Mi rica zorrita
Tengo una rica zorrita en casa, cuando la conocí ya la habían disfrutado varios hombres.
Cuando conocí a mi mujer, apenas tenía 21 años pero ya había Sido toda una gran puta, la primera vez que tuvimos sexo fue en un hotel, habíamos tomado unas cuantas cervezas, empezamos fajando y yo metiéndole mano por todos lados, la desnude, siempre ha estado muy rica, es chaparrita, no es gordita, pero tiene un por de nalgas muy carnosas y redondas y firmes, gracias a que de más joven siempre hizo ejercicio cabalgando unas buenas vergas, y aparte le gustaba jugar fútbol, por lo que sus piernas siempre han Sido torneadas, no es ni blanca ni morenas sino y tono intermedio, tienen una cintura muy pequeña y unos senos nada despreciables, no son grandes pero su forma es muy bonita y tiene una seña muy particular, tiene los pezones undidos lo cuál me exita mucho más pues tengo que mamarselos con más fuerza hasta que logró que salgan sus nenas, como yo les digo, bueno como les contaba era nuestra primera vez, desde ahí me di cuenta la puta que estaba por cogerme, ya que no puso ninguna objeción porque le metiera toda mi verga sin condón, no es que sea presumido al contrario, antes de tener sexo con ella a quien aquí llamaré Karla, obvio ya había tenido sexo con algunas mujeres más, sin embargo a todas ellas les parecía grande mi pene de 15 Cms, no voy a decir que son 20 como los que mienten pero si son 15 cms, no la tengo muy gorda yo creo el promedio pero al pregúntarle a Karla si le gustaba o si la tenía grande, sencillamente me contestó,
– no está mal, te digo la verdad? He tenido más grandes y gruesas.
Su respuesta me dejó perplejo, pero también desde ahí descubrí que me encantaría y que me calentaba y me dabanas ganas de meterle toda mi verga al escuchar sus pasadas puterias, fue así como poco a poco fui conociendo a mi zorrita y escuchando en cada cogida, cómo se la habían cogído riquísimo algunos hombres, ya que también me ha contado de los malos que no le hacían sentir nada. Con ella aprendí y me di cuenta que mi verga no era tan grande como yo creía, que simple mente nunca había estado con alguna mujer que tuviera tanta experiencias como ella y que hubiera estado con hombres más vergudos que yo.
Ese día no termine dentro de ella, tampoco se los eche en la boca, como después supe que le gustaba recibirlos de algunas de sus parejas en el sexo, tan solo la saqué y se los avente sobre sus pechos, ella se los embarró con una mano, para después irse a bañar.
Lo más rico de mi puta es que tiene una vagina muy bien entrenada, que aprieta muy rico, afortunadamente yo no soy precoz, como alguna pareja que tuvo que no le aguantaba sus talones
– de seguro que con ese perrito los hacías venir bien rápido.
Me contó de una de sus parejas, un negro de Veracruz, que fue el primero en decirle que tenía perrito entre sus piernas, aunque como no darse cuenta si dice que la tenía muy grande y le llenaba todo su hueco al metérsela y sacarlas
– de seguro que te sentías como brocheta, atravesada por esa vergota
– si se siente rico, pero después de un rato es incómodos
-entonces los haces venir rápido?
– si aveces no aguantaban nada, y me quedaba con las ganas.
Pues esta es mi putita Karla, mi mujer, mi zorrita, mi hembra.
Espero sus comentarios morbosos para mostrárselo a ella. Mientras le lleno su boquita con mi verga y me hace venir hasta el final, tragándose mi lechita caliente.
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