Los orígenes de mi masturbacion
Hola que tal espero les guste, esta será una primera parte, ojalá esperen con ansias la segunda parte.
Bueno, empecemos por relatarles donde comenzó todo, no sin antes aclararle que en la actualidad disfruto mucho de masturbarme y esta será una historia algo larga, espero les sea de su agrado y se tomen su tiempo de leer como me gustó masturbarme .
mi despertar sexual inconscientemente tuvo comienzo aproximadamente cuando tenia 8 años, habia una caricatura , no se si la conocerán, pero es la de los pequeños «TinyToons», si no mal recuerdo eran los hijos de los Looney Toons, pero bueno en esa caricatura hubo una escena en donde se encuentran dos conejos hermano y hermana y justo en esa escena el hermano le da un beso apasionado a la que se supone es su hermana.
En ese momento no comprendi que sentia, pero era una especie de cosquilleo, asi que esa escena quedó muy marcada en mi, tanto, que ya después yo jugaba a que era el conejo y se la pasaba besuqueandose con su hermana, aunque no comprendía disfrutaba el momento.
Después de eso, encontre por casualidad un programa a mediados del 2005 en National Geographic llamado «Sexo Salvaje», era un programa con una narración que te atrapa donde te mostraban como tenían sexos las diferentes especies de animales, así que nunca me perdí ningún capítulo, cada vez que veia ese programa y al ver a los animales teniendo sexo, sentía como me provocaban esas pequeñas erecciones duraderas hasta que terminaba el capitulo, recuero que, no comprendía que sentía al presenciar el sexo, como si mi pené si supiera de que se trataba.
Hasta esos momentos por mas que mi miembro estuviera duro y palpitando nunca tuve la intención de masturbarme, pues no conocía tal accion, pensaba que el único placer que iba sentir cuando estuviera con una mujer y se lo metiera.
Si no fue hasta después de unos tres años de tanto ver y ver morbosidades qué se encontraba por doquier en mi día a día y que me lo ponía más tieso qué pan de tres días pero yo sin saber que hacer despues, hasta que un día sucedió por fin sucedió, ya tenia la edad de 11 años, imagínense aguantando tremenda presión por casi tres años sintiendo como se me erectaba y palpitaba.
Ese día lo recuerdo muy bien, eran alrededor de la media noche, era una noche con una lluvia tranquila que arrullaba al estar durmiendo, en ese entonces recuerdo que estaba soñando y exactamente con nadamas que con las Vaqueritas de Dallas, el equipo de fútbol americano, esas hermosas mujeres con faldas cortas, sombreros pompones y bailando de una forma tan sexy, tan caliente me puso ese sueño que inconcientemente me estaba frotando ya mi miembro y mientras yo soñaba mujeres tan sexys bailando me, me frotab y frotaba y frotaba, hasta que bote el gran chorro de leche mojando mi short.
En ese momento sentí como me moje por completo la ropa despertando muy asustado, fue cuando sin hacer ruido lo más rápido posible me dirigí al baño, ya que mis padres se encontraban durmiendo y lo menos que quería era que se levantaran y que quisieran saber que pasoaba, sentí mucha vergüenza al ver mi short todo mojado pues yo creía que me habia orinado encima, pero ese sueño solo fue el comienzo.
Cuando cumplo los 12 años encontrándome en la escuela secundaria, el momento donde las hormonas comienzan a manifestarse a todo lo que dan, después de aquel sueño húmedo suceso que me hubiera encantado disfrutar, de antemano cabe mencionar que siempre fui de esos niños aplicados a los que les hacen bullyng los chicos pupolares, asi que ese intelecto me llevo guiado de la curiosidad para resolver mis dudas.
Como me daba vergüenza preguntarle a mis padres, a un maestro o cualquier adulto, yo solo comencé mi indagación sobre la masturbacion una vez haber recibido la clase de una maestra de biología con un trasero enorme.
Asi que ahi estaba yo, leyendo libros, articulos, forums, paginas porno, para llevar a cabo aquel acto, pero esta vez presenciar consientemente ese placer y esa sensación, pues aquella vez solo me lleno de preocupación y miedo.
Y asi se dio, ese día tan esperado llego, llegue temprano de la escuela y no había nadie en casa, asi que me cambie lo mas rapido que pude y a meterme al baño, segun mis investigaciones pues ya sea necesitaba un video porno, pero en esos tiempos los teléfonos no eran tan comunes para jóvenes de mi edad y las revistas eroticas no me podian ver comprando una por que todo mundo me conocia y seguramente le dirian mi mamá.
Y pues hice lo que todos hicimos alguna vez de muy jóvenes, usar la imaginación y que mejor que imaginar tener sexo con las que en esos tiempos eran las niñas mas guapas de toda la generación.
Asi fue comenzo la faena, estaba imaginandome teniendo sexo con las chicas mas hermosas de mi generación de secundaria, obviamente primero las mas guapas del a, después del b y asi sucesivamente.
Frotaba mi miembro y en cuestión de segundos ya se encontraba duro palpitando, todo iba bien, sentia coml el calor se me subia al rostro y comenzaba a exhalar ese aire caliente cuando estas muy prendido.
Parecia que iba a concluir en ese momento con éxito mi placer, hasta que escuche como abrieron la puerta de la casa y escuche la voz de mi mamá mientras ella entraba preguntando si ya habíamos llegado.
Estaba indeciso si responderle o no a mi madre, pero como ladron apuntó de ser descubierto con las manos en la masa, solo opte por quedarme callado y esperar a que no se asomora al baño, un dato muy importante es que el baño de la casa, estaba entre la habitación de mi madre y la mia.
Estaba retractandome de continuar en mi mision, estaba con el miembro punzando, pero sabia no queria ser descubierto por mi madre, estaba a punto de levantame de ese inodoro, subir mis pantalones y hacer como que no lahabia escuchado y entrar a mi cuarto, peor solo hubo una cosa que me mantuvo ahi, un gemido.
Asi es mi madre estaba gimiendo en su cuarto, asi que no era el único que tenia planeado una cita consigo mismo, los gemidos se escuchaban claramente y cada uno me daba un escaofrio, mi moral me decia que estaba mal masturbarte escuchado a tu mamá gemir, pero los instintos y las hormonas alborotadas sin que me diera cuenta me comencé a masturbar sin importar si era mi madre la que gemia.
No sentia culpa en ese momento, solo el gozo de sentir el placer que no disfrute en mi primera eyaculacion, mientras mi madre gemia mas y mas, yo comenzaba a frotar mi pene al ritmo de sus gemidos, hasta que escuche esos estruendosos gemidos, donde ya sabia yo que se estaba viniendo.
Loa gemidos de mi madre se escuchaban tan delicioso, que me puso recaliente y frotando como loco mi pene, tenia ya esa sensación de que ya iba a eyacular, esos escalofrios que invadian mi cuerpo y lo solte por fin, en el piso lance toda mi eyaculacion, exactamente a la pared, para no tener que hecharlas en el inodoro y tener que bajarle y hacer ruido.
Me levante sigiloso, con las piernas temblado, como si me huberan quitado las fuerzas, sali del baño sin hacer ruido y me fui a dormir a mi cuarto antes que me mamá me notara en el baño.
Después de esa vez nunca volvi a mastrubarme con los gemidos de mi madre, ni mucho menos pensando en ella.
Lo que si sucedio es que mi curiosidad salio a flote y pensando y pensando, me llegaba la idea de si podria masturbarme con otros objetos y que tal seria la sensación.
Asi que comenzó mi travesía de indagar formas creativas de masturbarme y controlar mis hormonas, como recordaran en esa etapa de mi vida que los jóvenes de esa edad tuvieran un movil no era muy común y solo uno de entre tantos tenia Internet en su casa, asi que la vieja confiable, ir a un ciber indagar en páginas web y poner manos a la obra.
Ademas de que tome el gusto de masturbarme, me encantaba hacerlo al aire libre en la naturalleza, en un rio, en un lago, en un lugar en la playa, en unas cascadas, acampando en un bosque, sobre una montaña, esos e infinidades de lugares, cabe aclarar que no me apetecía la idea de que me vieran masturbarme, no si no poder el poder masturbarme a mis anchas disfrutando de la naturaleza como si de un animal en su habitat salvaje se tratara.
Pero eso no termino ahi, si no que al pasar de los días, mietras planeaba donde y come me masturbaria, surgieron esas ganas de perforar absolutamente todo a lo que le pudiera hacer un hoyo.
El primer instante en el que decidi experimentar, fue cuando fui al rio sin compañia, llegue y me acomode en un lugar a la orilla del rio y cuando pude divisar muchas chicas mucho mayores que yo, rondando los 24 años y con unos atributos mil veces mejor que las de mi generaciones en ese momento, pues no tenian mucho chiste las chicas de secundaria.
Al ver los cuerpos de aquellas chicas apretujados por sus shorts de licra y con blusas de tirantes que dejaban decubierto sus ombligos, mismas prendas que estando mojadas remarcaban perfectamente sus cuerpos voluptuosos.
En ese momento tuve la idea mas loca del mundo, comencé a juntar monticulos de arena humeda, misma que es firme pero suave a la vez y mirando las formas de los pechos y los traseros de esas chicas que jugueteban en el agua, comencé a darles forma a esos monticulos de arena forma de unas prominentes nalgas y unas tetas enormes, ayudandome con una vara le hice un hoyo en el montículo que fue designado para ser las nalgas.
En mi secundaria por suerte nos daban preservativos a todos cada tercer día, asi que siempre traía unos conmigo, pues no se diga mas, saque el condon de su empaque lo coloque en mi pene que estaba erecto con la simple idea que iba ser introducido en un hueco.
Me tumbe encima de los monticulos de arena y meti mi pene en el hoyo elegido y como decía mi abuelo «a ojo de buen cubero», en hoyo tenia el diámetro casi exacto lo que ejercia la presion adecuada en mi pene, me comence a cojer los monticulos de arena procurando no sobrepasarme y destruirlos.
Talvez no haya sido la mejor experiencia pues no era caliente como una buena vagina, pero la presion que ejercio perfectamente en mi pene lo compensaba.
Asi fue como decidí comenzar a masturbarme con todo lo que veia, y encontraba y que podia atravesar en la naturaleza, mi familia era campesina así que, se me facilitaba irme a los potreros o terreno alejados y masturbarme a mis anchas, descubriendo formas nueva de complacer a mi miembro.
Como la vez que en un muro de tierra exactamente habia un hoyo el cual por donde yo radico, existen un pequeñas abejitas que al encontrarse estos huecos ya sea en rocas, troncos, o el cualquier otro lugar, estas clases de abejas, cubren toda la pared con una clase de cera muy suave y ahi hacen su nido.
Para mi suerte ese hoyo en el muro de tierra estaba exactamente de esa forma, asi que comence mi experimentacion, primero visualice el interior del hoyo y efectivamente estaba libre de abejas, asi que sin pensarlo me puse el condon y comencé a meter mi pene en ese hoyo, al ir entrando mi pene se sentia como la cera se comenzaba anachar ajustandose a mi miembro, la presion que ejercia ese hoyo se sentía genial, pues pareciera que lo estuvieran moldeando en ese momento a mi medida, la sensacion era tan exquisita en ese entonces para un puberto de 12 años con las hormonas al tope.
Para entonces decidi sacarme el condon y probarlo con mi propia piel, tratando de entran asi sin condom la piel de mi piel de mi pene sentía que se adheria fácilmente, pero como les dije ya era un curioso experto y preparado, ya llevaba mi lubricante listo, vaciaba un poco y aunqje aun sentía que peligraba mi piel lo meti hasta el fondo comenzando a bombearlo hasta vaciarme por completo en ese hoyo exquisito que me habia encontrado.
Pensaran ustedes, que hasta aqui debio haber llegado mi curiosidad, pues no entre mas me masturbaba mi mente pensaba que seria nuestro proximo deposito de fluido.
Al poder tener ese lujo de ser de familia de campesinos y tener terrenos muy alejados del pueblo,e daban la total libertad de poner mi pene donde sea y regar mis liquidos blancos en donde yo quisiera sin problema alguno, como un niño de la selva, pero con los problemas hormonales.
En esos momentos de mi secundaria, despues de haber me masturbado con todos los agujeros posibles, pues hoyo que veia mi pene le metia, incluyendo los mas comunes, los jabones, usar los calcetines, el rollo de papel, la toalla, las medias de mamá, cojer paredes, diferentes tipos de arboles, usar una botellas de plastico, tubos de pvc, sentía que ya habia cesado de mis impulsos hormonales, pero solo era un pequeño descanso para lo que seguía y pues el mundo aun no lo conocía del todo.
Tiempo después termine la secundaria y empece la preparatoria, todo estaba tranquilo solo una vida ordinaria, pero por influencias de los grandes amigos que hice en ese entonces, juntos con lo que eramos los raritos y mataditos de nustra generación y mismos que les gustaba hablar de todo un poco, fue donde ellos me enseñaron sobre las parafilias y todo aquellos tabues, incestos, zoofilia, trios, orgias y todas las pervesiones de nuestras retoecidas mentes se nos ocurrian y pues todos esos temas los indagabamos por nuestra cuenta sin que se enteraran nuestros padres obviamente.
En fin todo eso dio a lugar que comenzara a querer masturbarme, pues descubria cosas nuevas sobre el morbo y lo depravado, por alguna razon queria volver a masturbarme en cualquier lugar, asi que de solo pensarlo me ponia duro, sonaba muy alocado pero queria intentarlo.
Así que esas hormonas que pensé ya no estaban, pero salieron de nuevo al exterior como si de un oso terminando de hibernar se tratasen, asi que un gran comienzo opte por ir a mi preparatoria al atardecer cuando estaba vacia, bendito sea que ese entonces ya cualquier preparatoriano poseia un teléfono celular y ademas de ya contar von Internet en mi casa gracias a los avances tecnológicos, pues descargaba mis videos pornos favoritos, llevaba revistas, todo lo erotico y comenzaba la accion.
Me masturbe encima del escritorio de mi salon de clases, en los baños de las mujeres que siempre estaban abiertos, en la sala de computación, en la cancha de basquetball frente al asta de la bandera.
Eso solo fue el comienzo de una nueva oleada de masturbaje y sin olvidar de antemano que en esos tiempos de la preparatoria es cuando uno comienza a quere tener su propio direno y buscar experiencias fuera de tu lugar de origen, en mi caso asi fue, ya que comenzaba a trabajar desde la secundaria en mis vacaciones y estando en la preparatoria ya era lo suficientemente capaz de buscar algun trabajo y como era de esperarse.
En mis días de la preparatoria cosegui un trabajo en un hotel en mi temporada de vacaciones y eso llevo a las experiencias martubatorias, ya que al ser el unico que trabajaba de mantenimiento y a horas extras de los demas trabajadores, me permitia pasearme por todas las areas del hotel, llegando a masturbarme en la alberca, en la lavandería con la ropa de la mujer del dueño del hotel cuando pedia que la llevara a lavar, hasta en los cuartos de los inquilinos cuando salian a pasear y pedian que les realizarmos el aseo mientras se encontraban fuera.
Y no solo eso como era ciudad muy grande y turistica, pues cuando descansaba del hotel me salia a buscar lugares donde masturbarme a altas horas de la madrugada, como en los parques, en el zoologico, en las partes oscuras de los kioscos , incluso me metia a casas abandonadas para masturbarme a mis anchas entre sus pasillos, me subia a los árboles de los parques y me masturbaba eestando arriba.
Pero un día en una de esas veces que me iba a masturbar en el cuarto de una inquilina canadiense y con su ropa que habia dejado en el cesto los cuales eran un bra y un lan de calzones con ese olor impregnado.
Para ese momento de encontrarme listo para masturbarme con aquellas prendas llenas del olor de aquella inquilina, quise poner un poco de porno en mi cel para ambientar y de la nada se me ocurrio buscar relatos eroticos y justamente me meti a mi categoría favorita la de autosatisfacion.
Me encontré con el relato de un tipo que se masturbaba follandose a su almohada, justo en ese momento algo hizo click en mis hormonas y aun mas cuando tenia una almohada abarazada con las piernas…
Si les gustó esperen la siguiente parte para tenerlos al corriente de esas masturbatorias azañas.
Yo comencé masturbándome por mi madre. Cuando yo era niño y vivía en la casa de mis padres, mi madre cuando no iba a salir de casa, siempre vestía con una camiseta de malla que dejaba ver sus tetas, sus pezones a veces estaban bien parados.
También la espiaba cuando se bañaba.
Ella siempre se vestía bien escotada cuando salíamos a algún lado.
Mi madre tiene las tetas bien grandes.
Que rica madre, bien tetona para siga amamantando a su nene 😅🤤 🥵👍
Uffff que rico relato. Super. Lastima no pudiste seguir con tu mami,. Realmente me gusto lo de salir al aire libre como yo. Ufff. Las veces que he salido a masturbarme y dejar mi leche. Aunque ultimamente me como mi semen xd xd he nadado desnudo y caminado asi oor caminos lejanos. Sigue asi. Me gusta esta manera de vivir de paja en paja
Y ya casi estoy por subir la segunda parte