Le bese los pies a mi maestra
Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por landon127.
Me llamo Saul y esta es el relato de cómo bese los pies de una de mis maestras.
Estudie medicina en la ciudad de México y para mi internado tuve que realizarlo en la ciudad de León.
Estando ahí todo el año transcurrió con normalidad, pero en mis últimos dos meses conocí a una dra que me daría clases hermosa, creo que de unos 35 años, de muy buen cuerpo, piernas preciosas y sobre todo unos pies muy hermosos,
Siempre vestía de manera muy sexy con mini faldas, jeens ajustados y nunca faltaban tacones abiertos, sandalias, con los dedos pintados de acuerdo a la ropa o zapatos.
Siempre en clase la veía y me encantaba admirar esos hermosos pies, fantasear con ella y solo deseaba que llegara el día en que me tocara rotar en su consultorio para admirarla por mas tiempo.
Finalmente llego ese dia pero no sabia como abordarla ni como seria ella en persona.
Le pregunte a uno de mis amigo con los que compartía casa acerca de ella (el ya había rotado con ella) me dijo que era muy agradable y que por lo guapa que es todos siempre le hacían cumplidos y cosas asi, todo mundo simpre se la quería ligar, y que nunca fue grosera o creida a pesar de eso.
Los primeros días que estuve con ella solo podía mirar que llevaba botas porque hacia mucho frio e iba muy abrigada, para mi fortuna al tercer dia el clima mejoro mucho y volvió a la vestimenta anterior, ese dia llevaba unas sandalias las cuales tenían un orificio en forma de anillo para el primer dedo con las uñas bien pintadas de color rosa, durante mucho tiempo solo veía sus pies y solo fantaseaba pero no hacia nada al respecto, de la nada hace un movimiento con la silla y da un ligero golpe en su pie y se queja, inmediatamente me agacho acaricio su pie y pregunto si esta bien sin dejar de tocarlo, ella asiente y me deja seguir haciéndolo por unos 10 segundos mas y escuchamos que pasara un paciente y regreso a mi silla, después de tres pacientes mas le pregunto que como sigue, eleva un poco su pie y me lo muestra (mi silla era muy bajita y la suya mas alta) yo lo acaricio un poco y ella sonríe
Y lo deja en el piso nuevamente, ella me dice que me lave las manos porque le estuve agarrando los pies y le respondo que no, eso no tiene nada de malo, ya con mas confianza tomo su pie y lo pongo en mi rodilla, le digo que he tocado tantos pies con enfermedades y con mal olor por las enfermedades que el de ella es muy bonito y que hasta podría comer de ellos, al terminar de decir esto bajo un poco la cabeza y le doy un beso en el pie, ella solo me sonríe, dice que esta bien y retira su pie.
Ese dia al salir no cabia en mi de la felicidad y excitación llegue a la casa y me masturbe solo pensando en eso.
Los siguientes días nos mandábamos mensajes y cada que nos veíamos al saludarnos de beso nos abrazábamos y besábamos en la comisura de los labios pero no pasaba de ahí y no me quitaba de la cabeza que quería volver a besar sus pies.
Entonces se acercaron los últimos días de estar con ella en su consultorio y también mis últimos días en la ciudad, por lo que decidi hacerle un regalo y asi poder acercarme a sus pies, le mande a hacer una tobillera de plata y compre una crema para sus pies.
Ya decidido el ultimo dia espere a que se fuera el ultimo paciente para que no hubiera interrupciones, le dije que le tenia dos regalos pero que quería que cerrara los ojo, ella lo hizo y al tomar su pie me dijo que por favor no le fuera a quitar su zapatilla porque ya las había traido puestas todo el dia (este dia usaba unas altas, cerradas color verde) a lo que le dije que no se las quitaría y puse su pie en mi rodilla, le puse la tobillera, abrió los ojos y me dijo que le gusto mucho y se veía feliz.
Luego le dije que le tenia otro regalo pero que si necesitaba quitarle el zapato, al tiempo que lo decía se lo iba quitando, saque la crema que compre comencé a acariciarle y masajearle ese pie, ella me decía que le daba pena pero me permitía seguir haciéndolo ya cuando la vi mas relajada le daba besos en su planta y dorso del pie aunque ya solo olía al perfume de la crema, ella me dijo que ya porque alguien podría entrar y le dije esta bien pero deje igual masajeo su otro pie, ella asiente y me dice que ella se quita esta vez el zapato y pude ver casi en cámara lenta como ella se lo retiraba y me lo ponía en las manos, para poder tener mi fantasía completa me inque y ella al no poder dejar su pie en mi rodilla y no tener sus dos zapatos, el que ya había masajeado lo puso en mi hombro mientras que el otro recién salido de su zapato lo primero que hice fue besarlo todo, talon, planta, dorso, dedo por dedo asi sin aroma a crema solo ese delicioso olor de ella, me sentí tan bien incado ante ella, con sus pies en mis manos y boca mientras ella se encontraba en su gran silla, era como estar postrado a los pies de una diosa, después cuando me dijo que ya era tarde tomamos papel para quitar el exceso de crema y ella lo hacia en uno de sus pies mientra que yo incado lo hacia en el otro, recibe una llamada telefónica y era su esposo que ya iba a pasar por ella a recogerla, se pone sus zapatos la veo, le digo que es mi ultimo dia en el hospital y la ciudad, me ve , me abraza y al estar abrazados nos vemos nos damos un delicioso beso, yo ya estoy super erecto y acaricio sus piernas y nalgas, ella me agarra el pene, me vuelve a ver y solo nos volvemos a besar, salimos del consultorio salgo con ella, me da un beso en la mejilla y se sube al auto que la esperaba.
Podría decirles que me la cogí de muchas maneras pero seria mentirles y solo quiero contar mi experiencia real, espero les guste y pronto les platicare otras historias, de otras experiencias, pero esta experiencia es la que mas me gusta.
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