Pequeños Pantys de Nena
Perversiones suprimidas y escondidas de mi esposo.
Historia ficticia y anónima.
Hola soy Carmen tengo 40 años y estoy felizmente casada con Manuel de 45 años, no tenemos hijos ya que soy completamente infértil, sin embargo; tenemos una vida feliz. Mi historia empezó hace unos años atrás cuando los padres de mi esposo fallecieron en un viaje de jubilados, para mi esposo fue una tragedia que lo hundió en una enorme pena. Nuestra relación fue también afectada por la tristeza de mi esposo, ya que dejo de ser el hombre cálido y afectuoso que tanto me gustaba.
Yo siendo una esposa comprometida y enamorada me decidí animarlo, preparando sus comidas favoritas, alentándolo a salir adelante, seduciéndolo, cumpliendo todos sus deseos caprichos y fantasías. El proceso era bastante lento, durante 2 años logre algunas mejoras, pero él no conseguía volver a la normalidad, entonces investigué en internet sobre las personas que pasan por un trauma fuerte y aprendí que las experiencias positivas deben ser tan fuertes como las negativas para lograr que una persona las supere. ¡Es decir, debía hacerlo extremadamente feliz y dichoso! Lo raro fue que en el foro donde encontré la publicación tenía muchos comentarios y la mayoría me dejaron con la boca abierta. Encontré esposas que renunciaron a su moral, orgullo y decencia, e hicieron cosas inimaginables para recuperar del trauma a sus esposos. Cosas como contratar prostitutas para para hacer orgias en su cama matrimonial, o cumplir fetiches raros y algo fuertes como dejarse orinar encima, o ellas orinar sobre su hombre. Otras de alguna manera conocían gustos raros de sus esposos que ellos jamás se atrevieron a contar. Por ejemplo, una chica sospechaba que a su esposo le gustaba la cuñada (su hermana), así que convenció a la hermana de hacer un trio. Otra mujer sabía que a su esposo le gustaría verla con otro hombre, así que cumplió esa fantasía oculta. Pero lo que les voy a contar a continuación fue lo que más encontré en los comentarios. Muchos de sus esposos se sienten muy atraídos por chicas mucho menores que sus esposas, al parecer es algo casi instintivo. Entonces algunas esposas fueron capaces de llevar regalitos a sus esposos para excitarlos como pantys de sobrinas, medias, falditas etc…
Esta información me voló la cabeza porque me hizo recordar algunas situaciones que yo pasé por alto a lo largo de mi relación, por ejemplo, que mi esposo se pone muy contento cuando ve alguna nena, la saluda, le hace un cumplido, si puede le regala algo como un caramelo o alguna moneda, y cuando ha tenido la oportunidad les ha pedido un beso en la mejilla. A mí siempre me pareció muy tierno de su parte, pero no había notado que siempre que esto ocurría y llegábamos a casa me hacia el amor con locura.
Esta idea para mí fue devastadora y casi me vuelve loca, pero me calme y pensé que sea lo que sea el jamás él me ha demostrado ser un hombre malo o inmoral. Yo no tenía derecho de juzgarlo por una simple idea que vino a mi cabeza. Así que seguí investigando.
Los concejos que daban los comentarios del foro decían que todos los hombres tienen algún secreto, fantasía o fetiche ya que son animales de fuertes instintos que han logrado civilizarse, y que deben ser respetados y admirados por el control que tienen para llevar una vida tranquila en la sociedad. Así que si estaba decida a seguir adelante, debía estar dispuesta a no juzgar y aceptar.
Yo decidí seguir, así que empezar a revisar su teléfono, su computador, presté más atención a su comportamiento, a donde dirigía la mirada cuando estábamos en la calle, a como trataba a las personas cuando interactuaba, que películas veía, que contenido veía en las redes y como reaccionaba. Y por supuesto que días me buscaba para hacerme el amor.
Quiero empezar diciendo que pude reafirmar que mi esposo es un caballero, respetuoso y muy confiable, pero sin dudas el sentía una fuerte atracción por las mujeres muy menores a mí. Sé que él me ama, me desea y me elije a mí por encima de todo, por eso decidí que esto ya no sería más un placer prohibido y empezó mi misión.
Comencé llevándolo centros comerciales que son frecuentados por adolecentes, y me demoraba a propósito cuando había grupos de chicas cerca de mi esposo para que el pudiera verlas. Esto siempre funcionaba, mi esposo llegaba a casa muy animado, con ganas de cocinar, de limpiar, de conversar y por su puesto la noche terminaba con mucho sexo. Pero el efecto duraba solo unos pocos días.
Así que empecé a buscar otras maneras de estimularlo, me cole en las presentaciones del colegio de mi sobrina y lleve a mi esposo a ver las presentaciones de animadoras, le pedí que nos inscribiéramos en el gym en la temporada de vacaciones, sabiendo que estaría repleto de colegialas en ropas sexys y sudorosas. Sin dame cuenta empecé a tener un gusto por controlar la libido de mi esposo, el sexo era casi garantizado y además la economía de la casa mejoró mucho, porque mi esposo se volvió muy productivo, empezó a hacer mucho dinero, tener mucha salud y ser el hombre más agradable del mundo. Yo cumplí mi objetivo, pero ya no quería parar….
Un día estuvimos en una fiesta de 15años, se imaginarán lo contento que estuvo mi esposo, tomo mucho whisky y bailo con la cumpleañera y algunas amigas, siempre tomando distancia y comportándose. Fuimos de los últimos en retirarnos y nos ofrecimos a llevar en nuestro vehículo a algunas de las adolescentes que habían bebido licor a escondidas de los adultos. Yo conduje ya que mi esposo no estaba en las mejores condiciones, entonces él fue mi copiloto, y en los asientos de atrás llevamos 2 chicas a sus respectivas casas. La ruta era de más de una hora así que las chicas mareadas y ebrias se durmieron y se recostaron entre ellas de una manera muy incómoda. Mi esposo se volteaba a verlas con unos ojitos llenos de ternura, las chicas llevaban vestidos elegantes, pero muy cortos y pegados al cuerpo, entonces quise probar algo, detuve el vehículo y le pedí a mi esposo que se pase al asiento de atrás para que sostuviera a las chicas ebrias y así no se vayan a lastimar, él no estaba seguro, pero hizo lo que yo le ordenaba. Se sentó entre las 2 chicas y las apoyo cada una unos sus hombros. ¡Luego empecé a conducir muy despacio, puse música y apagué las luces internas del vehículo, entonces, pude notar la respiración de mi esposo, como el disfrutaba estar cerca de esas hermosas nenas! El respiraba profundamente con los ojos cerrador gozando el aroma de esos cuerpos. De una manera disimulada giraba su cabeza para oler sus cabellos, y a veces bajaba la cabeza para oler sus respiraciones. Empecé a excitarme sabiendo lo que el sentía, así que fui más lejos.
Conduje hacia nuestra casa y él ni siquiera lo notó, cuando llegamos y se dio cuenta solo le dije que necesitaba orinar y cambiarme de ropa, que me demoraría unos 20 min y que por favor me espere en el vehículo cuidando a las nenas. Desde la casa me asome por una ventana a oscuras para ver que, hacia él, y por su puesto ahora el olía sus bocas, su aliento y acariciaba sus caderas, pero no se atrevió a nada mas así que volví al auto y lleve a las chicas a sus casas. Al llegar a casa mi esposo me desnudó, metió su lengua en mi vagina, y empezó a chuparme todo de una manera espectacular. Tuve 2 orgasmos esa noche.
Me encantaba esto así que el día siguiente hice algo que jamás pensé ser capaz. Quería saber cuál eran los límites de mi esposo, que es lo que le gustaba con exactitud así que lo lleve a comprar ropa para regalar supuestamente a un orfanato donde había chicas de toda edad. Lo cual era mentira. Dejé que él me ayude con las bragas para niña sin decirle edades, y que creen??? Eligio bragas muy pequeñas con muy lindos dibujitos y colores pastel. Las que usaría una nena de unos 6 o 7. Decidí confiar en mis instintos y preparé todo para el fin de semana.
Busqué a una familia de la calle y ofrecí darle toda esa ropa nueva a cambio de la ropa usada de su hija, les dije que solo era para una investigación y ellos aceptaron, me dieron 5 pantys de los cuales 2 estaban aun sin lavar. En casa tenía preparada una cama con rosas, velas, música suave para dar la sorpresa a mi esposo. El llego lo desvestí y lo acosté en la cama con los ojos vendados. Empecé a besar su cuerpo, sus pezones masculinos, su boca y le dije que me gustaría que oliera mis pantys, lo cual acepto sin problemas. ¡Entonces acerque mis pantys a su nariz y le pregunte si le gustaba y claro que le gusto, pero su pene no estaba suficientemente duro, luego junté uno de los pantys de la nena con 1 mío y esta vez él respiró con más fuerza, su pene creció mas, después puse los 2 pantys de la nena sobre su cara y su pene se puso como una roca con las venas súper brotadas, pensé que podría estallar! Empecé a chuparle su verga dura mientras el respiraba esas prendas sobre su cara sin saber realmente lo que estaba pasando.
Cuando sentí que estaba cerca de eyacular bajé un poco el ritmo, escondí los pantys y desaté la venda de sus ojos. Le dije que lo amaba y que ahora el vería la sorpresa y que no diga ni una palabra o me haría llorar. Además, le pedí que me vendara los ojos porque quería que ese momento sea solo para él y yo solo me dedicaría a chupar su verga con todo entusiasmo. Me puso la venda en los ojos y metí su verga en mi boca, puse los pantys de niña en sus manos. Empecé a chupar con dedicación esa verga y el no movía un musculo, yo estaba nerviosa pero no me detuve, y al pasar unos minutos escuche su voz diciendo TE AMO, y sé que definitivamente TU ME AMAS A MI, luego olfateó con fuerza los pantys y empezó a eyacular una enorme cantidad de semen en mi boca, salía chorro tras chorro y aunque trataba de tragar, la cantidad era mucho para mi boca, mi cara se llenó de semen, mi pelo, mis manos. Luego quite la venda de mis ojos y abrace a mi esposo diciéndole que el se merecía eso y más y que yo apenas estaba empezando.
Cachondo
Muy cachondo relato, esperamos los próximos, excelente relato felicidades
Saludos
William
Uffff que buen relato, sin duda puedes hacer más eres una gran esposa.