Follando en el cementerio
La tristeza que tenía dentro más el estar en el velorio del marido de mi única amiga que tenía me llevó a terminar follando con el sepulturero del cementerio..
A lo largo de los días yo seguía muy triste y caliente porque Elias apesar de que fue a la cárcel por violar a muchas mujeres fue el único que me llevó llevó tener orgasmos tan fuertes que de mi vagina expulse un líquido blanco.
Ya habían pasado 4 días y mi cuerpo me volvía a medir un polla para satisfacer mis necesidades. Hacía las cosas sin ánimo, a mi hijo casi no le daba mucha bolilla, lo que es malo para una madre, pero no podía evitarlo sentirme así.
En las noches me masturbaba pensando en Elias y como me había hecho el amor todo un día entero.
Una tarde noche mientras esperaba que me llamen de un trabajo, sonó mi celular y vi que era Valeria, la mamá de juaquin el amigo de mi hijo, cuando atiendo Vale me dice que su esposo falleció ayer a la noche por un accidente de autos y que por eso juaquin no estaba llendo al colegio.
Vale: Romi, te quería pedir si no me podes venir a acompañar al funeral.
Yo: si amiga conta con migo ahí voy a estar.
Vale: dale gracias es a las 7 de la tarde.
Yo: en que lugar?
Vale: en el cementerio de recoleta.
Yo: bueno amiga ahí voy a estar.
Vale: yo paso por tu casa si?
Yo: dale.
Yo deje a mi hijo con juaquin el hijo de Valeria para que jueguen y se le quite la tristeza mientras yo me preparaba para ir al funeral. Ya que era un funeral debía ir nada provocativa por respeto pero tenía ganas de ponerme algo que al menos a mi me daba placer usar, así que de mi cajón saque unas medias negras hasta mis muslos, mis ligueros y una tanguita negra, el corpiño también era negro de encaje. Luego me puse un vestido negro largo hasta mis tobillos solo que tenia una particularidad el vestido, tenia un tajo en el costado derecho de mi muslo y dejaba ver mis piernas enfundadas en las medias sexis, también el vestido dejaba ver mis hombros descubiertos y para finalizar me compré unos guantes largos negros finos de terciopelo muy suaves al contacto con mi piel que me llegaban unos 5 centímetros más arriba que mis codos.
Luego termine de ponerme unos tacones y me maquille con labial rojo, un poco de rubor y me deliñe los ojos y pestañas. Y para rematar un perfume de rosas.
Al verme en el espejo, yo no quería ni era mi intención pero me veía tan coqueta y guapa. Estos guantes de terciopelo son tan suaves y el vestido con las medias y ligueros me esta poniendo muy cachonda de nuevo. Antes de que pudiera pasar otra cosa justo escuché la bosina del auto de Valeria que pasaba a buscarme.
Cuando entro al auto la veo a Vale que me abraza.
Vale: gracias por acompañarme de verdad
Yo: un placer amiga
Mientras íbamos en auto rumbo al cementerio hablamos de que es lo que ocurrio y el como paso.
Resumiendo la parte de la charla para no aburrirlos, cuando llegamos al cementerio había varios familiares de Valeria y del esposo ya fallecido y estaban vestido con la misma elegancia que yo.
Yo: uff, menos mal no quería que pareciera que vestía como una ramera de la época antigua.
Vale: Romi ahora que te veo bien estas muy elegante, como las mujeres ricas de la época medieval.
Yo: jajaja si?
Vale: si amiga, encima esos guantes te hacen ver más sexi
Yo: uuh, perdón no era mi intención
Vale: no, tranquila no te preocupes era un chistesito como para no estar tan deprimida.
Mientras íbamos caminando hacia la lápida Vale y yo hablábamos.
Yo: que grande que es este cementerio, nunca vi uno tan grande.
Vale: si viste, cuando averigüé el precio para dejar el cuerpo, no solo era barato sino que casi me pierdo dentro.
Vale: no te alejes mucho porque es un laberinto y no hay mucha gente es muy abandonado.
Yo: ay te imaginas que me pierda?
Vale: jaja no
Yo: pero posta no hay nadie
Vale: por eso, si te pierdes estas sola.
Paso al rededor de 1 hora en que los familiares decían unas palabras y se despedían. Yo estaba adelante de todo y mientras los familiares pasaban a despedirse veo que había un sujeto al lado del pozo donde pondrían el cajón, el estaba con una pala en la mano mirándome fijamente, la verdad que daba miedo porque no apartaba ni un segundo su mirada de mi.
El tipo era más bajo que yo, vestía un mono azul lleno de tierra, se podía notar que tenía una joroba porque estaba como medio inclinado hacia adelante pero ya era así, era pelado, no tenía cejas lo que lo hacía más feo aún, tampoco tenía barba por lo que pensé que era lampiño.
Cuando lo veo a los ojos el me sonríe como todo un depravado ya que su sonrisa era de malicia sus labios estaban como rotos, sus dientes estaban todos amarillos y algunos de sus dientes los tenía como afilados. En definitiva nunca vi un hombre nada igual.
Pero depronto me imagine que era tan feo que ninguna mujer estaría con el, mi corazón empezó a latir rápido, me empezaba a excitar con ese duende feo.
No era el momento de calentarme así que me fui al fondo donde no me podría ver ya que era petiso.
Cuando va terminando el velorio a eso de las 8 de la noche ya estaba oscuro y las luces de todo el cementerio de encendieron, mientras tanto la familia se iba mientras el enterrador todo con tierra está terminando de enterrar el cajón.
Vale: vamos?
Yo: eh, yo quiero ya que estoy acá despedirme de mi abuela. Era mentira solo quería ver más de serca al hombre este, para tentar al destino.
Vale: queres que te acompañe?
Yo: no, no te preocupes estaré unos minutos y me iré.
Vale: bueno si queres que se quede a dormir en mi casa tu hijo.
Yo: dale si. Le doy permiso.
Cuando Valeria y los familiares se van yo quedo todavía parada frente a la tumba del esposo de Valeria y del enterrador que todavía no se había ido.
Hasta que me habla
Enterrador: señorita ya es muy tarde para estar aquí.
Yo: si ya me iba
Enterrador: sabe de tantas mujeres que vi despedirse de alguien nunca vi a alguien tan coqueta y sexi como usted.
Yo poniendo colorada le respondo:
Yo: ay gracias señor. Usted trabaja aquí aquí cuanto tiempo?
Enterrador: hace 20 años. Desde que mi esposa murió.
Yo: ay que terrible, tanto tiempo?
Yo: cuantos años tiene usted?
Enterrador: si mucho tiempo, y mire tengo 45 años. Y estoy arruinado.
Yo: no diga eso.
Enterrador: como se llama?
Yo: yo Romina, pero decime ro o romi.
Yo: vos?
Enterrador: yo me llamo Carlos.
Yo: disculpe la pregunta pero desde que su esposa murió no tubo sexo con otras mujeres?
Carlos: no, con nadie además, quien quisiera acostarse con alguien como yo.
Yo: no se ponga así.
Carlos: es que ya no se como tratar a las mujeres.
Carlos: desde que mi esposa murió, vivo aquí en el cementerio, no salgo a ningún lado ni nada solo estoy aquí y camino por todos lados.
Yo: de verdad?
Yo: osea que no sabe como hablarle a una chica?
Carlos: no y ya tengo 45 años.
Yo: y porque hoy me miraba con esa cara de depravado? Jajaja
Carlos: porque es tan bella que quiero aparearme con vos Romi.
Ambos nos quedamos helados.
Yo: poniéndome nerviosa y algo caliente le digo
Yo: hay jajaja bueno estoy alagada creo..jaja
Yo: y donde vive usted ya que no vi ninguna casa en el cementerio.
Carlos: vivo en un mausoleo osea el dueño del cementerio me dejo quedarme y a cambio yo cuido el lugar por las noches.
Yo: y a que hora cierra el cementerio.
Carlos: y ya en 30 minutos cierra.
Yo: me podría guiar a la salida porque me contaron que esto es un laberinto y me puedo perder.
Carlos: si no hay problema. Pero tendría primero que pasar por mi casa así busco las llaves para cerrar el cementerio.
Yo: bueno lo acompaño entonces.
Íbamos caminando muy pegados nuestras manos se rozaban.
Carlos: Romi que lindo se siente la suavidad de sus guantes finos.
Yo: si quiere me puede dar la mano, va ya que usted hace mucho que no se ve con una mujer.
Sin pensárselo más el me tomo de la mano, eran como piedra, sentía su fuerza. Eso me excitaba.
Mientras caminábamos de la mano vemos que el cielo se tiñe de gris y listo como para llover.
Carlos: apresurados nos antes de que llueva.
Ambos apresurados el ritmo sin soltarnos de las manos
Dimos tantas vueltas que me marie no se donde estábamos pero si vi la casa de Carlos o mejor dicho vi su tenebrosa posada.
Era un mausoleo chico, cuando vamos entrando justo se largo la lluvia, era una lluvia torrencial. Yo seguía a Carlos que iba a buscar las llaves.
Cuando entro en el mausoleo, en ambas paredes había cajones con personas muertas, en el frente había una escalera caracol que bajaba hacia quien sabía donde.
Yo: Carlos mejor lo espero afuera
Carlos: no se asuste, se que es terrorífico pero es donde vivo, esto es un pasaje oculto.
Yo: bueno esta bien.
Carlos: venga deme la mano.
Como todo un caballero el me tomo la mano con delicadeza. El miedo que sentía por la situación y la excitacion de saber en que terminaría esto estaba haciendo que mi corazón latiera a mil.
Dimos como cuatro vueltas para abajo las paredes de mármol se convirtieron en roca antigua de esos que están en los castillos de la edad media y en vez de luces, había antorchas.
Cuando por fin llegamos al final de las escaleras Carlos abrió una puerta donde me llevó con el.
Carlos: aquí es donde vivo
Yo: aquí? Pero estamos debajo de la tierra
Carlos: si, dese hace 20 años que vivo aquí.
Cuando empiezo a pasar había una habitación amplia el suelo y las paredes eran de roca. Del techo colgaba un candelabro con velas. No había sistema eléctrico ahí abajo.
Carlos: esto era antes un calabozo antiguo por eso las rejas.
Yo: ay que tenebroso.
Yo: encontraste las llaves así nos vamos?
Carlos: las estoy buscando igual esta lloviendo muy fuerte a fuera.
Mientras seguía observando el lugar vi la cama donde dormía. Tenía una cama tirada en el suelo, estaba algo sucio debido a la humedad de ese lugar.
Tenía una mesita de luz también con velas por todos lados.
Yo: y donde te bañas o comes porque no veo cocina.
Carlos: me baño en algún gimnasio o algo parecido sino cuando llueve.
Y cocinar no cocino como de la basura o los restos de comida que encuentro en los tachos de basura.
Yo: y no te lavas los dientes?
Carlos: me da vergüenza pero no. Me lavo con agua solamente.
Yo: y hace cuanto que no se baña?
Carlos: hace 3 semanas.
Yo me estaba empezando a excitar, estaba en un calabozo antiguo con un hombre sucio que come de la basura, que no vio una mujer en mucho tiempo y encima era muy feo. Mientras esperaba a que encontrara las llaves yo le decía.
Carlos: acá encontré las llaves, pero será mejor quedarnos un rato porque llueve mucho.
Yo: ay si tenes razón, será mejor que me quede un rato.
Carlos: de verdad?
Yo: si
Carlos: ay Romi si gracias debería quedarse un rato.
Carlos me empezó a besar las manos en forma de alegría.
Carlos: ay Romi que lindas y finas manos que tiene envueltas en estos guantes de terciopelo tan suaves me esta volviendo loco.
Yo: ay Carlos tranquilo jaja.
Carlos en ese momento vio el tajo de mi vestido y pudo ver las medias negras y mis ligueros. Se le saltaron los ojos y me empezó a besar las piernas por encima del vestido y luego sentí sus labios en mis piernas.
Yo: ay Carlos no, que haces
Carlos: Romi es la mujer más bella que vi más que mi difunta esposa.
Yo: ay no diga eso por favor. Pare, ahhh no basta tengo que irme.
Cuando me suelto y lo alejo de mi Carlos se para a unos centímetros me dice.
Carlos: disculpe es que hace 20 años que no beso ni acaricio a una mujer.
Mientras lo escuchaba veía que Carlos decía la verdad ya que estaba muy alzado, se le veía una polla larga bien parada en pocos minutos.
Carlos: mire como estoy, se que es una locura pero al menos podría apiada de mi y podría besar su boca al menos?
Yo estaba que dudaba pero la situación me estaba calentado, ya que podría ayudar a un hombre que no tiene sexo por 20 años.
Yo: Carlos, lo voy a ayudar pero tiene que prometerme 2 cosas.
Carlos: si lo que quieras.
Yo: la primera es que no solo nos vamos a besar sino que vamos a follar, pero no más de 2 horas a las 10 tengo que estar afuera del cementerio.
Carlos: si si trato.
Yo: y una cosa más, tiene que prometerme que luego de esto se anime a salir al mundo y que busque una buena vida.
Carlos: se lo prometo de verdad.
Una vez hecho esto ambos nos acercamos y acercamos nuestras bocas. Carlos era medio inexperto pero me parecía tierno que no supiera como besar. El me manoseaba por todos lados, nuestras lenguas jugaban y yo empezaba a disfrutar de la situación.
Duro pocos minutos los besos ya que Carlos estaba muy caliente, se despegó de mi y se saco toda la ropa, un pene bien parado chorreando su líquido preseminal estaba apuntando hacia a mi, se veía también que estaba muy sucio ya que al rededor de su pene tenía esmegma que olía muy fuerte a queso rancio pero estaba tan cachonda que lo quería dentro de mi.
Yo me quedé desnuda sacándome el vestido quedando en mis medias negras y ligeros, y cuando estoy por sacarme los guantes de seda Carlos me dice que no me los saque ya que le gustaba sentir la suavidad de mis guantes en su cuerpo desnudo y me veía muy sexi con ellos.
Yo obedecí, ambos nos fuimos al colchón sucio que estaba en el suelo y nos besamos un poco más de tiempo. Me olía el pelo, besaba mi cuello perfumado, mordía mis pezones, pero duro poco este preparativo ya que Carlos estaba tan alzado que su pene chorreaba mucho líquido pegajoso.
Llega el momento y yo quedándome de piernas abiertas lo invito a meterse dentro mío. Cuando Carlos me pone la punta de la polla en la entrada de mi vagina Carlos empieza a ponerse romántico.
Carlos: ahhh, romi esto es tan..tan suave.
Finalmente hundió la polla hasta el fondo de mi vagina y ya nuestros cuerpos estaban completamente pegados. Con su pene dentro mío Carlos y yo nos besabamos y hablábamos antes de que empezáramos la faena.
Carlos: ay Romi esto se siente tan bien. Se que no voy a aguantar la primera cogida pero me repongo rápido.
Yo: shhh, tranquilo corazón.
Ambos nos fundimos en un beso con lengua mientras yo con mis guantes acariciaba su culo y su espalda.
Carlos separo su boca de la mía y mientras nos mirábamos fijamente sintiendo nuestros roces de labios y nuestros alientos empezó a follarme despacio y suavemente mientras acariciaba mi pelo.
Yo pensé que no iba a durar más de 1 minuto pero me sorprendió, llevándome a un orgasmo temprano que rara vez se me daba. Se ve que el sexo agresivo y que me traten como una perra me gusta pero lo que necesitaba en este momento era hacer el amor y vaya que lo estábamos haciendo.
Yo: ahhh ahhh ay Carlitos si, me sorprendes venite venite.
Carlos: ay Romi ay Romi me vengo, ahhh ahh.
Mientras sentía una gran cantidad de semen entrado en el fondo de mi vagina Carlos y yo seguíamos mirándonos perdidamente compartiendo nuestros alientos.
Carlos y yo nos quedamos en la misma posición mientras tenía clavado su polla dentro mío, ambos hablábamos y nos sonreímos.
Yo: Vaya Carlos pensé que no ibas a durar jaja
Carlos: yo tampoco jaja, pero dure bastante y creo que sentí un orgasmo tuyo no?
Yo: puede ser…es que la idea de saber que tengo el semen de un hombre que no hace el amor durante 20 años me exita muchísimo.
Habremos estado como 30 minutos besándonos y acariciandonos todo era muy romántico. Me sentía como aquella vez que lo hice por primera vez con mi esposo en la luna de miel, era raro volver a sentir algo así de nuevo.
Sentíamos que la lluvia se detenía pero debido a que aquí abajo no había aire fresco sentíamos la humedad que había en el ambiente, los dos estábamos chorreando en transpiración éramos como ranitas apareandose ya que las ranas son húmedas.
Increíblemente a Carlos nunca se le bajo la polla la seguía teniendo dura.
Yo: Carlos..ya paro la lluvia y son las casi las 10 de la noche.
Carlos: así? No me di cuenta, la estaba pasando tan bien.
De pronto Carlos empezó a moverse de nuevo pero a más velocidad.
Yo: ay Carlos ahh ahh es..esta bien una cogida más. Partime al medio dale mi amor.
Carlos me follaba a más velocidad mientras sentía como el semen pegajoso dentro mío actuaba como lubricante. Esto estaba provocando que tuviera orgasmo tras orgasmo, más de los que esperaba.
Yo: ahhh oohhh ohhh si Carli más más.
Carlos seguía sin eyacular y estaba como un toro. Yo para premiarlo le acariciaba la cabeza mugrosa y su torso fuerte.
Carlos: ay Romi que suaves esos guantes por favor no me hagas esto.
Carlos empezaba a morder y besar mi cuello.
Carlos: AHHH AHHH ME VENGO POR DIOS QUE RICO.
Yo: ahhhh si llename toda sii.
Mientras llegaba al último orgasmo con Carlos yo apreté y encerré con mis piernas su cadera con mi cuerpo y acariciaba nuevamente su culo.
Luego de 30 minutos ya Carlos perdía su virilidad y la sacaba de mi concha toda pegajosa expulsando leche por todo el colchón.
Ambos nos vestimos y subimos al cementerio para que Carlos me llevara a la salida y despedirme. Termine saliendo a las 10 y 45 de la noche.
Yo: Carlos espero que te halla gustado como me gustó a mi. Aunque no lo creas me ayudaste mucho, necesitaba algo de amor.
Carlos: Romi nunca me voy a olvidar de que una mujer tan bella me hizo el amor.
Yo: espero que cumplas con tu promesa
Carlos: claro que si mañana me pongo a hacer currículum y a buscar al menos una habitación de hotel para rentar.
Yo: algo más…. esto es para que no me olvidez.
Le di mis guantes de seda largos ya que le gusto y le excito mucho.
Carlos los olió y me dio un beso de despedida.
Cuando llegue a casa me fui a bañar y si bien a pesar de los orgasmos que tuve yo seguía muy caliente y excitada. Pero la tristeza que tenía por el violador Elias había desaparecido ya que hacer feliz a un hombre que no follaba hace 20 años me hizo sentirme muy bien realmente. Eso si estar nuevamente caliente me seguirá llevando cada vez más hacia una adicción que a pesar de querer dejarlo no voy a poder y terminará llevándome situaciones límites.
Dios te bendiga mujer por hacer esos espectaculares obras de Caridad con esos hombres necesitados 😘,un gustazo tener una mujer así,yo que llevo 4 meses sin sexo jajaja