Aquello me sentó, fatal por primera vez en mi vida, e intente, calentarla mientras ella de pie en la cocina picoteaba, sin éxito, y subiendo mas mi indignación, se que si no hubiera tenido esas copas, simplemente me hubiera acostado, pero le dije, a mi esposa seguro que si hubiera sido alguno de los que se te a acercado, aceptarías, se puso como una fiera, pero no me vine abajo sino que ataque aun mas diciéndole, seguro que te gustaría tener algún amante, eso la enfurecio aun mas, y para herirme me soltó, seguro que seria mas hombre que tu, entonces, fue cuando le dije, a ti lo que te hubiera hecho falta es haberte tratado, mal, haberte, dado dos buenas hostias, en su momento, aquello se había ido de madre, y me respondio, tu, ja, fue a marcharse, ya estábamos en el salón, y entonces, la cogi por su rizado pelo ella de espaldas, en esos momentos, si la cogi con fuerza y tire de ella, dando, un grito eso me hizo, aflojar, pero no soltarla, me sente en el sofá, y la coloque, sobre mis rodillas, al principio ella se resistia, de verdad, y yo iba a darle, de verdad, pero, de pronto, empece a reaccionar, la toalla estaba media desecha, y mi mano seguía sobre su pelo ella estirada sobre mis rodillas a lo largo del sofá y mi brazo, agarrándola bajo la cintura lo que la hacia estar inmovilizada a pesar de sus pataleos, y aquello me puso caliente como nunca, y le di dos rapidas palmadas en sus nalgas, aquello parecio como si le transmitiera sin palabras, que no ocurria nada que todo había cambiado, pues se quedo quieta, sin decir nada mi mano aflojo sobre su pelo, pero le di de nuevo otrs dos nalgadas estas mas fuertes, diciéndole, entonces, me respondes, eh eres muy putita, y vamos a ver quien manda aquí ahora mismo, ya dándole palmadas, paré tras 4 o 5 y acaricie desde atrás su precioso culo, hasta bajar mis dedos muy suavemente y lentamente por toda su raja, ella estaba ahora quieta, los ojos cerrados y su respiración, rápida y gemiditos la delataban, volvi a darle varias nalgadas, las acepto, y todas diciéndole, que si tenia la mas minima sospecha que me engañara, se acordaría de mi toda su vida, que era mi zorra, y volvi a acariciar su sexo.

Mi esposa estaba totalmente relajada, su cuerpo, temblaba, y vencida, ante mi entregada, como nunca, mis dedos, lentísimos, bajaban y subían de su coño hasta el final de la espalda, y enloquecia, cuanto mas y mas le hablaba, y le decía que era mi puta, o zorra, cuanto mas la inmovilizaba, o azotaba ella mas se entregaba, termine dejándola sobre el sofá, hacia abajo, me arrodille en el suelo, y me puse a decirle al oído que a partir de ahora iba a ser a solas mi esclava, que jamas me contestaría, y que obedecería, ella solo sabia decirme si a todo, una de mis manos, se metio entre el sofá y su teta le agarre un pezón y tire de él ella di un gritito pero no se movio, obediente, cuando se lo solte le dije ahora me voy a levantar y te vas a meter mi polla en la boca, la vas a mamar un buen rato, me levante y ella obedecio, la tuve unos diez minutos asi, hasta, que la levante la volvi, y la agarre muy fuerte, pegándola a mi mi mano se agarro a su sexo y comencé a masajearlo, termine el masaje de manera salvaje, pues ella solo hacia gemir retorcerse hasta que sentí su corrida en mi mano, apenas se recupero asi pegada a mii la lleve al baño, tenemos el wáter frente al espejo, uno amplio puse la tapa me sente y ella de pie la hice meterse mi polla, voto en ella, arriba y abajo viéndonos ambos como la empalaba en ella, vi como brillaba mi polla de sus liquidos a la luz del baño, mientras ella se miraba, como era follada, termino de nuevo a gritos, pidiéndome me corriera en su coño, y lo hice, fue el mejor polvo hasta ese momento con ella, desde que nos conocimos, cuando termino ella se llevo un buen rato sentada en mi relajada polla.

Me sente en el bidet, y la ordene, me limpiara mi polla obedecio como una perra, y estaba, como loco, con todo aquello, como a todo ella obedecia deseando de nuevo mas y mas sexo, me lavo mi polla a conciencia, y mis huevos, cuando dije voy a mear, me miró y me lo dijo todo, yo que ahora estaba mas digamos cortado y no quería pedírselo por ser demasiado, me levanté ella sola se metio en el baño mientras yo ya siguiéndole el juego, le dije venga perra te voy a mear bien como a una perra para que sepas que eres mia, y eso hice su cara, era un poema, mientras la meaba, me transmitia lo que estaba disfrutando con aquello, cuando termine rápidamente me puse durísimo, la hice se duchara rápidamente, cogi mi cinturón se lo puse en el cuello, como un collar y correa y la hice ir a la cama como una perra.

Me follé a mi mujer, a 4 patas se corrió como una loca, pero es que nada mas terminar, me puse estirado en la cama y ella se volvió a mntar en mi polla, mientras la follaba le decía de todo le daba bocados en sus tetas, le decía que era mi puta perra y ella me decía que si que claro que lo era, que la tenia loca, tuvimos un segundo orgasmo espectacular, y terminamos dormidos rendidos.

desde entonces, el sexo cambio para nosotros, siempre la tengo caliente, con mis juegos, que pueden durar días, hasta que, la tengo que no puede mas, y la hago correrse como una loca, por su puesto hemos ido perfeccionando, nuestros juegos, y si os apetece os contaré, como fui adiestrandola, en este año.