Familia Corrupción y Sexo F51

Tras la traición del club de magnates, las cosas parecen calmarse, pero es solo apariencia, pronto la perversión vuelve a darles….
Advertencia: este relato es completamente Ficticio, no tiene nada de real y solo esta para entretener con una buena de dosis de morbo a todos los lectores que gusten…

11

 

Era un despertar bastante caluroso, las últimas noches ardieron de placer carnal, Dany tuvo juegos eróticos como pocos, pues sus hembras infectadas por el deseo del sexo vicioso: Becky, cuyos padres prácticamente se la dejaron, esperando que quedara embarazada, cogía con un gusto delicioso, moviendo sus caderas para meterse hasta el fondo aquella verga, Salome, abandonó su casa por problemas familiares, y apenas su madre la buscaba para saber que pasaba, pues su padrastro borracho antes pudo haberla violado, Melina, Kimiko, Elisa, Mar, Dayna y Luna se hallaban rendidas, cada una tuvo su momento para sentir la verga de su macho entrar a lo más profundo de sus vulvas para darles el placer que tanto necesitaban, haciéndolas gemir hasta perder el conocimiento, viendo aquella virilidad que tanto les gustaba entrando y saliendo de sus cuerpos, mientras escurrían sus jugos de amor, de tal manera que el placer era total, entregando con deseo sus pechos, para sentir una descarga eléctrica recorrer todo sus delicadas formas mientras Dany gozaba al ver como respondían sus amadas ante sus caricias, pues unas seguían siendo niñas, otras ya se volvían señoritas, pero una en especial como tenía unas tetas precoces que eran la delicia del joven, le dedicó atención especial cuando la saboreaba con total lujuria, aunque eso era lo de menos pues al saberse dueño de cada una de ellas, bombeaba tanto como podía, después de coger como no recordaban, quedaron exhaustas desnudas presumiendo sus vulvas mojadas, hasta Alondra estaba ahí, totalmente perdida, dejando ver su cuerpo sudado, pues tras una semana desde lo ocurrido, su situación había cambiado mucho, su familia prácticamente la habían repudiado por considerarla una pérfida, así que tenía la libertad de estar ahí con Dany, cogiendo cuando quisiera, como si desearan sacarse un deseo difícil de resistir.

Estaban en eso cuando súbitamente alguien les fue a interrumpir, siendo Jenny, quien llegaba vistiendo muy ligera, usando un short y un topsito que jugaba con las formas de sus pechos, como si invitara a jugar también con ella.

Dany, ya acabaste, porque te están solicitando por llamada – dijo la chica con su celular en mano.

Jenny, preciosa – decía tras haberse corrido en la vulva de Alondra.

Este se acercó a ella, la abrazó de la cintura, dándole un beso en los labios, pero esta parecía algo incomoda, por lo que no insistió mucho, antes de tomar el celular, aunque no la soltó, así ambos se fueron enterando de lo ocurrido.

Qué bueno que te encuentro joven Dany, menos mal que un perrito tan fiel como tú no se perdió por culpa de ese loco, te aviso, para que todas tus hembras lo vean, daremos un reportaje especial en unos minutos, lo debes encontrar en señal especial, pues ya nos hartamos de algunos miembros del club, esos dementes se sienten intocables, nos echan a perder nuestras diversiones, son insoportables, pero veras lo que pasa cuando dañan al gremio y traicionan al club, esto no se queda como esta, por cierto, mi colega te agradece, está encantado con Matilde, la nueva niña, será un éxito, y dentro de poco los magnates de las granjas y seguridad privada irán a buscarte, no te preocupes, ellos son gente “más decente”, bueno, seguimos en contacto, y te recuerdo que te debo un bono especial por las películas que hiciste, aunque no te las íbamos a encargar – dijo el magnate de los medios antes de colgar.

Dany vería a Jenny, desde que todo eso ocurrió se había hecho un pequeño distanciamiento entre sus queridas hembras y él, ciertamente tenía a las otras, que necesitaban atención, cariño especial por culpa de las drogas recibidas, aparte casi eran vendidas como esclavas sexuales, pero al joven le molestaba no poder remediar lo que pasaron aquellas que llamaba primas, a quien quería tanto como para estar viviendo esa pérfida locura, pues se sentía tan contento con ellas, cogiendo cuando quisiera, disfrutando de su calor, besos o cualquier fetiche que él o ellas pensaran, todo parecía un sueño, pero tristemente daba la impresión de que iban a despertar.

Dile a todas que esto es importante, vamos a la sala – dijo con cierta autoridad a Jenny, quien solo asintió con la cabeza.

Por momentos se fue, mientras el chico acomodaba todo, para poner el noticiero, quien en un adelanto parecía indicar algo de “alto impacto” siendo la noticia que esperaba, habían encerrado a alguien importante por múltiples crímenes, aunque antes daría unos mensajes comerciales así que debían esperar, mientras eso pasaba, fueron llegando Eve, quien silenciosa se acomodó al lado derecho de Dany, mientras que al izquierdo se aferró Rene, aunque parecía algo inquieta, Jane y Soraya estaba a los pies del asiento, como si fueran niñas pequeñas, mientras que Jade se ubicó al lado de su hermana mayor, pero Jenny se quedó al lado de su prima, todas en el sillón para ver mejor que pasaba.

Súbitamente algo pasaría, la pantalla inteligente que estaba conectada al internet reaccionaria a un mensaje al correo electrónico, por lo que tendrían que pasar a verlo, pero aquello era casi una broma, un link especial se activo, mandándoles a una especie de pagina especia pues era una transmisión en vivo, de la misma comentarista que veían en el noticiero normal, solo que ahora la mujer que lucía un atuendo tan profesional, se mostraba frente a todos con un traje corto casi mostrando sus redondos pechos, así como una falda que dejaba ver un liguero, casi como si fuera una puta de lujo, la cual diría:

“Para todos los prestigiados magnates y miembros del gremio, les tenemos un reportaje especial, damos aviso de la traición de un colega del club con muchos años, este por múltiples errores y abusos se ha decidido prescindir de él, pues sus fallos han costado una fortuna a otros socios, además que rompió el acuerdo de no tocar a la familia de un perro, por eso se ha dispuesto en acabarlo, según las ordenes de nuestro miembro más importante Dad Army en la materia del orden, quien no tolerará que toquen a sus “hijas”, por lo que el magnate de los bienes raíces queda fuera de sus cargos, y será ejecutado por mister bull”.

En todo momento la mujer actuó de manera un tanto natural, pero se notaba que algo le afectaba en sus piernas, y en poco tiempo Dany se dio cuenta que le dejaron clavado un enorme consolador encajado, lo que sorprendía porque esta seguía su trabajo pese a la vibración de esa cosa, pero lo que seguiría al final resultaría atroz, pues verían al viejo magnate amarrado y colocado a 4, fijado al suelo por grilletes, antes de que la mujer llegara a su lado para untarle algo en el culo, después, lo que seguiría no sería nada agradable, porque meterían a un enorme cerdo de algunos 200 kilos, para violar al tipo, satisfaciendo así los fetiches de los zoofilicos mas locos en la audiencia. Dany habría apagado la tele, el no tenía ese gusto, y las chicas se sintieron demasiado inquietas por ver aquello, aferrándose un poco a este para no ver, lo cual sintió tan agradable, pues seguía con el pendiente de los miedos que tenías sus hembritas, no quería que estas sufrieran más, por lo que se quedaba a su lado tanto como podía, aunque era difícil, por suerte Lucia se mudaba al edificio, así que podrían pasar a ayudarles, realmente era un dilema, pues Dany se daba cuenta que sin el gremio no podría vivir así, rodeado de todas las chicas que quería, pero este no era tan leal como para dejar que siga en su fantasía, en realidad resultaba sumamente peligroso, los magnates pese a tener reglas no siempre las obedecían, así que podían tratar de arrebatarle lo que tanto amaba.

Recibiría una nueva llamada telefónica, y justo era de su querida Lucia, debía ir a verla, seguro podría pasarlo bien con tan sexy mujer, como le encantaba disfrutarla, y parecía que podría gozar de un buen encuentro, o eso creía, por lo que avisó que saldría, nuevamente las chicas le vieron con una sensación de desconcierto, en verdad estaban afectadas, pero no querían decirlo, le dolió pero debía dejar que el tiempo pasara para que se calmaran, luego en una buena noche de pasión lo contarían todo como charla de cama, de momento mientras estuvieran seguras podía quedar tranquilo, así que les dijo que saldría y pronto volvería. Usando su escarabajo, el cual tenía bien arreglado, llegó a las oficinas donde halló a Lucia, esta con una sonrisa picara le haría seguirle, y acudiendo a un cuarto aparte, comenzaría a besar al joven, con candente deseo lleno de lujuria.

Eso le encantaba, las sesiones de la terapeuta eran de lo más fogosas, disfrutaba de su cuerpo, sobre su escritorio, con la puerta cerrada, una música de fondo cubriendo los ruidos de su lujuria, un par de pechos grandes y redondos que empezaban a saber a leche, un vientre no tan plano, sus caderas se aferraban a las suyas con esas carnosas piernas, además le podía dar con fuerza, clavándole la verga tanto como podía, le encantaba saber que era su mujer, recordaba con emoción la primera vez que la vio, cuando era un crio estúpido con la sangre caliente. La psicóloga llegó para atender al nefasto Steve, porque necesitaba ayuda, pero él se perdió en esos redondos pechos y mini falda oculta bajo una bata, pensaría en todo el sexo de lujo que se podría tener con semejante hembra, imaginándola con la verga metida, mientras chupaba sus carnes, una fantasía demasiado buena, pero todo cambio cuando al salirse un momento por culpa de un encargo, acabó por volver sin que se diera cuenta, y descubriría que era una pervertida de lo peor, estaba metiéndole consoladores al culo de su primito, obligándole a comerle la concha, mientras lo llamaba putito, era una locura delirante sexual, por lo que sello un trato que le permitiría acercarse a ella, deseando hacerle lo que ahora hacía.

Como estas rica, mujer, y eres toda mía – dijo Dany sin dejar de penetrarla.

Tranquilo papito, que estoy sensible, mmm – diría Lucia dejándose hacer.

Esas palabras emocionaron al chico, porque la haría sentir más de su lujuria, le encantaba tenerla bien penetrada, moviendo sus pechos al ritmo de sus embestidas, los saboreaba con un gusto inesperado, con la ropa desarreglada mientras sus movimientos hacían un escándalo que acabaría siendo perdido entre la música, que al final sería cortina de sus gemidos, en especial de un grito de placer que se daba cuando la carga del joven llenaría la vulva de la hembra, quien lo veía con un gusto que rayaba en el amor.

Ah, como me gusta tenerte como mi hembra – decía contento Dany mientras acariciaba ese cuerpo seductor, en especial esas nalgas redondas.

Si, después de lo que pasó, lo soy – dijo con cierto fastidio Lucia mientras se dejaba hacer, disfrutando de esas manos sobre su cuerpo.

Oye, no te quejes, que cuido bien de ti y de la bebita, te salió preciosa – decía el joven sin poder detenerse, manoseando su cuerpo sin poder contenerse, incluso su verga no perdía fuerza del todo, seguía dentro de aquel delicioso cuerpo.

Tranquilo hombre, lo sabes me rendí a ti, por eso te mande llamar, ya estoy fuera de mi horario, vamos por la nena, está en la guardería, y luego a comer, invítame, tengo que darte una noticia importante, perdón, 2 noticias importantes – dijo Lucia mientras se iba arreglar su ropa, caminando mientras le escurría leche de entre las piernas.

A Dany le encantaba ver ese redondo culo moverse de manera sugestiva, recordaba con gusto las veces que lo vio moverse  antes de clavarse en su verga, mientras sus tetas se restregaban contra su pecho, los besos de esa mujer, un poco más experimentados a los de sus hembritas, a quienes adoraba con todo su ser, pues le calentaban tanto, le hacían ponerse terriblemente caliente, siempre deseando clavárselas, sobar sus delicados cuerpos, no quería compartirlas con nadie, solo él debía sentir esos pechos o sus labios, entrar en su interior para dejar escapar sus mieles del deseo, y era lo mismo con Lucia quien se terminaba de arreglar, le encantaba su imagen tan profesional, así que le besaba en el cuello, le tocaba los pechos sobre la ropa un poco más, luego se marchaban. Un viaje cortó la psicóloga recogía a su bebita, quien para ese momento cumpliría 3 años, debían de pensar en un buen regalo, una fiesta, por desgracia en la guardería debía faltar Dany, no era buena idea dejarse ver, pero en casa podrían seguir festejándola, como fuera el caso, lo pasarían bien, y aun tenían un par de meses para pensar bien las cosas, mientras tanto era una bebe feliz, aunque justo en eso el papá se daba cuenta que no debía bajar la guardia, el conserje miraba raro a las niñas, sabía reconocer a otros depredadores sexuales, por lo que mencionó eso a su hembra, que le daría la razón. Rato después se hallaban en un restaurante conocido, Jerry entregaba unas pizzas y una papilla para la bebe, muy contento de tener a Dany, era su socio patrocinador, una gran ayuda económica, aparte que no perdería la oportunidad:

Hombre y de dónde sacarte esa mujer, esta como para darle 10 rounds seguidos, y acabar con una pizza con extra-queso – dijo ansioso el muchacho viendo las tetas de lucia apenas contenidas por su escote, una camisa a punto de tronar.

Tranquilo que esa también es mi hembra – decía Dany triunfal.

No manchas, la Becky, la morena sexy, tu asistente tetona, y unas chicas de secundaria, sin contar las de tu casa, deja algo para lo demás, o estas de hablador – dijo Jerry viendo a Lucia.

No, esta también, o acaso no reconoces a la niña, es Erika, mía, es la mamacita – se burlo Dany con un tono que sugería el tremendo sexo que disfrutaba con Lucia.

Carajo, entonces bien que le has estado dando duro, que envidia, ah, y uno que sigue esperando ciertas oportunidades, tengo mis metas, hombre – decía Jerry sin quitarle la vista, contento de tener a su amigo y socio ahí puesto.

Y por su parte Lucia no podía creerlo, pero era cierto, le pertenecía, si bien tuvo que decir verdades a medias en su trabajo, su pareja era muy vigoroso sexualmente hablando, siempre haciéndole el amor con pasión, metiéndole la verga hasta el fondo, sacándole fuertes gemidos, chupando sus pecho, haciendo juegos eróticos que le hacían perder la razón, incluso ayudándole a salir de su problema, si por ello se rindió a Dany, pues en el juicio que hacían contra su maestro, alargado por burocratismos, el malnacido la involucró, pero fue su ahora macho quien la salvó con sus contactos, esto ayudó a que pensaran otros que su novio era un abogado brillante, pero en realidad era un joven de universidad que movió influencias para refundir al loco más en prisión, dando ciertos testimonios que la ataban a él, quedando en sus manos, aunque ahora que lo veía no se estaba tan mal, pues tener visitas periódicas de tan fogoso hombre, llenándole la vulva con su leche, mientras masajeaba sus preciosas tetas, haciéndola sentir como toda una hembra, le estaba gustando, además cuidaba a su hija, la presumía y le ponía bonitos vestidos, y la bebe le servía a este degenerado como freno a sus locuras, aparte que como padre celoso se daba cuenta de quienes podían hacer lo que el haría con otras niñas, aunque realmente lo que más le gustaba era el sexo desmedido, recibir esa carne agitándose en su interior, aunque tenía que dar un mensaje importante, relacionado con el juicio.

Perdón por la tardanza, pero no puedo dejar de presumir a mi bebe – dijo Dany cargando a su linda Erika, llegando con Lucy.

Tranquilo, también me presumías a mí, no es cierto, eso es halagador – dijo Lucia cruzando la pierna de manera sensual, casi enseñando la tanga.

Bueno, es que estás hermosa – acertó a decir Dany casi comiéndose a la mujer con los ojos.

Gracias, pero ahora que estamos comiendo, quería avisarte, paso algo más con el juicio, no me involucra a mí, pero parece que a ti te dará un pequeño gusto, el maestro no deja de hacer lo que puede para salirse del problema, ha soltado la lengua, hecho culpas al fiscal, el teatro del héroe se le vino abajo – señaló Lucy no muy contenta.

Carajo, solo lo tenían vivo por venganza, Dad Army es rencoroso y posesivo con sus hembras, y si ya no les sirve, uy, seguro se van a deshacer de él – dijo Dany viendo la magnitud del problema.

Si, puede que quieran que intervengas una vez más con algo referente a esto, pero no será nada serio, tu abuelo es muy cooperativo, además me dicen que un magnate te tiene en buena fe por el trabajo que le hiciste, por lo que desean recompensarte, explícate – dijo con fastidio la mujer.

Tranquila, debe ser el de la seguridad privada, con el conseguimos las grabaciones de cámaras de  vigilancia que te salvaron a ti y a Jane, no tenía mucho trato con él, le pedí un favor grande a Dad Army, luego se lo tendré que pagar, pero con el otro, es que le acabo de mandar reclutas del orfanato a su puerta, más de 20 chicos bien puestos para romper hocicos, seguro que están contentos – dijo Dany calmando a su hembra.

Uf, no me gusta nada ese club de ricos – dijo Lucia cansada.

Sí, pero de otra forma no podría tener a todas mis hembras contentas, y eso te incluye, mamacita – dijo con cierto pesar Dany reconociendo los peligros.

Eres un pervertido total y sin remedio, los chicos fantasean con un harem, pero tú lo hiciste, peor aún, está hecho con tu familia, aunque viendo la cercanía, no creo que te salgan los hijos tan mal, ah, pero de que me quejo, así te acepté, eres mi hombre, y seguirás haciéndome tuya, aparte que eres el único que quiero tener dentro, coges muy rico, tanto que lo lograste papi, segunda noticia, nuevamente estoy en embarazada – confesó avergonzada la psicóloga.

Dany pondría una sonrisa sínica en su rostro, si bien que quería cogerse a una mujer preñada, y ahora se daba cuenta que lo consiguió, y lo mejor era su Lucia, ya quería meterle todo cuando su vientre estuviera hinchado mientras le chupaba las tetas lactando, aunque debía ser cuidadoso, no quería dañar al bebe, y se notaba emocionado, por lo que aprovecharía para gozarla ahora que estaba en su condición, aunque también se daría cuenta que debía darle trato especial, pues tendría otro pequeño tesoro que adorar, como su pequeña Erika que se ensuciaba con el puré de papa, pero realmente estaba contento.

No dudaría en salir de ahí para llevarse a su casa a Lucia, apenas acabaron la comida, pidieron un poco para llevar, pago y se fueron, llegaron al departamento que ella usaba como hogar, no lo había dejado porque lo tenía rentado por unas semanas más, pero había comenzando a mover sus cosas al otro, así que fueron a seguir disfrutando, la pequeña Erika vería con gusto sus caricaturas mientras sus papas hacían cosas a un lado de ella, ya nada importaba, la puso sobre la mesa para penetrar esa concha con un placer total, le encantaba sentir los pliegues de su cuerpo abrirse, ella gemía de forma deliciosa.

Te gusto mi noticia, mm verdad papi – dijo candente Lucia.

Oh si, y pretendo disfrutar de esto, porque en serio te traigo ganas, siempre te las tuve – aseguraba Dany mientras empezaba a mover sus caderas de dentro de ella.

AH, en serio que tienes algo, mm, coges bien rico, mejor que cualquier mocoso – decía Lucia mientras sentía como se movían de manera especial la verga en su interior.

Claro que sí, tengo que celebrar, jejejeje, segunda criatura, en verdad que quería lograrlo – se burlaba Dany totalmente caliente.

Estaba caliente, le estaba metiendo hasta el fondo la verga a la mujer, tratando de disfrutar ambos cuanto fuera posible, realmente el cuerpo de ella era un deleite, esos pechos grandes y sensuales, la cadera con unos cuantos kilos de más, pero de forma tan erótica, le hacían tener deseos de acariciar esa cintura, mientras la penetraba, cosa que hacía, sintiendo las piernas con las medias puestas. Apenas tuvo la oportunidad el joven le empezó a penetrar con fuerzas indómitas, le encantaban verla con su verga metida, en especial con la ropa desarreglada, sobaba sus muslos, mientras la veía a los ojos, había una chispa de perversión en ambos, debido a sus secretos, se entendían, aceptaban y deseaban, por eso es que Lucia se quedaba con él, no habría forma que otro hombre quisiera a tan pérfida mujer, una que deseaba someter y abusar de niños, tratarlos con un erotismo ilegal, sin embargo a Dany no le importaba, deseaba su cuerpo con lujuria total, la gozaba, cogiendo tan ferviente, sus cuerpos se fundían entre roces cargados de pasión, sus besos tan apasionados, las caricias encendían el deseo, se perderían cogiendo sin parar hasta la noche.

Apenas haría Dany una llamada para avisar de la situación, le habló Eve, le mencionó un par de cosas, entre estas algo importante, pues en palabras de Lucia: Becky, Melina, Salome, Elisa, Kimiko, Dayna, Luna, Mar y Alondra deberán pasar un tiempo en el hospital por tratamiento, aparte de la droga deben tratar el shock traumático; lo cual aceptaría la preciosa hembra, quien luego de ello se despediría Dany, jurando que mañana iría a verlas, por lo que debían cerrar las puertas, a lo cual hubo una respuesta insegura, pero aseguró que todo estaría bien y lo esperaban, aunque parecía estar ansiosa, lo que hizo pensar al joven que ya estaban más calmadas, si no estuvo con ellas por la culpa de haberles fallado al cuidarlas, ahora creyó que lo perdonaron, las vería con gusto en la mañana.

El resto de la noche Dany se la pasaría cogiendo con Lucia, metiéndole hasta el fondo su verga, disfrutando de no tener que compartirla con Steve, ahora era completamente suya, pudiendo meterle el miembro hasta el fondo, un verdadero placer sin límites, trataba de hacerla gemir a gritos, aunque eso lo evitaba la mujer para no alertar a los vecinos, pero apenas se podía contener mientras disfrutaban ambos. Al final quedaron durmiendo desnudos, muy pegados uno del otro, Dany sobando ese delicioso cuerpo, que lo aceptaba completamente, dejando su verga entre sus carnosos muslos. Sin embargo no podía quedarse, al amanecer se marchó no sin antes ser afectuoso con su nenita hermosa, y luego se fue con sus amadas chicas, además debía movilizar a las otras, quienes seguían en su cuarto, quedando con la psicóloga en atenderlas a la brevedad, si aprovecharía el muchacho que su abuelo Razo se hallaba fuera, junto con su hermana Nancy en un viaje de relax en la isla del placer (o eso dijo), aprovecharía su combi para llevarlas. Llegaría y por suerte todas estaban mejor, aunque tenían secuelas de lo ocurrido, el sexo con él les había relajado, pero necesitaban tratamiento, por lo que con ayuda de Eve y Jenny las llevaron al hospital, no era agradable, estaban afectadas por aquel trato, estaba molesto, aquel magnate hizo lo que quiso con todas las mujeres que amaba, casi arriesgo a su pequeña Erika, más no quedaba de otra, debían internarlas para limpiarlas de droga y recibir cuidados especiales, quizás no podría tocarlas en un par de semanas, luego de ello Dany, viendo que Melina Becky y las demás estarían a salvo, pensaba en pasar tiempo con sus amadas hembras, por lo que planeaba una tarde con ellas, esperando acercarse un poco, pues no las había mimado en días por follar a las otras.

Que dicen chicas, que tal si salimos todos juntos al cine y a cenar como en familia, claro yo invito, y terminamos – estaba diciendo el joven cuando fue interrumpido.

Dany, hazme un favorcito, llévanos a Jenny y a mí de cita, es que las demás no se sienten bien – dijo ansiosa Eve con su dulzura habitual.

Claro, pero saben que no me gusta hacerlas a un lado – dijo el joven inquieto.

Por favor, por esta vez haznos mimos solo a nosotras, si – pidió Jenny melosa.

No podía resistirse, quería mucho a ambas, así que las fue a llevar a donde pensó justo, les compro algunas cosas, y fueron a cenar, era algo muy natural, le gustaba tratar con mucho cariño a ambas, además sabía que después de eso podría disfrutar de sus cuerpos, aunque no dejaba de estar preocupado por Jade, Rene, Jane y Sora, pues no estaba contento al no tenerlas cerca, pues sabía que debían estar alteradas por lo ocurrido, se sentía culpable, siempre quiso protegerlas, pero debido se iba enterando, el maldito magnate les estuvo vigilando, ansioso por ver que ocurría con ellos, y en su momento mandó a un grupito a sacarlas, no podía imaginar el terror que sintieron cuando fueron interceptadas, secuestradas, en especial ese momento en que esos tipos se metieron a su casa, para raptarlas, por eso quería consentirlas, pero no estaban cómodas, aparte ese tipo les hizo algo, al menos lo intento, debía admitirlo, intentar confundirlas para que cogieran con ese viejo asqueroso creyendo que era él, lo maldecía, por suerte era una hipnosis fácil de destruir. Entre sus compras les dejó bonitos vestidos, las llevó a un lugar elegante, nuevamente ambas chicas se lucían, llamando la atención de más de un engreído, que mandaba tragos intentando coquetearles, lo que enojaba más a Dany, aunque en su momento les diría:

Bien, sé que no ha sido la velada perfecta, no faltan los idiotas, pero quería preguntarles algo – dijo el joven con seriedad.

Dinos – respondieron ambas inquietas.

Estoy consciente de que vivimos una locura, y me encanta, cada noche es un sueño, pero después de lo ocurrido, quiero saber ¿quieren seguir así? Yo la amo, pero no sé si siguen deseando esto o irse con algún baboso como el del siguiente trago, maldita sea – dijo viendo al mesero llegar con una bebida invitada.

Eh, la del vestido azul, no quieres un papi en vez de un mocoso pitochico, jajaja – se burlaba desde la barra un vegete de al menos 60 años con aires de grandeza.

Las chicas se quedaron nerviosas, se miraron desconcertadas, por lo dicho de su amante fueron a darse cuenta que estaban cometiendo un severo error, no imaginaron que Dany también lo pasó mal por el accidente, pero en ese momento, harto de acosos de borrachos, el chico se levantaría con el trago para ir a la barra, donde un viejo rabo verde miraba con deseo a Eve, y le echaría la bebida en la cara, luego un golpe, mientras decía: es mi novia, entiéndelo anciano estúpido; claro que el tipo tenía guardaespaldas, pero el joven no tendría problemas para derribarle, incluso tumbarle todos los dientes del frente, al chocar su cabeza contra la esquina de la barra. Cabe decir que después de eso tuvieron que marcharse, pero al menos ya habían terminado de comer, y se regresaron a su casa, donde Dany se disculpaba por lo ocurrido, sin embargo, ambas estarían en una actitud diferente, aquella acción del joven fue emocionante, nunca lo vieron pelear, y fue emociónate para ambas.

Antes que se dieran cuenta habían comenzado a besarse, los 3 llegaban al cuarto de este para seguir con su actividad más natural, divertirse jugando entre ellos en un encuentro erótico, se iban tocando, reconociendo sus formas como si fueran nuevos en esto, aunque debía reconocerlo, no era común tener a Eve y a Jenny juntas solo para él, casi siempre eran profundas orgias entre todas, disfrutando de un carnaval de sensualidad, tocando cada parte de sus bellos cuerpos para fundirse en la lujuria, y notaba que era algo delicioso.

Wow, no esperé que estuvieran así, después de lo dicho – decía Dany mientras se sacaba lo último de la ropa, el pantalón con los calzoncillos.

Pero de que hablas cariño, yo no he dejado de quererte, aun espero que cumplas tu promesa – dijo soñadora Eve dejando a la vista sus redondos pechos.

Tu tranquilo precioso porque verte pelear así me enciende, me tienes mojada – decía Jenny mientras dejaba ver su vulva jugosa remarcada por su tanga húmeda.

Empezaban un ligero encuentro, besos que se iban cambiando de intensidad, caricias llenas de lujuria, sus aromas se mesclaban, el joven disfrutaba de ambos cuerpos, tan hermosos, con pechos redondos, carnosos, que deseaban probar la leche de macho, si podía pensar en verlas preñadas por él, deseaba hacerlo, pero se sentía algo inquieto, habían llegado a cierta monotonía en los últimos meses, y lo peor es que el accidente había dejado dudando a Dany, pero tener a ambas hermanas mayores juntas, era demasiado bueno como para dejarlos pasar, de hecho Jenny traviesa pensaría en salir un poco de la cama, pero notaria algo delicioso, pues pronto volvería en medio de esas caricias, pensaba hacer su jugada favorita, aunque no lograría nada, antes de ello su macho la penetraría desde atrás, para cogérsela a 4, mientras que la hermana menor ofrecía su vulva para que le diera una mamada, siguiendo con ese juego por largos minutos hasta que se corrieron ambas. Después de ello Jenny continuaría su plan, colocándose un dildo para penetrar a Eve por el culo, también le sobaría los pechos, mientras que Dany le daba por el frente, alcanzando las nalgas de la mayor para controlar el ritmo de las penetraciones, realmente estarían pasando una noche de lujo, pues cambiarían de posición, todo lo que se les ocurría lo hicieron, al final en la mañana los 3 despertarían abrazados cubiertos de sudor, oliendo a sexo.

Dany, yo quiero que sepas, me gustas mucho, eres mi primer amor, el único, no quiero irme con otro, los años lejos me hicieron quererte más, no pienses lo contrario – dijo Eve con una voz soñadora, dándole unos besos.

Mira Dany, eres mi macho, no quiero a nadie más metiéndomela, la simple idea me disgusta, en verdad tú me sabes ponerme cachonda, aparte que aun recuerdo algo que me dijiste, y quiero que me lo cumplas, quiero un niño que sea igual de pervertido a su papi – decía con una malicia Jenny.

Me alegró, porque sé que les fallé, no pude protegerlas, de nuevo las metí en un peligro, pero este fue mucho peor, en verdad lo siento y voy a compensarlo – dijo Dany con cariño abrazándolas.

Espera, no te estamos culpando de nada – aseguró Eve contrariada.

Sí, todo fue culpa de ese viejo asqueroso, de hecho nos sentimos mal porque al principio fingimos para ganar tiempo, pero cuando usó la droga realmente nos confundimos – dijo Jenny ansiosa.

Si, tratamos de mantener la calma, engañar al viejo mañoso, siguiéndole el juego pero se dio cuenta, por eso nos drogó, solo te queremos a ti – aseguró Eve desconcertada.

Además, si no hubiera sido por tu trato con ese miserable hubiera sido más difícil haber salvado a Jade de Great Planet – agregó Jenny recordando el porqué apareció ese maldito en sus vidas.

Si, nadie te culpa de esto, solo fue un desgraciado tratando de hacer daño, pero fue difícil porque podemos recordar todo, y el nos tocó, cuando solo queremos que lo hagas tu, nosotras te fallamos al ser infieles, es que nos mojamos – aseguró Eve con cariño y con pena.

Ah, realmente me alegro de todo eso, pensé que se habían decepcionado de mí, no pude cuidarlas como cuando fui un crio, y de nuevo las expuse a un peligro horrible, pero sépanlo, son muy importantes para mí, la adoro y quiero seguir con todas – decía con un ánimo ardiente que no dejaba de llenarse de lujuria.

No era para menos, Dany las adoraba, siempre fueron su motivación, les encantaba tenerlas al lado, disfrutando de sus bonitos cuerpos, sus sonrisas, se deleitaba con sus fragancias, meterles la verga hasta el fondo, mm, le encantaba esa sensación y que se abrazaran mientras se restregaban, era lo que más gusto les daba, por ello se quedaron un rato mas jugando entre las sabanas, dándose besos y caricias, disfrutando de un contacto más cariñoso, igual de intimo, de cierta forma su relación iba avanzando, aunque esta fuera poco común, pero ahí estaba entre el romance y el deseo. Sin embargo terminaría cuando les diera hambre, y Dany pediría unas pizzas, aunque en ese momento notaria algo en las chicas, que no le agradó, poca importancia les daría, más pronto se haría evidente, cuando llegó la comida este pagaría, así mandaría llamar a todas, pero con mala suerte Jenny le avisaría que en su ausencia con Lucia recibieron visitas, unas que no quisieron recibir al principio, pero después de una hora de insistencia les dejaron pasar. Para Dany aquello era una horrenda realidad, de todas las personas que evitaba, era Lorein a quien menos toleraba, tampoco a Clara, había una especie de enemistad entre su madre y él, ahora volvía.

Muy lejos de ahí, en una ciudad playera, en un precioso hotel 5 estrellas, 4 chicas disfrutaban asombradas, ver todos esos lujos, no estaban muy cómodas, pero querían despejarse, darse su tiempo, obviamente eran Jade, Rene, Jane y Soraya, quienes usaban en ese momento bonitos trajes de baño que resaltaban las formas de las mayorcitas, aunque en las más jóvenes las hacían ver con un encanto inocente que despertaba el morbo, pues más de un viejo las veía con deseo, pues las más chiquillas dejaban ver unas formas precoces, unos pequeños pechos que llamaban la atención, mientras que sus nalgas no dejaban de tragar la tela de atrás, haciendo una imagen demasiado seductora, se hallaban algo incomodas, pues sus madres insistieron demasiado, aunque unos días en la playa eran irresistibles, sin embargo pensaron que en un lugar así podrían haberse disculpado con Dany, si por ello trataban de mandar un mensaje a Eve y Jenny para decirles donde estaban, pero como una mala broma las señoras les interrumpían cada vez que lo intentaban, incluso les quitaron los celulares, siendo su consuelo poder ver a sus hermanitos menores, hasta el hijo del General era agradable, no tanto Steve, pero su “padrastro” lo estaba disciplinando, detalle que les divertía. Era un lugar precioso, al menos de vista, además muchos chicos guapos no les dejaban de ver, incomodando un poco a Jade y Rene, quienes con sus 14 años, lucían irresistibles, pues con sus pechos herencias de sus madres, sobresalían mucho, solo que hubieran deseado tener a su “novio” ahí, por lo que usaban la escusa de tenerlo para alejar a los idiotas, pues todos ahí eran niños engreídos, solo deseando acción sexual, gracias a las influencias de sus padres seguro la conseguían, y ellas sin eso se sentían expuestas, ya que el general no les daba confianza para llamarlo padre, aunque así lo trataban, era buena persona, más no le tenían el aprecio, así que usaban todo lo que Dany les enseño para evitar accidentes. Sin embargo eso no era del agrado de Lorein y Clara, quienes estaban cansadas de esa situación, no querían ver a sus hijas con su sobrino, detestaban aquello, y buscaban formas de acabar con todo eso, por lo mismo ni les dijeron a las mayores donde estarían, trataban de ser astutas, intentando juntar a las más chicas con “mejores prospectos”, ignorando lo que sus hijas sintieran, así aprovecharon lo del magnate de los bienes raíces para llevárselas bajo el engaño del descanso.

Dad Army, era un general de temer, su nivel, poder y reputación nadie lo ignoraba, aparte siendo miembro del club desde hace décadas, era una especie de autoridad en discusiones o pleitos, apenas otros 5 hombres tenían esa posición privilegiada, además, debido a larga estadía dentro de la organización militar, es que le harían un pequeño homenaje, una fiesta de gala donde podrían ir personas cercanas, algunos eran colegas, miembros del club, sus familias, el hombre estaba contento, aunque no se hallaba muy convencido de llevar a las niñas, de hecho la presencia de las 4 no les terminaba de convencer, no es que les odiara o parecido, de hecho disfrutaba de su jovialidad, las encontraba encantadoras, quería decirles hijas y mimarlas se sentía su padrastro, pero su relación era rara, pues tenía a ambas madres convertidas en sus hembras, una relación rara, mal vista, debía ser prudente, solo con los miembros del club era tolerado, no en público, lo que resultaba un problema mayor, más no pudo decir nada al ver la emoción de sus amantes. La fiesta habría sido prácticamente a la tercera noche desde que se fueron, acudiendo a un salón de gala donde el hombre saludo a todos recibiendo aplausos y halagos, hubo un par de vals, bebida y risas, las 4 chicas estaban incomodas, no querían ir al festejo, pero lo hicieron más por el hombre, declarándolo abiertamente, detalle que le enterneció, que por otra causa, y se lucieron: Jade llevaba un vestido verde, corto, con medias color piel, zapatillas a juego, era muy elegante, pero también dejaba ver un buen escote y la espalda descubierta, revelando que no traía sujetador, por su parte Rene usaba uno de color negro  con tacones cortos, su cabello suelto, pero algunas joyas de fantasía, por su parte Sora iba con un vestido blanco de holanes negros que la hacía ver delicada y Jane uno color rojo tan llamativo que era capaz de jalar las vistas de todos; realmente las 4 robaban miradas, y sobraban los chicos que trataban de acercarse, sin embargo las miradas insistentes de sus madres eran molestas, y aparte dijeron: vienen a una fiesta y no bailan con nadie, que desperdicio fueron las palabras de Clara, no sabrás cuanto quieres a una persona hasta compararla con otra, señaló Lorein con malicia; por ello ambas chicas se decidieron a bailar con algunos chicos, mas por obligación que otra cosa, y mientras lo hacia la mala fortuna querría que llegara una llamada: que Jane trato de contestar, pues había recuperado su cel sin que la vieran, diciendo astuta el nombre de la ciudad, pero su madre le quitaría el celular:

¿Qué quieres? Danzo – dijo con fastidio la mujer con el equipo en mano.

Acaso estoy escuchando música, estas en una fiesta – dijo Dany inquieto por la orquesta.

Sí, estamos en una fiesta de gala, para mi hombre, la estamos pasando muy bien, todas, en especial Jade y Rene, están conociendo verdaderos caballeros – aseguró con malicia.

Carajo, oye en serio no tienes idea verdad, pásame a Jane rápido – dijo con prisa Dany.

La mujer solo fingió hacerlo, pero no lo hizo, quería saber que iba a decirle ese mocoso que recogió y le traicionó, seguro que iba a manipular a su hija:

Jane, recuerda lo que te dije sobre las fiestas – decía Dany preocupado.

Mira, no sé cual sea tu juego, pero ya me cansé, son mis hijas, mi responsabilidad, no tienes porque meterte, las mayores ya se pudrieron, pero las pequeñas aun pueden ser rescatadas, lárgate de nuestras vidas, ya tuve que aguantar que las tuvieras 2 años, eso fue lo que pudiste “cuidarlas” – dijo sin corazón Lorein colgando, pero miraría a su hija pequeña.

¿Dónde estuviste hace 3 años? Mamá – fueron las palabras de la niña helando la sangre de la mujer, y en ese momento Jane junto a Sora se decidirían ir.

La mujer no sabría que decir o hacer, pero no le daría importancia pues notaria que Clara le llamaba, como era más sociable nunca le faltaban las nuevas amistades, además la sala de baile estaba en el mismo hotel donde se hospedaban, así que no debía haber problema, o eso creyó. Ambas señoras ignoraban por el cuidado de Dad Army, que el mundo podía ser horrible, se creían damas de sociedad, pero ambas eran solo las putas de un hombre poderoso frente a los ojos de muchos, y sus hijas, debían ser lo mismo, aprovechando que se marchaban las más chicas, o la distracción de las madres, algunos pensaban en aprovecharse, y un par de niños mimados, galanes de escuela, miraban a Rene y Jade bailar, realmente les encantaban ambas crías, se imaginaban que debían gemir bien rico, carne fresca, por lo que pensaban en disfrutarlas, aunque debían ser caras, o esa era su idea, por lo que viciosos sacaron unas pastillas para “seducirlas”, diluyeron un poco en unas bebidas que invitaron, y en un momento de descanso cuando ambas llegaron a tomar, terminaron mal, pronto ambos cretinos fueron a invitarlas, y sin problemas las pudieron sacar, como eran familia usaron una limosina para llevarlas lejos, viendo como las putas mayores seguían hablando con otras, se escaparon a un motel junto al aeropuerto donde se decidieron quien iba con quien por un tiro de moneda.

Hola preciosa, soy Michelle – dijo un chico cargando a Rene dentro de un cuarto.

Rene – diría confundida la chica.

Pero al cretino poco le importaba, pues la echó encima de la cama, donde le sacó el vestido, casi rasgándolo, viendo con deleite sus preciosas tetas, se veían mejor de lo que esperaba, las cuales chuparía con un desespero total, lamiendo como si fuera un crio, pero mordiendo, encajando los dientes, como si quisiera marcarlas, pensando que no sabía que las putas podían ser tan deliciosas, veía a la chica, realmente era preciosa, no recordaba ver algo semejante antes, todas sus formas estaban finamente cuidadas, incluso cuando le arrancó la tanga se notaria depilada, como sexo de bebe, pero soltaba una fragancia cautivadora que hacia hervir la sangre, luego al notar las medias, no pudo más que sacarse el miembro para empezar a meterle la verga en su suave y jugosa raja.

Mm, vez preciosa, los que tenemos clase sabemos coger, y yo soy Adolf – decía el chico al lado mientras veía a su familiar metérsela con torpeza que creía salvaje de su parte.

Jade – apenas acertó a decir confundida.

Oye, estas son putas de calidad, hasta se presentan – dijo burlón el primo del otro mientras se acomodaba con la otra cercas de su primo.

Ambos estaban en el mismo cuarto, empezando su deleite sexual, Michelle se cogería a Rene en la cama, se la había ganado, pero no le importaba a Adolf quien estaba jugando con Jade en un sillón, bajándole la ropa, también al punto de desgarrarla, viendo esos apetitosos pechos que masajeo casi arañándolos, le daba mucho morbo sentir aquellas formas, también pellizcaba, tenía un fetiche por jugar con esas masas de carne seductoras, deseoso de sentirlas entre sus dedos, lamiéndoles con desespero mientras iba arrancando la prenda, igual pasaba con Rene, así ambas primas eran violada por aquellos idiotas, quienes gozarían de aquellas chicas sintiéndose que les hacían un gran favor, saboreando con lamidas pérfidas, mientras se regodeaban con la suavidad de esa piel, penetrándolas lento, como si quisieran amoldarlas, al menos ahora que empezaban, disfrutaban de ese calor que le provocaba delirios de grandeza, pero perdieron la cabeza en solo unas cuantas embestidas para metérselas como animales salvajes, pues estaban podridos en una lujuria sin sentido, algo había en ambas que despertaba el deseo por hacerlas gritar, lográndolo en breve, pensando que era placer, disfrutaban de sus gestos lastimados, se sentían como si fueran sementales en cada una de sus embestidas, pues eran demasiado toscos, engreídos, pensaban solo en satisfacer sus deseos, no recordaban cuando tuvieron semejante oportunidad, esos preciosos cuerpos era sencillos, aunque igual de eróticos a una fantasía, se perdían en esos pechos que se movían de manera sugestiva, las voces cargadas de dolor que confundían sus sentidos, los araños en la espalda pensaban que se aferraban a ellos, era tanto su ego que ignoraban la verdad, y se corrían dentro sin importarles nada, para luego cambiar, pues no tenían llené, era sencillo pues con sus 19 y 20 años, les sobraba energía.

Mientras eso ocurría, un viejo malicioso, un tipo en sus 50 años había visto salirse a Jane y Jade, igual de idiota que aquellos juniors, fue a interceptarlas, las había visto en la alberca y playa, tenía sus fetiches, los culos redondos infantiles, así que gracias a un guardia del hotel, a quien dio una buena propina se las llevaría a su suite, ellas trataron de resistirse, pero fue imposible, una amenaza basto para callarlas, dentro del cuarto este les arrancaría los preciosos vestidos, metiéndoles sus calzoncitos en la boca para que no gritaran, comenzando a jugar con sus cuerpos, lamería cada parte de ellas, si había apostado con algunos amigos, ¿Quién podría contratarlas primero? Aunque no precisamente lo estaba haciendo, pero ya no soportaba, termino disfrutando de sus deliciosas tetas, pequeños limas que daban un toque muy dulce, intercambiando entre los de Sora y Jane, pero iría bajando para jugar con los ombligos de ambas antes de llegar a sus grutas de placer, donde se perdería haciendo toda clase de maldades, pues era un loco, no tan peligroso como otros, pero no le quitaba la demencia:

Mm, malditas niñas, no saben cuánto las hemos deseado, corriendo enseñando los culos, nos torturan, pero ahora me voy a vengar – decía el viejo cacheteando a ambas, volteándoles para nalguearlas dejando su tersa piel roja.

Encajaría sus dedos en los culos, pero no era suficiente, estaba poseído por su locura, las niñas apenas pujaban, con cinta adhesiva ataron sus manos detrás de ellas, y fue horrible cuando les metieron un consolador en la vulva, que vibraba tanto que las hizo correrse, pero no por placer, pues aquello se agitaba tan feo que les dolía, casi haciéndose que se orinaran, era más una reacción fisiológica a su verdadero gusto, aunque eso no lo entendía el viejo.

Se orinaron, que puercas, son asquerosas putas, pero tengo que comprobar – y lamia los fluidos viendo que eran mieles, lo cual le emocionó.

Al ver aquello su mente enloquecía, las volvió a nalguear con fuerza, deseando seguir con su juego sádico, haciéndolas llorar, y en eso aprovecho para meterles algo en los culitos, un enema, que les haría quejarse del dolor, sentían que les quemaba por dentro, revolvía sus tripas, haciéndolas retorcerse, ambas sufrían, y eso le encantaba al viejo, quien pensaba en cuanto debería pagar por tenerlas una semana completa, trataban de gritar pero no podían, en su boca sentían su propio sabor gracias a sus tanguitas, querían escapar y lo más frustrante era que sus hermanitos descansaban un piso más arriba.

Que buenas putas son, me las pienso quedar, cuanto será por día, no me canso – dijo aquel tipo enfermo, quien desataba toda su demencia mientras preparaba un juguete más.

En ese momento sacaba un consolador de 30 centímetros, no tan grueso, pero su fetiche anal lo obligaba a usarlo, metiéndolo hasta el fondo, aunque a las pobres niñas apenas les entraría, además la puso de frente, así terminarían conectadas por la pieza de plástico, y serían obligadas a follar entre sí, les dolía tanto, pero eso era mejor, antes lo habían hecho, si sabían cómo disfrutar entre ellas, muchas veces compartían cama, jugando desnudas, pero eso era horrible, el viejo no dejaba de verlas con un deseo enfermizo, mas al verlas disfrutar, aparte en un gesto sádico empezó a usar un par de vibradores para aplastar sus botones de placer hasta que se terminaron corriendo en un par de orgasmos muy fuertes, que harían escurrir sus mieles que empaparon las finas sabanas, pero eso también activo otra cosa, la sustancia que les metieron en el culo, haciéndolas sufrir, sentían que iban a defecar, lo sabía el tipo, pero no les dejó marcharse, pues quería verlo hacer eso ahí para castigarlas…