Las ricas chanclas y tacones de la profesora Adriana
Historia de la vida real, donde pude disfrutar muchas chanclas y tacones de una profesora .
Hoy quiero compartir una historia que viví muy rico hace años, y fue con las chanclas y tacones de una profesora de la primaria, su nombre es Andriana, una profesora con unos pies muy ricos, hermosos que siempre me traían loco, y aunque nunca pude disfrutar sus pies, si pude saber a que olían y sabían por sus ricas chanclas y tacones que usaba.
Fue hace mucho tiempo, aún estaba en el colegio, estaba cursando octavo grado creo, de ahí hasta graduarme le culie rico sus sandalias y tacones, ella siempre iba de tacones, pero en su salón de clase dejaba siempre unas sandalias con las que se mantenía en el colegio, durante toda la jornada, las usaba para descansar sus pies de los tacones, cuando vi que dejaba sus sandalias empecé a estudiar la manera de ingresar a su salón (pues ella no me daba clase) y poder pasar un momento rico con sus sandalias, así que constantemente miraba desde lejos cuando salía del salón, para donde se iba, que tanto se demoraba, si dejaba el salón abierto, ajustado, cuanto demoraba la señora que le hacia el aseo, cuanto demoraba en ir al baño a lavar las traperas y volver con agua, así me demore unos 20 días más o menos, y ya teniendo la información, en una de esas ingrese a su salón, pues ella se había ido para su casa y la señora del aseo demoraba un poco cuando salia para el baño, así que ingrese de manera rápida y pude tener por primera vez sus sandalias, las olí, lamí y llene de semen rápidamente, eso si, y no miento que con muchos nervios de ser descubierto, al salir de hacerle el amor a esas sandalias, sentí el deseo y la necesidad de seguirlo haciendo, el olor, y sabor era muy rico, demasiado, quería mas y mas, así que cambie la estrategia, y empece a hablarle a la profe, me hice amigo de ella, y así fue mucho mas fácil, con el tiempo ella fue cambiando de sandalias, y dejaba unas diferentes, con la confianza podía ingresar a su salón sin problema, le dacia que si podía hacer tareas y me dejaba el salón abierto después de que la señora le hiciera aseo, al irse las 2, tenia el salón y las sandalias para mi, me las culeaba con mucho gusto, las lamia muy rico, las chupaba y les hacia el amor con calma, en el salón pude llenar de semen tacones, sandalias, fue muy rica esa experiencia, recuerdo que en una ocasión hicieron un acto cultural en el colegio y las madres de familia de ese salón realizaron una actividad como de dramatizar algo y dejaron sus vestuarios en el salón, ese día me cogí sandalias de la profe y de muchas madres de familia, uff, me las culie muy rico, fue una orgía demasiada rica, pero no olvido las de la profe, usaba unas sandalias negras, altas, donde se nota la marca de los pies, muy rica, una vez le invente que teníamos que hacer una obra de teatro y que necesitábamos unas sandalias así, le dije que me las prestara y por la confianza no dudo, me las leve para mi casa y allá les hice el amor, me vine varias veces en ella….. esa época fue tan genial que aun sueño ingresando a su salón a llenar de semen sus sandalias, marco mucho mi adolescencia,, y tengo ganas de decirle a ella que me gustan sus pies, y decirle que me deje chupar sus pies, pero no se, aun no me decido, me da algo de miedo, ella ya debe tener unos 52 años, tiene esposo,, entonces no se si hacerle jeje,
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