Confesiones de un chico en extasis 3

Siguiendo con el diario hoy hablaremos sobre el hermano menor y el sobrino de Horacio..

Confesiones de un chico en extasis: Ancizar y Alejandro.

Advertencia: el siguiente relato contiene escenas de scat, normalmente soy algo exagerado con este tipo de contenido así que tratare de hacer en un parámetro mas normal, si no es de su agrado lea con precaución.

En la familia de Horacio el ocupaba el puesto de hermano del medio, teniendo uno mayor y uno menor, hoy no concentraremos en ese hermano, Ancizar. Una palabra que podría englobar tanto a él como a su único hijo Alejandro es mojigato.

Poco se del pasado de Ancizar, se que salió con la hermana de la madre de Jorge y Maicol, tuvo un solo hijo Alejandro, lo que lo convierte en primo hermano de los antes mencionados, después de eso cortaron relación y ella se quedó en el pueblo y Ancizar viajó a la ciudad, conocía a otra mujer y se convirtió al cristianismo. Si bien no se comportaba como un fanático religioso, estaba claro que le se sentía con la capacidad de criticar las acciones de sus hermanos, con Horacio por ser un irresponsable con sus parejas y sus hijos, con su hermano mayor Gabriel, bueno de el hablaremos en otros entrada, criticaba la forma de vida de sus hermanos, pero recuerden por algo lo llamo mojigato, crió a su hijo con los mismos valores, valores que olvido en el momento en que le fue infiel a su pareja en lo que el llama «un momento de debilidad». Después de eso quedo soltero otra vez, llegué a visitar a Ancizar algunas veces por mi amistad con Alejandro, verdaderamente nada que envidiar de sus hermano, alto acuerpado, atractivo, si no hubiera sido tan recatado tal vez hubiera hecho algo con él desde mucho antes, en una ocasión en la que estuve en su hogar, tuve la oportunidad de quedarme totalmente solo, Ancizar trabajaba y Alejandro tuvo que salir por unos libros, lo que me dejó un máximo de 45 minutos de poder explorar la casa, nada llamativo, pero para este punto ya había tenido experiencias con Horacio y algo me decía que sus hermanos no se quedaban atrás. Di con su portátil, no tenía clave por lo que había escuchado, no dejaba que Alejandro se acercara a ella, comencé a investigar los archivos y di con ese lado oscuro de Ancizar.

Algo que deben saber es que Ancizar es intolerante a la lactosa, nunca había nada lácteo en casa, ahora imaginen mi sorpresa al ver en las carpetas videos de él, bebiendo cartones de leche. Abrí el primer video, estaba en la mesa del comer, llenando un vaso con leche para acto seguido beberlo, hizo eso varias veces más, hasta que el efecto comenzó, al principio se podía ver el dolor en su rostro, después sus mejillas se inflaron y desató un poderoso eructo que hizo temblar la cámara, sacudió el aire frente a él, mientras se podía ver su rostro lleno de dolor que de alguna forma parecía disfrutar, comenzó a gemir y suspirar con mas fuerza parecía que ua había llegado a la otra zona, se levantó levemente de la silla y un poderoso pedo resono, había oido pedos fuertes, pero la magnitud de Ancizar era superior a la de cualquier otro, siguió gimiendo con dolor mientras se ponía de pie y caminaba con la cámara, eructando y apretando evitando manchar sus pantalones, al llegar al baño, coloco la cámara en un punto en el que podía verse su gran trasero mientras se acomodaba en la taza, los gemidos ahogados se volvieron en gritos, mientras pujaba con una mezcla de dolor/placer hasta que un chorro de mierda acuosa salió, Ancizar resoplaba y genial mientras seguía gimiendo, pedos mojados y más mierda salía de su trasero. Yo miraba el video consternado nunca esperaba sentirme tan caliente viendo ese tipo de contenido pero ahí estab yo, masajeando mi pene mientras podía sentir el placer por el que pasaba Ancizar. Cuando parecía que su intestino se había vaciado Ancizar se dio media vuelta mientras masajeaba su pene y expulsó grandes chorros de semen, mientras temía agotado sintiendo más cólicos. La adrenalina del momento me abrumo, con manos temblorosas traté de copiar el video para guardarlo en mi teléfono, había mas material, pero el sentimiento de que podían descubrirme me estaba superando, guarde el portátil y regrese a la sala antes de que alguien llegara tratando de analizar todo lo que había pasado.

Alejandro, es otro tema, el chico es muy tímido, podría decir que raya en lo estúpido o ingenuo con facilidad, fácilmente podría ser tomado como un tonto, las primeras veces que interactue con el me dejaban claro dos cosas, primero detestaba el comportamiento que lw inculcó su padre y dos era claro que con sus primos había hecho más de una locura, cuando pude ganarme la confianza de Alejandro pude ver a un chico igual que Jorge y Maicol, pero mejor, Alejandro era el típico chico que le podía salir natural algo, pero por algún motivo se rehusaba a actuar de esa forma y ed qué este chico había tenido aventuras bastante asquerosas, entre ellas estaba, haberse cogido una yegua con Jorge, varios concurso de eructos con Maicol, masturbarse con amigos en pijamadas, hasta defecar en la intemperie, sacarle esta información no fue fácil, siempre me soltaba la misma frase de «no me gusta ser sucio». Aunque le salía tan natural, Tenía una habilidad única con la saliva, lo único de que se enorgullecia, Alejandro tenía un récord de cinco metros al escupir, récord que defendió muchas veces de sus primos, verlo escupir era algo magistral, podía generar flema con una naturalidad impresionante, sin resoplar sin carraspear, parecía un físico, sabía medir el viento, la altura, era impresionante, pocas veces lo vi en aprietos en esas mismas veces lo escuché carraspear con bastante fuerza, llegar a un plano más sexual fue difícil, pero por suerte es de los que pierden el norte con la cerveza y créanme, cuando esta borracho se le olvida que no le gusta ser sucio, su habilidad en la cama deja mucho que desear, si puede aguantar bien, pero no tiene esa soltura que tiene Jorge o Maicol, almenos lo compemsa con un fetichismo llamativo, pies grandes, eructos fuertes y grandes cantidades de flema.

Hasta los más recatados tienen sus mañas y aún falta la gema de la corona, pero eso será para la próxima entrada.