La gorda apestosa del local
Me cogí a la apestosa encargada de un local por el culo y su olor me excitó.
Yo soy Axel, me presento, este es mi primer relato, soy medio llenito, cabello castaño y con un pene de 15 cm, piel blanca y ni tan delgado ni tan gordo.
Este es mi primer relato como ya dije, y quiero comenzar por el que más me encantó, y este fue cuando me cogí a la sucia encargada de un local por el culo.
Mi historia comienza un día que necesitaba comprar una USB, así que decidí ir a una tienda que ya conocía yo, pero sabía que siempre atendian hombres, nunca había visto mujeres en ese local, hasta ese día, llegué a la tienda y al entrar, mi mirada inmediatamente se fue hacia una parte.
En la entrada, estaba sentada una mujer madura, de unos 40 años aproximadamente, de piel blanca, cabello negro, gorda, con un enorme culo que se desparramaba sobre el banquito pequeño en el que estaba sentada, unas tetas enormes, cubierto todo en un pants negro, y vistiendo unos leggins negros que se pegaban con sus muslos carnosos, a simple vista se veía que no se había bañado, debido a que su cabello estaba despeinado, desarreglado y se veia hasta grasiento.
Al entrar a la tienda, pregunté al encargado en el mostrador, si tenía una memoria USB de tamaño pequeño, unos 16 GB aprox, el fue a buscarla a su bodega, asi que me puse a pendejear por la tienda, hasta que llegue cerca donde estaba la gorda, debido a que no paraba de mirarle el culo, ella pensó que buscaba algo asi que se levanto y me dijo «Buenos días, ¿en qué puedo ayudarle hoy?», con una voz suave y dulce, pero a la vez se notaba cansada, ¿Y quien no? trabajar en domingo debe dar mucha hueva.
Le respondi que ya me estaba atendiendo el de mostrador, entonces de los nervios al tener semejante mujer enfrente de mi, se me cayó mi cartera, al momento que ella se dió la vuelta y su culo quedó justo enfrente de mi nariz, el cual desprendía un olor a sudor mezclado con olor a culo y caca, mis sospechas eran ciertas, mi culona amiga, no se había bañado.
Pude oler su fuerte aroma a mujer madura, caca y sudor, lo que hizo que mi miembro comenzara a endurecerse dentro de mis pantalones.
Me levanté, y la señora se volteó de nuevo y me dijo »Aguas! si no quieres el dinero, damelo JAJAJA», yo solo nervioso y con la erección de mi verga, me reí, entonces me dijo »Aguanta, ya debe venir el muchacho con tu memoria, sino deja te busco en el mostrador a ver si la tienen, en eso la fui siguiendo. mientras veia sus enormes nalgas enfrente de mi
Llegando al mostrador, se subió a una escalera para buscar en el estante, su enorme culo se bamboleaba de un lado a otro, y sus leggins se ajustaban perfectamente a sus nalgas, los leggins se le transparentaban un poco, dejando ver un poco el calzón blanco que traia, yo le pregunté, »Como se llama disculpe?» y me dijo »Juliana, bueno, todos me dicen Juli, soy la encargada de aqui», para hacerle la platica, le dije »debe ser pesado trabajar domingo no?» y me dijo »Si, más en las mañanas, cuando ni un pito se para aqui», me reí y le dije »bueno, solo cierras y a descansar no?» ni creas, tengo que limpiar todo, los muchachos si se van a descansar, yo me quedo hasta tarde cerrando.
Entonces le dije »Que le parece si la ayudo?, digo, no tengo nada que hacer, es más, no le cobro», ella se sacó de onda al principio, pero aceptó, me pidió copia de mi identificación y me dijo que cerraba a las 5, eran las 2, en eso llegó el muchacho con mi memoria y me cobró
Ella asintió agradecida y me pasó su número de celular. «Muchas gracias por tu ayuda. Aquí tienes mi número, por si quieres contactarme para… bueno, para cualquier cosa».
Asi pasaron las horas y llegó el momento de cerrar, sabía que mi oportunidad podia estar ahí, si o si, Juli tenia que ser mia o por lo menos olerle las nalgas un rato.
En eso llegué al local, estaba cerrado, le marqué a Juli y me dijo »Ahorita te abro», al abrirme ya estaba con una camisa de tirantes, sudando y con los mismos leggins de hace rato, al llegar, me preguntó bien sacada de onda »Bueno, a ver dime, que es lo que quieres por ayudarme, es raro que alguien venga de la nada a querer ayudarme», yo me quedé frio y le dije la verdad.
Quizas no iba a aceptar pero era mejor a que pensara que era un ladrón, entonces le dije
»La verdad Juli… es que, me excitas mucho, me gustaste desde que te vi y solo quiero, que me dejes olerte el culo, ni siquiera sexo, quiero que me dejes poner mi nariz en tus nalgas y con eso yo te ayudo en lo que quieras»
Juli se quedó paralizada por un momento, mirándome con incredulidad. Luego soltó una carcajada. «¿En serio? ¿Solo quieres olerme el culo? Eso es lo más raro que me han pedido en mi vida.»
Yo asentí, sintiendo mi cara arder de vergüenza. «Sí, lo sé, suena muy extraño. Pero es la verdad.»
Juli me preguntó: »Y que harás cuando te lo deje oler?» yo con la excitación ya bastante grande, le dije que solo me iba a masturbar, Juli se quedó mirándome por unos segundos, como si estuviera considerando mi petición. Luego soltó un suspiro y dijo: «Bueno, supongo que no hay nada de malo en dejar que un hombre me huela el culo, si es lo que quieres. Pero no esperes nada más de mí, ¿entendido?»
Asentí rápidamente, sintiendo mi corazón latir con fuerza.
Juli me dijo: »Sientate», en eso me senté en una de las bancas que estaban, ella era más alta que yo, entonces comenzó a ponerse en posición, pero de la nada se detuvo y me dijo »Espera, estas seguro? no me he bañado en todo el día» Yo asentí con entusiasmo. «Sí, estoy seguro. No me importa si no te has bañado. De hecho, prefiero que no lo hagas. El olor a culo me excita aún más.»
Juli se quedó sorprendida por mi respuesta, pero luego asintió y volvió a ponerse en posición, ella se agachaba y su culo poco a poco rozaba mi cara, hasta que finalmente, toda su enorme cola estaba en mi cara, yo me saque mi pene que ya me dolía por la excitación y comencé a aspirar su aroma a culo y sudor
Juli se quedó inmóvil mientras yo enterraba mi cara en sus nalgas, inhalando profundamente su aroma fuerte, olia a caca y a sudor, combinado con olor a vagina. Ella soltó un pequeño gemido cada vez que aspiraba, al sentir mi cálida respiración. «Wow, eso es muy raro» murmuró ella. «¿Te gusta, verdad?»
«Mmmph» gruñí afirmativamente contra su trasero, dejando que mi nariz se hundiera en su enorme culo.
Ella yo creo que empezó a excitarse porque soltaba gemidos pequeños, hasta que me preguntó »ya vas a venirte?», yo le dije »Ya casi», en eso me dijo »Espera, todavia no te vengas, digo, si ya estamos aqui es mejor que lo huelas completo», en eso se comenzó a bajar el pantalón lentamente, revelando poco a poco su enorme trasero, todo blanco, con pequeñas venas, cuando finalmente liberó su culo completo, yo estaba hipnotizado por la visión de sus carnosas nalgas desnudas enfrente de mi, no me lo podía creer, le iba a oler el culo a una madura.
«Bien, ahora sí… inhala todo lo que puedas» dijo juli abriendose el culo ella misma, como un perro en celo, enterré mi rostro entre sus grandes nalgas abiertas, aspirando profundamente su aroma a culo y sudor, aproveché el meterme con su piel desnuda, que por el mismo acercamiento, le daba pequeños lamidos a su vagina, ella gemia excitada hasta que se bajó todo el pantalón y me dijo »bueno, si ya vas a olerme el culo, pues hazme un trabajo completo no?»
Ella se volteó, dejandome ver su coño peludo, estaba repleto de vello, de una mujer madura, me lancé sobre su vagina, enterrando mi rostro entre sus muslos, lamí y chupé su clítoris hinchado, mientras ella gemía y se retorcía de placer, »asi hijo de puta» Metí mi lengua profundamente en su vagina, mientras ella me apretaba la cabeza hacia adentro, una y otra vez, follandome la boca con su panocha toda sucia, sabia salada y olia a orines, pero para mi, era la gloria.
Me quedé atónito ante su repentina propuesta. No podía creer que la mujer que acababa de conocer quisiera tener sexo conmigo. Pero mi erección palpitante me decía que no debía rechazar esta oportunidad. «Sí, claro que quiero cogerte, Juli. Quiero enterrar mi verga dura en tu coño peludo y hacerte gritar de placer, pero primero dejame besarte esas tetas sudadas»
Juli se inclinó hacia mí, ofreciéndome sus tetas sudorosas, blancas, venosas y con pezones pequeños y rosas «Adelante, chúpalas y bésalas todo lo que quieras. Son todas para ti.»
Sin dudarlo, agarré sus grandes pechos con ambas manos y enterré mi rostro entre ellos, inhalando profundamente su aroma a sudor. Lamí y chupé sus pezones duros como piedras, haciéndola gemir de placer, ella me los refregaba mientras excitada por el momento comezaba a decirme »Asi, chupalas, mami te hara sentir bien cabron, eso querias no? cogerte a una señora que viste en la calle? querias olerme la cola cabrón?»
Al escuchar esas palabras tan provocativas saliendo de su boca, no pude contenerme más. Con un movimiento rápido, me puse de pie y comencé a desnudarme completamente. «Sí, quería oler tu culo, Juli. Y ahora quiero hundirme profundamente en tu coño mojado. Quiero hacerte gritar de placer con mi verga.»,
En eso ya desnudos ambos comenzamos a besarnos y Juli recalcando »Querias olerme la cola verdad?» mientras me besaba, me separaba una y otra vez de sus labios, Juli continuó sus provocaciones: «Así es, mami te hará sentir muy bien. Tú querías oler mi culo de puta en la calle, ¿no es así, cabrón? Pues ahora tendrás lo que pediste. Veamos cómo reaccionas ante una hembra de verdad. Mira bien este coño peludo, porque pronto estará goteando mis jugos mientras me follas como el cerdo hambriento que eres»
Juli me sentó en el suelo mientras ella me besaba desde el cuello hasta antes de llegar a mi verga yo le decia, »si mami, ahora sera mejor que comas mi verga como la zorra asquerosa que eres», en eso Juli dijo »tengo un mejor plan», mientras que estaba acostado en el suelo, juli se sentó en mi cara haciendo la pose del 69, mientras me provocaba mas y mas con lo que decia al mismo tiempo que me chupaba la verga
«Voy a chupar esta deliciosa verga hasta que te corras en mi garganta, y mientras tanto, quiero que entierres tu cara en mi culo, quiero que huelas cada parte de mi ano y me lamas el coño como un buen perrito. ¿Te parece bien, papi?»
Sin esperar respuesta, Juli bajó la cabeza y envolvió sus labios alrededor de la punta de mi verga, chupando una y otra vez, yo estaba en extasis total, Juli estaba loca, estaba cachonda y como perra en celo, su sudor empezaba a correr por todo su cuerpo, mientras yo disfrutaba de chuparle el ano a una chica tan sucia
Asi estuvimos un buen rato, hasta que ella se quitó de mi cara y me dijo, »suficiente culo para ti, es hora de que me demuestres si vale la pena repetirse, si me coges bien, dejare que vengas cuando quieras a olerme la cola y te daré mis calzones que ocupe hoy»
«Bueno, me parece justo», le respondí. «Pero antes de comenzar, ¿estas casada o algo?» y me dijo:
»Si, bueno, mi esposo no es como que ya le interese el sexo, y siempre era lo mismo, coger y ya, pero ya no tenia sentido, hasta que llegó alguien con un fetiche particular que me dejó sacar lo puta que hay en mi, tu tienes novia?»
Le respondí »no, tengo una amiga con la que tengo estas aventuras igual, pero es el mismo caso que tu, ella es muy limpia, correcta y recatada, lo que le quita lo interesante al sexo»
Juli asintió con una sonrisa traviesa. «Entonces estamos en el mismo barco, cariño, somos 2 calenturientos que nuestras parejas no saben que es coger. Pero ahora estamos aquí, y podemos saciar nuestros deseos sucios el uno con el otro. ¿Qué dices, papi? comence a besarla mientras agarraba sus pechos y aprovechaba para chuparlos.
Juli comenzó a meterse mi verga en su coño peludo, comenzando a gemir de placer, varias gotas de sudor me caian al rostro, mientras ella me daba sentones, ella gemia cada vez mas rico, hasta que cambio de posición dandome la espalda, mientras veia como su gordo culo rebotaba en mi pelvis, el olor era profundo en todo el local, mareaba de tanto olor a culo y sudor que desprendiamos Juli continuó montándome con fuerza, sus enormes nalgas rebotando contra mis muslos con cada embestida. El sonido obsceno de piel contra piel llenaba el aire, junto con nuestros gemidos y gruñidos de placer. Ella se inclinó hacia adelante, apoyando sus manos en mis piernas para tener más equilibrio mientras me follaba.
«Así, papi, dame esa verga grande y dura.»
Yo le decia »Eso es puta asquerosa, te gusta como te follo? eso es, usa tu gran y apestoso culo, me encanta que seas tan sucia»
Juli gemia pero me decía: »Asi papi, te prometo que cuando vengas, me encontraras mas mugrosa que de costumbre para que chupes bien mi apestoso ano»
En eso la puse de pie y nos fuimos al mostrador donde la arrincone y la puse en posición de gata, mientras volvia a meter mi pene en su coño «Ah, sí, eso es, dame esa verga grande y gruesa, papi. Cógeme más duro», gemía Juli mientras yo le daba embestidas profundas desde atrás, mi pelvis chocando contra sus grandes nalgas.
Su coño apestoso me envolvía deliciosamente, ordeñando cada centímetro de mi miembro hinchado. El aire estaba cargado de nuestros olores corporales y fluidos sexuales.
Finalmente, Juli me dijo algo que sin duda me excitó: »Ya estuvo bueno que solo me des por la panocha, quiero sentirte en mi cola, follame ahora el culo, ese lugar es solo para mi esposo, pero tu le daras mejor uso»
Asi que la acomodé en posición hacia abajo, chupe su culo de nuevo para lubricarla, el cual a pesar de las lamidas, seguia apestando y antes de meterla me la mamó para que se lubricara mas, poco a poco abri su culo para follarla
Asi estuve bombeandola una y otra vez, el aire ya era nauseabundo, el olor de nuestra saliva, semen, culo, coño y sudor, inundaba toda la tienda, Julia gemia y gritaba de placer y ambos sudando dejamos todo el mostrador mojado por nuestro sudor, hasta que le dije a Juli »Me vengo mi amor, me vengo» Juli apretó mas su culo y terminé descargando todo adentro de ella.
En eso el semen que regué era impresionante, jamas recuerdo haber sacado tanto, finalmente Juli limpió mi verga con su boca hasta bromeó diciendo »sabe a culo tu verga jajaja» finalmente nos dimos un beso apasionado y aunque hubiera quedado acostado con ella, tenia que irme a mi casa, Juli se levanto y se vistió al igual que yo, se puso los mismos leggins y la camisa pero su calzón no se lo puso
Juli se limpió con sus leggings el semen que aún tenía en sus muslos. Luego se sentó en la esquina del mostrador, dejándose caer para recuperar el aliento, agarró sus calzones mientras yo me vestía, los metió en una bolsa y me dijo »Lo prometido es deuda cabrón, te espero cuando quieras aquí, para que me vuelvas a oler la cola»
Finalmente salí rumbo a mi casa, aun recordando que Juli me habia dado su numero de celular, mire mi reloj eran las 8:00, asi que llegué a mi casa y di un baño, volvi a coger con Juli y una amiga suya pero eso será otro cuento para otro dia.
Si tienen el mismo fetiche que yo: no duden en contactarme por insta: Luci_fer_rlpx
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