EL CHANEQUE 2

(La señora Claudia en el departamento 7).
La señora Claudia Pérez 35 años era una mujer de fortuna, había heredado de su padre además del edificio de departamentos, una botica y una pequeña fortuna. Vivía con una sobrina de 28 años que tenía una hija de 11. Era una mujer muy dada a la iglesia que daba grandes limosnas a la misma. Ese día eran las tres de la tarde y según parecía venía de su botica, entró justo en el momento en que Jaime y el hombre aparecían en la sala, pero no podía verlos, Magda, su sobrina salió a recibirla.

-¿ya llegaste tiita?

-si mi amor.

Y se dieron un beso en la boca. Magda dijo de pronto.

-la comida esta lista.

-espérate, vengo muy caliente, me llamó el padre Manuel y fui a verlo, estaba muy caliente y tuve que darle un par de mamadas y me dio por el culo, pero sigo cachonda. Entonces ante los ojos de Jaime las dos mujeres se desnudaron, en verdad que eran unos cromos de hembras e iniciaron un 69 sobre el sofá de la casa. Sé mamaban los coños desesperadamente se metían los dedos en el culo, se besaban y acariciaban, de pronto Claudia le dijo.

-necesito a Ajax.

Se escucho el grito de Magda a su hija.

-Nora, tráete a Ajax y ven preparada.

Tres minutos después apareció una niña de 11 años completamente desnuda conduciendo un mastín gran danés con las patas protegidas con una especie de botas, ante ellas la niña se puso a acariciar el pene del perro que creció enormemente y luego empezó a mamarlo, el perro se retorcía de placer, pero la niña midió bien los tiempos e hizo que el animal se montara en Claudia, que estaba echada en el sofá con las piernas abiertas, de un empujón metió su pene y sin tardarse empezó a moverse, Claudia gritaba de placer mientras Magda y su hija controlaban al mastín, de pronto este descargó su semen dentro de Claudia y cuando sacó su pene la niña continuo mamándolo mientras su madre decía.

-que no se afloje, mantenlo duro.

Después de cerciorase que así era, Magda se colocó en cuatro patas y su hija guio al perro que se abalanzó sobre ella penetrándola en el culo, duraron unos tres minutos hasta que el perro tuvo otro orgasmo y al sacar el pene de nuevo la niña lo mamó mientras su madre le decía.

-si tienes muchas ganas en la tarde ve a la iglesia para que el padre “te arregle”.

Las tres mujeres continuaron acariciándose y mamándose el coño hasta que se fueron a comer

Jaime veía todo esto con los ojos abiertos de par en par y hasta el preguntó al hombre.

-¿esto es real?

-acaso no lo has visto, le contestó.

-a ver que piensa el padre Antonio de todo esto.

-¿quieres que veamos lo que hizo el lunes el padre Antonio?

-¿también él?

El hombre hizo sus pases mágicos y de pronto aparecieron en el departamento No 6, que era el que tenía el acceso más escondido por su posición pues daba a un callejón ´por donde nadie pasaba.