Cuidando la casa de mi prima
Mi prima me pide cuidarle la casa por unos días. La reemplazo poniéndome en sus zapatos, literalmente.
Mi prima tiene unos 30 años, 9 más que yo.
Siempre nos llevamos muy bien, bromeamos y hablamos mucho, es la persona mas alegre que conozco.
Tiene un cuerpo que es la envidia de muchas mujeres, y cuando me abraza tengo que hacer un esfuerzo gigante para evitar una erección.
A principio de año se fue de vacaciones con su familia por un fin de semana largo y me pidió ir en lo posible una vez al día, ya que mi otra prima, su hermana que suele cuidarle la casa tampoco iba a estar.
En el instante que salieron tomé rumbo a su casa.
Compre algo de comida ya que tenía planeado no salir de la casa hasta que volvieran.
Lo primero que hice fue desvestirme y dejar mi ropa en el baño, no pensaba volver a usarla hasta que volvieran, el baño esta al lado de la puerta de entrada y en caso de visitas o de salida podría cambiarme rápido.
Busqué ropa interior usada pero había dejado todo limpio, ya que no encontré naca sucio ahi.
Subí a su habitación, cerré las cortinas y localize todo lo que tenía en los cajones y en un enorme ropero.
En cuanto ví sus sujetadores, bragas, tangas y demás empeze a sentir el clásico hormigueo, se me empezaba a parar pensando lo que podía hacer en todo el tiempo que tenía.
Empeze con algo cómodo, tomé unas bragas negras y un sujetador deportivo del mismo color.
Uff la tela.
Tan suave como me imaginé y de un color un poco más claro dónde irían sus partes.
Me puse una remera de mangas largas celeste, unos pantalones cortos deportivos y sus Havaianas verdes usadas.
Tenía unas negras nuevas que pensaba probarme pero se las debía haber llevado.
Por suerte solo calza un número menos, me entraban a la perfección.
Con el pensar que estaba con la ropa de mi prima me sentía como ella.
Había usado y transpirado esa ropa, su olor estaba totalmente impregado y casi que podía ver su cuerpo si miraba para abajo.
Se me paro mintras pensaba esto y corrí al baño por la primera corrida.
Cocine y me tiré a ver una película.
Verme con su ropa era increíble, me pinté las uñas con el color que más usa y ví algunas de sus películas favoritas.
Antes de dormir me duche, y nuevamente me cambié para dormir.
Me puse un conjunto de lencería y un vestido corto de seda para dormir, alimente al gato y finalmente me acosté en su lado de la cama.
Para el sábado repetí las bragas, no quería que su ropa Interior quede con mi olor y las bragas me las dejaría.
Me probé unos jeans suyos pero me molestaban un poco en la entrepierna, así que me quede con una falda naranja larga muy cómoda, por arriba una camiseta blanca sin mangas ajustada y unos zapatos planos marrones que me quedaban un poco sueltos.
Supongo que eran sus típicos zapatos cómodos a los que se cambiaba cuando se cansaba de los tacones, ya que eran grandes para su pie.
Como trabajo desde casa, pude seguir con lo mío por el resto del día sintiendo su ropa en todo momento.
El día estaba caluroso y pensé en meterme en la pileta con algo suyo.
Hay una escalera de los vecinos que es la única zona en donde alguien podria verme.
Me arriesgue y busqué algo en su ropero.
Encontré una malla enteriza color verde agua.
La conocía, varias veces la había visto con ella cuando los visitabamos.
Con solo verla se me paro más de lo que estuvo en todo el día, y apenas me la probé y me vi, me vine en el instante, por suerte llegué a sacarla por el costado de la tira de abajo y cayó todo en el inodoro.
Era increíble, con ese body ella se veía muy caliente.
Me tape con una toalla y salí, en cuanto tomé valentía me descubrí y salte al agua.
Fue un momento único.
Nadar con su malla era muy comodo, mis piernas estaban completamente libres, y lo ajustado hacia que parecía que nadaba desnudo.
En la noche quería salir, necesitaba comprar algo y no me apetecía volver a mí ropa ni siquiera por unos minutos.
Necesitaba seguir siendo ella.
Me puse lo mas unisex que encontré, una campera deportiva gris, un pantalón de vestir que usaba para el trabajo y unas zapatillas comunes blancas.
Sentía todo más suave de lo normal, las zapatillas me apretaban un poco pero lo aguantaba muy bien.
En cuanto pude controlar mi erección salí al negocio que estaba a una cuadra.
El chico que atendía no me dijo nada, pero la chica que lo acompañaba me miró raro.
Talvez había reconocido algo de su ropa?
Para la última noche me vestí como un sábado merece.
Encontré un vestido rojo y negro con mangas hasta el codo y falda corta, se lo había visto en algún lado.
Lo acompañe con unas medias negras y unos stilettos negros con suela roja.
Nuevamente me cambié en el baño, y el solo verme así me calentó como nunca.
Busqué otros zapatos y me corrí sobre ellos.
La calentura era muy grande, lo volví a hacer sobre sus bragas y cuando termine me recosté en su cama.
Tenía el corazón a 1000.
Una vez se me pasó, aproveche y me probé todo lo que pude.
No sabía si tendría otra oportunidad parecida.
No quedo nada sin pasar por mi, ya me dolía todo de tanta calentura, así que fui a cocinar con el último conjunto, una camiseta deportiva sin mangas violeta y arriba una campera negra corta, unas calzas negras muy frescas con una falda corta negra y unas botas negras de taco alto.
Estos junto a los anteriores eran los primeros tacones que usaba, y quería practicar con ellos.
Mientras cenaba ví algunas peliculas en Netflix y me fui a dormir.
Me llevé un mono entero largo rosa, en la cama volví a masturbarme antes de dormir, y ya cansado cedí ante el sueño y dormí por última vez con su ropa.
El último día pensaba pasar a mi ropa, desayunar y volver a casa.
Mi prima volvía por la tarde.
La tentación era muy grande, decidí desayunar y limpiar con un último conjunto, me quede con una camisa violeta común, un pantalón blanco hasta las rodillas y unas ojotas altas de goma, con lo que me quede hasta el almuerzo.
Dejé todo ordenado y como estaba y me fui.
Me dolio todo el cuerpo por días.
Mi prima no dijo nunca nada que me haga creer que sepa lo que hice.
Me agracedio mucho y cuando me abrazo usando la remera celeste del primer dia, me costó mucho que no se me parará miéntras la tenía a ella sobre mi.
Dudo que se repita, pero sueño con que se de y pueda volver a vestirme de ella.
A un amigo le comenté que cuide la casa del prima, y me dijo que en el verano me dejaría que cuidara la suya, ya que no encontraban a nadie de confianza que lo hiciera.
Mencione que su madre y su hermana son dos mujeres muy calientes?
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