Adoracion a mi esposa
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por marido_cagon.
Has llegado sin decir nada y te has ido a cambiar. Cuando vuelves a aparecer ya no eres tu, es la viciosa que vive en tu cuerpo y que me encanta ver así vestida, con medias de red y tacones, enseñando tu coño afeitado y con las tetas desbordando ese pequeño top.
Te vas al baño y te sientas en el water a esperarme. Me llamas y me ordenas pasar.
Entro caminado a cuatro patas, desnudo, sin atreverme a levantar la cabeza, mi pene cuelga a media erección. Mi mirada se detiene en tus pies, enfundados en unas provocativas medias de red ancha por la que sobresalen los dedos y levantados por los tacones de las sandalias.
Me detengo cuando mi cabeza esta a la altura de tu sexo, pero con un empujón me la diriges hacia el suelo.
-Ahora vas a esperar a que me entren ganas….
Mi nariz prácticamente roza tu tobillo y podría acariciar con la lengua las tiras de la sandalia. Pasan unos segundos, el tiempo parece detenerse…Me obligas a bajar aun más la cabeza, quedando prácticamente a ras de suelo, mientras acercas el pie a mi boca. Comienzo a besarte uno a uno los dedos de tu pie izquierdo cuando oigo caer las primeras gotas. Aun albergaba la esperanza de que te levantases y pudiese disfrutar de tu liquido dorado en mi cara, pero hoy preferías hacerme sufrir.
A estas tímidas primeras gotas siguen varios chorros de orina que acompañas de suaves pedos, era la preparación final. Mi cuerpo estaba postrado lamiéndote los pies, pero mi mente me llevaba al interior del water, imaginaba esa visión de tu coño empapado en orina y tu ano dilatándose para dar paso a un deliciosos pastel marrón.
-Ya viene….
Me pellizcabas el culo furiosamente y me arañas mientras te esfuerzas por soltar la carga. Uno tras otro los trozos de mierda caen al agua acompañados por mas pedos y las ultimas gotas de tu meada. Tu olor inunda el baño, delicioso y morboso a la vez. Mi polla alcanza ya unas dimensiones espectaculares, y cuelga rozando tu otro pie.
-Ya esta, límpiame…
Cuando me incorporo para coger papel, vi el soporte vacío. Mi mirada se levanta por primera vez y se cruzo con la tuya y comprendí que no me habías pedido que usara papel…
Con la mano diriges mi cabeza hacia tu entrepierna, y yo bajo a ciegas guiado por el intenso perfume que me llega, aun no has tirado de la cadena.
Empiezo a lamer las gotas que han salpicado tus muslos y alrededor del coño, saboreando cada una de ellas, tu te recuestas cada vez mas sobre la taza abriendo mas las piernas de forma que parece que vas a engullirme entero. A cuatro patas continuo avanzando y me acomodo a la entrada de tu cueva.
Por fin alcanzo el interior de tu vagina, el fuerte sabor salado de tus meos se mezclan con otro mas dulce de tus flujos vaginales. Intento meter la lengua lo mas adentro que puedo y buscar entre cada pliegue de tus labios restos de orina. Intento tomar todo el liquido que tienes en tu interior, pero a cada lametazo respondes mojándote mas. Delicioso.
Tengo la cara empapada y tu de vez en cuando me separas para verla, y comprobar la mirada de ansiedad que tengo por seguir comiendo. Mi boca brilla impregnada de todos tus líquidos mezclados con mi saliva. Entonces haces que me incorpore un poco, estoy a la altura de tu cara, abres la boca y esperas a que escupa dentro. Te relames de placer al saborear tus propios jugos. Me obligas a acercarme mas y me pasas la lengua por la cara. Dos o tres lengüetazos bastan para limpiar de flujo mi cara. Te lo tragas saboreándolo mientras me ordenas continuar comiendo.
Tu culo sobresale ya del borde del water, mientras te chupo el clítoris. La excitación es tal que me obligas a parar para no correrte en ese momento.
Has tenido bastante por ahora, me detienes y me ordenas levantarme.
-Meame el coño y el culo….
Agarro la polla y la bajo para dirigirla a tu entrepierna, tengo que esperar unos segundos pues la excitación me impide mear, y mientras tu comienzas a pasar los dedos por alrededor de tu raja.
-Meame ahora…
Ya sale, procuro dirigir el chorro dentro, tu te lo abres con la mano para que te empape bien. Te riego bien el coño y el liquido amarillo chorrea por tus muslos. Ahora levantas una pierna y la apoyas en mi pecho, clavándome el tacón.
-El culo también…
Metes una mano por debajo del culo para abrírtelo y comienzo a lavarte el agujero, limpiando los restos de mierda que habían quedado pegados. Ya me queda poca orina, que he de hacer ahora?
La intensidad del chorro comienza a disminuir, bajas la pierna y te incorporas, las ultimas gotas caen directamente dentro de tu boca. Con el final de la meada aprovecho para menearme un poco el rabo, pero tu me detienes. Te levantas y me escupes la orina en la cara, abro la boca para recibirla, un lengüetazo mas sobre mi rostro y te giras.
-Acaba de limpiar…
Caigo de rodillas detrás de ti, te inclinas un poco mas hacia delante y sitúas ante de mi la maravillosa visión de tu culo, tu ano y tu coño empapados, y listos para que me los coma.
Hundo la cabeza entre las nalgas, buscando con mi lengua el agujero de tu culo, era el sabor que me faltaba. Como me pone el sabor de tu culo y además, condimentado con restos de tu cagada y mis meos. Te limpio el agujero. Dejo que la saliva con tus restos marrones escurra desde mi boca y caiga sobre mi pecho, deslizándose hasta alcanzar la punta de mi rabo que palpita de excitación.
Muevo la cara arriba y abajo, te follo con la lengua los dos agujeros, estoy fuera de mi, y ni si quiera me estoy tocando la polla. Tus dedos no dejan de bailar sobre el clítoris, mientras mi cara sigue atrapada entre tus nalgas. Me agarras la cabeza por detrás empujando aun mas adentro, apenas puedo respirar.
No lo resisto mas y me empiezo a sobar el rabo mientras te meto un par de dedos dentro de la raja. Los chupo a medida que los saco empapados. Estoy totalmente fuera de control, te follo el coño y el culo con los dedos y con la lengua, de mi barbilla cuelgan hilos de saliva y flujo que llegan hasta la polla, lubricándola mientras me la machaco.
En unos segundos estallas en un orgasmo bestial, mientras te corres agitas el culo y te retuerces comprimiendo mi cara contra ti. Me olvido de todo, solo quiero sentir como te corres sobre mi. Deseo poder estar siempre entre tus piernas.
Mi polla revienta y comienza a lanzar chorros de semen que salpican mi estomago y mis muslos, el placer del orgasmo se mezcla con el dolor que siento en la polla después de una corrida tan intensa y que me hace detener mi mano. Noto como comienza a escurrir la corrida. La mía por entre mis dedos. La tuya por mi boca.
Cuando nos recuperamos, nos miramos cara a cara y nos fundimos en un intenso morreo.
-Vamos a la cama….a seguir follando….
Fin.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!