yo, el abuelo y mi hermanita tetona 4.

La historia de cuando mi hermanita y yo viviamos con nuestro abuelo durante la pandemia, y de como crei que todo por fin terminaria..
Con mi ayuda de obligado complice, El viejo pudo consumar sus planes, metio a mi hermanita en su cama, la sedujo, y al fin la termino de convencer para que se entregara a el. Vi como mi hermana se dejaba poseer por nuestro abuelo, ansiosa por sus besos y sus caricias, y abriendose de piernas para que la desvirgara. Escuche los gritos de placer y dolor cuando el miembro del viejo accedia en su hambriento canal vagina y la volvia mujer.

 

La imagen de la cara retorcida de placer de mi hermanita derrumbo todas mis esperanzas esa noche. Y supe que ya no habia oportunidad para mi. Me llene de amargura y decepcion, y me avergoncé al regresar a mi piesa a pajearme para poder bajar mi calentura.

 

Desde la mañana, las cosas cambiaron. Los meses que siguieron fueron un calvario para mi y el paraiso para el viejo. Y tuve que ver en silencio todo.

 

La juanita ya no se despego nunca mas del abuelo, empezo a dormir todas las noches en su cama y siempre queria estar cerca de el: en las comidas, durante el dia, en paseos de compras e incluso cuando iba al campo a ver sus arboles y a sus animales. El abuelo comento que habia vendido las tierras que antes trabajaba a una empresa porque mi papa se habia buscado otro oficio, y con lo que consiguio se hizo un fondo de retiro que le permitia su pasar holgado. Por ello me habia parecido tan diferente el lugar, era un nuevo terreno y una nueva casa. Era por ello que ya no se veia el agobiante trabajo en el que me habia metido de niño junto a mis papas.

 

Aunque vivia en la casa y comia con ellos, Yo no estaba incluido en esos momentos. El viejo y la juana compartian su tiempo juntos sin pensar mucho en mi. Cuando salian de compras me traian regalos como zapatillas, ropa o lo que les pidiera, pero no prestaban interes en que hiciera, por el contrario estaban arto felices de no verme cerca para poder disfrutar dandose todo el amor y placer que desearan. Cuando salian de paseo al campo permanecian fuera todo el dia, y al regresar podia ver en la juanita los indicios de los momentos de pasion que habian tenido; como su ropa desordenada, su pelo revuelo y las manchas de pasto en sus rodillas. Aquello no le representaba riesgo alguno al viejo, ya que el lugar donde vivia era muy apartado y aun antes de la pandemia era raro ver algun alma pasar cerca. Tambien empece a ver que la basura estaba llena de condones y estuches de pastillas anticonceptivas. El viejo se habia preparado bien para evitar cualquier incidente y no devolverle a la juanita embarazada
a mis papas.

 

En algunas ocaciones, el abuelo tenia que irse a atender algun asunto, y se quedaba fuero todo el dia. La juana esos dias se quedaba como un cachorro abandonado, durmiendo en su piesa o paseando por la casa sin hacer un ruido. En esas ocaciones cuando la veia caminando intentaba hacercarme a ella, solo para volver a tener cercania, pero siempre recibi apaticas y desinteresadas respuestas por parte suya, que terminaban con la juana llendose a su piesa.

 

entendí que en la cama o fuera de ella el viejo era dueño de la juana. Su animo, su cuerpo y su placer le pertenecian. Ella lo deseaba, lo buscaba, lo necesitaba para que la hiciera suya mas y mas. ella no estaba llena si no lo tenia para satisfacerla.

 

El viejo lo sabia, y asi hizo que la juana se amoldara a sus deseos. Como le gustaba al abuelo, la Juana se vestia todo el tiempo ropa provocativa que le compraba en sus viajes: Usaba Poleras ligeras, Hotpans y jean muy ajustados que le apretaban su gordo culo. Vestia vestidos de una pieza con grandes escotes para lucer sus grandes tetas y Faldas supercortas que dejaban ver los calzones, y algunas veces ni se ponia calzones y su poto desnudo se asomaba a cada paso, cosa que excitaba al viejo y a mi. Al poco tiempo la juanita dejo de llevar sosten tambien, al abuelo le gustaba poder ver como se le marcaban sus pezones, constantemente hinchados por los dias y noches se ser chupados, y que se le habian vuelto tan sensible que el roce con la ropa bastaba para que se le pusieran duros todo el dia.

 

La juana se mostraba a gusto complaciendo los deseos del abuelo. Se volvio natural para ella actuar como el viejo queria, tomando una actitud cada vez mas sensual y provocativa. Y con el paso de los meses el cuerpo de la juanita tambien reacciono.

 

Como habia dicho antes, la juana nunca fue muy activa y pese a ello su figura era atractiva, con los kilitos extra asentuandose en sus cuerpo. Ahora, los dias y noches de sexo con el viejo fueron moldeando esa grasita, como apretandola en sus caderas, ensanchandolas aun mas en sus gluteos y piernas hasta darle un culo de estrella porno. Sus tetas enormes seguian creciendo aun mas hasta ser casi como los de mi mama (con quien guardaba mucho parecido) y se coronaban con pezones enormes por ser saboreados constantementes. Tambien su cara cambio, seguia con su rostro infantil de ojos grandes, pero sus labios se volvieron mas gruesos y carnosos, y cuando se los pintaba de rojo se me hacia agua la boca imaginando lo rico que serian sus besos. Y en su mirada cuando estaba junto al viejo se notaba la pasion que tenia dentro.

 

Ambos iban por la casa disimulando sus atenciones si estaba yo cerca, pero cuando no estaba a la vista se escuchaba el sonido de gemidos y jadeos en cada esquina. Al asomarme encontraba a la juanita y al abuelo comiendose apasioandamente, con mi hermanita recibiendo sus besos y caricias mientras se apoyaba contra algun mueble o se sentaba en sus piernas. La Juana respondia sumisamente a las manoseos del viejo, si este tocaba su pecho, ella se bajaba la parte alta del vestido para quedar con las tetas al aire, o se subia la falda para que pudiera tocar mejor sus nalgas si el viejo sobaba su culo. Cuando la calentura invadia a la juana, esta ponia su manita sobre su pantalon, acariciandole el pene, y el abuelo entendia, y se la llevaba a algun lugar mas comodo.

 

Detestaba ver cuanto gozaba el viejo, pero no podia controlarme al pillarlos y siempre me quedaba mirando para luego ir a masturbarme. El viejo me tenia dicho que si los pillaba, no debia interrumpirlos, y tras la conversacion de la noche en que me confeso que deseaba a mi hermana no me atrevia a desafiarlo.

 

Dia a dia se repetia, cuando los veia me tenia que hacerme a un lado. A veces en la mañana me levantaba al baño solo para escuchar los gemidos de ambos haciendo el amor en la ducha, y teniendo que aguantarme o ir a mear afuera. Viendolos oculto salir desnudos y sonrientes, la juana con sus exquisitos senos y culo al aire, y el abuelo con su pene flacido aun brillante tras haber llenado la vagina de mi hermanita con su semen. O los encontraba en la sala, sentados en el sillon con la juana semi desnuda sobre el, gimiendo mientras sentia como el miembro del viejo entraba lentamente en ella. Una y otra vez me preguntaba que veia mi hermanita, una niña tan joven y linda en el viejo para que le gustara tanto culiar con el. Si tenia el pellejo del cuello rojizo, calvicie y una panza promiente.

 

Tampoco al finalizar el dia tenia descanso. Desde que se habian acostado la primera vez, el viejo se culiaba a la juanita todas las noches, el abuelo le decia a la juanita que era su mujer y debian compartir la cama todas las noches, y la juana gozaba siendo la pareja del viejo y señora de la casa . En la “intimidad” de su piesa, el abuelo y mi hermanita no median el ruido que hacian, y al escucharlos, la calentura me dominaba he iba a espiarlos. El abuelo siempre dejaba la puerta entreabierta, lo que decia era un “gesto” hacia mi. Entonces podia verlos desde la oscuridad del pasillo. Al viejo le gustaba culiar tomandose su tiempo, y preparaba a la juanita para gozar de su voluptuso cuerpo. Hacia que la juanita se pusiera la ropa que mas le habia gustado en el dia, o algun atuendo que lo calentara especialmente.

 

Lo que mas usaban en la cama eran la ropa de colegio. El que traia no era de su escuela, pero tenia todo el conjunto, camisa, falda de tirantes y medias largas color azul marino. Se ponian en posicion d cuchara, para que asi el viejo tocara sus grandes tetas a placer. La juana movia su culo para sentir la penca del abuelo frotandose entre sus nalgas, y se besaban y acariciaban mutuamente. Entonces la juanita llevaba sus manos a los botones de su camisa, los deshacia y de un tiron dejo libre su gordas ubres. El viejo se lanzaba sobre sus tetas y se ponia a chupar los pezones. Cuando se cansaba de esa pose, se hecha sobre la cama, la Juana apoya las manos sobre las almohadas y dejaba sus tetas balanceandose en la cara del viejo. Tambien el abuelo se recostara en las piernas de mi hermana, y esta abrazara con ternura su cabeza, como si fuera un bebe, y le ponia las enormes tetas en la boca para “amamantarlo”.

 

Luego la juanita se hecha sobre la cama y el viejo se echaba sobre ella, para penetrarla en posicion de perrito. La juanita levantaba ofreciendo su culo y desaparecia bajo el cuerpo del abuelo, que se balanceaba encima de ella mentiendo y sacando su pene en ella y haciendola gritar de placer. Siempre llevaba mi celular conmigo para poder ver con el zoom cada detalle. En otros momentos, le viejo queria que la juana estuviera arriba y lo montara. La juana apoyando sus manos sobre la panza del viejo se ponia a saltar sobre la penca del viejo como frenetica. Subia y bajaba su gordo culo y su vagina humeda que enbolvia el grueso pene. Esa posicion era de las que mas me prendian, pues podia ver perfectamente como los labios vaginales de la juanita besaban el miembro del viejo, y no lo dejaban ir mientras sus caderas se sacudian, hasta que se corrian. Siempre era la juanita la que se corria primero, y luego tenia que recibir con su coño sensible las enculadas del viejo hasta que este se viniera dentro de ella. Tras el coito, la juana quedaba desfallecida en la cama, y se dormia poco despues.

 

 

Yo me cagaba a pajas esas noches, para luego sufrir la vergüenza y frustracion de saber lo que nunca tendria. Y de que asi serian las cosas por el resto de tiempo que siguieramos en esa casa.

 

El tiempo siguio su curso, y 6 meses que se me hicieron eternos habian pasado. En las noticias se hablaba ya de volver a la normalidad. Mis papas trabajaron por todo ese tiempo en la empresa durante pandemia, pero ahora que volvian a operar los diferentes negocios, mi papa renuncio y volvio a la empresa de construccion. Mi mama en cambio decidio quedarse ya que restaurant en el que estaba hacia quebrado. Y como tambien empezarian a hacerse clases, decidieron que era momento de volver a
casa. Por ello, mi mama y papa acordaron ir el fin de semana para hablar con el abuelo. La juana y yo estabamos muy nerviosos por verlos otra vez tras tanto tiempo, y no sabiamos que pasaria. Cuando vimos acercarse su auto, salimos a recibirlos, y nos acercamos a ellos para abrazarlos. Y puede ver la sorpresa en sus ojos. Yo estaba casi igual que la ultima vez, pero la juanita parecia otra persona, pese a seguir igual de chaparra. La primera en hablar fue mi mama.

 

 

Mama: ¿Juana, hija?
Juana: claro, mama. ¿Quien mas podria ser?
Papa: pero mira como has crecido. Bebe.
Abuelo: estos niños crecen como la mala hierba, el ambiente del campo les hace bien.
Mama: no puedo creer que mi niña se pusiera tan grande y yo me lo perdiera.
Abuelo: Ya es toda una señorita, hija.
Mama: si, es mi señorita, mis bebes.

 

Mi mama solto unas lagrimas al abrazarnos y entro con nosotros a la casa para que conviviéramos juntos tras tanto tiempo, mientras hablaba de lo linda que estaba la juana. Yo me preguntaba que pensaria mi mama si supiera que su niña, su señorita, todos los dias andaba por la casa caliente buscando la atencion del abuelo, que cada noche se iba a la cama con el choro excitado y los calzones humedos, aguardando a que el viejo subiera para culiarsela hasta hacerla gritar como una perra.

 

Comimos temprano y luego mis papas se quedaron con el abuelo hablando. Le dieron las gracias por todo lo que habia hecho y hablaron de que ya era tiempo de que volvieramos a nuestra casa. Pense que el viejo trataria de convenserlos de dejarnos un tiempo mas alli, ya que no querria desprenderse del chorito de su pequeña amante, pero para mi sorpresa no fue asi, sino que estuvo de acuerdo, y solo les pidio que nos llevara con el de visita mas seguido, ya que nos extrañaria. Mis papas no vieron problema en ello y acordaron que la siguiente semana vendrian por nosotros para volver a casa. Yo estaba satisfecho de que por fin acabaria esa tortura, y pense en que hacer una vez volviera a casa. La semana siguiente transcurrio con normalidad, el viejo y la juana no cambiaron en nada su rutina.

 

Cuando faltaban 2 dias para la nuestra marcha, me acorde que que el abuelo habia promedito darme un regalo especial en agradecimiento por mi ayuda, y que nunca le habia cobrado la palabra. Cabile sobre pedirselo o no, ya que no sabia que podia ser quizas no valdria la pena, pero la insertidumbre me llenaba la cabeza, asi que me arme de valor y le hable de ello.

 

Tono: abuelo.
Abuelo: ¿si, tono?
Tono: si, queria hablar contigo.
Abuelo: bueno, ya estamos hablando. ¿que pasa?
Tono: b-bueno, veras, me acorde que habias dicho que me darias algo, un regalo.
Abuelo: a si?, bueno, que quieres? Zapatillas? Ropa? Una de esas consolas?
Tono: no eso, sino, u-un regalo especial. Por…eh, por.
Abuelo: mmm, ah, si, ya me acorde. Por tu ayuda. Jejeje.
Tono: si. Eso.
Abuelo: y quieres algo que tenga que ver con la juanita, ¿eh?
Tono: s-si.
Abuelo: jajajaj bueno, bueno. Yo te lo prometi. Esta noche te lo cumplo.
Tono: ¿de verdad?
Abuelo: claro, pero tienes que hacer lo que te diga.
Tono: si, si, por su puesto.

 

 

Pase el resto del dia esperando a que llegara el momento. Y al anochecer el abuelo me llevo a una esquina y me dijo que debia hacer.

 

 

Abuelo: ve a mi piesa y entra al armario.
Tono: ¿porque?
Abuelo: ¿quieres tu premio o no? tu hazlo y no preguntes.
Tono: bueno…
abuelo: bien. Cuando estes alli, espera y no hagas ruido, yo me ocupo del resto.
Tono: b-bien.

 

 

Fui a su piesa y entre donde me dijo. Aguarde dentro del armario impaciente por ver que era lo que el
abuelo habia preparado para mi. La luz de la pieza entraba por las rendillas en forma de rejilla de la
puerta, iluminando el espacio oscuro donde estaba. La panza se me revolvia por el nerviosismo y ya no
aguantaba mas la espera, cuando finalmente el abuelo aparecio, trayendo a juana de la mano que estaba

cubierta por una bata.

Abuelo: muy bien, mi amor.
Juana: ¿empiezo?
Abuelo: si. Quitatelo.

 

El viejo se recosto en la cama poniendo los brazos tras su cabeza para acomodarse, le dijo a la juana algo al oido y esta se levanto dando la espalda y con un movimiento dejo caer la bata a suelo, mostrando la ropa mas caliente que hubiera podido imaginar: un baby doll que con solo verlo se me puso el pene mas duro que nunca. Era un sosten y calzon de tirantes que le dejaban al descubierto los grandes pezones y el coño rosado, con unos portaligas que unian las medias al calzon, tan diminuto que
parecia a punto de desaparecer tragado por sus enormes tetas y su carnoso culo. Y era todo blanco, con lo que parecia un obsceno vestido de bodas.

 

Al verla no cabia en mi de la emocion, jamas la habia visto tan sexy como en ese momento. El corazon me latia fuerte y pense que todo el tiempo que habia esperado me parecia que habia valido la pena. No me habia imaginado algo tan bueno.

 

La juana giro, mostrandole al abuelo como se le veia su conjunto. le modelo el caliente atuendo, danzando y acariciando su sensual cuerpo. Pasando su mano por sus tetas, sus muslos, entre sus piernas y se inclinaba para que observara como los tirantes de encaje apretaban sus ricas nalgas. El abuelo ya no aguardo mas, y se levanto para tomar a la juanita y tirarla a la cama.

 

Abuelo: mi amor, que rica eres.
Juana: mmm, te gusta?
Abuelo: si, mi vida. Eres la niña mas preciosa del mundo.
Juana: no soy una niña, soy tu mujer.
Abuelo: lo eres, mi vida.
Juana: ¿me amas?
Abuelo: si, te amo, te deseo.
Juana: yo tambien. hazme tuya, mi amor.

 

El viejo de inmediato fue sobre sus tetas, esas tetas tan grandes, suave y firmes, que jamas esperarias ver en un niña de 13. se metía los pezones de la juanita en la boca y chupetaba hasta que la juanita se quejaba, para luego soltar un pezon e ir al otro. Beso esos grandes senos, los chupo, apretujo, amazo y lamio todo lo que quizo. Despues, volteo a la juanita y empezo a lamerle la vagina. La juanita gimio al sentir como la lengua del abuelo invadia en su interior. No podia llegar hasta el pene del viejo, pero lo
tocaba y amazaba para masturbarlo, deteniendose cada vez que el abuelo le metia profundo la lengua en su sexo.

 

La juana gemia y gemia, y cuando ya no podia mas de la excitación miro al abuelo y le hablo – AY, PAPITO, YA NO AGUANTO MAS. – entonces el viejo la recosto sobre la cama, y como otras veces la puso en posicion de perrito. La juanita sabia bien que tenia que hacer, y rapidamente levanto su voluptuoso culo, movia ansiosa las caderas por sentir el miembro del abuelo entrando en ella. El viejo se puso detras de ella, paso sus brazos por su cintura y en un movimientos metio su grueso pene en la vagina de mi hermana. La juanita solto un agudo chillido seguido de quejidos, y por unos momentos se debatio como si intentara soltarse.

 

Juana: ay, papito, ay papito.
Abuelo: te gusta? Te gusta?
Juana: ay quietito, mi amor, despacito.
Abuelo pero te gusta?
Juana: ….me gusta, pero quietito, mas despacito.

 

El abuelo beso el cuello de la juanita, pero no bajo el ritomo. Movian su culo hacia adeltante y atrás mientras la juanita recibia las en enculadas en su pequeña vagina, tras unos instantes se entrego y sus quejidos se volvieron gemidos de placer. El abuelo la embestia con fuerza, soltando el ruido humedo cuando su pene entraba profudamente en mi hermana, y la juanita soltaba ahullidos al sentir aquel mete y saca. Con el brazo en su cintura hizo que la juanita se alzara, quedando de rodillas y con su espalda apoyada en el cuerpo del viejo, que se puso a jugar con sus grandes senos mientras su penca seguia entrando entre las piernas de la niña. La juana tenia cerrados los ojos y se ponia las manos en su pelo, mientras ponia muecas obscenas por el placer que sentia. El abuelo miro hacia el armario, y senti su mirada clavada en mi. Como si me preguntara si estaba disfrutando el espectaculo. De repente agarro el sosten de encaje y lo jarro de un tiron, con lo que las tetas de la juanita quedaron sin nada que las cubriera. El abuelo puso su mano en la cabeza de la juana y la arrojo contra las almohadas, empujandola para que se quedara echada y empezo a penetrarla como loco.

 

 

Juana: UY PAPITO, ME LA METES MUY DURO¡¡¡¡
abuelo: ¿DE QUIEN ERES? ¿DIME DE QUIEN ERES MUJER?.
Juana: TUYA PAPI, SOY TU MUJER, SOY TU MUJER.
Abuelo: me voy, me voy mmmmm.

 

El viejo hizo un fuerte gruñido cuando se vino, y dio media docena de enculadas para asegurarse de echar todo su semen dentre de mi hermana como siempre hacia. Al acabar se echo a un ladocon su pene mortecino cubierto de los fluidos de la juna y su propio semen. La juanita quedo derrumbada a su lado, recuperando el aliento. Cuando se recompuso algo se rescosto con su cabeza en el pecho del viejo y le pidio besos. Ambos se besaron por largo rato hasta que el agotamiento vencio a la juana, que se durmio sobre el pecho. Pasado unos minutos el abuelo me hablo y me dijo que saliera.

 

Abuelo: ¿que tal? Como estuvo el show?
Tono: ah ahahah.
Abuelo: ¿asi de bueno? Jejeje. Espero estes satisfecho.
Tono: s-si, gracias abuelo.
Abuelo: bien. Ahora vete, que mañana sera un dia agitado.

 

Me despedi y fui a mi cuarto. Aun tenia el pene duro por lo que habia visto y la ropa interior se me habia manchado, asi que los tuve que dejar en el baño.

A la mañana siguiente mis papas llegaron temprano y empezamos a guardas todas nuestras cosas para volver a casa. Al medio dia tuvimos todo listo y toco despedirnos. Le di la mano al viejo y me despedi de manera, y el me respondi dandome un sobre con bastante plata, un ultimo regalo de despedida decia. Cuando le toco a la juana fue bastante diferente. la juana se lanzo a los brazos del abuelo y se puso a llorar desconsolada, lo abrazo y no quizo soltarse. Mis papas le decian que entedian que se hubiera acostumbrado a estar en el campo pero que ya era hora de volver a casa, pero la juana empezo a decir que no se queria ir y que queria vivir alli para siempre. Mi mama le decia que no hiciera eso y empeo a impacientarse, pero entonces el abuelo la tomo y le dio un beso en la mejilla, y la juana entre lagrimos finalmente se solto y acepto separarse.

 

Desde que nos subimos al auto la juana miro hacia la casa en todo momento, y cuando perdimos de vista al viejo emepzo a sollozar como una niña chica. Siguio llorando en el regazo de mi mama por todo el viaje, hasta que se quedo dormida y mi papa tuvo que sacarla del auto y llevarla a su piesa cuando llegamos a la casa.

 

El casa las cosas estaban como las habiamos dejado, y pense en que alli podria dejar atrás todo lo que habia vivido en la casa del abuelo.

Pero no fue tan simple.

Me di cuenta que aunque habia sido muy frustrante el ver al viejo culiarse a mi hermana sin poder hacer nada, yo tambien habia disfrutado de ese ambiente. Ahora nada de lo que tenia a mi disposicion era igual de excitante, los videos porno me parecian muy sosos en comparacion y me costaba mucho correrme. Mientras que los recuerdos de los dias y noches en la casa del campo eran mucho mas estimulantes. Para la juana tampoco era facil. Por varios dias se mantuvo triste y lloroza por la separacion con el abuelo. andaba por la casa desanimada, y estaba seguro que por la noche podia escuchar ruidos y gemidos desde su piesa que solo podian ser de ella masturbandose, pues se detenia si escuchaba que alguien se acercaba.

 

Aunque se hablaba ya de volver a clases no se daban fechas para iniciar, asi que no habia prisas para nada. Mi mama pasaba 5 dias seguidos en sus turnos nocturnos en la fabrica, y regresaba solo para dormir, por lo que en le dia veiamos mas que nada a nuestro papa. Las cosas en la casa eran tranquilas pues mi papa siempre habia sido mucho mas relajado que con mi mama, pero podia notar que habia algo de tension en el ambiente que no podia explicarme. Pasaron algunos dias para que entediera que era al espiar como se me habia hecho costumbre. En una de mis vueltas pudo ver a mi papa que abrazaba a mi mama por la espalda y acariciaba sus senos, los mismos senos enormes que la juanita habia heredado. Pero mi mana lo hacia apartarse porque estaba cansada. Mi papa se quejaba de que estaba cansada todo el tiempo y no culiaban hacia rato, pero ella no le prestaba importancia y se iba a dormir, dejando a mi papa caliente y con la penca dura.

 

Me dije que todos alli teniamos nuestros problemas y no le di importancia, pero por mi experiencia debi suponer que el calor entre las piernas es algo que no deja que las cosas se queden tranquilas.

 

Tras una semana, la juana empezo a mejorar su humor. Volvia a andar por la casa alegre y compartia con la familia como antes. Me alegre y empece a pensar que tal vez se estaba acostumbrando a nuestra vieja rutina, y empece a albergar ideas de que, quizas, con el tiempo volveriamos a tener la relacion que teniamos antes de irnos, pero poco a poco note cosas que me alertaron por mi experiencia. La juana empezo a bañarse todos los dias, pero en vez de llevar su ropa para cambiarse solo con la toalla y salia
medio desnuda. Tambien se sentaba junto a mi papa cada vez mas seguido en el almuerzo, y cuando lo encontraba en el pasillo lo abrazaba y se pegaba mucho a el, como buscando hacer que este sintiera su cuerpo. Tambien la empece a encontrar sentada en sus piernas al ver tv o recibiendolo muy efusivamente cuando llegaba del trabajo.

 

Dude al principio, pero una corazonada me decia que no estaba actuando de forma normal, y tambien notaba que mi papa entendia paulatinamente el actuar cariñoso de mi hermana, y que estaba pasando de la incomididad al agrado por su comportamiento. Ya que en un principio evitaba ligeramente los gestos que le hacia mi hermanita, pero cada vez mas los aceptaba, y que emepaba a buscarlos y desearlos. No me imaginaba hasta que punto podian llegar, pero me mantenia atento. Hacer esos jueguitos en la casa tenia sus riesgos y facilmente podria ocurrir un fiasco, pero en el fondo deseaba saber que estaba
dispuesto a hacer mi papa y hasta donde la juana lo dejaria ir.

 

Fue finalmente un viernes en que obtuve la respuesta. En la mañana escuche unos ruidos, y me levante para averiguar que era lo que pasaba, me intuia algo. Mire por la esquina y vi lo que me esperaba. La juana estaba detenida en medio del pasillo, se cubria solo con una toalla de la cintura para abajo y mi papa que estaba parado frente a ella estaba acariciando sus grandes tetas. la juana le hablaba y le sonreia tranquilamente, como si fuera lo mas natural del mundo que la estuviera manoseando con tanto descaro. No podia escuchar de que hablaban pero la juanita se reia continuamente mientras hacia gestos sugerentes y provocativos. Estuvieron asi, como si fueran un par de desconocidos que se seducian en una calle, hasta que mi papa dejo de agarrarle las tetas, le paso su dedo pulgar por los labios a la juanita, que se lo lamio lentamente, y ambos empezaron a besarse.

 

Mi papa agarraba con firmesa a la juanita, luego la empujo contra una pared y puso su mano en el cuello, la beso como forzando a quedarse quieta, mientras la juana respondia con pasion al rudo trato le estaba dando. Ambos se abrazaban desenfrenados, y mi mientras mi papa le comia los labios, con las manos le apretaba los senos. Agarro la toalla con la que la juana se cubria y se la quito de un tiron, para meterle la mano entre las piernas, frotandole su sexo. Estuvieron asi un buen rato, perdidos en la excitacion. Mi papa empujaba tan rudo a la juana contra la pared que cada por mi hermanita soltaba un – AY, AY, QUIETITO, PAPI – . Pero mi papa no le hacia caso y la seguia tirando contra la pared como a una cualquiera, y la juana no se resistia, sino que se entregaba a ese juego.

 

Estuvieron asi hasta que un ruido en el segundo piso los hizo detenerse. de golpe se separaron y la juana agarro rapido la toalla que estaba tirada y se dirigio al baño, pero antes de alejarse mi papa la agarro del brazo, le susurro algo al oido. La juanita le sonrio con cara de tonta y solo asintio antes de irse corriendo. Unos minutos despues bajo mi mama con la cara llena de sueño, preguntado que ajetreo habia abajo que sonaban golpes. Mi papa le invento una excusa, y aun con la penca parada la agarro
por sus gordas tetas y empezo a besarla de tan caliente que seguia. Mi mama le dijo que ahora no porque estaba cansada, lo aparto para ir por un vaso de agua y se volvio a su pieza. Mi papa se quedo en el pasillo mirandola irse, esta vez sin decirle nada. Mi papa habia encontrado como quitarse lo caliente.

 

Era completamente increible. Mi hermana habia buscado a nuestro padre para satisfacir sus deseos sexuales, y mi papa habia sedido a sus encantos y la deseaba tambien. Pendeja puta, ¿porque con el? La sensacion desagradable que creia que no volveria a sentir habia regresado, pero tambien sentia una emocion diferente. Parecida a la excitasion de espiar furtivamente. Algo en mi tambien sentia una ligera alegria de pensar en que el abuelo perdia la exclusividad de poseer a la juanita, y al igual que yo ya no la poseeria, aunque en su caso el no lo sabria.

 

Poco despues mi papa se fue a su trabajo, y yo volvi a mi piesa para pensar en que pasaria en la casa pronto. Intentaba imaginar formas para espiar a la juana y a mi papa cuando emeparan a hacer sus cosas, cuando el sonido de alguie hablando en la sala llamo mi atencion. Pense que quizas era mi mama, pero la voz intentaba no hablar alto, y solo por mi oido acostumbrado al silencio es que lo habia notado. Por lo que me levante y sali a ver quien era.

 

Me acerque disgiloso, todos los meses espienado al abuelo me habian enseñado a como moverme sin hacer ruido. Y escuche lo que decia. Al estar tan cerca pudo notar la vo de mi hermana. Juanita: si, si……..no, al principio no, pero me miraba… si, le gusto……si, al final cuando ya no disimulaba que le gustaba verme desnuda y queria mas.
Juanita: si. Nos va a llevar este fin de semana, se lo rogue cuando estabamos en el pasillo y me tocaba y me dijo que si y nos va a acompañar……. Te extraño mi amor. Extraño tus besos, que estés dentro de mi. No puedo esperar a estar contigo…

 

la juana colgo y yo me retire. No me habia imaginado algo asi. Estaba seguro que mi papa y la juana habian terminando sediendo al deseo por la calentura y necesidad de sexo que ambos tenian, pero no habia sido asi. Ella lo sedujo por orden de la persona con la que habia estado hablando, y esa persona solo podia ser uno. La juana habia actuado ¡¡¡¡¡POR ORDEN DEL ABUELO!!!!!
No entendia porque el viejo habria hecho que mi hermana se acostara con mi papa, y para que queria que fuera a su casa con

nosotros.

Podia intuir que las cosas no harian mas que complicarse el fin de semana, y que no habia acabado todo como habia pensado. Pero lo que paso en casa del abuelo, con mi papa, mi hermana, el abuelo y yo, es otra historia.

 

 

Con esto damos por finaliza esta historia. Doy gracias a todos los que me escribieron dando su apoyo y que les gustaba mi historia. Dentro de poco quiero empezar una historia diferente y espero que sea de su agrado. Hasta entonces.