VIEJOS RECUERDOS Y UN NUEVO COMIENZO
Me pasaba los días deseando volver a esa época, hasta que ocurrió algo que cambió mi vida.
Un saludo para todos, este es el primero de los muchos relatos que contare más adelante, mi nombre es Roxana, o como me llaman, la esclava 3, puesto que soy una de las tantas esclavas que tiene mi ama (Jenny), la cual tiene un gusto por acumular esclavas en todo lugar o como ella lo llama, ya sea perras, mascotas y entre otros nombres que se le ocurra, además soy la encargada de dar a conocer todo acerca de nuestras vidas y la supremacía de mi diosa
Todo comenzó hace ya varios años, actualmente ella tiene 36 años y tiene 1 hija, que por lo que me comento a sus cortos 12 años ya demuestra actitudes de domina aunque no tanto en el aspecto sexual, se separó de su marido, ella es muy alta a comparación de otros, mide como casi 2 metros, las proporciones y curvas que maneja son aterradoras, sumada a su personalidad dominante y la belleza innata que posee, por otro lado yo tengo 26 años, algunas de sus esclavas no pasan de 30 años, otras son mayores que ella incluso algunas ni tienen edad de 2 dígitos, sonara raro pero les iré contando de a pocos, aun así le gusta dominar familias enteras y tiene un gusto mayor por las mujeres que por los varones, quienes poco o nada participan en su vida diaria.
La conocía desde hace tiempo, cuando apenas era una niña de apenas 10 años, ella (20) me cuidaba a mí y algunas amigas del condominio, este no era muy grande pero me sentía a gusto viviendo ahí, Jenny era una chica bastante confiable para muchos, podía notar que era bastante voluptuosa y más alta que muchas mujeres del vecindario (note esas cosas ya de adulta, era muy ingenua de niña), aunque claro no tenía mucho uso de razón a esa edad.
Solíamos jugar muchas cosas, era muy atenta con nosotras, casi siempre éramos niñas, ya que había muy pocos niños en el condominio y terminaban en otros lugares. Pasaron algunas semanas con ese tipo de atenciones, nos volvimos tan apegadas e inseparables a ella, que muchas veces escuchábamos o hacíamos más caso a lo que ella decía que a lo que decían nuestros padres, pasado ese tiempo algunas cosas cambiaron pero al tenernos apegadas a ella no se notaba nada raro tan solo otras actividades de diversión, o eso nos decía ella , ya que era parte de sus juegos psicológicos, pasamos a cosas o juegos relacionadas a reyes y súbditos o como eran en realidad ama y esclavas y todas las veces ella era la reina, debido a que nos hacía pensar que era un juego, se aseguraba totalmente que no le dijéramos nada a nuestros padres, nos manipulaba mentalmente que todas nosotras terminábamos autosugestionadas a no decir nada del tema, además nos parecía tan normal ese tipo de atenciones, nos hacía arrodillarnos o postrarnos ante ella besando o lamiendo sus zapatos, sus sandalias no sé cuál era la razón para que ninguna de nosotras se negara, es más lo hacíamos de buena gana y en algunos casos terminábamos peleando para ver quien debía adorarla, chuparle los pies, besarle la mano en señal de pleitesía, besarle las piernas, no paso mucho tiempo para que llegáramos a ese nivel de atenciones. La forma en que nos incitaba a hacer esas cosas era tan simple y a la vez loable y precisa.
- Hoy jugaremos un juego con recompensas y castigos, ustedes díganme que quieren de recompensa.
- Dulces
- Que nos cargues
- Adorarte
Al parecer esa última petición le fascino tanto que ignoro las 2 primeras y ya no escucho más opciones
- Pues será así, la recompensa será que me besen y laman mis pies, y chuparan lo dedos de mis pies hasta que yo lo diga, ¿están de acuerdo? –
- Siiii!!!!!
- Y el castigo será darme un beso en la entrepierna tanto adelante y atrás, en mi vagina y mi culo
Se bajó la falda y para sorpresa de muchas de nosotras no llevaba nada, nos mostró su vagina
- Acérquense para que la vean de cerca, esto es una vagina, estos 2 pliegues se llama labios vaginales y este pequeño bulto es el clítoris,
A continuación dio una vuelta
- Este es mi culo, y mis nalgas tóquenlas – mis amigas y yo estábamos pasmadas al ver ese monumento tocábamos y presionábamos sus nalgas
- Son muy suaves
- Huelen rico – tal vez se debía al jabón que usaba o quizá usaba alguna fragancia en esa zona como parte de su plan
- Si dices que huelen rica dale un beso – señalo a una de nosotras
- Vete acostumbrando ya que esta será la nueva forma de adorarme.
- Quiero que 2 de ustedes presionen sus caras en cada una de mis nalgas
De inmediato se paró firme y 2 de nosotras apoyaron sus caras en cada una de sus nalgas para después ella tomarlas por la nuca y presionarla a su antojo, vi que cada una de sus nalgas era más grande nuestra cabeza, ella se miró al espejo aun presionando sus cabezas y sonrió de forma malévola, su culo era más ancho que 2 de nuestras cabezas juntas, una vez hecho eso, se quedó pensando un rato, se subió a un cojín hasta que su culo quedara a la altura de nuestras caras y ordeno a las 2 que estaban a su lado
- Ustedes agarren una nalga cada una y abran mi culo lo más que puedan
Las niñas cogieron sus nalgas y las abrieron hacia su lado dejando ver su ano, al tener una piel blanca el color de su ano era un tanto rosado
- Sandra, y las demás vean mi ano y su nuevo lugar de adoración
- Pero ama Jenny, ese lugar…. – dudaba al ver su ano
- Parece que no obedeces lo que te digo, bien, tal vez ya no debamos jugar como antes
Al escuchar eso Sandra se acercó y le pregunto qué quería que hiciera
- Primero vas a olerlo, para que no tengas dudas la próxima, y luego me darás un gran beso justo en el centro
Sandra ya no tenía dudas y procedió a obedecer, empezó a olerle el culo y dijo que tenía un olor a flores para posteriormente darle un beso en esa parte o más bien llenarla de besos en el ano para después empezar a lamerla, pero mi ama solo alejo u cabeza diciendo que aún no estaba permitido lamerla ahí, Sandra se inclinó y postro como nos lo había enseñado anteriormente y suplico para la dejara adorarla y lamerla en ese lugar, mi ama simplemente alejo su cabeza causando que Sandra deseara aún más saborear ese culo, por lo que dio la orden de empezar el juego.
Ya habiendo jugado pues era más que obvio que casi todas nosotras éramos las perdedoras, obviamente el juego era idea suya al igual que los resultados y el castigo, tenía todo perfectamente calculado y más aún sacaba provecho de nuestra ingenuidad, se sentó en el sofá y alzó una de sus piernas
- Bien, es hora de sus premios pero para hacerlo más rápido se ocuparan de adorar ambos pies, ya después me encargare de los castigos, así que hagan una fila en donde les corresponda
Sabíamos claramente el lugar que nos tocaba, yo y Sandra éramos las únicas ganadoras pero nuestra obsesión por su culo era enorme a tal punto de hacer lo que sea con tal de que podamos adorarlo, así que fui la primera en formar, pero al parecer a la hora de adorarla no le importo quien gano o quien perdió, nos ordenó que primero debíamos adorar sus pies y luego sus vagina y culo
Nos pusimos en fila y 1 de nosotras iba directamente a uno de sus pies, besando su empeine, lamiendo el contorno, la planta, entre sus dedos y chupando sus dedos, estuvimos así alrededor de 15 minutos mientras que ella y toda su grandeza permanecía triunfante, para después colocarse en una posición cómoda para que pueda disfrutar al máximo de nuestras atenciones, cabe aclarar que ella misma la que nos indicó de qué forma había que hacerlo, presión, fuerza, se preocupó del mas mínimo detalle que sus esclavas debían tener en cuenta a la hora de adorarla y así los días mantuvieron ese curso.
De ahí en adelante las cosas avanzaron más y más hasta que un día nos hizo besarle la vagina y sus nalgas y pues obviamente nos causaba gracia hacerlo, y era de esperar que poco tiempo después nos hiciera chuparle el coño y el culo, cogía una de nuestras cabezas y la incrustaba en su entrepierna o bien daba la orden de que le abrieran el culo y así una tercera poder lamerle el ano, cada vez que alguien la lamía el ano ella se aseguraba que su mascota tenía que introducir toda su lengua hasta adentro, mientras que ella tenía que sujetarla de la nuca empujándola aún más en su culo, nos ordenaba mirarla mientras se masturbaba para después chuparle el clítoris que era bastante imponente no sin antes ordenarnos en una fila y turnarnos para postrarnos ante ella y besarle la vulva, otros días se echaba en una cama o en el sofá boca abajo mientras que nosotras le besábamos las nalgas y lamiamos su ano o bien le chupábamos los pies o la vagina si es que nos era posible mientras que ella disfrutaba de nuestras atenciones sin la menor preocupación, incluso llegaba a sentarse en algunas de nuestras caras mientras nos ordenaba lamerle el ano, sabíamos lo que hacíamos, puesto que nos tenía en su juego psicológico, pero simplemente cumplíamos de buena gana debido a la “lealtad” que le teníamos, y peor aún cada una de nosotras se aseguraba estrictamente de no decirle nada a nadie de lo sucedido.
Pasaban los días de esa forma de adoración, que en muchas ocasiones, por no decir todas, era muy emocionante para nosotras y era quizá lo único que ansiábamos cuando ella llegaba, el chuparle los pies, coño o culo eran sus órdenes, aunque también usaba esa actitud a modo de supuestos castigos
- Laura y Carmen, póstrense ante mí y besen mis pies a modo de disculpa –
- María, échate en el suelo y lámeme ahí atrás, y las demás adórenme de la forma que les parezca – decía mientras se excitaba
- Si ama Jenny!!!! – todas al unísono
Podía ver como se acomodan para adorarla, éramos un aproximado de 5 o 6 niñas que cuidaba a diario o mejor dicho entrenaba, aquella que le servía de asiento miraba fijamente el enorme culo de mi ama, mientras que su pequeño rostro desaparecía cuando ella presionaba su gigantesco culo contra ella, a veces usaba un cojín que ella mismo hizo a fin de no presionar tanto nuestras caras, dicho cojín tenía un agujero en el medio o tan solo era un soporte para los muslos, o también usaba un asiento con mallas las cuales tenían una gran abertura justo entre las nalgas de esa forma podíamos lamerle y chuparle el ano tanto como ella quisiera
Al considerarla como nuestra reina suprema, nadie podía desobedecerla, ella decidía cuánto tiempo debíamos adorarla, cuando empezar y cuando terminar, caminaba por el cuarto, mientras que nosotras postradas en el suelo debíamos ser agiles para poder besarle los pies.
Cada tarde que venía la saludábamos como nos había enseñado
- Cuando entre todas ustedes deben postrarse ante mí con la cabeza en el suelo, y cabeza que yo pise será la primera en adorarme chupándome los pies, de ahí lo harán todas – nos daba una señal o bien una orden, ya sea un chasquido, un gesto voz o lo que sea.
Nos arrojábamos sus pies casi siempre elegía a 2 o 3 de nosotras y las hacia arrodillarse de forma erguida y las acercaba a su coño y a su culo, si llevaba una falda las metía debajo de su falda, cuando eran 3 ponía a 2 en su coño o bien en su culo.
Las cosas y los días transcurrían de esa forma alrededor de 3 años, con nuevos juegos o escenas incluso algunas de nosotras empezábamos a desarrollar mentalidades o actitudes acorde al gusto de Jenny, nuestros padres desconocían nuestras actividades por completo, claro que en ese punto ya no había necesidad de que alguien nos cuidara, pero siempre nos las arreglábamos para poder estar junto a ella y en caso de preguntarnos la respuesta era que tan solo jugábamos o le pedíamos ayuda en algunas tareas, aunque la verdad sea otra. Pasaron los años, algunas se fueron, aunque mantenían cierto contacto, Jenny se fue por temas de estudio, deduzco que a donde iba también conseguía esclavas, transcurridos casi 10 años el condominio iba a ser vendido, aunque no esperaba lo que venía, la compradora era Jenny, al verla no pude evitar sorprenderme, parecía otra persona, alta, voluptuosa pero de una manera tremenda, volvía a sentirme como cuando era una niña.
La salude, me invito a su departamento y comenzamos a hablar se volvió una persona de pocas palabras y bastante reservada, pero me sorprendí aún más cuando vi a algunas de mi amigas del condominio tras de ella en su departamento, me sentía nerviosa, sabía que algo iba a pasar pero me quede quieta, en eso ella chasqueo los dedos e inmediatamente las 2 se arrojaron a sus pies para chupárselos
- Bueno, te presento a mis esclavas o perras, como las llames – me quede pasmada y sin habla
- Al parecer querían seguir con los roles y les di la oportunidad de su vida.
No podía creer lo que veía ver precisamente a dos de mis amigas de la infancia Sandra y Lorena, sometidas de esa forma al parecer disfrutaban lo que hacían a Jenny no le importó y siguió conversando, yo no era capaz de mirarla a los ojos por un momento yo también quería arrojar me para hacer lo mismo que ellas adorarla, las alejo con sus pies y dijo:
- Creo que ya es hora del bautismo –
Me dijo y que si quería mirar me pasara a sentar en el otro sillón o bien que era libre de irme, en cuanto se puso de pie mis amigas se postraron ante ella con la cabeza en el suelo para que los bautizara, sin ninguna molestia ella accedió se puso de pie y su estatura era sorprendente mis amigas parecían niñas a su lado por lo que me quede turbada un momento, se relajó un poco y se subió la falda al ver su cuerpo por detrás quede totalmente anonadada ver esas increíbles piernas y ese culo totalmente espectacular a simple vista parecía que cualquier cosa estar en medio de ese tremendo culo terminaría desapareciendo por completo, una sola persona no sería capaz de poder chupar y adorar tremendo monumento, la idea de presionar una cara en cada nalga estaba fuera de discusión ya que no sería suficiente si quería estar satisfecha todo eso y sumada a su estatura y 2 de mis mejores amigas estaban siendo tratadas peor que basura por ella me inundo una enorme sensación de servilismo y excitación
- “Desde este momento les concedo el honor de ser mis esclavas desde hoy día su única meta y propósito en la vida será adorarme como su diosa gradualmente irán perdiendo su condición de seres humanos y pasaron a ser simples objetos destinados a darme placer hasta el último día de sus vidas.”
En eso puso una mano y empezó a abrir sus labios vaginales, empezando a mearlas sobre su cabeza, hizo un chasquido y de inmediato sus esclavas levantaron sus caras para beber su orina dando por finalizado el dichoso bautismo en dónde ellas agradecían por tal honor, acto seguido se volvieron a postrar ante ella y le chupaban los pies, no sin antes lamer toda la orina que se esparcía por el suelo, mi instinto servil me obligaba a postrarme ante ella y también lamer su orina del suelo, y de ser necesario suplicarle para que también me orine encima y me permita beberlo, pero mi nerviosismo no me dejaba actuar.
Al ver todo eso entendí que tal vez tendría esclavos por cada parte de su cuerpo, pies, piernas vagina culo u otros que le servían de asientos personales, retretes humanos, reposapiés o lenguas qué servían de papel higiénico y estaba en lo correcto ya que me dijo que con esas dos ya tenía 8 perras, 4 esclavas y 4 siervas procedió explicarme que diferencia existe entre las esclavas y las siervas, primero las siervas podrían vivir su vida de forma normal pero aún tenían esa vital obligación de complacerla, por otro lado las esclavas no tenía más opción que vivir bajo los pies de su ama todos los días de su vida y eran las más susceptibles a perder su condición como seres humanos, cada vez me quedaba más y más sorprendida.
Ya estaba por irme pero justo antes de salir me gano el impulso y me lance directamente a sus pies, lamiéndole el empeine completo y metiendo mi lengua entre sus dedos para luego metérmelos en la boca y poder saborearlos, era una delicia completa estar así, luego le suplique para que también me bautizara.
- Al parecer tampoco te pudiste olvidar verdad?
- No mi diosa, todo el tiempo que estuviste fuera extrañe poder estar a tu lado o mejor dicho a tus pies
- Será mejor que te refieras a mí de usted te queda claro, si en caso quieres tener el honor de ser mi esclava
- Perdóneme por favor mi diosa no volveré a hacerlo – aumente el ritmo de mis lamidas y chupaba cada uno de sus dedos
- No quieres probar tu parte favorita después de mucho tiempo
Al instante se dio la vuelta y pude contemplar de cerca ese majestuoso e imponente culo, era muy diferente al que recordaba, más grande blanco y redondo, aun cuando habíamos crecido parecía que éramos pequeñas en comparación, era tan diferente del que tenía hace 14 años con el de ahora, si fuéramos esas niñas aun, nuestras caras desaparecerían por completo en ese monumento de carne, me abalancé sobre su culo y empecé a besar sus nalgas para después lamerlas recorriendo todo su culo con mi lengua, al ser tan alta y yo estando de rodillas tras de ella me era un poco difícil cubrir todo su culo con mis lamidas, por lo cual ella se agacho un poco y chasqueo los dedos, en eso vinieron sus 2 esclavas y empezaron a abrir sus nalgas, en ese momento contemple su hermoso ano, era casi igual lo que recordaba no me pude contener y agarrándome de sus muslos empecé a lamerle el ano, pasaba mi lengua por todo el contorno, note que su ano empezaba a dilatarse y a expandirse de a pocos, lamia con más fuerza, en eso ella me tomo por la nuca y me presionó aún más, enterró mi rostro completamente en su culo, para luego tener un orgasmo explosivo, después de 30 minutos de lamerle al ano, me dijo que la siguiera adorando pero que el bautizo tendría que ser otro día debido a que no le quedaba orina y dijo que se relajaría un poco viendo TV, y mientras eso podían adórala cuanto quisieran, las otras 2 no se alejaban de sus pies y en cuanto ella se sentó en el sofá se postraron ante ella y empezaron a chuparle los pies mientras que yo miraba perpleja la espectacular vagina que iba a adorar, los carnosos labios vaginales, un clítoris enhiesto que me apuntaba directamente tentándome a saborearlo, como primera medida me postre ante ella durante algunos segundos para después acercarme a su entrepierna y chuparle el coño, mientras que ella planto su mano en mi nuca y la presiona aún más y aunque me faltara el aire yo seguía lamiéndole el culo puesto que era fascinante, se sentó en el sofá y entre las 3 estuvimos adorándola por 15 minutos hasta que tuvo una serie de orgasmos y toda la corrida estaba dirigida a nuestras caras un impacto de su corrida era potente y a la vez majestuosa, lamiamos las gotas que se habían desperdiciado
- Eso estuvo bueno, sude un poco así que me daré una ducha, es todo por hoy te llamaré en uno de estos días, para decidir tu situación
- Gracias mi diosa
Me postre ante ella y le bese los pies en señal de lealtad, se retiró de la habitación mientras dio un chasquido y de inmediato sus perras la siguieron a 4 patas.
Me retire del departamento toda sudada, aprovechando que no había nadie en ese momento me estire un poco, toda mi mente y pensamientos estaban en blanco, mi única idea y objetivo era convertirme en su esclava de cualquier forma haría y daría lo que fuera con tal de que me deje adorarla como su perra, llegue a mi casa tan solo a esperar su llamada.
Esa misma noche subí a ver qué era lo que hacía, me volvía loca todas las maravillas que era capaz de hacer con su cuerpo y su actitud, al mirar por la ventana note que estaban sus 2 perras (mis amigas) y otras 2 personas, alcance a reconocer a una de ellas; era la dueña de un consorcio en el centro de la ciudad.
La empresaria se arrastraba por el suelo lamiendo sus tacones mientas que mi ama estaba sentada sobre la cara de la otra y las perras le adoraban el otro pie, debido a su tamaño su pie era bastante grande por lo que se requerían mínimo 2 esclavas para adorarlo correctamente, al ver a la empresaria actuando de esa forma quedé totalmente anonadada de qué tan gran mujer estuviera a los pies de ama y actuara como una simple perra, sabiendo que esa mujer tenía fama por ser rígida y orgullosa, no pasarían más de un par de minutos y mi ama se levantaría del sofá y tomaría del cuello a la otra y la arrojaría al suelo como si nada debido a la gran fuerza que tenía, pues al parecer ya no era capaz de satisfacerla.
Temía que al ser descubierta ella ya no quisiera tomarme como esclava así que regrese rápido a mi apartamento, no sé cuánto tiempo más estuvieron, a la mañana siguiente sonó mi celular a esa hora de las 7, era ella por fin me aceptaría, conteste de inmediato
- Tienes 1 minuto para venir – e instantemente corto la llamada
Subí lo más rápido que pude y siguiendo mis instintos me postre a su puerta, al abrirla y al verme en ese estado piso mi cabeza contra el suelo
- Si no eres capaz de aguantar esto menos aguantaras mi culo sobre tu cara – decía mientras me pisaba con más fuerza
Tras unos segundos pisándome puso su pie al suelo y de inmediato comencé a lamer sus sandalias, me sentía excitada al hacerlo, me inundaba una enorme sensación de servidumbre, aunque no pasarían más de 30 segundos hasta que se hartaría de eso y entraría, obviamente yo la seguí a 4 patas como la perra que era, aun sin haber realizado el bautismo yo ya me autoproclamaba su esclava y perra fiel, ella se dirigió al centro de la sala y yo levante la mirada y vi su exuberante y majestuosa figura, señalo el suelo quería que me pusiera en ese lugar, empecé a gatear y veía como las demás permanecían postradas ante ella.
Supe instintivamente que sería hora del bautismo, por lo cual trate de adoptar una postura más sumisa de la que ya tenía, no pasarían más de 10 segundos cuando dijo:
- Viendo tu actitud y siendo consciente de lo que hacías por ser una de mis perras y esclavas, “desde hoy te concedo el honor de ser mi perra y que tu propósito en la vida de hoy en adelante y para siempre será adorarme como tu diosa, tu lugar no será a mis pies sino bajo mi pies, harás y hare uso de tu cuerpo para satisfacer hasta el más mínimo de mi caprichos, y es posible que vayas perdiendo progresivamente tu condición de ser humano, a un simple objeto que usare de forma libre, aunque claro de no ser lo suficientemente capaz de satisfacerme como lo haría una perra, puedo simplemente desecharte y escoger a otra de entre mis candidatas “
Acto seguido empezó a mear sobre mi cabeza, yo sentía el líquido de mi diosa, sentía jubilo, felicidad, emoción, por ser una de sus perras, y más aún al sentir ese néctar cayendo sobre mi cabeza, aunque aún no tenía la orden empezaba a lamer lo que chorreaba cerca de mi boca, dio un pequeño chasquido y levante la cabeza, en lo que la orina sagrada de mi diosa caía en mi boca, era mucha aunque yo trataba de no desperdiciar ni una gota, me sentía extasiada bebiendo y saboreando su regalo al punto que tuve el primer orgasmo de mi vida tan solo por beber su orina, a pesar de que ya había tenido relaciones con mi novio, mi nivel de excitación en ese entonces no se comparaba por nada a la excitación que sentí en ese momento.
Terminó de orinar y de inmediato agaché la cabeza y me postré a sus pies agradeciéndole por tal honor y empezando a lamerle los pies besándoselos con pasión, tras unos segundos se retiró y se sentó, al mismo tiempo sus perras corrieron a chuparle los pies
- De ahora en adelante estarás al mismo nivel que ellas, adorarme como tu diosa será tu única labor de hoy en adelante, puedes hacer las cosas que te plazcan, no te las prohibiré, pero tu lugar siempre será bajo mis pies
Al principio no entendía a lo que se refería, aunque después comprendí que podía seguir con mi vida, es decir, realizar mis labores normalmente, seguir en la relación con mi novio y demás, comprendí que mi caso era excepcional, puesto que mis 2 amigas tenían familia, pero aun así solo eran perras a sus pies, y ya no tenían nada que ver con su vida anterior.
Continuamos adorándola durante un buen rato, pies, piernas y vagina mientras que ella miraba plácidamente la TV sin ninguna preocupación o incomodidad, al poco rato sentí como me tomo de la cabeza y me arrastró hacia ella, dejando caer mi cara en el sofá, entendí y de inmediato gire mi cabeza para que se sentara sobre mi cara, no espero a que me acomodara, simplemente se levanto un par de segundos para que ponga mi cara en posición y se volvió a sentar, de hecho si me demoraba 1 segundo mas era posible que la terminaría decepcionando por mi lentitud.
Al tener su culo en mi cara intente lamerle el ano, pero el volumen de sus nalgas no permitía que mi lengua llegara a su sublime orificio.
- Vaya, al parecer has olvidado todo el entrenamiento que te di cuando eras niña
- A tus 11 o 12 años eras bastante ágil, me levantaba apenas 1 o 2 segundos y tu lengua ya estaba frotándose en mi ano
- Te hare este favor solo por esta vez –
Al terminar de hablar cogió sus enormes nalgas y las abrió, sentí que su culo me presionaba aún más, saqué la lengua ya endurecida e intenté insertársela en el ano, debido a que anteriormente esa empresaria ya le estaba lamiendo el culo, mi diosa tenia el ano un poco dilatado, por lo que mi lengua estaba entrando de manera sencilla, aunque claro que no pude enterrar toda mi lengua, aparte de que me faltaba oxígeno.
Debido a la falta de oxígeno, empezaba a sacudirme, aunque tratara de ocultarlo de mi diosa puesto que no quería que se incomodara en lo absoluto, pese a mis esfuerzos ella se dio cuenta y se levantó, me miro y nada mas sonrió
- Al parecer tendrás que retomar tus entrenamientos, apenas si aguantaste poco menos de 3 minuto bajo mi culo
- Te voy informando que tengo otra perra capaz de aguantar al menos 8 a 10 minutos bajo mi culo y además es capaz de introducir toda su lengua y masajearme por dentro
Al oír eso me quede pasmada, no podría soportar la idea de que me desechara, de que el sueño de toda mi vida se derrumbara en muy poco tiempo por mi incapacidad, acto seguido, aunque si fuerzas me postre a sus pies y empecé a lamérselos y besárselos implorando que no me reemplazara y peor aún me desechara
- Quizá puedas retomar tus entrenamientos de silla personal y aguante, jajaja
Me dio una leve patada que agradecería desde el fondo de mi corazón y se acerco a la empresaria quien por su actitud y expresión quería realizar el mismo tipo de entrenamiento.
Al estar cerca la empresaria abrió su boca y seria usada como retrete, recibiendo el liquido sagrado de mi diosa, estaba extasiada y a la vez celosa de presenciar la escena, pero mas aun emocionada ya que tenia una gran labor que cumplir la cual determinaría mi posición como perra de mi diosa.
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