La niñera se cogió a mi hijo, antes que yo lo haga 2

Confronto a la niñera y su novia pero no puedo evitar ser su esclava sexual junto a mi pequeño hijo. .
este es el link de la primera parte https://sexosintabues30.com/relatos-eroticos/bisexual/la-ninera-se-cogio-a-mi-hijo-antes-que-yo-lo-haga/

Eran las 11 cuando llegó gala, me sorprendí por qué venía otra vez con su novia, yo no sabía qué decir, ni cómo encarar la situación, en cambio ellas estaban muy relajadas y fueron ellas quienes me encararon a mi, primero gala me dijo que estaba al tanto de las cosas que hago con Cristian, que incluso tiene fotos y videos que copio de la cámara de seguridad.

Yo muy indignada le dije que lo que me molestó no es lo que pasó, sino que ni siquiera tengan el respeto de pedir permiso, yo quería que la primera concha que penetre mi bebé fuera la mía y resulta que entre las dos me robaron ese privilegio.

Ester dijo calmandome que eso para los niños no es tan importante, que no me enoje por niñedades, que su hijo ya pasó por lo mismo y el ni se acuerda quien fue la primera, lo bueno es que el nene la pasé bien y disfrute dándonos placer a nosotras tres, se pararon y se me acercaron cómo lobos a una presa, una por cada lado, gala me encajo un chupón riquísimo y Ester me empezó a amasar las tetas y las nalgas.

En un momento reaccione y me las saque de encima, a mi las minas no me gustan les recrimine, gala me tomo con fuerza y me sentó en sus piernas, me explico lo que le hacía en la cola a mi bebé cuando lo sentaba en su regazo, y ahora que lo recuerdo él siempre quería sentarse desnudo sobre ella, el índice de gala se movía en mi recto dándome escalofríos y haciendo que se me moje la concha, por debajo de mi pollera de secretaria, Ester metió la mano en su cartera y busco sus bolas chinas, para meterla en mi concha mientras me besaba, ellas tenían el control total de mi y mis acciones, gala metió dos dedos en la vagina de Ester, los metió en mi boca y después hizo lo mismo con la suya para que saboree a las dos, su sabor me desagrado por lo ácido pero me calentó su perversa acción, me hicieron besarlas a cada una y luego las 3 juntas prácticamente nos lavamos la cara, yo volaba de calentura pero gala me mandó literalmente a buscar a Cristian al colegio, debía hacerlo con las bolas chinas adentro todo el tiempo, mientras ellas me iban a preparar una tortilla, la cual tenía la obligación de comer cuando vuelva.

Yo había usado bolas chinas antes pero no me parecieron gran cosa, pero el hecho de estar tan caliente me estaba volviendo loca, sentía como se rozaban dentro mío y cada pasó me acercaba más al orgasmo, camine dos cuadras hasta el colegio, una de las madres no paraba de hablar, pero yo no entendía nada, cuando mi hijo salió del Cole y me saludo con un piquito como siempre lo hace, sentí como una contracción que me recorrió desde la concha hasta la espalda, casi me caigo y me tuve que agarrar de un padre que ya se estaba retirando, le pedí disculpas con mi rostro enrojecido y emprendí el regreso a toda velocidad, sentía que mis muslos se iban empapando de un líquido viscoso, pero por la cantidad creí que también me había orinado un poco, casi me chorreaba a los gemelos.

Cuando pude cerrar la puerta y ahí nomás me agache, y sentí otra descarga, apreté mi vagina y corrí mi tanga para dejar caer esas esferas metalizadas, se escuchaban gemidos en mi habitación, gala y Ester estaban desnudas en mi cama, estaban frente a frente y con sus piernas entrelazadas, un olor a pescado me invadió, wow estás mujeres apestan a sexo.

Gala saludo a mi bebé con un beso de lengua y otro a Ester, me exigieron que lleve una cuchara, con ella juntaron el flujo mezclado de las dos y me obligaron a comerlo, su flujo era blanco y espeso, suave y salado , con olorcito a pescado, yo solo les dije que la próxima vez, la condición era que sean pulcras, conmigo y con mi hijo, gala se rió y me dijo que todo lo contrario, yo le pertenecía al igual que Ester y ella haría de mí lo que quiera, se paró en la cama y me empezó a resfregar la concha en la cara, estaba muy peluda y eso me saco un poco de onda, mi nene se terminó de desvestir y gala lo tomó y le beso todo el cuerpo, con él era más suave que conmigo y eso me tranquilizó, Ester me tomo a mi y me acariciaba a medida que me desnudaba, cuando me saco la ropa interior empapada se la dió a su novia y ella la chupaba junto con mi niño, Ester me estaba dando una chupada que me hacía ver las estrellas, mi bebé se puso tras de Ester y le empezó a lamer el orto gordo y redondo, a mi me tocó lamer el flaquito de gala, pero me sorprendió lo cochina que estaba, cómo un culo tan flaquito podía apestar tanto.

Gala le pidió a mi bebé que me garche, pero él primero quiso comerme la cola, mi bebé tenía las mismas perversiones que ellas, después se acomodo sobre mi y apuntó su pito a mi vagina, tenía a las chicas levantándome las piernas para que mi hijo me haga el amor y también estaban cada una prendida de una teta, lo que me hacía gozar de esa pija como si fuera un falo enorme, Cristian estuvo un rato dándome amor y gala le dijo que lo iba a hacer acabar le metió un dedo mojado en su flujo en la cola y enseguida acabó dentro mío y quedó exhausto sobre mi y yo súper complacida.

Recosté a un lado a mi bebé y Gala se sumergió entre mis piernas para absorber toda la humedad que aún tenía, ella era incluso más hábil que su novia con la lengua.

Ahora que el nene se durmió, vos y Ester van a ser mis esclabas nos dijo muy segura, se puso un arnés con el dildo más grande que encontró en mi placard, para cogernos un rato a cada una, el placer de gala estaba en humillar, y mi condición no hizo más que darle idea de cómo rebajarme más, me obligaba a lamer el dildo después de sacarlo de la concha de Ester, yo aunque consciente de que me podía rehusar cuando quiera, no lo hacía, no tenía la voluntad de hacerlo, nose si era miedo a perder a mi hijo o la excitación de que me usará a su antojo, me metió su pie en la boca y lo lamí con devoción, me hizo lamer el culo a Ester, gala tomo un jarro en el que llevo agua para tomar en la noche y orino adentro, y mirándome se seco la concha con mi almohada, y lo más loco es que a pesar de haber lavado la funda, cuando me acuesto siempre recuerdo lo que hizo y persivo su aroma al que me hizo adicta, creo que me engualicho la sucia, después me hicieron acabar con espasmos incontrolables mojando la cama con mi humedad, ellas se pararon y me pidieron permiso para usar mi bañera, lo hicieron sarcásticamente, y se fueron, yo escuchaba como gemían cómo cerdas pero el agua estaba cerrada, mi bebé se despertó y nos fuimos juntos a ver lo que hacían.

Nos sentamos sobre inodoro a mirar asombrados, esto iba más allá de cualquier perverso pensamiento, gala no paraba de meter dedos en Ester y al sacarlos sucios se lo untaban en todo su cuerpo, para después lamer esa zona, todo apestaba, Cristian había traído el juguete que gala le metió, es uno color piel, tendrá 10 cm de largo y 2 o 3 de ancho, me pidió que se lo meta mientras mirábamos, me exite tanto que me puse el juguete sobre mi pubis y senté a mi bebé en él para cogerlo con fuerza, el gemia bien rico hasta que me dijo que quería acabar y no hice más que meterme su penecito en mi boca, le salió un poco de líquido transparente y después me masturbe yo con su juguete hasta acabar, nos metimos los cuatro a la bañera para lavar nuestros cuerpos entre los cuatro, sin duda una experiencia inolvidable, lo que me dejó pensando que a mi bebé no solo le gustaban las guarrerias de gala sino que también le gusta más que le den en la colita.

Nos tomamos un vino en el living, aclaramos algunas cosas como que a mí lo sucio no me va pero si quieren guarradas yo les doy guarradas, y que a mí Cristian lo dejen ser, que el decida que le guste