El nuevo conserje negro de la escuela

En un acto escolar, vi al nuevo conserje negro de la escuela de mi hijo y no puedo evitar tener sexo con el, aun con las graves consecuencias que traerá..
Era un lunes, la mañana estaba fresca, eran al rededor de las 6 de la mañana y debía llevar a mi hijo a la escuela ya que la persona a quien contrate estaba de vacaciones y debía llevarlo yo. Debido a que seguía buscando un empleo y sin nada que hacer aprovecharía este momento para seguir tirando currículums.
Mi apetito sexual había disminuido un poco ya que antes de acostarme me había masturbado agresivamente para tranquilizarme así que cuando me levanté me sentía no relajada pero si no me temblaba el cuerpo por el ansias sexual.

Deje a mi hijo desayunando y me fui a cambiar.
Me puse un jean bastante ajustado color azul claro de tiro alto, un cinturón color marrón, unas botas de tacón cortas marrones de gamusa, para la parte de arriba opte por ponerme una remera de tela suave de color fuxia bien ajustada y una chaqueta de gamusa marrón. Me pinte los labios de un suave color rosa, me perfume,me deliñe mis ojos y mis pestañas y me fui a buscar a mi hijo para salir.
El viaje fue atareado ya que como sabrán a las 7 de la mañana hay un mundo de gente en la estación, lo bueno es que ningun hombre se sobrepasó como para lograr ponerme más cachonda de lo que estaba, igualmente manoseadas y arrimones claro que hubo pero lo normal.

Entre que estaba deseosa de sexo y las manoseadas y arrimones que recibí en el tren llegue caliente a la escuela para dejar a mi hijo.
Ni bien entramos a la escuela pude ver las caras embobados de los padres y las caras de celos u otras caras de mira a la solterona como se viste de las mamás, no me vestí provocativa pero si bastante coqueta, demasiado para solo dejar a mi hijo, pero aprovecharía para seguir tirando currículums así que quería estar linda y presentable, aun así ni me importa la opinión de los demás acerca de mi.

Ya que no estaba Valeria, mi una amiga la mamá de Juaquin, decido por dejar a mi hijo y marcharme fuera de la escuela.
En eso cuando voy caminado por el pasillo central para salir por la puerta, se ve que el resonar de mis botas de tacón llamó la atención de alguien.
Ese alguien era un hombre negro un poco más alto que yo, bastante musculoso y su cabello tenía como trenzas para atras bien peinadas, ese hombre salió de una puerta y miraba para todos lados como mirando que era ese ruido. Cuando paso lo saludo amablemente y el me devuelve el saludo.
Yo lejos de estar interesada aunque era muy fuerte y no era muy lindo decido hablar con él ya que el se presentó. Me dijo que se llama Franco y era el nuevo conserje del colegio.
Yo: hola que tal me llamo Romina.
Franco: que tal señorita, disculpe mi sobresalto pero ya que soy el conserje debía de saber que ocurría porque como verá las madres que dejan a sus hijos no acostumbran llevar botas de tacos, o no acostumbran venir tan guapas.
Mientras me miraba de arriba a abajo sin disimulo mi cara no ocultaba aquella situación ya que me empezaba a poner colorada.
Yo: si, bueno es que tengo que hacer tramites.
Franco: ah, está bien, bueno que tenga un muy lindo día, señorita Romina.
Le estaba por dar la mano pero el se me lanzó rápidamente y me beso en la mejillas derecha y con una de su mano, fuerte y grande la apoyo en mi cintura con total confianza, como si fuéramos novios o algo. Yo me quedé desconcertada parada mientras Franco se volvía adentro de su oficina. Antes de irme pude notar que su pantalón elastizado dejaba ver a un monstruo ahí abajo. No es que mire buscando ver que tenía entre las piernas pero es que se veía a plena vista lo que tenía. Cuando salgo siento que mis piernas me flaquean, mi cuerpo me vuelve a pedir algo con urgencia y yo cada vez lo escucho más.
Yo sin darle importancia a la necesidad de tener sexo hago mi día con normalidad tratando de olvidarme de aquello sucedido.
Pero una vez estando varias horas caminado por las calles y dejando currículum en locales ya era hora de volver a casa, pero cuando voy llendo para la estación se me ocurre que tal si retiro a mi hijo hoy para volver ver al conserje.
Faltaba 1 hora para que salga mi hijo, eran las 4 de la tarde y a las 5 salía, y yo cada vez tenia certeza de que hacer. En eso llamo a Cristina que es la niñera que había contratado para llevar y traer a mi hijo a la escuela entre otras cosas.
Yo: hola Cristina que tal.
Cristina: hola señora como le va
Yo: bien Cris, mira hoy no te preocupes por llevar a mi hijo a casa estaba por la zona así que descansa.
Cristina: hay bueno muchas gracias señora.
Yo: no, de nada.

Una vez hecho esto, ya no había vuelta atrás aunque me preguntaba qué que es lo que estaba haciendo. Que me controla.
Pero a medida que se acercaba la hora y yo caminaba al colegio mi corazón latía con fuerza.
Cuando entro a la escuela El pasillo estaba lleno de madres y padres, yo caminaba hasta la salita donde estaba mi hijo, mientras yo mirando para todos lados haber si veía a ese hombre. Finalmente mi hijo salió y yo desilusionada salía agarrandole de la mano a mi hijo mientras caminaba por el pasillo. Hasta que doblando para la puerta lo veo que estaba parado mirando a los padres y madres pasar por la puerta como cuidando de que no ocurra nada. Aunque yo mirándolo de lejos Franco se fijaba más en las colas de la madres.
Cuando pasamos por su lado yo bajando la velocidad y fingiendo hablar con mi hijo me interrumpe y me saluda.
Franco: hola Romi, no pensé verte de nuevo.
Yo: hola Franco que tal
Franco: bien acá cuidando en la salida.
Yo: a me parece muy bien, como no lo había visto hace un rato pensé que se había ido
Franco: ah, así que me estaba buscando?
Yo: (poniéndome colorada) eh no, pasa que me extraño porque los conserjes están siempre por acá.
Franco: ah si pasa que siempre sobre estas horas tengo que hacer unas cosas de limpieza entonces salgo más tarde para ver los pasillos.
Yo: ah me parece bien, que responsable.
En eso mi hijo cansado nos interrumpió.
Hijo: ma podemos irnos.
Yo: si, perdón Franco por quitarte tiempo tenemos que irnos.
Franco: bueno, con cuidado.
Cuando esta vez el que lo salude fui yo chocando nuestras mejillas con un saludo.

Cuando llegamos a casa mi hijo se fue a la habitación y yo me fui a la cama a manosearme y tocarme ya que estaba encendida.

Al día siguiente vuelvo a llamar a Cristina diciéndole que nuevamente llevaría a mi hijo yo y que para retirarlo también que no se preocupe.
Con el corazón galopando a mil esta vez decido ponerme algo más provocativa pero eso sí, se que esta mal que mi hijo llegue un poquito tarde a clases pero para que las madres no me miren feo por como iría vestida opte por llegar tarde así en el pasillo no quedará nadie, no habrá ninguna madre o padre.
Al vestirme sentí que debía mostrar mi conjunto preferido al fortachon del conserje, así que me puse unas finas calzas ajustadas negras de tiro alto, botas de tacón por las rodillas gamusadas, un top rojo mangas largas y mi chaqueta negra de gamusa. Al verme en el espejo me miraba que mi culo estaba bien expuesto se veía a simple vista, estaba bien paradito. Me terminé de maquillarme y perfumarme y nos fuimos a la escuela.
Cuando llegamos no había ningún padre, ya se habían ido todos, mejor, llegamos 7 minutos tarde y le pedí perdón a la maestra ya que el tren viene lleno a estas horas. Me dijo que no me preocupara ya que siempre empiezan 10 minutos tarde.
Cuando me fui, camine lentamente para ver si veía al conserje, y como si estuviera esperándome lo veo que me observa en la puerta de salida, y esta vez soy yo la que me detengo a hablar con el.
Yo: hola, como amaneció en este día.
Franco: eh, bien bien, usted va a a salir o algo?
Yo: por?
Franco: pues porque usted está hecha una bomba. Pero una buena bomba.
Mientras Franco me observaba sin disimulo por todos lados.
Yo: ah, este es mi conjunto preferido, no pasa que tengo una entrevista en una empresa y siempre visto elegante yo.
Se le notaba a Franco que me quería faltar el respeto o decirme cosas sucias pero claro como no sabría como reaccionaria no me dijo nada.
Franco: ah, pues entonces de seguro tendrá ese empleo.
Yo: porque lo dice?
Franco: porque está super hermosa
Franco: se lo digo en buenos ternimos eh, no le estoy tirando onda ni nada.
Yo: na, ya se no se preocupe.
Yo: bueno….me tengo que ir ya que la entrevista es a las 9 y queda en belgrano sur.
Franco: bueno, suerte.
Cuando lo saludo Franco apoya rápidamente una de sus manos, pero esta vez casi llegando a una de mis nalgas.
Uffff, dentro mío estaba mojadisima, esas manos tan grandes y fuertes bien callosas me pusieron caliente. Así que al retirarme y pasar por la puerta de salida me voy con un paso lento y coqueto moviendo mi culo . Y cuando abro la puerta para irme de reojo veo que Franco me estaba filmando con la cámara de su celular.
Una vez fuera me reí por la situación y camine hacia algún bar para beber algo ya que la entrevista era falsa y debía hacer tiempo hasta que mi hijo saliera.
Haciendo tiempo me di cuenta que lo que hacía era una locura, como podría estar con alguien que esta en al escuela de mi hijo, que pasaría si nos descubren.
Así que hoy sería la última vez que iría a la escuela, debía olvidarve de ese negro.

Cuando voy para la escuela obviamente más tarde ya que no quería que me vieran los padre y madres, cuando voy entrando por la puerta veo a Franco que estaba sin remera limpiando el piso.
Cuando me quedo mirándolo me quedo embobada del físico que tenia, ese cuerpo tan fuerte, esos abdominales, mmmm, me estaba mojando de solo pensar.
Cuando la puerta se cierra y hace ruido tanto Franco como yo nos quedamos mirándonos y riendo.
Franco: ay disculpe señorita pensé que ya no había nadie aquí, además quiero terminar rápido eh irme a casa.
Yo: ah,no se preocupe en todos caso soy yo la que vino tarde.
Ambos estábamos mirándonos los cuerpos. Hasta que la maestra de la salita salió con mi hijo y yo disculpándome ya que llegue tarde.
Maestra: mire señora Romina Yo no se lo que hace pero trate de al menos venir a retirarlo temprano si?
Yo: si perdón, no volverá a pasar.
Cuando nos estábamos llendo con mi hijo por la puerta, veo que salen todas las maestras y el director.
Se empiezan a apagar las luces y veo a Franco que cerraba la escuela.
Mientras estaba fuera de la escuela con mi hijo veo que Franco me dice.
Franco: sigue aquí?
Yo: ay si es que me quede hablando con mi hijo de algunas cositas.
Franco: bueno hasta luego.
Yo obviamente quería saber en que transporte se iba y para mi sorpresa el se tomaba el mismo tren que nosotros solamente que para el otro lado del andén.
En ese momento se me ocurrió una locura
Yo: hijito te compro un helado si me aguantas, porque antes de ir a casa tengo que hacer una cosa si?
Hijo: si dale mami gracias.
Yo: nos vamos a tomar el tren pero el que va para la terminal si?
Hijo: si dale mami.

Íbamos caminando a unos metros detrás de Franco y mi corazón seguía latiendo muy fuerte, creo que no había hecho una locura así, buscando ser yo la que provocara.
Cuando llegamos al andén, nos ubicamos en el medio ya que Franco estaba allí.
Cuando me quedo a su lado y haciéndome la tonta como no sabiendo que el estaba a mi lado, de pronto escucho que Franco me llama.
Franco: Romina?
Yo: Franco?
Yo: que haces acá?
Franco: te iba a hacer la misma pregunta
Yo: no nada llendo a casa. Vos?
Franco: también.
Franco: nunca te vi tomándote el tren a retiro.
Yo: sabes que yo tampoco.
Franco: por donde vivis vos?
Yo no sabía que contestarle ya que si le decía San martin me diría que que hago llendo a Retiro.
Yo: eh vivo en San Martin pero me voy hasta retiro porque tengo que hacer unas cosas.
Franco: ah, y todos los días o día por medio?
Yo: no, no día por medio.
Yo: y usted donde vive?
Franco: yo vivo lejos en realidad, vivo en Tigre.
Yo: uhh lejos, y como haces para ir hasta allá.
Franco: y mira voy hasta la terminal de retiro y de ahí tengo que esperar al tren que va a tigre y de ahí hasta la termina de tigre, son 16 estaciones.
Yo: y cuanto tardas en llegar a tu casa?
Franco: y 3 horas fácil. Y de la estación tengo que caminar 4 cuadras hasta una zona de departamentos no muy lindos.
Yo: guau, que de tiempo.
Franco: y usted cuanto tiempo tiene hasta su casa.
Yo: tendré 1 hora.
Franco: que suerte jaja.

En eso vemos que el tren venía pero muy lleno. Así que le agarre la mano a mi hijo y subimos al tren.
No había lugar para movernos y Franco aprovechando esto se pego a mi, estábamos cara a cara. Y con mi hijo al lado. De pronto un hombre baja y llevo a mi hijo para que se siente mientras yo quedo parada con Franco.
Tendríamos unos 20 minutos hasta retiro así que seguimos hablando.
Yo: y a que hora salis de tu casa para llegar a la escuela.
Franco: y saldré a las 4 y 30 de la mañana
Yo: ay que temprano, yo lo más temprano que me levante fue a las 5 cuando trabaja de secretaria.
Franco: ah, mira, y tenes pinta de secretaria
Yo: por?
Franco: porque las secretarias se visten muy bien y son muy bonitas.
Yo: osea que me estas diciendo linda?
Franco: puede ser jajaja
Ambos nos reíamos y ocultabamos nuestros deseos ya que ahí de bajo sentía como una morcilla grande se estaba parando.
Yo estaba mojada y con los pezones duros, tenía unas ganas que me agarrara con sus manos grandes y me acaricie la cintura mmm. Pero trate de controlarme.
Yo: y, de que país sos ?
Franco: soy de Haití, pasa que en mi país esta todo mal y hay mucha pobreza.
Yo: ah, y novia no dejaste allá?
Franco: no, no tenía novia desde hace 3 años que no tengo.
Yo: pero cuantos años tenes?
Franco: 34, vos?
Yo: yo 33
Franco: y su esposo de que trabaja?
Yo: em, no tengo esposo, soy divorsiada
Franco: imposible, como una bella mujer puede estar soltera
Yo: pues nose jaja pero puedo.
Yo: y como un hombre tan fuerte y musculoso puede estar soltero?
Franco: pero si soy feo de cara jaja
Yo: pero no todo gira al rededor de la belleza, a mi por ejemplo me atraen los hombres feos.
Franco: osea que tendría oportunidad con vos?
Yo: no, vos no sos muy feo jajaja
Ambos nos reíamos y se sentía como nos tirábamos onda. Cuando de pronto llegamos a retiro.
Yo: se paso rapidísimo
Franco: si la verdad que si.
Yo: bueno suerte y que llegues bien.
Franco: vos también.
Cuando nos saludamos nos sorprendimos tanto el como yo ya que en vez de darnos un beso en la mejillas nos abrazamos suavemente mientras Franco apoyaba sus manos en mi cintura y yo lo abrazaba por toda su espalda.
Fue rápido el abrazo pero pareció eterno.
Lo tome más como despedida ya que no podría volver a verlo aunque mi cuerpo lo quería dentro mío.

Termine por comprarle el helado a mi hijo cuando llegamos a casa y llame a Cristina para que llevara a mi hijo a la escuela.

La noche se pasó lenta ya que andaba mojada por el haitiano, me encantaba esos músculos, esa fealdad que lo compensaba con ese cuerpo y esa polla que tendría de bajo.

A la mañana siguiente me quedé sola en casa aburrida y cachonda, estaba tentada en salir a la calle y buscar que alguien me viole porque no daba más. Cuando de pronto me llega un mensaje desconocido. Diciendo: hola Romi, que tal, estube buscando tu número en los registros de la escuela a la mañana cuando no había nadie porque quería avisarte que mañana los chicos saldrán a las 3 de la tarde en vez de las 5, y la escuela cerrará temprano.
Yo: Franco sos vos?
Franco: si, busque tu celular.
Yo: ay si gracias seria de mucha ayuda, gracias Franco.

Al rato a eso de la 3 de la tarde me llega otro mensaje
Franco: que pasó que no pudiste venir hoy?
Mordiéndome el labio le respondí
Yo: no, pasa que estaba media complicada hoy.
Franco: uh que mal bueno, y lo vendrá a buscar?
Yo: nose, porque preguntas?
Franco: no, nose jaja estaba aburrido y quería saber.
Yo: aburrido?
Franco: si, siempre sobre las últimas 2 horas no hay mucho por hacer.
Yo: yo estoy acá aburrida también.
Franco: escuche tengo una pregunta para hacerle.
Yo: si dígame
Franco: si llegara a haber alguna interrupción en la línea de tren que va hasta tigre que me combiene tomarme?
Yo: y, podría esperar el 343 que va a tigre pero tiene como 4 horas de viaje.
Franco: uh bueno muchas gracias.
Yo: de nada.

La tarde paso y no fui a buscar a mi hijo a la escuela. Aunque esa noche también la pasé caliente y sin poder dormir mucho, estaba desesperada, quería ver a Franco. Así que se me ocurrió otra locura.
Primero al día siguiente le deje a Cristina las llaves de casa para que a la tarde traiga a mi hijo porque le comente que por una entrevista no podría estar.
Así que invente esa excusa para que casualmente me encontrara con Franco en la estación, nose que saldría saldría todo esto pero estaba muy cachonda con el negro fortachon así que me vesti como para una entrevista. Debido a que estaba fresco y apunto de llover me puse unas calzas nuevas de tiro alto ajustadas de color negra con un fino cinturón en mi cintura y dejaba ver mi culo muy paradito, unas botas de tacón marrones que me llegaba por las rodillas y un top rojo de mangas largas y una chaqueta marrón clara de gamusa.
Me perfume con un perfume de sabor a chocolate y me maquille algo excesiva para hacerme notar. Estaba muy excitada con mi nueva calza y el cinturón que hacia lucir más mi culo.

En eso que salía de casa para ir a la estación cada vez estaba más decidida en tener sexo con el conserje, y aprovechando que los niños salen temprano hoy podría aprovechar el tiempo de estar con el.

Todo el viaje en tren me dolía la panza de los nervios que tenía. Una vez llegado a la estación cruze hacia el otro lado del andén para tomar el otro tren que va hacia la terminal mientras espera abajo de la lluvia. Mire mi reloj y daban las 3 y 15 de la tarde.
Yo: en cualquier momento tendría que llegar.
En eso veo que viene el tren, la gente sube pero Franco no aparece así que dejo pasar ese tren.
Ah eso de 5 minutos mientras la estación estaba vacía lo veo a Franco y haciéndome la que no lo esperaba mire para otro lado. Cuando me doy vuelta de reojo para ver a Franco, El me ve y empieza a venir para donde estoy yo.
Franco: Romi?
Yo: Hay hola Franco, todo bien?
Franco: sisi bien, que haces acá? No fuiste a buscar a tu hijo?
Yo: no, fue la niñera porque yo tenia una entrevista justo.
Franco: ahh, mira, acá en retiro?
Yo: eh, no.
Yo: en Carupa, nose donde es por eso me estoy moviendo con GPS. Jajaja
Franco con cara de pícaro me dice:
Ah, vamos a viajar por mucho tiempo juntos entonces.
Yo: porque decis?
Franco: porque el tren que me tomó va para Carupa.
Yo: na, enserió? Que casualidad
Franco: si, mira ahora cuando lleguemos a retiro tenemos que esperar el tren que va hacia tigre y tenemos como 13 estaciones , va yo tengo 14 vos 13.
Yo: y tarda mucho en llegar el tren?
Franco: unos 10 minutos, la cosa es que va llenito
Yo: uh, mal ahí.
Yo: y hasta Carupa cuantos minutos tengo?
Franco: 1 hora y moneda
Yo: ufff, que viaje largo.
Franco: si, pero se pasa rápido y más si vas acompañada.

Cuando llego el tren que va a retiro Franco me pregunto si nos podíamos sentar juntos. Yo claramente le dije que si. Estuvimos hablando de la vida, de pavadas. Mientras ambos nos mirábamos con pasión que obviamente ocultabamos.
Cuando llegamos a retiro pagamos el boleto del otro tren hasta que Franco se empieza a tocar los bolsillos.
Yo: que pasa Franco esta todo bien?
Franco: creo que me olvidé las llaves de casa en la escuela. Tengo que volver
Yo: si queres te acompaño
Franco: pero tu entrevista?
Yo: no importa, me queda lejos.
Franco: bueno dale

Eran las 4 de la tarde, volvíamos en tren para la escuela. Ambos estábamos en silencio como si supiéramos que algo iba a pasar.
Cuando llegamos a la escuela, Franco abrió las puertas y una vez dentro las vuelve a cerrar.
Franco: las cierro porque no debería haber nadie ya aquí adentro Romi no te asustes
Yo: yo? Jaja yo no estoy asustada para nada
Yo: bueno y donde…dejaste tu llave
Franco: buena pregunta, habría que buscarlas.
Franco: veni, vamos al zotano que hoy estube allí trabajando.
Ambos caminábamos sin hablar, solo es escuchaba el ruido de mis botas. Caminábamos de pasillo en pasillo hasta que bajamos unas escaleras y allí había una puerta oxidada y sin manija.
Yo: ese es el zotano?
Franco: si, es feo no?
Yo: mmm, si la verdad que si jaja
Franco: aquí no hay luz así que agarre mi mano porque tengo que caminar hasta el interruptor para encenderla.
Yo: bueno dale.

Una vez dentro Franco cerró la puerta y no se veía nada de nada solo sentía la fuerte y rugosa mano de Franco que me estaba poniendo muy cachonda.
Yo: ay Franco no veo nada. Siento que hay muchas cosas en el piso.
Franco: si hay muchas porquerías así que Romi si no le incomoda le voy a pedir un favor.
Yo: decime.
Franco: vas a tener que ir delante mio así te voy guiando y vos no te tropezas con nada
Yo: ah, si me parece muy sabio ese pensamiento.
Yo: donde me pongo acá?
Franco: si acá
Yo: y como me va a guiar hasta allá
Franco: pues jaja no lo pensé.
Yo: yo creo que tengo una idea, agarrarme de las caderas y nos vamos moviendo juntos despacio para que no me choque con nada y vos me puedas guiar.
Franco: excelente dale.

La situación en la oscuridad y que Franco me agarre con sus manazas de mis caderas me estaba mojando mucho.
Ambos caminábamos despacio y sentía que Franco se pegaba a mi culo reiteradas veces mientras sentía su pene que estaba muy erecto y era muy grande.
Yo apropósito me frenaba de golpe para sentir su pene duro.
Franco: ya estamos cerca, creo que es acá.
Yo: si acá siento el interruptor
Franco: tirelo para arriba entonces.
Cuando lo tire para arriba la luz se prendió
Yo: lo hicimos.
Franco: si genial
Ambos seguíamos bien pegados y no nos separamos
Yo: Franco creo que ya está jajaja
Franco: ay si disculpe. Creo que encontré las llaves.
Yo: donde
Franco: aquí
Cuando de pronto las saca de su bolsillo. Los dos nos miramos y sin dudar nos empezamos a besar muy apasionado nuestras bocas y lenguas jugaban entre sí.
Franco: sabía que eras una solterona calentona beba
Yo: ay si soy muy calentona porque no me rompes toda.
Franco me cargo en sus brazos y fuimos a un sillón chico estaba sucio y roto, olía a humedad pero era fantástico para que me monte al conserje y sacarle la leche
Estuvimos muchos minutos besándonos y mientras nos sacábamos la ropa me chupaba las tetas, mientras me acariciaba la espalda, el cabello hasta que por fin quedamos desnudos.
Yo: guau Franco, que pedazo de polla que tenes ahí. Me vas a dejar bien llena jaja
Franco: si perrita te voy a llenar toda veni para acá.
Me sentó entre sus piernas y yo tome la iniciativa, mientras nos besabamos con lengua yo levante mis caderas y me ensarte la polla negra larga de Franco en la vagina.
Y mientras lo cabalgaba despacio para que me entrará toda sentía como me corría, del pene chorreaba mis flujos que era un lubricante perfecto ya que una vez bien ensartada comenze a moverme más y más rápido mientras Franco me chupaba y mordía mis tetas que estaban bien duras y paradas.
Yo: ahhhh, ahhhh si Franco que grande mi amor.
Franco: mmmm, me vas a ordeñar como una vaca nena, no pares, no pares ahhh sii.
De pronto siento un gran torrente de semen entrando en mi vagina.
Lo que me desilusionó ya que solo me lo monte con 10 minutos y ya se había corrido.
Hasta que me dice, Romi que te parece si lo seguimos en tu casa.
Yo: em, pero esta mi hijo en casa
Franco: ah, entonces no queres que te martille toda la noche? Mientras te digo la madre zorrita que sos eh perrita.
Sus palabras me estaban encendiendo y a pesar de ser una mala madre quería que viniera a casa a cojer.

Así que a eso de las 8 de la noche llegué a casa con Franco a los besos desde que viajamos en tren hasta subir al departamento.
Cuando entramos en mi departamento, entramos bien abrazos, con la polla de Franco pegada a mi culo, mientras me besaba el cuello y con sus manos masajeaba mi culo.
A todo esto mi hijo nos ve y yo me despego rápido.
Yo: hola Sebas, pensé pensé estabas dormido, mañana tenes que ir al cole.
Hijo: porque tardaste tanto?
Yo: es que acompañe a Franco a la escuela porque me tenia que dar algo.
Hijo: y que te tenía que dar.
Franco interrumpiendo dice: le tenía que dar a tu mamá un fierro largo porque no necesitaba para la casa.
Yo me quedo helada por la insinuación, aunque me alegro que mi hijo no se diera cuenta.
Hijo: y te va a servir ese fierro mami?
Yo: si, me va a ser muy útil, mientras le sonrio y me muerdo el labio a Franco.
Yo: veni vamos a la cama.
Mientras acuesto a mi hijo, le digo: hijito si escuchas ruidos raros es porque Franco me va a dar un masaje si? No te preocupes que no pasa nada. Si grito es porque estoy contracturada y me esta doliendo la espalda. Vos dormí tranquilo.

Cuando me voy le cierro la puerta y prendo la tele un poco alto para que no escuche mi hijo las cochinadas que hiciéramos. Cuando voy a mi cuarto lo veo a Franco acostado boca arriba con la polla bien parada.
Yo: mmmm, veo que esto se va a poner caliente. Cuando lo veo me desvisto rápido y cierro la puerta con llave y me lanzo a la cama. Volvimos a besarnos muchos minutos, y esta vez Franco me pone en la posición de misionero y mientras me la pone, me besa el cuello, me jala el pelo, mientras me insulta.
Franco: sos una perra, sabes.. acá en tu cuarto con tu hijo a unos metros.
Yo: ahhhh, si dame más, ay ay.
Franco: mmm, mamita, cuando te vi tenía tantas ganas, pero empiezo a creer que te usaron todos.
Yo: si si dale usamos vos también.
Franco: sos una zorrita, sabes, alta zorra.
Yo: ahhh ay papi, me estas haciéndome venir muchas veces.
En ese momento escucho que mi hijo se toca la puerta y me habla
Hijo: estas bien mami?
Yo: ahh, si hijito, tengo dolor en la espalda.
Hijo: te duele?
Yo: ay ay si un poquito.
Hijo: y la cama porque se mueve tanto?
Yo: em.. porque me esta amasando como una pizza es una técnica.
Yo: anda a dormir.
Franco: mmm, que puta que sos, sos una barata, putita. Ahhh me vengo ahhhh.
Yo: ahhhh yo también, ahhhhh que rico.

El resto de la noche fueron gritos, gimeos, y sexo duro, hasta que Franco se fue a eso de las 5 de la mañana porque se tenia que ir al colegio.
Y yo en la soledad me quedé pensando si habré perjudicado a mi hijo de todo lo que escucho.
Y eso más adelante tendrá muchas consecuencias graves.