Una prima ardiente y una novia recatada
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por elias99.
Hola mi nombre es Elias soy de la ciudad de México y les cuento de cómo me cogí a mi prima una verdadera locura y satisfacción para empezar les contare como soy, mido 1 68 de cuerpo delgado y marcado por ser algo desnutrido, no por el gimnasio y esas cosas. Esto paso hace 3 años y aún lo recuerdo con tanto anhelo y satisfacción.
En ese tiempo a mis 18 años andaba de noviecito de María una chica que conocí por la escuela y de la cual estaba enamorado, ella era de estatura un poco más baja que la mía, morena de cabello rizado con unos labios hermosos, que acentuaban su figura algo simple pero excitante.
Curiosamente en estos momentos recuerdo cual fue el motivo de que me quedara prendado de ella sexualmente, puesto su forma de vestir era siempre recatada y masculina se podría decir, fue en una ida al cine que llevaba una blusita negra escotada negra (de esas que se entallan al cuerpo) y unos jeans que en verdad hacían que denotaba su hermoso y voluptuoso culo, ya me sentía atraído por ella pero verla con esa ropa me hizo desearla y penetrarla a como diera lugar.
Con el tiempo me volví novio de ella pero mis intenciones de poder follarmela fueron en vano, puesto que ella era virgen y muy mal instruida en labores sexuales por su educación. Realmente tarde bastante en poder cogérmela y me limitaba a solo manosearla y meterle uno que otro dedo y la primera vez que estuve con ella fue un verdadero desastre.
Todo esto nos lleva a la situación entre manos (contexto) en verdad me sentía muy caliente porque desde muy joven había tenido encuentros sexuales con vecinas y novias, por lo cual me encontraba en mi red social esperando que una de esas tantas amigas se ofreciera a aliviar el dolor palpitante de mis pantalones.
Fue así que mis suplicas fueron respondidas y un día me encontré con una ventana de chat en la cual estaba mi prima Rosario de la cual no había sabido hace mucho tiempo puesto que vive en Veracruz.
Comenzamos a platicar de cosas triviales como nuestras familias y cuanto habíamos crecido, eh de decir que en ella encontraba una confidente muy fiel y comprensiva a tal grado que nuestras conversaciones subieron a un tono más sexual, expresando nuestras frustraciones sexuales por parte de nuestras parejas.
De un momento a otro comenzamos a tener una relación mucho más cercana y amorosa en la cual jugueteábamos con insinuaciones muy calientes de las cuales me sentía bastante excitado y quería desfogar con María pero la cual seguía en su siempre estado de inocencia y timidez.
Rosario y yo acordamos que no podíamos más con la situación y que si se llegase a presentar la oportunidad comprobaríamos que tan calientes estábamos el uno por el otro, y ese día llego cuando un tío falleció en vacaciones de verano lo cual hizo que mis padres y hermanos viajáramos a su estado natal de mi madre.
Cuando llegamos a la casa de Rosario y mis tíos la salude cordialmente y me sorprendí de que las fotos en su sitio confirmaban mis más bajos instintos, siendo ella de 1 72 (más alta que yo) tez blanca, pechos 36b y un culito paradito de 95 , al principio la salude cordialmente sin ninguna intención caliente y morbosa, pensando que lo de nosotros solo era puro juego de niños hasta que mis tíos ella y yo fuimos a comprar al súper cosas para el funeral que nos quedamos en el estacionamiento, ya sentados en el asiento trasero me sentía nervioso y un poco fuera de lugar , pensando en María hasta ella me saco de mi letargo mental.
-Entonces, dime que te parezco –
-¿Como?-
-La verdad este más bueno de lo que veo en tus fotos-
-Jajaja eso crees-
-Has olvidado que dijiste que me la meterías-
-No-
-Pues eh traído esta faldita para mostrarte lo húmeda que estoy-
Sin previo aviso levanto su minifalda de mezclilla mostrándome una tanguita blanca la cual jugueteaba con sus dedos y después la pasaba por mi boca, el olor de su vagina era exquisito, dulce y acido al mismo tiempo, mi pene ya explotaba ante tal situación la cual culmino al abalanzarse contra mí y besándome con furia descomunal y lengüetazos torpes mientras su mano buscaba mi miembro y las mías no desaprovechaban el tocarle tan bello culo inquieto y mojado.
De pronto sentí que su plan se había cometido al sacar mi pene de mi cierre y meterlo a su boca, fueron una langüetadas y mordidas a mis testículos lo que me sacaban de mis casillas y me hacían retorcerme de placer, mientras me veía con sus ojos claros y hermosos, esos ojos qué dicen “penétrame por favor”, no aguantaba más iba a eyacular en su boca cuando no se si ella lo sintió que se zafó de mi verga y en un movimiento súbito y ágil se dispuso a sentarse de espaldas en mi miembro , no lo podía creer , estaba a punto de introducir mi miembro en tal coño tan caliente y jugoso. Cuando nuestro momento acabo súbitamente al momento en que ella me decía que venían sus padres y tuvimos que acomodarnos nuestras ropas y yo mi miembro el cual dolía de no haber sido satisfecho.
A lo largo del camino ella me miraba y sonreía pícaramente mordiéndose los labios y subiendo ocasionalmente su faldita. Así pasaron los primeros días, con insinuaciones visuales por parte de ella y pequeños y calientes roses debido a la cantidad de gente que había en su hogar.
Fue al 3 día que las cosas se habían calmado con todo el ajetreo del funeral que mis tíos le pidieron a mi prima que nos sacara a pasear para desintoxicarnos del áspero ambiente que existía, por su parte mis hermanos embobados con el Xbox rechazaron dicha oferta y tuvimos que apañan orlas solas.
Juntos caminamos por la plaza y fuimos a varios lugares tomados de las manos como novios siempre coqueta con minifaldas y escotes, diciéndome al oído que moría de ganas por chupármela, así nos metimos a unas cabinas de internet divididas por cuartos donde nos metimos y comenzamos nuestra tan esperada faena.
Ella rápidamente bajo mis bermudas y comenzó una terrible mamada mientras me decía:
-Ya la quería Elí-
-Lo sé, pero no vendrá nadie-
-No te preocupes nadie entra aquí eh venido antes-
-Con otros-
-Sí, ¿te molesta?-
-Un poco-
-No te enojes, veras que es muy rico-
Acto seguido me sentó en la silla y ahora así era el momento esperado se montó de espaldas contra mí y lo pude sentir, la sensación de penetrar unos pliegues ásperos e instruidos que devoran la la hombría, que succionan tu miembro hasta el punto de querer gritar de placer.
Ella cabalgaba como poseída y hacia círculos con su culo, mientras me quedaba prendado visualmente de su ano el cual parecía grande e invitaba a ser perforado, comenzó a tantearlo y sobarlo con mis dedos mientras ella seguía con su inminente cabalgata , después de un rato se percató de mis intenciones y giro su cabeza y me miró fijamente.
-Sabes porque es muy buen sexo-
¿Porque?
-Porque eres mi primo y una verga prohibida es lo mejor-
-No has cogido con primos antes-
-No claro que en, quieres meterlo en mi culo-
-Si se me antoja mucho-
-Adivina porque esta tan grande mi hoyito-
-¿Te han penetrado por ahí?-
Me eh metido los dedos todos los días por si querías
Rápidamente se zafó de mi verga y lo introdujo lentamente, la verdad había succionado toda mi lubricación y sentía dolor al meterlo, lo cual para ella era un gozo porque se reía y gemía y se ensartaba mas salvajemente contra mi hasta que ya no pude más y me corrí en su ano.
Así pasaron los 7 días, salíamos a mandados y visitábamos lugares para coger como locos, de pie en los parques en la playa, Rosario me enseño que no solo los hombres podemos ser aventados y calientes, si no que ellas pueden infectarnos de una lujuria única y feroz.
Nuestro último día la pasamos cogiendo en el cuarto donde nos quedábamos mis hermanos y yo con la promesa de repetirlo y que yo ahora sería posesión de ella y que dejara mi mojigata noviecita.
Tengo que decir que me había quedado vacío al irme de aquel lugar de tantos hermosos y calientes recuerdos y obviamente no termine con María ya habíamos tenido 3 encuentros sexuales antes de que me fuera pero yo ahora con una nueva visión del sexo y su lujuria , quería más y no iba a aceptar un no por respuesta.
Mis padres volvieron a sus labores y mis hermanos fueron a sus cursos de regularización y yo volvía a mi rutina con rosario en la red. Con la diferencia que el primer día que llegue miraba a María con otros ojos , le tenía odio y resentimiento por las mieles qué me había negado así que cundo fue a visitarme la salude y la bese locamente mientras le decía:
-Amor quiero cogerte-
-Me extrañaste mucho, porque quería que saliéramos-
-Ala chingada salir quiero comerte tu hermoso culo-
-¡Oye estas muy brusco!, no me habías hablado así-
-Lo vas a hacer o no-
-Si pero…-
No espere más y desnude todo su cuerpo lamí cada centímetro de su cuerpo sus axilas su espalda y sus hombros, ella no quería que lamiera su vagina porque se le hacía insano, pero si antes comprendía sus inquietudes ahora me valían madre, estaba enfermo de lujuria quería lo que me había dado Rosario, quería más.
La tome por la cintura y en el mismo piso de la sala la penetre si ningún pudor y sin protección, ella estaba sorprendida por mi brusquedad y ferocidad, mordía su pechos, ardía en deseos por rellenarle el culo, así que la embestí cuanto pude y la puse en cuatro y le coloque mi verga (estas posiciones eran enfermas para ella) y se la introduje en su vagina que a pesar de parecer asustada se sentía muy mojada.
Tarde unos minutos en hartarme de esa posición y le ordene que lo lamiera a lo cual se opuso y la tome por sus cabellos y la obligue a hacerlo, que no me importaba si me mordía o llenaba de saliva solo quería que lo hiciera. Mientras ella intentaba el cometido yo cavaba su culo y lo ensalivaba con mis dedos y los metía, ella con un quejido me imploraba que no hiciera eso, que era algo sucio, no le escuche y seguía en lo mío.
-Sabes que esto no me gusta-
-Porque si es muy rico-
-No, me haces daño-
-Pero si bien que te gusta-
-No, en serio eso no me gusta, mejor me voy-
Ella se levantaba y comenzó a ponerse su ropa mientras me quedaba ahí parado, justo cuando creí que todo acabaría decidí tomarla por la fuerza y voltearla empinada contra el sofá mientras le metía un dedo en el culo y con mis dos manos le agarraba las suyas y le decía.
-Estoy harto, sabes porque eres mi novia-
-Elías me haces daño-
-Cállate Eh esperado por tu culo, quiero cogértelo y va a hacer mío-
-Noooo espera-
-Obedéceme o si no terminamos-
Después de eso guardo silencio durante toda la sesión donde al final pude abrir lo suficiente su ano para introducir mi pene, la verdad el culo de María era más regordete que el de Rosario y un culito más apretado sin duda es más satisfactorio y caliente, la penetre por más de 10 minutos cuando sentí que eyaculaba dentro de ella.
Y no sé si les pase a ustedes pero cuando eyaculo y tengo sexo sigue parado mi pene y lo siento más insensible a las penetradas. Con esta ventaja de mi parte sometí a María a coger en diversas posiciones con mi verga en su ano a lo largo de esa tarde, al final cuando estuve rendido al fin ella se fue llorando y sin decir ninguna palabra.
Paso una semana sin saber de ella , y pensaba que habíamos terminado, la verdad no me sentía culpable siento que en verdad las sesiones de Rosario me ayudaron a ya no reprimirme con María y a poder poseerla como era debido.
Eventualmente nos buscamos, y me reclamo por una inflamación en el recto pero que por la pena no había venido a verme, seguimos de novios, porque nuestra relación más que el amor existían profundos sentimientos de abandono y codependencia de ambos. Que poco a poco terminaron pero que nos dieron gratos momentos de juventud.
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