LENCERIA QUE RICO

Relato publicado originalmente en SexoSinTabues.com por Anonimo.
Hola aquí estoy relatandoles como empezó mi pasión por la lencería, todo comienza un día que llegué de trabajar estaba lloviendo copiosamente por lo tanto llegué empapado a la casa, me quité laropa mojada, estaba haciendo mucho frío y no tenía nada a mano pués mi mujer no se encontraba y Ella tenía las llaves del ropero, no me tocó mas que ponerme un camisón que encontré en le baño, era un camisón en satín color morado, les cuento que me sentí muy bien, su suavidad y comodidad me fascinó, me recosté y me quedé dromido, cuando mi mujer llegó me encontró con su camisón puesto y me dijo: que te pasa? estas volviendo travesti o que? yo le expliqué el por que a lo que Ella aceptó.

Ya en la noche cuando veíamos televisión; me dijo sabes: me he quedado pensando en lo de esta tarde, me gustaría volver a verte con mi camisón pero sin nada abajo, yo le dije: mi amor si es tu deseo lo hago, te cuento que su suavidad me encanta, asi lo hice, Ella se quedó mirandome y me dijo en verdad te vez muy sexi, empezó a besarme y acariciarme la verga, yo también empecé a acariciarla, nos fuimos calentando, de pronto me dijo quiero que te pongas una tanga, ponte luna morada paa que te haga juego con el camisón, así lo hice, Ella se emocionó mucho, tanto que me dijo papi asi te vez muy hermoso quiero que te cambies y te pongas un bayby-doll a ver como te vez, les cuento que yo estaba superfascinado me encantaba estar con esa ropa, me coloqué un baby-doll amarillo muy transparente, ahí fué la de troya, se emocionó tanto que empezó a masturbarse como una loca, me bajó los panties y em pezó a darme una mamada de padre y señor mío, nos colocamos en un sesenta y nueve, así en esa posición empezó a meterme un dedo por el culo, nunca lo había hecho y ami me encantó, poco a poco fué dilatando mi ano hasta que me metió dos dedos, nunca había sentido una emoción tan grande, tanto que me desarrollé en su boca, Ella a sentir mi chorro también soltó un orgasmo que me inundó la boca, me supo a leche.

Como estabamos en la sala de casa nos fuimos a la habitación, mientras descansabamos, me dijo que le había encantado verme con su ropa íntima, que como me parecía si yo cada que estuviera en casa me colocaba sus piyamas, yo le repondí que por parte mía no habría ningún problema pués también me había gustado.

Al otro día que llegué del trabajo, me había alistado un camisón largho color verde manzana muy traslúcido y unos panties color amarillo, me bañé y me puse esas cositas, que cosa tan rica me sentía muy feliz, no contenta me dijo a ti te falta algo: sacó un brassier también amarillo y me dijo póntelo, rellenó las copas con unas bolas de icopor y dijo ahora si estas bien sexi.

Así empezó mi fetiche por la lencería les seguiré contando mi historia por es mas bien larga, ya que todo esto termina en transexualismo.

Fetichista arrecho