Sumiso esclavo de mi ex novia
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por danieslav.
Ella es una mujer dominante, se llama Lore, y siempre me llevo de las narices. En nuestros juegos sexuales yo hacía de sumiso y ella practicaba conmigo cualquier tipo de perversiones que se le ocurriese. Me ataba, recibía todo tipo de castigos, me ponía un collar de perro y con una cadena me paseaba en cuatro patas por la casa. En ocasiones me hacia chupar su strapon y muy pronto terminó follándome el culo.
Un día vino con la idea de que quería que le diera a un hombre una mamada delante de ella. Yo me negué, la verdad es que nunca lo había hecho y en ese momento, no me daba tener que chupar una polla. Pero ella insistía. Me molestaba mucho, tratando de conseguir que lo haga, diciendo que "no es para tanto" “que te cuesta” y que sería muy excitante para ella verme arrodillado, en la postura más sumisa que nunca, chupándosela un chico, y luego tragar su semen. Ella siempre me decía que yo era una chupapijas natural, y todo eso (Sobre todo después de nuestras sesiones de chupadas de sus consoladores en las que resultaba ser bastante bueno).
Tuvimos muchas discusiones sobre el tema y un día ella cortó la discusión y se fue. Y luego de que me dejó, ella me dijo, que la única manera de que volvamos a estar juntos, sería que cumpla con su exigencia. Lore tenía todos los "poderes" que las mujeres dominantes nos hacen estar a los sumisos a sus pies. yo lo medite durante mucho tiempo. Y la respuesta final era que la necesitaba a ella, sin importar el costo. Mi vida desde que me había dejado era un vacío absoluto. Así, que en un momento de desesperación, me di por vencido y le dije que lo haría.
Ella creó el encuentro con un chico "gay", según me había dicho. Fue en su casa que el muchacho bien parecido y con un pedazo interesante, se presentó totalmente desnudo. Sin entrar en muchos detalles, diré que me arrodille como Lore quería y siguiendo sus instrucciones se la chupe hasta que finalmente acabó dentro de mi boca. Ella quería que me trague todo y aunque me resistí al principio, termine haciendo lo que me pedía, como siempre… Me tragué su semen lo más rápido que pude, pero era pegajoso y había un montón de él.
Pero luego vino la peor parte. Cuando terminé de tragar ella se rió de mí, llamándome patético marica chupapija, Y fue a abrazar a su amigo "gay", que pasó no ser gay en absoluto y resultó ser su nuevo “novio sumiso o algo asi” Y me dijo que no había manera de que volviéramos de nuevo ahora, después de que me chupara esa polla.
Luego, más tarde esa misma noche, ella me envió un correo electrónico diciéndome lo bueno que fue para ella verme hacer eso y me dio las gracias, Explicó que al poco tiempo de conocerme se había dado cuenta de que yo era el candidato perfecto para un desafío que se había propuesto. "conseguir que un hombre heterosexual chupara una polla para ella". Explicó que no hay mayor medida del poder de una mujer que ser capaz de conseguir que un chico se la chupara a otro para su diversión. Y que aquella noche ella su nuevo chico la cogió con desenfreno y tuvieron unos orgasmos brutales a mi cuenta.
Quede consternado al darme cuenta que la iba a perder. Le rogué para que pudiera seguir siendo su perro sumiso aunque no pudiera volver a tocarla ni tener relaciones sexuales.
Después muchos días de incertidumbre me mandó otro mensaje: me informó que había decidido darme una oportunidad de ser su felpudo, y que ya me diría las condiciones.
Y por otra parte pensaba, haber chupado una polla me convertía en gay? Me había gustado? No lo se, durante mucho tiempo tuve una rara sensación entre el rechazo y el gusto o la aceptación.
Finalmente, se comunicó conmigo como al mes, y me contó que tenía un nuevo novio, y que en una tortuosa lluvia de ideas, ella tuvo la idea que yo se la chupara al nuevo agraciado. De hecho, me dijo, ahora quiere que pruebe todas las pollas de sus futuros nuevos novios (al menos una vez, después de ella los persuada) por el resto de mi vida! Dijo que ella sabe que aún la adoro y que necesito complacerla, y por lo tanto yo debería "probar" todas las maravillosas pollas que la hacen tan feliz. Me dijo, además, que ella me quiere que haga esto "por amor y admiración por ella", y "que aunque no vamos a tener nunca relaciones sexuales de nuevo, esto será algo que aún podemos compartir ", y porque, simplemente," sería hacerla feliz”.
Nos encontramos aquella noche en su casa y allí estaba su nuevo novio, Ricardo. Él sólo me sonrió con una mirada divertida y un poco de piedad, y me dijo: " así que eres la puta chupapijas de Lore. He oído hablar mucho acerca de ti." Ella volvió con unas bebidas y antes de que me diera cuenta, se sentó en mi regazo a caballo, y sacando un lápiz de labios me pintó los míos con un rojo intenso. "Oh cariño, esto es sólo una última cosa para ayudarnos en esta noche. Te dije anteriormente que Ricardo estaba un poco indeciso a permitir que lo mames, pero estuvo de acuerdo en que sí, si tenías una apariencia más femenina. Esto es sólo para ayudar a la ilusión.
En muy poco tiempo, mis labios quedaron brillantes, y la textura cerosa, el gusto y el olor eran todos familiares, cuando ella me besaba, aunque ajeno a la experiencia de primera mano.
Ahora sentada en el regazo de su novio, me dijo, "Así que, ¿por qué no vienes aquí y te arrastras y haces lo que mejor sabes hacer?"
Finalmente me arrodillé entre sus piernas, con sus pantalones bajos alrededor de los tobillos, y mi ex novia le acariciaba y besaba su cuello mientras se burlaba de mi, dándome palabras soeces de aliento.
Se la chupé durante un buen rato. Debo admitir que esta vez me gusto más que la anterior, y hasta tuve una erección. De vez en cuando, ella me agarraba del pelo y me forzaba a mirar a los ojos a su novio, “toda buena puta debe mirar a su hombre como goza con la mamada que le esta haciendo” me decía.
Al cabo de unos minutos él se estaba acercando al clímax, mientras temblaba cada vez más, y el sabor de su líquido pre seminal era mas acentuado. Su pulso se aceleró, como lo hizo el mío, y ya estaba preparándome para recibir su descarga en mi boca dentro de los próximos momentos. "Puta, estoy dispuesto a correrme", me dijo. Entonces mi ex, de la nada, gritó, "¡Alto!" Y me detuve, sorprendido. Me dijo que era suficiente para mí esa noche, mientras se subía a su gran polla, dura como una piedra, empalándose plenamente, Y una vez firmemente en manos de él, se volvió hacia mí y me preguntó con una sincera y totalmente excitada expresión de su rostro, "Así que, ¿No estas encantado con esta maravillosa polla que me hace tan feliz? "
Sabía que debía contestar en mi papel de esclavo sumiso, aunque no estaba seguro de mis sentimientos, así que respondí: "Sí, sí lo claro que me gustó. Era deliciosa y grande y dura,
Y me volvió a preguntar: ¿No crees que es mejor que la tuya, y que ahora estoy gozando mucho mas y mejor que cuando lo hacíamos nosotros?
Si, es más grande y mejor que la mía. Eres una chica muy afortunada, y fue un privilegio que me dejes compartir algo de lo que te dan.
Ella irrumpió con la sonrisa más amplia que le había visto hasta el momento, y mientras lentamente montaba la polla de su novio, y entre pequeños gemidos, continuó: "Oh, eres el esclavo tragona que cualquier chica jamás podría tener. Gracias por estar de acuerdo conmigo; su polla es magnífica, lo sé. Ahora, odio tener que privarte de su esperma, ya que sé que te estas haciendo adicto. debes irte ahora. Te sugiero que si te quedaste con las ganas, vayas a un bar gay para obtener su premio. O al menos no dudes en comer tu propio semen, después de masturbarte pensando en esta noche de picor sexy.
Ahora déjanos mientras Ricardo me hace estragos. Al ver como se la chupaste me ha dejado extraordinariamente caliente esta noche.
Gracias de nuevo, mi perrita tragona.
Ah, ¿puedes sacar la basura al salir? Gracias cariño ".
Esa fue mi segunda mamada a un novio de mi ex, pero hubo más, y otras cosas también, pero lo dejo para otros relatos…
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