Abuelo joven y feliz con una hija bisnieta

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Abuelo joven y feliz con una hija bisnieta
Soy abuelo desde los treinta y dos años me llamo Jacinto tengo una hija bisnieta
Esta es una historia real que me sucedió.

Hace años cuando mi hijo mayor tubo 16 años estableció una relación con una niña, vecina de 13 años cuando estaban estudiando, al poco tiempo la nena apareció embarazada, fruto de esa relación nació mi nieta muy bonita la llamaron: María para entonces yo era un abuelo muy joven, pues me casaron a los 16 años con mi esposa de 15 años, por esta época los matrimonios los cuadraban, nuestros padres según les conviniera y comodidades económicas que les conviniera.

Pues mi hijo no se quiso casar y en nuestra cultura era muy mal visto, una deshonra de estas para la mujer, y quedaba como madre soltera deshonrada, ya que ningún joven la determinaba, por haber tenido un hijo y lo consideraban, un hijo bastardo y la joven solo podía casarse, con un viudo o un solterón viejo y de pocos recursos.

Mi hijo tan pronto se enteró del embarazo, huyo a la ciudad dejándome ese problemita, con la otra familia, me hice responsable de la situación le colaboramos, a la pelada económicamente y afectiva, se le colaboraba con la crianza de la bebita, pues la gusta venir a traer la nietecita pues, los papas de la nuera eran un poca jodidos, por los hechos sucedidos.

A pesar de su niñez prácticamente.
ya una madre y asía parte de la familia.

debía tener mucho cuidado, ya que yo tenía otros hijos uno de 14 y otro de 12 y una nena de 9 años, nos había rendido la familia y ustedes, comprenderán son edades que comienzan, a despertar sus instintos uno de los problemas, era que se contaba con pocas habitaciones, ya que solo cuenta con dos habitaciones, la matrimonial y la de los niños, hay donde acomodamos la nuera con mi nieta, los niños estudiaban y mi esposa, se dedica a los oficios de hogar mientras permanezco, a los quehaceres de la finca

Vivimos relativamente, cerca del pueblo ya que los chicos, estudian en el pueblo, un día mi esposa se fue al pueblo, a una reunión de las que hacen en los colegios, para la entrega de notas y me quede solo, y con mi nuera y mi nieta, que tenía seis meses cuando entre a la habitación de los niños, ella estaba amamantando la bebe al ver su diminuto pecho en esa acción, me llamo poderosamente la atención y le dije quien tuviera, la dicha de ser nene y me contesto que para qué.

Le dije probar esa leche que se le está regando, le escurría de seno que no está mamando la beba.

Me contesto pue debe tener experiencia, con cuatro crías que tiene.

Pues sabes que nunca he probado, a que se sabe la leche de una mujer, pues uno nuca se acuerda la que la dio la madre o tu si te acuerdas.

No tienes razón.

La nena se quedó dormida, y ella la acodo en una de las camas.

Me dijo entonces quiere saber, a qué se sabe la leche de mujer.

Le conteste que sí que si no tenía ningún problema.

No por que.

No sé cómo se mama.

Pues no lo puedo alzar como se alzan los niños.

Hasta allá tampoco.

Siéntate hay al bordo de esa cama, y se paró al frente y me ofreció el seno, que le goteaba la leche tenia, desabotonada la blusa y usaba un sostén, de los se destapan solo el frente de pezón.

Abrí mi boca y lo introdujo su pezón, sintiendo el sabor se-mi dulce de la leche, que goteaba seré lentamente mis labios y comencé a succionar como lo hacía la bebe, que hacia un momento la veía, como lo hacía saliendo el líquido tibio, y se-mi dulce de momento pasé mis brazos, por su espalda y sentí que estremeció, por no se inmuto con mi lengua le rosaba, con fuerza el pezón se puso erecto y dejo de salir ese delicioso líquido.

Le dije le pudo mamar el otro.

Lo desabrocho y me quedo mirando, lo tome y comencé a sentir que temblaba y gemía suavemente, un poca la abrase y le di un beso, el cual lo correspondió en se momento entendí, lo que quería lentamente le desabroche, la blusa y enseguida el sostén dejando al descubierto, su dorso de niña ingenua, no podía creer lo que sucedía, la lleve a la cama matrimonial, allí la desnude por completo pues su cuerpo, no era con lo deseado estaba flaca, de pechos pequeños pero muy lecheros, al fin una mujer de 15 años y cumplidos me desnude pues en realidad, ya está muy excitada tome mi pene erecto y colocado en su vagina, dejando ir hasta el fondo sin ninguna resistencia, comenzó el placer de entra salir, sentía como contraía su vagina, algo fenomenal lo que no sucedía nunca mi esposa, hasta que llegamos al mismo tiempo a ella su orgasmo, y mi corrida dentro de ella que dando exhaustos.

Recogimos los desórdenes nos aseamos arreglamos, ella se encargó de lo de la casa y Salí a los quehaceres de la finca, desde entonces las ayudas se asían más generosa, pero los encuentros eran más difíciles, pero así estuvimos dos años hasta el día que no, sé por qué motivo nos dejó la niña, con todas sus cosas y se marchó cuando ella cumplió los 18 años, a la gran ciudad y formo una nueva familia, y nos quedamos con mi nieta con la que tuve una hija, esto lo contare en otro capitulo
Espero sus comentarios y le haya gusta