Infiel con el verdulero del barrio

El feo verdulero del barrio Ramón me dirá los galgos todos los días pero ahora que estoy desatada y volví a ser una puta regalada quería montarmelo..
En mi anterior relato luego de la noche de amor y pasión que viví con aquel vago me volví a sentir alegre, ya no reprimida, quería salir a la calle y gritar lo zorra que era.

Ya había pasado solo unos días desde mi infidelidad con el vagabundo y todos los días me seguía vistiendo provocativa obvio me cambiaba rápido antes de que llegara mi novio para que no se diera cuenta y todos los días me sacaba la ropa y me masturbaba constantemente hasta que estaba caliente otra vez y deseosa de una verga.

 

Una tarde en la que volvía del trabajo recibo un mensaje de mi novio que si no podía recoger las frutas que había comprado en la verdulero de don Ramón.

– Si no hay problema dije yo.

Yo estaba todavía vestida sexi y bien maquillada y perfumada y cuando entro el verdulero lo noto y se quedó embobado mirándome.

Cuando voy a hablar con su asistente que era más joven que el para que me de las frutas del encargo que hizo mi novio yo me voy a la caja para pagar y ahí estaba Ramón. Lo describiré un poco el es de Bolivia bajito, bien morocho, orejas como de duende, tendría unos 56 años y tenía una barriga algo grande, siempre andaba desprolijo, transpirado por la humedad del local, sucio, con ropas rotas, tenía un bigote desarreglado y cabellos canosos desarreglados. En definitiva era un viejo verde que miraba los culos de las mujeres y no le importaba si estaba casadas, solteras de novio o si estaba el marido enfrente. Se había ganado la fama de un cerdo, un viejo asqueroso, un baboso. Era bien feo, y mi novio no quería que vaya allí sola pero lo tranquilice y bueno estoy donde estoy.

 

Cuando voy a la caja a pagar

R: hola Romi pero que bella estas hoy, porque estas tan sexi vestida ?

-Hola Ramón pasa que vengo de trabajar y mi novio me pidió si no retiraba el encargo.

R: ah si bueno ahí te lo alcanza mi asistente

 

Mientras buscaba la plata vi de reojo que sus ojos no paraban de mirarme la boca los pechos.

Cuando termino de pagar agarro la bolsa y como sabía que me miraba me aparto del mostrador y antes de salir hago que guardo la billetera en la cartera mientras le mostraba mi culo al baboso del verdulero, cosa que Ramón se deleitaba.

Y cuando lo veo y con una sonrisa para despedirme rápido lo note que miraba mi culo.

-Chau preciosa que bella que estas vestida me encanta su figura perfecta.

– jajaj muchas gracias Ramón.

 

Cuando salí dela verdularia un calor me invadió, una calentura. Por mi mente pensaba que pasaría si por fin ese viejo alzado podría tenerme ahora si quiero que me folle ese boboso feo.

Cuando llegue al departamento ese pensamiento se desvanecía y venía la culpa.

-Pero que estoy haciendo no debo y encima con ese verdulero que tiene la fama de viejo verde alzado.

 

Paso una semana más y sabía que debería ir a la verduleria ah hacer la compra semanal pero la verdad quería ir más días así que se me ocurrió voy a hacer que me olvide de comprar cosas así iría más días pero con disimulo ya que no quiero que mi novio sospeche.

 

Cuando llegue de trabajar fui directo a la verduleria, estaba vestida con unos leggins rojos, una botas de tacón negras y una remera mangas largas negra pegada al cuerpo.

Cuando entro a la verduleria siempre al final del día ya que no entraba mucha gente Ramón me vio y me lanzó un chiflido aprovechando que no había nadie dentro.

-Guapa.

Me grita.

Yo sonrio y me acerco al mostrador. Y mientras le coqueteaba y jugaba con mi pelo.

-que tal Ramón que anda aciendo.

R: nada acá fumándo un pucho que me muero del aburrimiento.

-ya veo, bueno vengo a hacer la compra semanal.

R: si, personalmente la atiendo yo espere un tantito.

Cuando se va para el fondo veo que a su asistente lo manda para el fondo a buscar vaya a saber que.

Yo hago que veobla fruta y la tanteo.

R: dígame que necesita.

– estaría buscando pepinos grandes, berenjenas y zanahorias y me lo quedo mirando.

R: vaya se ve que le gusta la verdura no?

– me encanta, mientras más grande mejor

Mientras le selecciono cual es la que quiero noto que Ramón estaba excitado porque noto como por debajo de su pantalón se le formaba un gran bulto y era un gran bulto.

Eso me calentó y quería tenerlo entre mis piernas así que mientras estaba detrás mío yo hacía que me agachaba para seleccióna las verduras que quería y me tiraba más para atrás.

R: de verdad que le gusta la verdura eh? Jaja

– pues si soy muy sana me gusta hacer deporte.

R: se nota

– porque lo dice?

R: porque tiene un cuerpazo tremendo y más como se viste me vuelve loco.

Nos quedamos mirándonos y mordiéndome el labio le digo:

– eh notado que siempre que vengo me mira el culo.

R: y si mami lo que daría por llenarte de leche.

– pero…sabe que tengo novio no?

R: y que importa, ese cornudo no sirve para nada yo soy un hombre de verdad.

Ambos nos miramos y nos mirábamos la boca hasta que me entra una llamada y me saca del transe aunque Ramón me seguía mirando.

Cuando corto la llamada:

– Ramón me tengo que ir vino mi novio y si me ve así y sabe que fui a la verduleria me mata.

Y cuando estoy saliendo me agarra del brazo y me lleva a un cuarto que tenía ahí nomas.

R: por favor Romi te deseo quiero hacerte mía.

– Ay Ramón nose.

De pronto de baja los pantalones y veo una verga gigante y me quedo embobada.

– Ay Ramón eso tiene ahí abajo?

Le colgaba una polla de 27 centímetros.

R: Romi mañana voy a cerrar más temprano venite al local y vas a ver que vas a disfrutar.

– Bueno esta bien pero un rapidito y listo

 

Mi corazón latía a full no me daba la cara para ver a mi novio que el muy tontos se creía todo lo que decía.

Así que a la tarde me puse del otro día le dije que tenia una reunión de trabajo y debería irme a las 4 de la tarde y no se a que hora llegaría.

 

A eso de las cuatro estaba lista y me puse una medias blancas con ligeros hasta los muslos, una falda marrón de gamusa y una remera sin mangas rosa.

Me perfume y me maquille como siempre aprovechando que no estaba mi novio.

Cuando camino a la verduleria veo que había gente y dude si entrar así que decidí pasar más tarde, pero escucho un chasquido y cuando veo era el asistente del verdulero que me llamaba.

– que haces?

Asistente: me dijo que te ingresara por la puerta trasera.

Yo sin descaro y entregada entro por un pasillo largo, la situación me calentaba porque una princesa como yo vestida como puta entrando en un pasillo feo lleno de fruta podrida.

Hasta que giramos a la izquierda y de ahí abre una puerta de hierro y cuando la abre veo que estaba el verdulero desnudo con un colchón sucio masturbandose.

Y luego el asistente cierra la puerta con llave y se va.

R: hola muñeca esta preciosa.

– MMM RAMON HACEME TUYA MIRA COMO ME VINE BIEN PUTA PARA VOS.

R: acá podes gritar porque estamos bien alejados amor.

 

Fui yo la que me tire al colchón y tome la iniciativa y me lance a chuparle la polla grande, hilos de saliva y jugos preseminales caían al colchón

– que jugosa que le tiene.

R: te gusta putita?

– si papi me encanta.

De pronto me la saco de la boca y nos besamos con lengua varios minitos mientras me aferraba a su cuerpo y el aprovechando eso mientras nos abrazabamos me la metió en la vagina.

– Ay Ramón pero que GRANDE QUE GRANDE AY AY AY.

Empezó con todo, rápido y duro mientras estábamos abrazados en el colchón mientras nos besamos con lengua, no paraba de morderme la boca.

Luego me la saco y cambiamos de posición, quería chuparme las tetas y se dio cuenta que tenia chupones.

R: ah mira la puta tmte gusta que te hagan chupones no? Zorra

– ay si dale chupame las tetas dale.

Mientras follabamos cara a cara y lo montaba a velocidad sentía como succionaba mis tetas, mordía mis pezones eso me encendió más de lo que estaba así que lo montaba más rápido y era yo la que me vine.

Con su verga ensartar me abrace a su espalda sudorosa y el tomo el ritmo otra vez.

– AY AY SI RAMON DALE QUE AGUANTE TENES.

Nose cuanto estuvimos así solo se que el asistente cerraba las persianas del local y nosotros seguíamos garchando como conejos.

Fallamos en todas las posiciones, en en cuatro contra la pared todo.

Hasta que vi la hora y debía irme porque tenía 5 llamadas perdidas.

Pero estaba tan excitada que no podía contestar.

Todavía no se había corrido y yo tenia que irme.

Amor tengo que irme.

Pronto me cambio de posición a misionero y sabía que me gustaba así y me enrosque mis piernas en su cintura y me dio muy fuerte y rápido.

-AH AH AH AH RAMON SI SI DALE MAS MAS VENITE FEO VENITE.

R: AHHHHH AHI VOY PEDAZO DE ZORRA AHHH.

Me aferre con mis manos a si cola y mientras el semen caliente entraba en mi vagina.

Nos besamos unos minutos.

Me limpie los restos de semen, me perfume un poco y me fui a casa.

Cuando entro estaba mi novio enojado porque no le contesté.

– Perdón amor es que no podía estaba en la reunión te acordas?

– si perdón es que me preocupe.

– Esta bien amor me voy a bañar y charlamos.

 

No podía creer que se había creeido lo que le dije estaba excitada de haber mentido a mi novio pero triste también otra vez la culpa me carcomia.

 

Así que estube dos semanas sin follar, me moría de ganas, de vestirme como puta y follar con alguien feo pero no podía por la culpa hasta que nuevamente todo cambio cuando mi jefa me dijo que tendría que despedirme por la crisis que afrontaba el país y no podía pagarme más.

Yo triste en casa era un peligro porque tenía a disposición la libertad de salir a la calle y hacer locuras.