Él, mi padre (Capítulo 13)
Creo que se viene lo que quiero….
Capítulo 13
La honestidad
Después de esa follada que me mandó el doctor, vuelvo a casa y sigo mi vida. Siempre que puedo, veo a papá cuando anda en boxer por la casa, le miro su bulto tan exquisito y su cuerpo cuando se me da la oportunidad. La semana sigue sin mayor movimiento.
El día viernes de esa misma semana, me baja la curiosidad de ver que puede tener mi padre en su pc cuando lo he visto de reojo pajearse. Cuando estoy solo en la mañana decido entrar a su habitación y prendo el pc. A mi mala suerte, mi padre le había puesto contraseña, pero confié en mi instinto y la descubrí de inmediato. Era mi fecha de nacimiento. No veo nada extraño en las fotos o los documentos, así que entré al navegador y ahí me encontré con algo. Veo que en el historial mi papá tenía búsquedas cómo: sexo gay padre hijo. Empecé a revisar y los videos eran super excitantes, hombres adultos besando y follando jóvenes. Me empezó latir el corazón por lo que había encontrado y solo pensaba si mi papá realmente me miraba con deseo.
Decidí seguir mi instinto y me preparo para esperar a que papá llegue en la piscina. Me pongo una sunga ajustada para marcar mi culito redondo y me voy a acostar a la silla cama para tomar sol. Mi padre llega a casa y siento que viene hacia mi. Abre la puerta y saluda. Le digo que entremos a la piscina antes de comer. El acepta.
Sale a los minutos con su sunga tipo boxer roja, una de mis favoritas porque se le marca su bulto exquisito. Se acerca y se sienta en la silla de al lado. Yo estaba con la espalda hacia el sol así que papá tenía mi culo ahí, ambos estamos con lentes de sol, pero siento que papá me mira el culo. Decidí dar un paso y le pedí que le aplicara bloqueador en la espalda. Acerca la silla y empieza a echar crema desde arriba. Nos ponemos a conversar y de repente pregunta: “hijo, tienes novia?”. Decidí ser honesto y respondo: “no tengo, y tampoco tendré”, papá solo dice: no seas pesimista, si eres muy guapo. Le digo: “podría tener novio”. Mi papá queda en silencio así que digo: “estás bien?”. Papá sigue con el bloqueador solar y baja ya a la espalda baja. “No tengo problema con ello, hijo”. Yo me río y le digo: “me gustan grandotes” y sigo riendo, papá se pone a reír y baja más cerca del culo con la crema. “Grandote?” Y siento sus manos un poco más fuerte cerca de mi culo. “Papá! Me refiero a edad!” Y reí. Mi papá estaba disfrutando la conversación. De reojo trato de mirar su bulto y lo tiene marcado, semi erecto. Aprovecho y le digo: “aplícame en las piernas porfa”. Papá baja las manos y me masajea con la crema desde abajo hasta llegar a mis muslos. Veo que se acomoda el bulto y dice: “suficiente! Me voy al agua”, se para rápido y se tira un piquero. Yo sabía que lo había hecho para disimular lo que tenía entre las piernas.
Por la tarde mi papá me dice que bebamos algo juntos para conversar. Ahí sentí que podía ser mi oportunidad de acercarme al siguiente nivel con él.
Dejar un comentario
¿Quieres unirte a la conversación?Siéntete libre de contribuir!