Xime, Xime, Ximenita 5
Su culito de 7 añitos era hermoso.
Después de haberla bañado y cambiado esperamos a que llegara la pizza.
Comimos y le pedí que se lavara los dientes y fuera al baño para que ya se metiera a la cama a dormir. Su mamá no había llegado aún de su compromiso y eso era bueno para mí porque ya había podido toquetear mucho a mi pequeña diosa de 7 años. Ya eran cerca de las 10 de la noche y de pronto recibí un mensaje de su mamá para avisarme que le había surgido un imprevisto y me pedía de favor que yo me quedara a dormir con Ximenita si acaso no tenía algún inconveniente. Le respondí enseguida que no se preocupara porque el día siguiente era día festivo y yo no trabajaría. Le pregunté si acaso necesitaba apoyo con otra cosa y si todo andaba bien. Ella respondió que sí y me envió un audio para avisar que ella estaba bien y no era algo grave pero habían cambiado sus planes y no podría llegar esa misma noche, al fondo se escuchaba que alguien le susurraba algo así como: ¡Qué rica estás! En ese momento supe que ya había encontrado con quién pasar la noche y me alegré porque yo ya tendría con quien pasar la noche también 😀
Me dispuse a preparar a Ximenita para dormir pero primero le leí un poco y la hice reír mucho para que se cansara y se quedara dormida pronto, incluso la hice saltar en la cama ahora que su mamá no estaba. Nos divertimos mucho y la abracé y besé mucho. Ella ya confiaba mucho en mí y me daba besitos en los labios sonriendo y diciendo: «Te quiero mucho papi.» Yo le correspondía diciendo: «Y, yo te amo, princesita mía.»
La abracé por encima de las cobijas y se durmió enseguida. Yo aproveché y me fui a bañar para poder meterme a dormir con ella. Solamente pensaba en el baño que le di unas horas antes.
Regresé a la habitación después de bañarme y la estuve acariciando para ver qué tan profundamente estaba durmiendo. Ella estaba durmiendo tan profundamente que no escuchaba cuando le hablaba. Le comencé a decir cosas como: «Eres hermosa, princesita; Eres preciosa; Jamás te dejaré de amar; Siempre estaré contigo y tú siempre serás el amor de mi vida porque quiero casarme contigo.» Todas esas cosas se las dije porque había leído un libro de Programación Neuro–Lingüística que decía que puedes programar tu cerebro mientras duermes. En este caso, yo quería que ella se sintiera segura y protegida conmigo.
Yo seguí acariciando su larga cabellera, sus brazos, su cintura, su cadera, sus nalguitas. Cielos!!! Era tan hermosa!!! En ese momento pensé si todo padré desea a sus hijas de la misma manera que otros hombres las desean o de la misma manera que uno desea a otras mujeres. Quizá esté equivocado pero creo que un padre desea a sus hijas MÁS de lo que desea a otras mujeres incluyendo a su propia esposa. Dejen su opinión en los comentarios.
Y, volviendo al relato… Comencé a bajarle su ropita de dormir poco a poco para no despertarla y ella seguía profundamente dormida. Le estaba acariciando esas nalguitas tan celestialmente suaves que no podía evitar ponerme caliente y me dieron ganas de besarla en los labios. Le di un beso un poco más atrevido que estando despierta. Pensé que se despertaría pero no lo hizo. Entonces miré sus labios tan suaves y tiernos y decidí sacarme la verga y pasársela por los labios sin pensarlo. Era tanta mi calentura que solamente seguí mis instintos.
Le pasé mi lubricante natural en los labios y ella lamió sus labios por reflejo. Seguía durmiendo. Entonces le di un beso y probé mi lubricante en sus labios tan suaves y me calentó más aquella experiencia. Se la volvía a pasar varias veces hasta que se familiarizó y después le comencé a meter un dedo en su boquita como si fuera un pene pequeño. La entrené un poco y al darme cuenta que se había familiarizado con la sensación le metí la puntita de mi verga.
Cielos!!! Era una experiencia indescriptible pero obviamente ni siquiera le entraba la cabecita completa porque su boquita era tan tierna y chiquita pero fue suficiente para hacerme producir más lubricante natural y se lo pasé en toda su boquita y ella lamió sus labios. Podía ver el brillo de sus labios con la luz nocturna de su buró. Como no le quise seguir metiendo mi verga para no ahogarla, decidí destaparla y quitarle su pantalón y calzoncito por completo.
Le comencé a besar sus piecitos largos y hermosos. Besé sus pantorrillas y sus muslos bien torneados. La giré un poco para poder besar sus nalgas tan perfectas. Eran tersas, suaves, eran lo máximo. Había tocado muchas nalgas de 10, 11, 12, 13, 14, 15, 19, 23, 32 años anteriormente pero nada se comparaba a este par de deliciosas nalgas de 7 añitos de edad.
Estaba tan caliente que decidí ir por una toalla de manos y tomé un poco de agua tibia del lavabo para poder limpiarle su ano. Mi calentura hizo que quisiera pasar mi lengua entre sus nalgas y así lo hice. Estaba tan excitado como lo estoy al narrarlo.
Estuve pasándole mi lengua entre sus gloriosas nalgas por unos minutos y terminé por darle vuelta boca arriba para comenzar a lamerle su panochita virgen. No pude notar por mi calentura pero con el paso de los minutos mi Ximenita había comenzado a gemir y en mi mente solamente pensaba: Xime, Xime, Ximenita!!! Yo seguí lamiéndole su coñito con sabor ligeramente saladito y ligeramente con sabor a nuez o paleta de leche sabor a nuez (algunos sabrán a lo que me refiero). Después de un tiempo soltó chorros de pipí y la sequé.
Yo la cobijé y me metí a la cama detrás de ella para pajearme. Le tomé su manita para pajearme con ella. Qué delicia!!! Le pasé mi verga entre sus nalgas y levantaba su pierna de ladito de vez en cuando para meter mi verga entre sus piernitas delgaditas. Así estuve gozando hasta que ya no pude aguantar y la puse boca abajo para descobijarla y explotar en sus nalgas tan excitantes. Después de vaciar todo mi semen en su trasero le di a probar un poco con mi dedo y froté todo su culo y espalda con mi semen. Espere un poco para que se secara y la vestí. Aproveché para repetirle que era hermosa y que la amaba.
Espero que les haya ayudado a terminar rico 😛 😀 🙂 Dejen sus comentarios !!!
Ok si termine. Espero continue
Me encanta tu relato amigo, que suerte tienes…esta es solamente la primera experiencia de muchas más que tendrás la suerte de poder disfrutar en el futuro…